Notas del cap:

Por andar viendo comics de Kazajistan y México, me entro también ganas de shipearlos, me gustaron y sin querer termine escribiendo a Kazajistan como yandere XD... bueno, en la historia de "La guerra de las plumas" imagino que va a tardar un poco en mostrarse esa situación pero... a base de que lo único que llevo escrito (Para el momento en que estoy escribiendo estas líneas) es poco... me quede con ganas de un puto lemon de ellos dos... y como no encuentro muchas historias (si acaso dos) pues... ya saben, si no lo hay... ¡Hay que hacerlo uno mismo! Y aquí estoy yo ¬u¬ con mi granito de arena muajajajaajaj

¡A leer!

Especial de San Valentin 3/?

17 - Vuelo en las montañas Kazajistan x México

El viento corría con fuerza permitiendo un vuelo agradable y dinámico de parte de ambos countrys que se encontraban en ese momento en los cielos ligeramente nubosos; México, con gran sonrisa divertida, veía de cuando en cuando hacia atrás, tratando de no alejarse mucho de su aprendiz y anfitrión, el Kazajo se encontraba algunos metros lejos, detrás del tricolor mas embobado observando las hermosas e imponentes alas del tricolor que aleteaban y eran acariciados por el viento

-Vamos muchacho, esto no es nada- sonríe el latino tratando de hacer reaccionar a quien, apenas escucha la voz del latino asiente, aleteando más rápido con sus doradas alas, no tarda nada en darle alcance al tricolor y rebasarlo; ahora, es el latino quien con una sonrisa divertida y con su orgullo picado en una competición para ver quién es más rápido, comienza a aletear también con velocidad para alcanzar a Kazajistán... el kazajo comprende la idea del latino y corresponde al juego aleteando con velocidad para alejarse y comenzar una competencia de velocidad

El vuelo avanza con risas y desafíos, Kazajistán logra de cuando en cuando ser rebasado por México y luego, a la inversa; ambos sonríen, en algún punto, el latino baja hasta un bosque y esquiva con maestría los arboles, mirando hacia atrás a Kazajistán en espera de que el muestre su propia agilidad; Kazajistán acepta sin palabras y recorre el mismo camino que hizo anteriormente el tricolor, la sorpresa inunda al latino quien aplaude con fuerza felicitándolo y, antes de que Kazajistán se pueda acercar a él; México, como un niño pequeño, comienza a volar lejos, divirtiéndose como pocas veces podía tratándose de sus alas

Kazajistán de todos modos nunca ha sido una persona de decir muchas palabras, pero le gusta ver la enorme sonrisa del latino, sus ojos brillando en alegría, ese brillo que envuelve su cuerpo sin darse cuenta, ante su propia felicidad, sus alas extendiéndose más, casi, brillando por encima de las nubes como si fuera algún tipo de ser celestial más que un country... Kazajistán observa maravillado y extasiado de ser uno de los muy pocos que pueda observar aquella faceta del latino, una, mas libertina y no tan recta dirigida hacia los negocios y su país...

Una nueva oleada de viento fuerte termina golpeando primero al latino que había ido delante de Kazajistán desde hacía algunos minutos; el viento frio le golpeo con fuerza no solo en el rostro, sino en su pecho al respirar el aire; parpadeo notando que al encontrarse volando en el medio de las espesas nubes grisáceas, ahora se encontraba perdido... detuvo su avanzar y miro hacia atrás... Kazajistán ya no estaba cercas tampoco

-¿Kazajistán?- pregunto al aire, aun aleteando y notando como las espesas nubes apenas se movían un poco con su movimiento de alas; giro sobre su cuerpo tratando de buscar en algún lugar a su compañero y la razón de que en realidad, en estos momentos estuviera en pleno vuelo y no en tierra terminando de empacar para volver a sus tierras; aun así, un fuerte golpe y sacudida lo asusta desde su costado izquierdo que rápidamente lo lleva en picada hacia el suelo. Pega un grito y trata de removerse, hasta que nota, que es un cuerpo el que lo estaba llevando en picada; al luchar por ver de quien se trataba encuentra a Kazajistán con un rostro serio

No le da tiempo de verlo por más tiempo pues nota demasiado cercas el suelo, sus ojos se abren y grita que iban a chocar, sus ojos se cierran y siente un nuevo jalón brusco, Kazajistán había logrado detenerse en el momento justo y ahora, con un aletear presuroso que se escuchaba bastante fuerte, se encuentra suspendido a un metro del suelo, bajando con cuidado y llegando a tocar suelo nevado que sorprende y confunde al latino... en especial, cuando, al mirar a los alrededores, lo único que encuentra es nieve y nada más que nieve además de un viento más fuerte que comienza a traer consigo copos de nueve

-Lo lamento ¿Fui muy brusco? ¿Te lastime?- escucha por fin la voz de Kazajistán y México se digna al fin a verlo, aun sabiéndose perdido pero, al menos con alguien conocido cercas suyo, el latino suspira tratando de controlar el miedo que le había embriagado cuando fue atrapado por el contrario; cuando se creyó tranquilo mira a Kazajistán confundido

-He... no, no, no, no; estoy bien pero ¿Por qué lo hiciste? Me diste un susto tremendo cabron- trata de sonar cada vez más divertido aun cuando su tono de voz lo demuestra confundido, Kazajistán señala el cielo y comienza a hablar

-Se acerca una tormenta de nieve... estamos demasiado lejos de la civilización como para poder volver volando en estos momentos... lo mejor será que nos ocultemos en una cueva hasta que la tormenta haya pasado- anuncia rápidamente, México mira los cielos, volviendo a ver los copos de nieve que, es cierto que se movían con velocidad. Se detuvo un momento a preguntarse si era cierto que, como en las películas, las tormentas de nieve incrementaban tan violentamente pero prefirió no averiguarlo si él estaba fuera... de todos modos no era bueno soportando el frio, se dijo antes de asentir a los comentarios del kazajo

-De acuerdo... ¿Qué hacemos entonces?- pregunta al contrario que, apenas escucha afirmación de parte del latino lo guía lentamente entre la nieve y lo que rápidamente se va volviendo una tormenta hasta poder encontrar una cueva profunda en la cual refugiarse hasta que todo haya pasado

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El fuego brillaba hermosamente dentro de la oscuridad de la cueva, a lo lejos, México podía escuchar el viento agresivamente soplando, se percibía el ambiente frio y su cuerpo ya estaba temblando... de verdad que era malísimo para soportar estas zonas de frio, se dijo al tiempo que se abrazaba a sí mismo, frotando sus brazos para tener calor

Sorpresivamente, Kazajistán se sienta detrás suyo, colocándole de paso su propia gabardina sobre los hombros y envolviéndolo en un abrazo, México lo mira sorprendido y con un tenue sonrojo

-¡¿Estas tu pendejo o qué?! ¡Ponte tu chamarra pendejo! ¡Te me vas a enfermar!- le reclama, aunque su voz calla al observar cómo, además de estar siendo abrazado desde atrás por Kazajistán, sus alas se abren y hacen una pequeña copula para el latino, sintiendo ahora que hay un poco mas de calor en su cuerpo, también sus reclamos enmudecen, viendo de todos modos con preocupación al kazajo que sigue tan silencioso como siempre

-Yo puedo soportar mi clima, tu eres un ave que prefiere el calor que el frio, debo de cuidar que no tengas hipotermia o seré yo quien este en problemas después- dijo... y México no lo sintió como un insulto, sino como un mero pretexto que hizo al tricolor a mostrar un puchero de incredulidad

Pese a que México quería decirle que no le creía nada... después del último comentario de parte de Kazajistán, ya no hubieron palabras; ahora, siendo Kazajistán quien abrazaba a México como un osito de felpa, envolviéndolo también con sus alas; ambos miran hacia la fogata creada a último minuto, siendo el latino quien por momentos tiemble en frio pero luchando por no demostrarlo demasiado

-¿Crees que la temperatura baje más?- habla suavemente el latino castañeando sus dientes sin desearlo; Kazajistán baja la mirada para observar a quien es tan bajo que su barbilla queda en su coronilla, suspira suavemente el aroma del latino y lo estrecha con más fuerza pero sin lastimarlo

-Es posible, aun no pasa la peor parte de la tormenta- susurra tranquilo, cerrando sus ojos y sintiendo como el cuerpo bajo suyo tiembla ante el frio

-¿Aun es mucho tu frio?- pregunta por fin, luego del silencio que se había creado, el latino trata de burlarse y reír pero es claro para Kazajistán que el latino no tiene la fuerza para soportar los fríos de aquella ahora oscura noche... tal vez no debió de dejar ir al latino tan lejos en sus tierras... pero no podía evitarlo, era tan hermoso verlo volando libre y ajeno a sus problemas que hasta el había olvidado el mundo a su alrededor

-Psss... ¿P-Para que te digo que no, si, si?- se ríe bajito y por fin comienza a temblar con más fuerza aferrándose a la chaqueta del contrario, Kazajistán desvía su mirada hacia salida de la cueva y su gesto se muestra ligeramente preocupado... a todas luces, la tormenta parecía ir a peor dentro de unas horas... y si el tricolor no podía soportar el frio que apenas estaba haciendo, se preocupaba al tratar de pensar en cómo mantenerlo caliente cuando de verdad hiciera frio hasta para el... fue entonces, que al sentir como su cuerpo se estremecía, que cayó en cuenta de una situación que podía utilizar a su favor en más de un sentido

No dijo nada, volvió a recargar su barbilla sobre la cabeza del tricolor, con sus ojos cerrados y lentamente su corazón palpitando cada vez más fuerte, deja de abrazar al latino y sus manos, muy lentamente comienzan a acariciar su pecho, México tarda un poco en notar aquello, como, la mano izquierda de Kazajistán lentamente baja hasta su vientre, haciéndose paso entre la chaqueta y la camisa de manga larga que portaba, llegando a tocar con sus frías manos la tibia piel del latino haciéndolo sacar un chillido ante el frio

-¡W-W-Wey! ¡¿Qué haces?!- trata de reclamare entre sus espasmos de frio, tratando de detener la mano que ha llegado hasta uno de sus pezones y, debajo de la ropa comienza a acariciarlo junto a su cuerpo; la otra mano, aun libre, continua también acariciando hasta llegar al mismo destino que la anterior y bajar, solo que esta hacia los pantalones del latino, atravesando ropa tras ropa; logra tocar el vientre cálido del tricolor y por fin llegar a su verdadero cometido, la hombría del mexicano que yacía dormida

-¡Kazajistán! ¡E-E-Esto no es...! ¡D-D-Divertido!- tartamudea entre su frio y la molestia; sin embargo, el contrario no dice absolutamente nada, solo cierra sus ojos tratando de imaginar cómo sería el cuerpo del contrario completamente desnudo

Con sus manos lo apega más a su cuerpo, ahora ambos se restriegan suavemente gracias a que el latino no tenía sus alas extendidas, sino guardadas; gracias a ello, el kazajo tiene la oportunidad de escuchar mejor como lentamente los reclamos del latino y sus intentos por alejar sus manos del cuerpo mexicano disminuyen y se vuelven temblores pequeños

-Kaz... en serio... no...- trata de pedir conteniendo un gemido suave; Kazajistán traga saliva silenciosamente, al tener sus manos ocupadas acariciando el cuerpo contrario, ocupa una de sus alas como si fuera algún tipo de mano y empuja muy suavemente la mejilla del latino para que mire hacia su izquierda; cuando el latino lo comprende y desvía la mirada, los labios fríos y dulces de Kazajistán lo atrapan en un beso lento pero que denotaba deseo y lujuria hacia el contrario

Las manos de México se aferraron a las manos de Kazajistán tratando aun inútilmente de detener lo que estaba aconteciendo... pero su cuerpo era sensible, fácil de excitar, y el frio no le permitía moverse adecuadamente; apenas sentía tener la fuerza para notar que estaba sujetando las manos del contrario y de todos modos no estaba logrando nada, Kazajistán no solo no se había detenido, sino que lo que antes había sido una pequeña copula con sus alas para que solo a ellos les llegara el calor, se volvió un capullo, envolviéndolo y encerrándolo del mundo entero, Kazajistán envuelve ambos cuerpos con sus enormes alas y mira al latino apenas se liberan del beso, volviendo a besarlo con mas necesidad al tiempo que la mano que acariciaba sus pezones sube, sujetándolo de la barbilla y obligarlo a corresponder el beso con la misma necesidad que de pronto comenzaba a mostrar el de bandera turquesa

... ... ...

México jadeo apenas a mitad del beso, sintiendo como la lengua resbalosa de Kazajistán se paseaba por su boca, moviendo la suya, acariciándola de un modo obsceno y aun así, volviéndolo loco con el simple rose de ello. Su cuerpo comenzó a sentir más calor, su barbilla fue liberada para permitirle moverse un poco; su cuerpo comenzó a estremecerse cuando sus caderas sintieron lentamente corrientes de placer cosquilleando y llegando a su falo... sabia que, por las caricias de Kazajistán y por su débil mente, se estaba dejando llevar y la excitación había llegado al punto de un clímax que estaba gritando necesitadamente explotar en la mano del que le estaba acariciando con tanta devoción

-Mmgg esperapmmm... kazahhh... ¡Kazajistán!- trata de pedirle alejándose, pero siendo en todo momento atacado una vez más por los labios hambrientos del contrario, sintiendo como todo se vuelve débil en su cuerpo, como, sus manos apenas se pueden aferrar de las ropas de Kazajistán antes de tensarse todo su cuerpo y finalmente, con sus ojos fuertemente cerrados y una mordida en los labios ajenos explotar en su primer orgasmo dentro de sus pantalones y la mano del de mayor altura

Para cundo México dejo de estar tenso y libero los hinchados labios de Kazajistán, este pudo sacar su mano de los pantalones del latino, observando la blanquecina substancia que yacía en su mano; México, mas perdido en su placer que consciente, observa cómo el contrario acerca la mano manchada y la lamen lentamente observando que, el ya de por si sonrojado rostro del tricolor incrementa en carmesí al ver aquello

-¡Tu estas pendejo! ¡No hagas eso idiota! ¡Está sucio!- le regaña rápidamente, mas Kazajistán vuelve a besarlo ahora que ha liberado ambas manos de sus atenciones y una vez más, con sus brazos, con sus besos, lo envuelve y devora necesitadamente de seguir sintiendo mas tacto de aquella piel suave y cálida; México cierra sus ojos; su cuerpo va girando, ya se sentía torcido en su posición y ahora, arrodillado, se encuentra cara a cara con Kazajistán quien se niega a soltarlo del beso

Las manos del kazajo apenas tranquilas bajan de nuevo, volviendo a introducirse por debajo de la ropa, acariciando la piel que tiene a sus alrededores, México piensa que su ropa terminará manchada si no detiene al de bandera turquesa pero, antes de poder negarse como había tratado todo el rato, siente que una mano llega desde las ropas de su vientre hacia su trasero. Pega un brinco; ahora que estaba arrodillado delante de Kazajistán, su trasero estaba libre y por supuesto que el kazajo no lo había desaprovechado

-Nophh- trato de negarse mitad de beso moviendo su trasero para que la mano de Kazajistán no llegara, pero todo fue inútil, un dedo ya había logrado hacerse paso, restregándose y enterrándose con cuidado hasta encontrar el anillo de carne del latino; comienza a acariciarlo de arriba hacia abajo y, entre la lucha del tricolor para no ser penetrado por la mano del kazajo, termina ocurriendo precisamente aquello, el dedo de Kazajistán logra introducirse con cuidado en la entrada del latino que, soltando un gemido ahogado, se aferra al pecho del contrario

-México- ahora entre besos Kazajistán; envolviéndolo, cada vez con menos espacio entre sus brazos y sus alas, México se siente cada vez mas atrapado al sentir como la mano de Kazajistán lo empuja lentamente hacia atrás, permitiendo algo de espacio, solo para apartar la ropa extra. Kazajistán abre la chamarra de México y levanta su suéter permitiéndole por fin ver parte del cuerpo del tricolor, en un blanco puro, adornado con las cicatrices de las incontables guerras que ha tenido para llegar hasta donde se encuentra... Kazajistán desea observar y besar cada una de aquellas cicatrices que debía de tener el latino con orgullo por una batalla ganada, así que, se acerca, da un beso en su pecho y baja entre besos, por las cicatrices, pasado a sus pezones donde chupa y mordisquea con todo el cuidado del mundo, notando los gemidos contenidos del tricolor

México coloco sus manos en los hombros de Kazajistán al sentir como era mordisqueado y lamido en su cuerpo, sus ojos apenas podían entre abrirse ante las sensaciones que sentía, su mente era un mar de pensamientos diversos... "no era correcto" "no era el lugar" "¿Por qué lo estaba haciendo?" demasiados pensamientos para su propia mente; rápidamente ahogados en el momento en que Kazajistán volvía a dar una mordida en su pezón derecho, chupándolo y luego, volviendo a mordisquearlo para jalarlo suavemente haciéndolo echar la cabeza hacia atrás y soltar un gemido estridente de placer y nervios

La mano libre de Kazajistán rodea la cintura del latino y lo jala de nuevo hacia su cuerpo, uniendo ambos, negando a que se mantengan demasiado tiempo lejos el uno del contrario; México continua con la cabeza echada hacia atrás, con sus ojos cerrados y su cuerpo apenas respondiendo a sus demandas internas; puede sentir como nuevamente una mano se cuela directamente hacia sus pantalones, abriéndose paso entre ellos y llegando a su trasero descubierto, enterrando uno de sus dedos en la entrada ajena; México se estremece y trata de apretar sus nalgas para evitar movimiento pero solo hace que su interior sienta y atrape mejor el dedo en su interior haciéndolo estremecer. Kazajistán observa gustoso los gestos y acciones del tricolor, como, pese a su intento por mantenerse callado, de todos modos termina siempre soltando alaridos bajos de placer y suspiros contenidos de aliento, como, continua removiéndose y por fin, lo que era anteriormente un dedo, se convierte en dos dentro de su entrada

Sus manos liberan un segundo el trasero del latino y lentamente bajan el pantalón y la ropa interior dejando al descubierto la hombría del latino erecta y goteante aun, y su trasero que parece pararse apenas se siente libre de las ropas, Kazajistán lo abraza con fuerza, haciéndolo girar sobre su cuerpo, quedando una vez más, la espalda del latino recargada sobre el pecho del kazajo. México apenas se va recuperando de los placeres que lo tenían sedado cuando escucha el cierre de una cremallera y el movimiento de la tela, su cuerpo se tensa, sus caderas notan la tierra fría restregándose y lastimándolo un poco pero solo es por poco tiempo pues rápidamente es depositado con todo el cuidado del mundo sobre las piernas de Kazajistán; siente un nuevo escalofrío cuando siente algo húmedo y caliente golpeando a mitad de su trasero y como lentamente las caderas de Kazajistán están restregando aquel trozo de carne caliente contra su trasero, México desvía la mirada temerosa hacia el contrario para verse

-¿Iremos más lejos?- México quería gritarle que estaba loco y que debía de ser una broma, pero la mirada concentrada de Kazajistán le decía al latino que ni siquiera estaba jugando... desde el principio México sabía que no estaba bromeando... pero él quería aferrarse a esa idea... hasta que siente como las manos de Kazajistán lo y toman por debajo de sus piernas, elevándolo y permitiendo que haya una presión caliente y húmeda en su entrada, lo suficientemente clara para callar cualquier tipo de queja, reclamo o insulto que se le pudiera ocurrir

-Voy a entrar México- responde Kazajistán colocando con cuidado su rostro al lado del de el latino, dejando caer lentamente el peso del tricolor sobre su hombría; México se estremece y tensa, su espalda se encorva sacando su pecho y echando su cabeza en el hombro derecho del kazajo. Pega un quejido de dolor cuando va sintiendo como se hace espacio dentro de sus entrañas, México cierra sus ojos que rápidamente se llenan de lagrimas; para cuando cree que ha entrado Kazajistán por completo en su cuerpo, sus pantalones junto a su ropa interior es retirada de su cuerpo, los brazos del de bandera turquesa lo envuelven una vez más, las alas, parecen a mente del latino cada vez mas cercas de su cuerpo, negándole a ir demasiado lejos del cuerpo contrario... pero bueno, ahora que esta "ensartado" no es como que pueda ir muy lejos aunque quiera

-No... mames... es... enorme... wey...- trata de reclamar ahogadamente, necesita aire entre su dolor, solo puede sentir como Kazajistán vuelve a pasar ambas manos a acariciar su pecho, caderas, vientre, incluso una vez más su miembro al tiempo que su boca, inquieta pero pausada en su recorrido, comienza a abrirse paso, arrancando por fin la chamarra y la camisa; el latino queda completamente desnudo y expuesto ante Kazajistán quien, sin tiempo que perder, comienza a besar insaciablemente el cuello y los hombros del latino en busca de darle placer

México cierra sus ojos, de pronto, el frio que lo había estado entumeciendo se vuelve un calor sofocante para su cuerpo; sus caderas comienzan a moverse al compas que en determinado momento comienza a marcar Kazajistán, sus brazos se aferran del cuello y uno de los brazos de Kazajistán, el contrario solo puede besarlo, lamerlo, mordisquearlo muy suavemente, dejando pequeñas marcas silenciosas de propiedad; llamando el nombre de quien esta gimiendo al tiempo que salta sobre su hombría, Kazajistán se deleita con lo poco que observa de latino, como hace su cabeza hacia atrás, como lo abraza con uno de sus brazos en busca de apoyo y equilibrio, como, su rostro se vuelve lascivo demasiado rápido y prontamente se encuentra con la boca abierta, con la lengua de fuera y soltando gemidos y jadeos ante el placer que recibe

Es demasiado para alguien como Kazajistán que, con cuidado deja primero su chaqueta sobre el suelo y posteriormente, al latino a cuatro patas para ahora, con sus alas extendiéndose de un modo imponente y sus manos aferrando con fuerza las caderas del latino; comenzar a golpear con fuerza el cuerpo contrario, escuchando los gemidos y suspiros ajenos, como se aferra con todo lo que puede a las telas que sirven de cama provisional, como, su voz comienza a dejar de soltar gemidos para avocar al nombre de quien lo esta tomando en esos momentos

Kazajistán apega su pecho a la espalda del latino, besándolo, mordiéndolo con mas necesidad, lamiendo su piel como si estuviera adorando a un dios, besa en especial en la zona donde parece tener las cicatrices que conforman sus alas, Kazajistán se desvive probando cada trozo de piel del tricolor. Cansado de solo esa posición, vuelven a cambiar, siendo ahora, una vez más el kazajo sentando y recargado contra un muro, observar embelesado, ayudado por la luz que entrega el fuego, como el cuerpo del latino, abrazado a su cuello, se encuentra, viéndolo a los ojos, con sus ojos llorosos, con un sonrojo en sus mejillas, con su boca abierta clamando su nombre mientras el mismo mueve sus caderas de arriba hacia abajo cabalgándolo necesitado, Kazajistán lo aferra por las caderas, se funden en otro necesitado beso, más necesitado por parte del latino, amoroso por parte de Kazajistán y por fin, siendo Kazajistán quien entrelace sus dedos con la mano del latino, ambos terminan corriéndose al mismo instante, aferrándose de una mano, abrazándose con la otra, uniéndose en un beso que ahoga los gemidos de ambos

Para cuando México cree volver en sí, nota a Kazajistán también liberándolo del beso, con un grueso hilo de saliva uniéndolos; México se acerca más al kazajo descansando su cuerpo sobre el contrario, destensando todos sus músculos y cerrando sus ojos sobre el hombro de Kazajistán quien, sin esperar lo estrecha contra su cuerpo y lo envuelve no solo con sus manos, sino con sus alas y también, utilizando su propia chaqueta para que el tricolor no pase frio... ahora, solo quedan las respiraciones agitadas de parte de ambos y un latino que lentamente se va quedando dormido después de semejante acción para con su anfitrión

Kazajistán, quien tiene un poco mas de resistencia, mira hacia el exterior de la cueva... la luz comienza a entrar lentamente y el sonido de los vientos agresivos desaparece por fin... la tormenta ha pasado pero... al parecer, tardarían un rato mas en poder salir si el tricolor se había quedado dormido. Kazajistán baja la mirada con una sonrisa satisfecha, envolviendo mas posesivamente al tricolor hacia su cuerpo... si por él fuera... sería capaz de mantener a ambos en esa cueva para siempre... aun cuando sepa, que tal vez, lo mas hermoso del tricolor, es esa libertad para volar...

Bueno... algún día, seria suyo su corazón, se dijo, mientras el también cerraba sus ojos y se entregaba a un agradable sueño junto al mexicano

Notas finales:

Dios, que esto de corregir errores en un mismo día es pesado... y aun me falta el que es el verdadero especial de San Valentín... diablos... a veces odio escribir... más que nada por el trabajo que es corregir errores de ortografía... en fin, ya saben, si ven muchos errores me dicen y yo lentamente los voy corrigiendo, igual, una disculpa, que me enletro demasiado fácil y bha, que mas da XP... ahora, sobre el oneshot (si es que se le puede decir así) XD es que andaba con ganas de escribir algo de Kazajistán y México luego de ver algunos comics que... ¡Los ame! Y bueno, entre ellos ponen algo posesivo y yandere a Kazajistán con México pero sin llegar (aun) al concepto de matar por su amor ni nada... más bien como manipuladores... me gusto la idea y aquí hay algo de ello... además de que me metieron la idea de que Kazajistán es el tipo de persona seria, casi cara de frisk -- __ -- pfff XD hahahaha

En fin...

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Que tengan lindo día

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¡Feliz San Valentín!