Bien, no sé si abarcare bien este tema pero me da igual, solo estoy escribiendo lo primero que se me viene a la cabeza.

Por si en verdad les llega a gustar, puede que en un futuro haga un fic, aunque con otra temática.

Mi idea con esto es solo saber hasta donde puedo llegar nada más con respecto a este mundo.

Seguramente cometeré errores argumentales, me confundire en muchas cosas pero me da igual.

Ya me funaron una vez por eso hace tiempo pero ahora me vale madres.

Mi intención es crear romance, algo con lo que me caracterizo.

Así que si vienes aquí a ver algo más pues lo siento, vas a perder tu tiempo, así que puedes irte sin pena ni gloria.

Este será un solo capítulo y será un tanjiro x shinobu.

Aunque hay otros ships que me gustan pero este fue el primero que me gustó desde hace años.

Así que bueno, espero puedas disfrutar de este unico capitulo, y sino pues lo siento, pero la advertencia ya la di.

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Depresión.

Algo que seguro podría resultar siendo un tema tabú para la época en la que se encontraban pero que tristemente era algo con lo que se solía vivir más de lo que le gustaría admitir a cualquiera.

Aunque claro, este trastorno puede influenciar de diferentes formas a cualquier tipo de persona.

Ya sea por medio de la liberación de emociones o acciones, como la falta de apetito, la falta de sueño, enojo, tristeza o incluso felicidad.

Y esto último se debe a que en ocasiones, las personas no llegan a asimilar con exactitud lo que ha sucedido.

Esa etapa de negación está vigente, sin representarse por medio de palabras pero si de pensamientos.

Y eso es lo que estaba viviendo el joven cazador de demonios.

Tanjiro kamado.

Durante su estadía en la organización de caza de demonios, el ha ido entendiendo y asimilando poco a poco todo lo que había vivido hasta el momento.

Si bien lloró en su día, visiblemente no comprendia con exactitud lo que estaba sucediendo.

Demonios, cazadores, posturas, respiraciones.

Todo eso era nuevo para él.

Un mundo que solo podría existir en la más loca de las fantasías.

Y por desgracia, el estaba metido en eso, era su realidad.

Así que, después de un largo día en dónde logró cumplir con su misión, el fue al cuarto que se le prestó en la finca de las mariposas y luego descargó la caja que llevaba consigo en su espalda.

Una carga que le recordaba día tras día lo que el estaba haciendo y porque lo estaba haciendo.

Sabía que lo que contenía ahí, era lo más valioso de su vida.

Una vida que el hubiera abandonado hace muchísimo tiempo sino fuera porque aún le quedaba una pizca de esperanza.

Y es que el siempre se caracterizó por ser una persona alegre y optimista.

Siempre encontraba cosas bellas o interesantes en objetos que para muchos pueden resultar de poco interés.

Aunque eso era parte de su personalidad, y eso le terminaba por gustar a la gente.

Que para bien o para mal, podían llegar a empatizar con el chico y sentir cierta admiración sobre él por ser alguien tan gentil y bondadoso.

Cualidades que en esa actualidad muy poco se veía.

Y por obvias razones, ya que simplemente no habían razones suficientes para estar feliz.

Y eso es algo que poco a poco fue escalando en el joven kamado el cual quitó el broche de seguridad de la caja de madera y luego la abrió, dándole paso a nada más que a su hermana menor, la cual salió rápidamente de ahí dando una vuelta en el piso en forma de bolita.

Posterior a eso, ella se levantó del piso y luego fue corriendo hacia donde estaba su hermano y lo abrazó en la pierna, cosa que le sacó una débil pero genuina sonrisa al chico, el cual puso una mano en la cabeza de la niña y luego la acarició.

- misión cumplida Nezuko, tienes permiso para descansar.- dijo el chico en modo de broma puesto que su hermana solía dormir casi todo el día, pero en esta ocasión, su hermana sutilmente movió su cabeza de un lado a otro en señal de negación.-

Acto seguido, ella de un salto se sentó en el regazo del chico y luego lo envolvió en un cálido abrazo, provocando que tanjiro suspirara amargamente.

El dolor había regresado.

No entendía como, pero era algo que no podía manejar.

Su corazón dolía, pero no era por medio de una enfermedad como tal o algún golpe o algo por el estilo.

Simplemente dolía, y era por causa de los recuerdos que lo atormentaban día y noche.

La sonrisa de su madre y de sus hermanos, de su padre cuando desgraciadamente falleció por causas que ni él ni nadie pudo haber evitado.

La muerte de Rengoku delante de sus ojos.

De las personas a las cuales no pudo ayudar en su momento en el distrito rojo y que también sufrieron por causa de su debilidad.

Y así podría seguir enumerando casos pero eso solo sería una tortura más para su ya fatigada mente, la cual pedía un descanso por todo lo que estaba asimilando.

Se sentía cansado, aunque físicamente estaba bien.

Se sentía triste, pese a que había una sonrisa en su rostro todo el tiempo.

Tenía ganas de llorar, aunque no lo hacía porque no quería preocupar a sus allegados.

Tenía bastante hambre, aunque no comía porque su cuerpo lo rechazaba debido al asco que sentía.

Simplemente quería descansar.

Descansar de todo lo que estaba viviendo porque simplemente era demasiado para un chico de 15 años el cual nunca había salido de su pueblo, pero por circunstancias de la vida tenía que afrontar todo esa situacion.

Porque aún le quedaba alguien que confiaba en él.

Es por eso que sin saberlo, una lágrima se escapó de manera traicionera de su ojo izquierdo, algo que fue visto por su hermana la cual, llena de pánico limpio rápidamente con una parte de su vestimenta superior, cosa que hizo sonreír a tanjiro.

- está bien Nezuko, no te preocupes, estoy bien.- dijo el chico el cual solo vio el semblante triste de su hermana, la cual negó con su cabeza y luego lo volvió a abrazar con fuerza, acción que el correspondió de la misma manera.-

Claramente no estaba bien, pero debía de mantenerse fuerte para que Nezuko no se preocupara por él.

Pero cada vez era más difícil.

El lo único que quería era estar con su familia una vez más.

Ver a su madre otra vez y abrazarla y no soltarla jamás.

Jugar con sus hermanos y decirles lo orgulloso que estaba de ellos. Y no porque hicieran grandes azañas como estudiar o conseguir grandes logros, sino porque estaban viendo la luz del día un día más.

Quería que estuviera su padre con él para pedirle consejos, ya que la vida era mucho más difícil sin su ayuda.

Quería pedirle perdón a Rengoku por no haberlo podido ayudar. Que de ser otras las circunstancias, él ahora podría estar en su finca y pláticar con su hermano y tal vez convencer a su padre de que ya no se pierda tanto en el alcohol.

Habían tantas cosas que el quería hacer que simplemente no pudo retenerse más y se rompió en ese momento.

Empezó a llorar en silencio, abrazando fuertemente a Nezuko y apoyando su cabeza en su pecho para que no lo viera así de roto.

- perdóname Nezuko, y-yo te juro que lo intento...pero cada vez el camino es más difícil.- dijo el chico entre lágrimas mientras sentía como las pequeñas manos de su hermana lo acariciaban en los costados de su espalda de arriba hacia abajo.-

Como una forma de consuelo.

Un consuelo que ya no era suficiente.

Quería sonreír y pensar que todo iba a estar bien.

Pero los recuerdos lo inundaban de manera fugaz, y eso era suficiente para que su corazón doliera mucho.

El no merecía ese dolor.

Ninguna persona merecía ese dolor.

Pero son cuestiones de la vida que para bien o para mal, tenía que vivir y tenia que aprender a adaptarse a ello.

De manera injusta.

Él poco a poco fue tranquilizando su llanto y posterior a eso alejó un poco a su hermana de él.

Ahí pudo ver que en los pequeños ojos de Nezuko había rastros de lágrimas, cosa que lo hizo mostrar una ligera sonrisa en contra de su voluntad, pero tenia que ser fuerte para que su hermana estuviera bien.

- perdón por hacerte llorar, solo necesitaba desahogarme un poco...pero ya estoy mejor, ahora que tal si dormimos un poco? Mañana sera un nuevo día de entrenamiento así que debemos de estar preparados.- dijo el chico con un ligero entusiasmo, a lo cual la pequeña Nezuko asintió de manera firme, por lo que rápidamente se separó de tanjiro y luego se fue a meter de bajo de la manta de la cama, cosa que hizo reir débilmente al chico el cual fue a cerrar las cortinas de ambos lados de su cama para evitar la luz de la mañana y luego se acostó sin ni siquiera cambiarse.

No tenía ánimo para eso.

Por lo que después de acomodarse en la cama, Nezuko una vez más se recostó en su pecho y luego se aferró a él, acción que lo hizo reir una vez más, ya que Nezuko se durmió al instante.

- descansa Nezuko...mañana será otro día.-

A la mañana siguiente.

Todo transcurrió con normalidad.

Tanjiro resguardó a su hermana como de costumbre en su caja de madera y luego procedió a ayudar a las chicas de la casa con sus labores cotidianos.

Eso de alguna manera lo ayudaba a distraerse, aunque no se sentía con el ánimo de platicar, pero sabía que era algo por lo que debía pasar ya que sus compañeros y amigos no eran los más silenciosos que digamos.

Pero dentro de lo que cabe, estaba bien, puesto que al menos entre sus interacciones comunes le podían sacar una que otra sonrisa.

Aunque siendo sincero, lo único que quería era estar solo.

Es por eso que inconscientemente, se alejó de forma distraída de sus compañeros al momento de verlos.

Y no fue en el momento, simplemente en un punto de la plática en dónde no lo estaban incluyendo a él, simplemente se apartó a realizar alguna otra actividad.

Con Aoi por ejemplo, después de ayudarla con las mantas y algunos trapos limpios los cuales ya habían sido colgados, ella le ofreció amablemente prepararle algo para comer...aunque de manera suave, el la rechazó y luego se fue a ver que otra actividad realizaba.

Esto en cierto punto llamó la atención de la chica, la cual no hubiera tenido problema con eso sino fuera porque no era la primera vez que tanjiro se negaba a comer.

Ya lo había notado días anteriores a la hora del almuerzo o de la cena, en dónde el chico no terminaba de comer lo que se le servía, aunque no era tan notorio para el resto ya que Inosuke siempre la arrebataba los platos y se lo comía él.

Pero esto era algo que le generó un poco de intriga a Aoi, ya que sentía que tanjiro estaba actuando de forma particular.

Incluso en ocasiones cuando veía los entrenamientos de rehabilitación de él con las niñas, despues de cada sesión ellas le ofrecian jugar un rato, cosa que en el pasado él hubiera aceptado sin rechistar puesto que eso era algo que lo caracterizaba y que llegaba a encantar a cualquier persona.

Pero ahora, el cortésmente les decía que en otro momento jugarían y luego se marchaba, cosa que las hacía sentir tristes, a tal punto que pensaban que fueron muy duras con él en su rehabilitación.

Y eso la hizo dudar un poco más ya que empezaba a creer que algo andaba mal con tanjiro.

Él seguía sonriendo y apoyando en muchas cosas por mera voluntad, pero había ese "algo" que lo hacía ver diferente a como era comúnmente.

Cómo cuando veía a Zenitsu y a Inosuke discutir por cualquier cosa, el ya no intervenía.

Al contrario, se alejaba y realizaba otro tipo de actividades que estuvieran fuera del ruido o de las personas.

En su lugar se ponía a regar las flores de la finca, en dónde en ocasiones solía encontrarse a Kanao, con la cual se llevaban bien desde aquella vez que hizo una apuesta con ella con la moneda que llevaba siempre consigo.

Pero ahora, el solía pasar de ella, aunque no de manera grosera.

Simplemente la saludaba y seguía con lo suyo, cosa que también le parecía raro a la chica puesto que por lo general, tanjiro solía extender sus conversaciones para que ella se motivara a hablar más, cosa de la cual ella estaba dispuesta, pero últimamente tanjiro se veía distraído y ya no hablaban como antes.

Por lo que después de analizar y ver todo lo antes mencionado, llegó a la razón obvia de que a tanjiro le estaba pasando algo malo aunque no sabía que era.

Aunque también podía tener sus suposiciones, como el hecho de que seguía afectado por la muerte de Rengoku, pero incluso tiempo después de eso, el seguía mostrandose optimista e incluso estaba motivado a querer mejorar aún mas.

Pero ahora ese deseo parece haber desaparecido.

Ya no tenía ese brillo tan único en sus ojos.

Y su sonrisa parece haber perdido intensidad.

Incluso se veía pálido y parecía que algunas ojeras se estaban formando en sus ojos.

Por lo que Aoi, ya sintiéndose preocupada, ella decidió pláticar con él.

Aunque primero preparó unas bolas de arroz y luego preparo dos tazas de té y luego lo fue a buscar al patio de la finca.

Cosa que no tardó mucho, ya que pudo visualizarlo en el tendedero recogiendo algunas mantas que ya habían terminado de secar, cosa que la hizo sonreír puesto que ese no era su trabajo, pero ahi estaba él, apoyando como siempre.

Es por qué al ver que terminó de doblar la última manta, ella se acercó a él y luego colocó una taza de te en su mejilla, cosa que hizo sobresaltar al chico el cual estaba distraído.

- A-Aoi-san, que haces?-

- eso debería de preguntarte a ti, porque estás haciendo esto? Acaso me quieres dejar sin trabajo?-

- eh? ¡No! Claro que no...acaso shinobu-san te dijo algo al respecto?- cuestionó el chico algo preocupado, cosa que al final hizo sonreír a la peli-negra la cual negó con la cabeza y luego le pasó la bola de arroz a tanjiro junto a su taza de té a la fuerza.-

Tenía que comer si o si, además de que le ofendió mucho de que despreciaran su comida.

- solo te estoy vacilando tanjiro-kun. Sabes bien que te estoy agradecida por tu apoyo aquí en la finca, pero ya te dije que no es necesario.-

- ya veo...lo lamento, es solo que no me gusta estar sin hacer nada.-

- aún no les han mencionado sobre alguna misión?-

- por el momento no...y es extraño...- contestó el chico con simpleza y luego procedió a comer su bola de arroz, cosa de la cual estaba pendiente Aoi puesto que quería seguir indagando más la actitud del chico.-

A simple vista no había nada fuera de lo particular.

El estaba tranquilo, comiéndo lentamente y bebiendo su té con calma.

Pero aún así sentía que algo no estaba bien.

Tanjiro tenía algo que la hacía preocupar, y estaba completamente segura de que si se lo preguntaba directamente él le diría que todo estaba bien.

Además, sentía que él no estaba con el ánimo para platicar en ese momento, y tampoco quería molestarlo por si en dado caso se sentía mal, así que espero pacientemente a que terminara de comer junto con ella y luego procedió a recoger las cosas en la bandeja que llevaba.

- que tal estuvo?-

- estaba delicioso, gracias Aoi.-

- de nada...aunque hay algo que quiero decirte.-

- uhm? Quieres que te ayude en algo más?-

- no, no tiene nada que ver con los quehaceres de la finca. solo quiero que sepas que si en dado caso estas pasando por algo, puedes hablar conmigo.-

- eh? Y a qué se debe eso?-

- no creas que no me doy cuenta de las cosas tanjiro-kun...te he notado muy distraído últimamente, y aunque quisiera decirte muchísimas más cosas, puedo comprender que en este momento no te sientes cómodo con la presencia de alguien.-

- e-eso no...-

- está bien, no estoy molesta por eso...en algún punto todos nos sentimos así, por lo que no debes de preocuparte por eso, aún asi, quiero que sepas que si en dado caso necesitas hablar puedes apoyarte en mi o en alguien más de este lugar. Después de todo eres nuestro amigo y nos preocupamos por ti.-

-yo...lo entiendo... gracias.-

- no, gracias a ti por ayudar.- dijo Aoi de manera suave mientras recogía también la cesta en la que estaban dobladas las mantas limpias y luego se retiró del lugar.-

Quería extenderse más e indigar en lo que tenía tanjiro pero si hacía eso puede que lo estuviera presionando, y lo que menos quería era incomodarlo.

Así que de manera serena se conformó con que haya comido algo y luego se marchó de ahí.

En busca de una opinión para saber si se puede ayudar a su amigo.

Llegada la tarde.

Aoi se encontraba en la oficina de su maestra, y es que creía que tal vez ella podría ayudarla a encontrar una respuesta a la duda que tenía.

Y es simplemente le dió muchas vueltas a ese asunto a tal punto que ahora ya estaba preocupada por tanjiro.

Quería apoyarlo de algún modo, por lo que no vió mejor solución que esa.

Es por eso que fue en busca de shinobu, la cual estaba leyendo un libro de medicina hasta que fue interrumpida por Aoi, quien con algo de pesar, entró a la oficina y le pidió platicar a ella de un tema importante.

Algo extraño a su parecer puesto que Aoi no era precisamente alguien que llegara a platicar con ella por temas de esa índole, pero se veía afligida, por lo que cortésmente la invitó a sentarse delante de ella y luego procedió a dar inicio a su relato.

Durante los siguientes 30 minutos, Aoi le contó todo lo que había presenciado de tanjiro en los últimos días.

De como había cambiado algunos aspectos pequeños de su día a día pero que de verdad lo hacían ver como alguien diferente.

Cosa que de cierta manera dejó extrañada a shinobu puesto que ella no solía convivir tanto con él como le gustaría, pero desde que se conocieron, el le dió la impresión de ser alguien bastante feliz.

O más que feliz, le dió la sensación de ser alguien sereno y bondadoso.

Después de todo, el fue el único que se dió cuenta de lo mal que se sentía ella debido a su desarrollado olfato, por lo que saber ahora que esa persona que la ayudó en su día, ahora estaba comportándose de forma diferente a la que ella recordaba era ligeramente inquietante.

- Dime Aoi-san, piensas que tanjiro-kun se siente triste?-

- bueno...solo son divagaciones mías ya que como le digo, parece el mismo de siempre pero me incomoda la idea de creer que de verdad el este triste. Aunque la única resolución que tuve fue que posiblemente su pequeños cambios se deben a la partida de Rengoku-san.-

- consideras que sigue afectado por eso?-

- es solo una idea mía pero si, pienso que puede ser eso. Después de todo me comentó que él lo vio morir delante de sus ojos. Aunque días después de eso el se mostró nuevamente feliz y dispuesto a querer superarse, es por eso que no entiendo que es lo que lo puede tener mal ahora.-

- ya veo...bueno, es un tema bastante complejo, pero si mis suposiciones no me fallan, puede que tanjiro-kun esté pasando por una fuerte depresión.- Dijo shinobu con algo de pesar, algo que consternó a Aoi por completo.-

- Depresión? Pero...cómo? Es decir, jamás lo he visto triste o algo por el estilo.-

- como te digo, es un tema complejo, no estoy tan pulida en ese tipo de temas, pero tengo entendido que las personas que sufren de este trastorno suelen manifestarlo de diferentes maneras.-

- aún así...pensar que tanjiro-kun tenga ese tipo de problema...-

- lo se, es raro debido a la dulce personalidad de él, y ahí es donde radica el problema. Tanjiro-kun jamás aceptará estar mal delante de las demás personas o de sus seres queridos, más que nada porque dado a como es él, no va a querer preocupar a nadie, y porque seguramente no sabe que está pasando por eso.-

- pero si ese es el caso, como podemos ayudarlo?-

- bueno, es algo difícil ya que las personas con ese problema, por lo general buscan aislarse de los demás...no se sienten con el ánimo para querer mejorar y suelen fingir estar bien todo el tiempo, es por eso que es difícil de saber si alguien tiene depresión o no.- dijo shinobu la cual habló en base a su propia experiencia.-

Aunque no podía comparar su vida con la del joven kamado. Ambos vivieron cosas diferentes, lo que los a llevado a afrontar sus propios problemas de diferentes formas.

Por su parte ella aún contaba con personas con las cuales ha convivido toda su vida y a las que ha podido proteger desde que se convirtió en cazadora y posteriormente en pilar, por lo que la carga era mucho más ligera para ella.

Pero por el lado de Tanjiro, el tenía que vivir día tras día con el hecho de que su hermana era un demonio y que debía de pelear por ella para poder encontrar una cura.

Una cura que por el momento era de nulo conocimiento.

Con ese simple hecho ya podía intuir de que por muy feliz que estuviera el chico, aún estaba esa espina en su corazón la cual le recordaba la razón por la cual se volvió cazador.

Y solo la vida sabrá que otras cargas lleva en la conciencia el joven kamado.

- ya veo... entonces, hay alguna forma de ayudarlo?-

- pues creo que por el momento es mejor llevar la relación con el de manera tranquila, necesita saber que por muy triste que esté, tiene a personas que de verdad lo estiman mucho, así que trata de ser amable con él, con un gracias o con un buenos días es suficiente por el momento. No necesitamos que se agobie o eso podría ser contraproducente.-

- ya veo...veré qué es lo que puedo hacer entonces...ya que tampoco le apetece comer demasiado.-

- en ese caso déjamelo a mi, hablaré con él en estos días que no tendremos misiones.-

- es verdad, eso es otro tema que me tenía intrigada...por qué solo llamaron a Zenitsu-san e Inosuke-kun a una misión y tanjiro-kun no?-

- fue por órdenes del patrón...en un principio no lo entendi ya que incluso a mi me dejó sin misiones, pero puede que haya sucedido algo más o que el haya visto algo mas, metafóricamente hablando.-

- bueno, creo que es algo que jamás comprenderé.-

- descuida, tampoco hace falta, aunque si eso es todo entonces ya te puedes retirar, te agradezco mucho de que me pusieras al día con el joven kamado, hablaré con él después.-

- bien, y gracias por el apoyo, adiós.- dijo Aoi mientras se marchaba, dejando a shinobu pensativa mientras veía hacia su ventana.-

- supongo que ahora es mi turno de ayudarte a ti.-

Llegada la noche, Tanjiro estaba recorriendo el patio junto con Nezuko.

La brisa de esa noche era refrescante, por lo que se tomó la molestia de subirse al techo junto con su hermana y ahí decidieron admirar el cielo nocturno.

Eso de alguna manera lo estaba ayudando a reflexionar, puesto que sabía que no había estado bien en los últimos días.

Tal vez no fue grosero con nadie pero sabía que se habia apartado mucho de sus amigos.

Pero que podía a hacer al respecto?

Sus animos estaban por lo suelos y cada vez era más difícil mantener su sonrisa.

Por lo que solo podía suspirar y esperar a lo que le deparara el futuro.

Y aunque quería seguir en sus pensamientos, un aroma en particular lo invadió en ese momento.

Es por eso que al voltearse, pudo ver de frente a nada más que a la pilar del Insecto.

Cosa que solo le generó recurdos de la última vez que platicaron ahí, aunque ahora las circunstancias eran diferentes.

- Buenas noches Tanjiro-kun, cuánto tiempo sin verte.-

- buenas noches Shinobu-san, si, ha sido un tiempo desde la última vez que nos vimos.- contestó el chico mientras acariciaba la cabeza de Nezuko la cual ya había caído rendida en los brazos brazos, cosa que hizo sonreír a shinobu.-

- veo que aún no has entrado en actividad.-

- no, por alguna razón no se me llamó a mi para la misión que tienen Inosuke y zenitsu, así que bueno, no tengo nada por hacer.-

- ya veo, en ese caso acompáñame, daremos un recorrido por toda la finca.-

- eh? A esta hora?-

- acaso no quieres?-

- bueno, ya es tarde y pues, no tiene misiones por hacer o algo?-

- acaso me estás rechazando?-

- ¡no! Solo pregunto si no tiene cosas más importantes que hacer? Incluso dormir también es importante.-

- acaso me estás rechazando?- cuestionó shinobu mientras le sonreía al chico, aunque una vena creciente se le había formado en la frente, cosa que le dió algo de miedo al chico.-

- voy a ir a d-dejar a Nezuko a la habitación.- dijo Tanjiro el cual se bajó del techo y salió corriendo a dejar a su hermana, para la total diversión de shinobu la cual también se bajó del techo y esperó la llegada del joven kamado quien en cuestión de segundos ya estaba de regreso con ella.-

- bien, entonces vamos, no hay tiempo que perder.- dijo la chica la cual lo tomo de la mano y luego lo empezó a arrastrar hacia a fuera de la finca.-

Puede que en otras circunstancias Tanjiro se hubiera avergonzado por el contacto repentino de la pliar, pero ahora estaba confundido por la repentina acción de la pilar.

- y a dónde vamos Shinobu-san?-

- a ningún lado en particular, solo caminemos y platiquemos un poco.-

- oh, bueno, está bien entonces...-

- bien, en ese caso dime, cómo has estado?-

- pues todo ha resultado muy bien, las últimas misiones que hice fueron un tanto complicadas pero logré resolverlo adecuadamente. Por fortuna mi katana no se ha roto y llevo bien las tareas de la finca, aunque lo s entrenamientos son un tanto .-

- eso suena bien, pero no me has respondido mi pregunta...cómo has estado?-

- eh? Yo...no entiendo.-

- es decir, como te sientes? Estás feliz? Estás triste? Enojado, como es que te sientes Tanjiro-kun?- cuestionó shinobu mientras permanecia al pendiente del semblante del chico.-

Tal como se lo comentó Aoi, Tanjiro parecía cansado, aunque no era tanto en el aspecto físico, más bien era un cansancio mental.

Su rostro el cual siempre estaba enmarcado con una sonrisa genuina ahora se veía opacada por una débil sonrisa forzada.

Las ojeras en sus ojos era una clara señal de que no estaba durmiendo bien y se veía mucho más delgado a como lo recordaba ella.

Tomarlo de la mano no fue más que la excusa para saber cómo estaba, y a comparación de la primera vez que lo hizo solo para jugarle una broma, ahora podía ver la falta de alimentación del chico.

Y eso fue suficiente para ella para saber que en efecto, tanjiro estaba pasando por una depresión profunda.

Algo que le dolió, puesto que consideraba al chico como alguien especial.

Una especie de luz en ese mundo tan podrido por culpa de los demonios.

Pero ahora, el brillo tan genuino de Tanjiro kamado estaba siendo eclipsado por el pesar de sus pérdidas.

Y era tan fácil de reconocerlo a simple vista.

Después de repetir su pregunta, shinobu pudo ver cómo los labios del chico empezaron a temblar un poco.

Su respiración se volvió un poco más pesada y sos ojos se cristalizaron un poco.

Lo que en efecto era la imagen de un chico que solo necesitaba un abrazo.

Abrazo que ella le consedio, puesto que antes de que el pudiera responder, con gentileza ella lo atrajo hacia su cuerpo y lo recostó en su pecho, acariciando suavemente su cabello con una de sus manos mientras dejaba que el se desahogara a su manera.

- está bien Tanjiro...no hace falta ser fuerte todo el tiempo. De hecho llorar es algo bueno ya que a diferencia de los demonios que nos rodean, llorar nos hace ver la vulnerabilidad de nuestras almas, la cual nos transmite la humanidad que aún poseemos, así que grita o llora si lo necesitas, que yo estoy aquí para ayudarte, así como me ayudaste a mi en su día.- terminó de decir la pilar con la voz mas suave que podía entonar en ese momento.-

Cosa que terminó por funcionar, ya que pese a no llorar de manera desconsolada, Tanjiro se liberó momentáneo de sus tristeza mientras abrazaba a shinobu, soltando algunas lágrimas en el proceso mientras sentía la calidez que la chica le transmitía.

Y así estuvieron algunos minutos, en dónde shinobu no dijo nada, puesto que el silencio era más que suficiente para que tanjiro se expresara libremente sin tener que trabarse con sus palabras.

Solo sentía la forma cariñosa en la que ella acariciaba su cabello y su espalda, haciéndole algunas cosquillas en el proceso pero de manera gentil, acción que lo terminó por calmar.

Es por eso que después de ese pequeño tiempo, tanjiro se apartó con ella, viendola directamente a los ojos, y aunque quiso decirle algo, ella lo silenció con uno de sus dedos de manera juguetona.

- sigamos con nuestro recorrido, de acuerdo?- cuestionó shinobu de manera juguetona, a lo cual Tanjiro simplemente asintió por lo que siguieron con su camino sin rumbo aparente.-

Aunque para shinobu no había problema alguno, puesto que entendía que Tanjiro no era capaz de dormir debido al claro insomnio que sufre, y ella ya estaba acostumbrada a cazar en la madrugada, así que podia acompañarlo sin problema.

Por lo que ambos exploraron los alrededores de la finca de las mariposas mientras resguardaban sus palabras, aunque Tanjiro al ya sentirse un poco mejor, decidió entablar una conversación con ella de algo que lo tenía confuso.

- Shinobu-san, le puedo hacer una pregunta?-

- claro, que sucede?-

- bueno, me da algo de pena preguntar pero... usted mencionó que yo la ayude en en su día...si pudiera preguntar, en que la ayude exactamente?- cuestionó el chico mientras observaba a la pilar, la cual siguió con su camino aunque sonrió en medio de su respuesta.-

- me ayudaste a comprender que la vida puede ser espectacular pese a las cosas malas que vivimos. Hasta ese entonces solo estaba pensando y ahogándome en mi deseo de venganza...y de repente apareciste tú.-

- yo? Pero no creo haber hecho mayor cosa.-

- y es ahí en donde radica la increíble persona que eres. Tienes cualidades que hoy en día ya se han perdido tanjiro-kun. Viste tan fácilmente atraves de mi que ni siquiera tuve tiempo de defenderme, aunque tampoco hizo falta ya que me ayudó a comprender algo muy importante.-

- en serio? Y puedo saber que es?- cuestionó el chico, el cual solo observo como la chica lo volteaba a ver y luego le sonrió con gentileza.-

- que hay personas que aún confían en mi, por eso no puedo fallarles.- contestó la chica de manera tranquila, por lo que Tanjiro únicamente sonrio de manera suave, sintiendose identificado con la manera de pensar de shinobu.-

- yo... comprendo.-

- aunque no creas que fue algo fácil...a día de hoy sigo pensando en mi venganza.-

- eh? Pero eso...-

- si, se que es algo malo, pero es un proceso tanjiro-kun. Los cambios siempre llevan su tiempo, y se trabajan de diferentes maneras...en mi caso lo trabajo junto a todos ustedes.-

- que? Con nosotros? Y como lo hace?-

- solo necesito convivir con ustedes para saber que la razón por la cual me esfuerzo día tras día. Ver el rostro feliz de la niñas como la de Kanao o incluso la de Aoi a la cual le cuesta sonreír pero aún así lo hace...ver discutir a zenitsu con Inosuke o verte a ti jugar con tu Nezuko o cuidarla siempre...todo eso hace que me esfuerce ya que no quiero que eso se acabe.-

- Shinobu-san...-

- bueno, me gustaría que zenitsu e Inosuke-kun si dejen de pelear, pero más allá de eso, disfruto mucho de mi convivencia con ustedes, y me dejo influenciar por ese sentimiento cálido ya que es lo que me hace sentir bien.-

- es por eso tanjiro que aunque no se por lo que estás pasando, quiero que recuerdes que hay gente que te quiere...que te aprecia y que valora todo lo que has hecho por ellos y lo que estás haciendo todavía. Así que sigue luchando, y si en dado caso te duelen las manos por blandir tu katana, apoyate en mi, yo con gusto te ayudaré a seguir mejorando, o incluso en los otros pilares...bueno, en sanemi no porque aparentemente te odia, pero fuera de eso no cargues con todo tu solo.-

- eres especial y un gran chico, puede que ahora todo lo veas gris, pero recuerda que después de cada tormenta siempre aparecerá el sol...esa luz que los demonios jamás tendrán el lujo de ver.- terminó de decir shinobu la cual observó como en el horizonte empezaban a salir los primero rayos del sol.-

Aunque lo que más le cautivó a la chica fue ver la sonrisa genuina del chico el cual estaba limpiándose las lágrimas después de las hermosas palabras que le dedicó la chica.

- Gracias Shinobu-san, yo en verdad necesitaba escuchar eso.-

- no hay de que, al contrario, yo te doy las gracias a ti.-

- eh? Y a mí porque?-

- porque fuiste quien me enseñó que no me tengo que rendir.- dijo la pilar la cual le robó un beso rápido en la mejilla al chico y luego salió corriendo a su máxima velocidad.-

Aunque volteó rápidamente para ver la reacción del chico y como era de esperar, Tanjiro estaba muerto de la vergüenza, cosa que la hizo reir.

Ahí empezaba el cambio del chico.

Claramente aún estaba triste y seguro que iba a tomar un tiempo regresar su alegría a como era antes.

Pero todo llevaba un proceso, y ella se aseguraría de apoyarlo.

Así como él a apoyado a todos los que alguna vez lo han necesitado.

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Hace tiempo leí un comentario que decía que le sorprendia que tanjiro no tuviera depresión después de todo lo que había vivido.

Y eso me hizo mucho sentido y decidí sacar este one-shot.

Pues no sé si les gustó pero a mí me encantó.

Siente que puedo hacer un libro de one-shots de kny o extender este one-shot a fic.

Dependerá de los votos que le den.

Por mi parte, perdón por si ofendí a alguien que de verdad tuviera depresión.

Yo también pase por eso pero en menor medida, así que lo relate en base a mi experiencia.

Y nada, esos sería todo de mi parte, espero que les haya gustado, nos vemos en la próxima.^^

Palabras escritas: 15