Muerte, muerte, muerte. Dolor, pena, vacío. Muerte, muerte, muerte. Llantos, sollozos, lágrimas quedas. Muerte, muerte, muerte. Rostros con aflicción, rostros incrédulos, rostros aburridos. Muerte, muerte, muerte. Murmullos, conversaciones, risas reprimidas. Muerte, muerte, muerte. Abrazos de solidaridad sincera, abrazos de refugio, abrazos por cumplir. Muerte, muerte, muerte. Palabras sentidas, palabras mudas, palabras por compromiso. Muerte, muerte, muerte. Flores primorosas, costosas; ¿le gustaban las flores?, ¿no que era alérgico a su aroma? Muerte, muerte, muerte. Quisiera olvidar, quisiera fumar, quisiera irme. Muerte, muerte, muerte. Qué bueno que vino, cuánto tiempo sin verlo, quién rayos es este. Muerte, muerte, muerte. Cuanto nos costará, ¿pagará el seguro? Muerte, muerte, muerte. No puedo pasar ni un bocado, ¿servirán algo? Muerte, muerte, muerte. Me congelo, cómo no se les ocurre prender la calefacción; qué calor espantoso, qué falta de consideración no usar el aire acondicionado. Muerte, muerte, muerte. Estos asientos más incómodos no podían ser. Muerte, muerte, muerte. Cuándo se acaba esto; ya me vieron, puedo partir. Muerte, muerte, muerte. Lo voy a extrañar, por fin se largó. Muerte, muerte, muerte. Oye, ¿te acuerdas como se llamaba?

— Ni hablar —aseveró con firmeza el cliente y el diligente abogado marcó la opción de no funeral.

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Respuesta al Desafío funeral de El Circulo: escribir un relato de no más de 250 palabras de cualquier género teniendo el funeral como tema.