Estabamo bailando el vals y entro Havoc tocandonos el hombre, tenia las manos con sangre, ella y yo nos miramos algo desconcertado y luego lo miramos a el, él bajo su cabeza triste y simplemente dijo en voz baja

-Ed....Edward esta muerto!!

No lo pude creer y salir a buscarte ¿por que tuve ese impulso de la nada?.

Te busque por toda la recepción y salí al patio trasero, ví tu cuerpo inerte, el suelo y tu estaban manchados de sangre y tus manís sostenían una daga.

Corrí hacia ti y te levante entre mis brazos, camine contigo hacia donde estaban todos y ellos quedaron sorprendidos, ¿que acababa de pasar?.

Ese fin de semana hicimos tu funeral, bajaban la tumba y tiraban la tierra encima, todos decían cosas de ti, comenzó a llover, algunas eran malas y otras buenas, pero se escuchaban cosas horrible de ti hasta que enfurecí y chasquille mis dedos, de alguna forma el fuego salió creando una chispa, no quería saber lo que acababa de pasar

-¿COMO SE ATREVEN A HABLAR DE ESTA FORMA?...el solo es un niño, pueden tener más respeto ¿no?, si no les agrada mejor se van por que nadie los tienen amenazados-

Conteste enfurecido, mi ahora esposa estaba llorando, tu mejor amiga estaba enojada y tu hermano solo podía llorar sin parar, empezó a llover y el se durmió, todos se estaban yendo, ella se me acerco y toco mi hombro

-Nos vamos?

Pregunto melancólica

-Ve tú, yo me quedare un rato más-

Mencione mientras tocaba su mano, ella se fue y me quede bajo la lluvia mirando tu tumba, no paraba de pensar en todo lo que vivimos, en lo que habíamos tenido y entonces quedo claro para mi.

Yo aun seguía enamorado de ti,  te amaba incluso cuando estaba con Riza, termine contigo solo por pensar en que diría la sociedad si se enteraba, pero no comprendía el por que de tu suicidio.

Ahora tenia miedo.

Y entonces mi hijo nació, era un varón, cumplió el año, sus ojos eran de dos colores, su ojo izquierdo era negro como yo y ojo derecho dorado como los tuyo, no sabíamos por que pero no me importaba, su cabello era dorado como el tuyo.

Aun después de un año no podía parar de pensar en ti y en honor a ti nombramos a nuestro hijo Edward, había algo en el que nos hacia pensar que estabas presente.

Esa noche la puerta fue golpeada y abrí la puerta encontrando a tu hermano

-¿Que sucede?

Pregunte

-Esta es una carta que tengo de mi hermano, la escribió el día de tu boda y la escondió en el traje, debes tenerla -

Y me la entrego para luego irse sin decir nada más.