Tengo una de las preguntas más interesantes del mundo. 

¿Cómo sabes si estás loco o loca?

Esa pregunta se ha estado apoderando de mi mente desde hace tanto tiempo...

Y aquí estoy. Sin respuesta frente al espejo de mi baño, mirándola, impaciente, expectante... 

Luce como yo, sus ojos, sus labios, el color de su piel, incluso su cabello, todo absolutamente todo es exactamente igual a mí. Pero ella no soy yo.

Tampoco está siempre en los espejos, a veces aparece frente a mí, sin aviso, ni aparente motivo, la veo perfectamente como a cualquier otra persona, sin embargo, soy consciente de que ella  ¡No es real!

Tiene que estar en mi mente, porque solo yo la veo, solo yo la escucho, solo a mí puede acosarme y atormentarme, hasta el punto de hacerme sentir su juguete personal.

Sin embargo, llevo tanto tiempo viéndola que he desarrollado una capacidad innata para que nadie de mi entorno se dé cuenta, incluso con el tiempo aprendí a conversar con ella, sé que será difícil de creer, pero realmente la escucho y ese sonido no está en mi cabeza. Soy perfectamente capaz de saber y diferenciar cuando estoy pensando en algo y cuando un ruido externo invade mi sistema auditivo.

De hecho, la mayoría de las veces cuando la veo, no es porque esté pensando en ella, la mayoría del tiempo ni siquiera recuerdo su mera existencia. Asistí a infinidad de consultas psicológicas en búsqueda de respuestas, a clases de neuropsicología, incluso con videntes. 

Escuche de todo, las personas tenían hipótesis como que era perseguida por un maligno espectro, o que posiblemente sufro de algún tipo de trastorno de personalidad, aun así, he pasado cada prueba médica, cada examen, pero nadie puede garantizar que estoy loca.

Nadie excepto ella.