|| Capítulo Único ||
Los flashes de la cámara iluminaba el lugar, junto a su característico sonido.
El omega de piel pálida posaba distintas poses para la cámara y así obtener fotografías de ensueño, increibles e intáctas. Vestia una chaqueta de cuero de color negro, por dentro llevaba puesto una playera blanca con la palabra "NEVERMID" en color negro, la playera estaba metida dentro de los pantalones de cuero que vestia, calzaba unas botas negras de cuero, en su cuello se adornaba una gargantilla negra, mientras que los dedos de sus manos eran adornadas con algunos anillos, su cabello negro algo desordenado le daba un estilo rebelde y sensual, sus labios color rosa suave y el deliniador en los ojos, y su mirada seria y tranquila son el último toque.
- Listo -chilla el beta- terminamos Gigi -da unos saltitos de emoción, el modelo deja de posar y se encamina hacia donde se encuentra él-
- ¿Cómo sali Hoseok?
- Espectacular como siempre -deja escapar un suspiro de conformidad cuando vuelve a ver las fotos- eres increible Gigi.
- Lo se J-hope lo se -menciona con su ego alto- tienes suerte de tener a un modelo tan radiante y hermoso como yo -ahora tiene un tono más divertido-
- Vaya suerte que tengo eh, ¡¡oh!! -exclama mirando al pálido- ¡¿pero que clase de persona es usted?! ¡¡es un magnífico adonis!! ¡¡siento que su belleza me dejará ciego!! ¡¡piedad por favor!! ¡¡no me quite la bendición de poder admirar su radiante esplendor!! -dramatiza y todos los presentes en la habitación se hechan a reir por las ocurrencias del beta-
- No se preocupe mi fiel aficionado, usted puede seguir apreciando mi esplendor -le sigue el juego-
Todos en la habitación vuelven a reir por lo dicho, no era un secreto para nadie que Yoongi el omega modelo y Hoseok su patrocinador eran muy buenos amigos, ambos se consideraban almas gemelas, razón por la cual muchos pensaban que ambos eran pareja en secreto, sin embargo la verdad era otra, pues su relación no era nada más que una amistad muy fuerte, ambos se consideraban hermanos que posíblemente fueron separados al nacer. Jung Hoseok es el mejor amigo del omega bonito.
- Hola Yoonie -el pelinegro deja un beso en la mejilla del pálido-
Y ese era Park Jimin, un "beta" que era el mejor amigo de los otros dos individuos, en conclución, los tres chicos son mejores amigos y son conocidos como los tres mosqueteros.
- Hey hola Jimin -saluda el beta-
- ¿Por qué se saludan si hace ya hace horas que nos saludamos? -cuestiona Yoongi-
- Ni idea -alza los hombros- mejor vayámos a comer sushi o cualquier otra cosa, pero vayamos a comer, me muero de hambre -suelta un bostezo-
- Cierto, yo también tengo hambre, no he vuelto a probar vocado desde que comimos la pizza.
Los tres chicos al estar de acuerdo empiezan a caminar a la salida, pero uno de los trabajadores detuvo a Hoseok y se lo llevó ya que al ser él el patrocinador necesitaba hacer algúnas cosas importantes y no podia irse así como así.
- Jimin -el pelinegro mira al omega- vayamos a comer, tengo mucha hambre -hace un puchero, escerio queria comer, tenia tanta hambre que icluso a él le sorprendia, pues Yoongi no era de comer mucho, pero las veces en las cuales tiene mucha hambre se debe a su celo, pero para su celo falta un mes, así que no es eso-
- ¿Mi pequeño Yoonie tiene mucha hambre? -pregunta con tono meloso-
- Shi
- Mucho, mucho
- Shi Jiminie
- Esntonces vamos a comer, seguro que Hoseok entenderá porque no lo esperamos, andando Yoon -Jimin agarra a Yoongi de la cintura y lo apega a él-
A Yoongi no le sorprendia que Jimin lo agarrara de la cintura, casi siempre lo hacía, así como también solia tocar su cuello y acariciar la parte donde iria su marca, tambien solia posar sus manos sobre sus piernas e incluso acariciarlas, al principio a Yoongi le incomodaba pero después se fue acostumbrando, despues de todo solo eran caricias, no significaban nada más ¿cierto?.
- Hasta que al fín llegas Yoongi -suelta un suspiro-
- No me tarde mucho, sali cinco minutos despúes de que tu salieras del edifício -y no mentia, todos los que habian ido al viaje se quedaban en un hotel, donde cada persona tenia su habitación de hospedaje, el de Hoseok estaba más hacia el acensor y el de Yoongi en el fondo junto a la habitación de Jimin-
- Vamos ve a cambiarte para las fotografias y ponte lindo.
- Siempre soy lindo J-hope.
- Si lo se -roda los ojos mientras sonrie- ve a cambiarte ya -palmea- Jimin ya esta listo, vámos.
- Si como diga señor Jung -lleva su mano a la frente como un militar-
Jimin y él son modelos junto a otros, pero ambos eran los más aclamados para ser modelos de marcas reconocidas. Solian poner algunas veces un poco de detalles como ahora, le habían dibujado algunos tatuajes falsos, llevaba tatuajes en sus brazos y uno en su cuello, un toque genial.
El día transcurrio muy bien y normal o eso parecia puesto que Yoongi sentia mucho calor, no sabia si era solo él, pero sentia demaciado, mucho calor, tanto que parecia que se freiria en cualquier momento. Se sentia extraño, aparte de estar acalorado, sentia algúnos mareos y su lobo estába muy inquieto, pero logró disimularlo bien.
Estaba en los vestuarios ya cambiado con sus ropas y listo para volver al hotel, pero nisiquiera pudo mover un músculo cuando nuevamente su vista se hizo borrosa y sentia que todo daba vueltas. Perdió el equilibrio y estaba a punto de caer al duro piso cuando unos brazos lo sostenieron de la cintura evitando la caida.
- ¿Estas bien? -una voz conocida para él le habló al oído-
- Si, solo perdi el equilibrio -se recompone y mira al espejo frente a él- gracias Jimin.
- No agradezcas, ¿pero seguro que estás bien? te noto algo extraño ¿pasa algo? -se apega un poco más al cuerpo del omega-
- Estoy bien, no te preocu-
Yoongi había vuelto asentir el mareo de nueva cuenta, fue cuando su nariz se movio detectando un aroma ceniza con un toque de incienso, ese aroma lo sentia muy a menudo últimamente y no le molestaba, pero si lo tenia confundido.
Estaba tan sumido en la neblina del aroma que solo volvio a la realidad cuando sintio algo húmedo en su cuello, más exactos una lengua.
- No te vez bien Yoongi -menciona con una voz ronca-
- E-estoy bi-ien, so-olo -de la nada el aroma se intensificó y eso golpeó los sentidos del pálido- y-yo..
- Shh tranquilo, relájate.
Yoongi solo podia ver borroso, sintiendo como las manos de su amigo tocaban la piel de su cintura y el aroma ingresaba por sus fosas nasales segándolo por completo.
- Es el momento -susurra en su oído- es hora de que te entregues cariño, de que seas mío y sellarte, quiero dejar mi sello sobre su hermoso cuello amor, después de todo para eso naciste, eres mío desde siempre.
Dicho esto Yoongi no pudo más y sus ojos se cerraron dejándolo inconsiente, la oscuridad prevalecia.
Sus ojos se abrieron lentamente, todo estaba oscuro pero no lo suficiente, se sento en la cama y observó el lugar, definitívamente no era su habitación de hotel, entonces ¿dónde estaba?.
- Ya despertaste Yoongi.
- ¿Jimin? -pregunta confundido viendo hacia donde seria la puerta del lugar y de donde venia la voz-
- Si, soy yo.
- ¿Dónde estamos?
- Es mi habitación de hotel.
- ¿Tu habitación?.
Ahora que lo recuerda Yoongi nunca había entrado a su habitación, era extraño, con razón no reconocia el lugar, pero eso quiere decir que sí están en el hotel, entonces podia irse a su habitación, que bueno.
- Tengo que irme -se levanta pero al instante siente un dolor en su parte baja y cómo su aroma se intensifica- ¡¡rayos!! -grita en un susurro al darse cuenta de su condición- Jimin ¿dónde está mi bolsa.
- Mmm lo tengo yo.
- Pásamela por favor.
- No
- ¿Qué?, no seas chistoso dámela.
- No Yoongi -rebusca en la bolsa y saca un embase pequeño con pastillas- quieres estas, no te las daré
Yoongi frunce el ceño, los supresores era lo que más necesitaba ahora mismo joder.
- Jimin, no estoy jugando, dame los malditos supresores -no obstante puede ver que el otro niega mientras se acerca a él-
- No Yoonie, esto no te ayudará como es debido.
- ¡¿Entonces que me va a ayudar estando yo en pleno celo?! -menciona exasperado- encerio necesito los supresores Jimin.
- Yoonie, ¿crees que no se como sufres en tus celos? -el pálido lo mira con el ceño fruncido- ¿crees que no se lo mucho que necesías que alguién te toque y te complasca? -menciona poniendo una rodilla sobre el colchón-
Eso era lo que Yoongi más odiaba de su celo, que su cuerpo no respondia en el acto, simplemente no, nisiquiera con los juguetes sexuales que tenia, era lo más frustrante, no poder complacerse a sí mismo porque su cuerpo no respondia, nisiquiera se exitaba ni una pizca joder, es decir, ya estaba exitado, el problema era que cuando trataba de autocomplacerse su exitación desaparecía como un globo inflado que había sido pinchado por una aguja, pero el deseo, la necesidad, aún seguía presente.
- ¡¡Por eso mismo te digo que me des los putos supresores!!....espera.....¿tu cómo lo sabes? -ese secreto no le había dicho a nadie-
- Yoongi yo se todo de ti -hace un silencio y luego suelta las palabras- son un demonio y te observo todo el tiempo.
El omega solo se queda callado y confundido, ¿lo observaba? ¿cómo? y ¡¿Cómo que era un demonio?!.
- Jimin por favor no digas estupideses, ¿cómo que eres un demonio? ¿acaso bebiste? -rie un poco- es eso, estas ebrio.
- Hablo encerio, soy un demonio y tendrás que acostumbrarte cariño.
- ¿Qué?
Siente como Jimin se mete entre sus piernas.
Un momento.
¡¿Cómo mierdas llegaron a esa posición?!, con Jimin entre sus piernas, sus manos colándoce bajo su camisa y besando su cuello mientras él solo se dejaba hacer y estaba recostado en la cama.
- Ji-imin ¿que-e ha-aces?
- Shhh
- Ba-asta.
Pero Jimin seguia con lo suyo y daba leves succiones en su cuello.
- No-o si-igas -se remueve tratando de alejarse, pero el otro lo sostiene de sus cintura impidiéndocelo.
- No te muevas, déjate llevar bebe.
- No, de-éjame-e -aprieta sus labios cuando siente las manos de Jimin tocando sus pezones-
- Lo disfrutaremos Yoongi -susurra más ronco moriendo la piel del cuello del omega-
Yoongi puede sentir como Jimin deja sus pezones y empiesa a desabrochar los botones de su camisa sin dejar su blanquesino cuello.
Joder, él debia parar esto no estába bien, Jimin era uno de sus mejores amigos, simplemente no debia dejarse llevar por su calor, ahora recordándolo ¿por qué su cuerpo si reaccionaba a Jimin? más importante ¿porqué su celo se había adelantado todo un mes?.
Sintió la mano de Jimin acarisiándole la mejilla y pronto se dio cuenta de que este lo miraba con un brillo en los ojos, era uno de amor y el pálido se quedo arrobado ante esa imagen.
- Tu eres mio Yoongi, tu siempre fuiste mio, la Diosa Luna me prometio que estaríamos juntos otra vez -se acerca y junta sus frentes- nuestras almas están unidas, ahora nadie podra separarnos, eres igúal de hermoso que la primera vez que mis ojos te apreciaron -suelta una risita- es irónico que un demonio haya quedado enamorado de un humano, el mismo humano del cual el Diablo quedó embelesado y empezó la guerra enfureciendo a la Diosa Luna y arrasando con la raza de los demonios, pero dejando libres a los que no eran como su padre el Diablo, ese día te perdi y ahora estás de vuelta.
Yoongi pudo ver como de los ojos del beta o mejor dicho demonio brotaban gotas saladas, no pudo evitar llevar una de sus manos al rostro del chico y limpiar sus lágrimas, acto que al demonio lo hizo sentir bien.
- Entrégate a mi Yoonie -pide- llevo esperando esto por siglos, déjame tomarte, entrégate a mi tal como yo lo hice, porque yo soy todo tuyo y no le pertenezco a nadie más que no seas tú.
El pálido sonrie y asiente, porque no podia negarlo más, él siempre estuvo enamorado de Jimin, siempre quizo pertenecerle.
- Está bien.
Entonces el demonio sonrie y besa a su amante, un beso tierno y lleno de sentimientos recíprocos, un beso encontrado que ambos individuos habían extrañado y anhelado, un beso que con el pasar de los segundos se volvio más necesitado, las manos inquietas de ambos amantes tocándoce entre sí.
Pronto la llama del deseo y la pasión empezó a crecer dando a entender así que esto no se detendria hasta terminar el acto, y que ambos se entregarian el uno al otro en un acto que muchos llamarian "el calor del momento" pero para estos amantes era mucho más que eso.
Las manos se movian inquietas y cosquilleaban por tocar más allá de la piel, pronto las prendas empezaron a ser desalojádas de sus cuerpos y tiradas en algún lugar de la habitación.
El olor a "vino, uvas y nardo" que desprendia el omega embriagaba al demonio, dejándose llevar por el aroma mientras sus manos acariciaban las piernas del pálido mientras su boca se movia sobre la del pálido con desespero y pasión.
- Ah -gime el omega después de haberse separado de la boca del demonio-
Las manos del omega acariciaban el pecho y abdomen marcado de su acompañante, mientras este mordisqueaba y succionaba su cuello alocadamente.
Pronto Jimin empezó a mover sus caderas fingiendo embestidas que hicieron que el omega gimiera suave al oído del demonio.
- Ah -gimio más fuerte cuando Jimin empezo a acariciar su entrada con sus dedos- ah.
Yoongi se sentia muy acalorado y necesitado, nunca se había sentido de esa forma, era tan caliente que podria compararse con el infierno. Sus manos fueron a parar a la cabellera del contrario y enredaba algúnas hebras entre sus dedos.
El pálido mordio su labio inferior al sentir un ardor en su entreda, el demonio habia metido un dedo en su interior.
- Tranquilo -besa su frente y con su otra mano acaricia la cintura del blanquesino-
Dolia mucho, se sentia incómodo y ardia, tal vez sea porque Yoongi nunca se habia metido algo en su interior, esta era su primea vez y joder que dolia mucho.
Jimin repartio besos por su pecho hasta llegar a sus pezones y chuparlos, haciendo que el chico bajo su cuerpo jadeara y se distraiga un poco del ardor en su interior.
Pasaron los minutos y Yoongi ya era un manojo de gemidos de placer mientras que tres dedos de Jimin se movian en su interior y la boca del mismo succionaba uno de sus pezones sensibles y erectos, nisiquiera él mismo sabia que era tan sensible a cualquier toque.
Por el lado de Jimin, éste se deleitaba con los gemidos de su amante, pero necesitaba más, mucho más, su pene dolía y goteaba líquido preseminal, podia sentir que su cola empezaba a querer salir de su espalda baja y como el demonio que habitaba en su interior empezaba a dominarlo.
- Yoongi, no puedo aguantar más, necesito entrar en ti -habla con la voz más ronca-
- Tambien te necesito, puedes hacerlo.
Entonces Jimin saca los dedos del interior del omega, toma su miembro erecto, lo masturba un poco y presiona el glánde en la cavidad del pálido, entra lentamente para no dañar a su compañero y al estar dentro por completo se queda quieto para que el otro se acostumbre a la intromisión.
- ¿Duele?
- Si, joder que duele como el infierno.
- Shh ya pasará.
Jimin lo besa apasionádamente y hace movimientos circulares con sus manos en su cintura.
Pasaron los minutos necesarios y el pálido le dio el permiso de moverse. Entonces Jimin movio sus caderas lentamente entrando y saliendo, siendo delicado, acariciando su cuerpo y cuidándolo como el cristal más frágil del mundo, besando su cuello con behemencia.
Yoongi estába seguro que para el día siguiente su cuello estaria con marcas y posíblemente Hoseok lo regañe pero eso no importa ahora.
Mientras los minutos pasaban los movimientos se hacian más rápidos, fuertes y certeros, el demonio interior de Jimin estaba tomando el control vada vez más, los gemidos del pálido eran cada vez más altos mientras pedia por más.
Las manos de Yoongi viajaron a la espalda del otro y empezó a arañarlo, Jimin solto un gruñido ante el ardor en su espalda, pero eso le gustó.
Sin poderlo contener más, su demonio interior salio y junto a ella su cola no tan larga pero tampoco muy corta, sus ojos se volvieron negros como la misma noche y arremetió más fuerte y rápido, sus manos sostenieron las caderas del cuerpo bajo suyo, sus uñas se incrustaron en la piel contraria y el contrario gimio más fuerte, casi gritando mientras sus manos ahora apretaban las almohadas y más gemidos salian de su boquita.
La cola del demonio paseaba sobre el cuello del omega, este solo se dejaba hacer y ladeo más su cuello al sentir como la cola tocaba el lugar donde iria su marca.
- ¿Quiéres saber por qué tu cuerpo no reacciona al de los demás pero sí al mio?
- S-si -asiente, queria saberlo-
- Es porque tu cuerpo solo me pertenece a mi -se acerca al oído del contrario y susurra- antes huias de mi, pero una vez te dije que podias escapar, pero jamás de mi, cariño, tal vez creas que puedes esconderte, pero puedo oler tu aroma a millas, solo tu despiertas el demonio que llevo dentro -Yoongi gime al escuchar esas palabras-
Ambos sentian ese cosquilleo que anunciaba que pronto llegarian al climax, Jimin aumento más la fuerza de sus embestidas que parecia una bestia infernal. Yoongi sentia que en cualquier momento el demonio terminaria rompiéndolo, estába seguro que incluso su entrada estaba sangrando.
El demonio sentia que era hora de sellar al omega como sullo, sabia que él era suyo, pero necesitaba sellarlo y ver su sello en él.
Sin más, la punta de la cola del demonio se abrio y de esta salieron tres aguijónes, el omega solo ladeo el cuello dándole el permiso, tanto él como su lobo estaban de acuerdo, entonces los tres aguijónes se incrustaron en la piel del omega, justo donde iria su marca, el susodicho solto un grito muy fuerte.
- ¡¡Ah!!
Los aguijones salieron de cuello y luego volvieron dentro de la cola y la punta de la misma se cerro.
- Esta bien -menciona el demonio dando unas embestidas más y ambos se corrieron, Yoongi en el abdomen de ambos y Jimin dentro del omega-
La cola del demonio volvio a meterse a su cuerpo desapareciendo y volviendo a la normalidad. El demonio lamio la sangre que salia del cuello de su pareja mientras salia lentamente de él.
- Te amo -menciona el demonio mientras limpiaba al omega de su semen-
Yoongi no dijo nada, solo se acomodo junto a Jimin cuando éste se acostó a lado suyo tapándolos con las sábanas y este lo recibia gustoso mientras acariciaba sus cabellos.
- Jimin
- Mmmmm
- ¿Por qué tienes cola? -ante ésta pregunta Jimin solo rie-
- Nisiquiera yo lo se, solo se que ésta sale en el acto sexual, cuando mi demonio interior se presenta.
Yoongi hace un sonido comprendiendo.
- Jimin.
- Dime.
- Tambien te amo -dicho esto suelta un bostezo y empieza a quedar dormido-
- Lo se.
Habían muchas cosas que Jimin debia aclarar, sobre todo muchas cosas que enfrentar, el camino de su nueva vida como pareja es un largo recorrido y habrán obstáculos, pero ambos debian enfrentarlos para poder ser felices.
Ahora Jimin había sellado al omega y pronto el tatuaje que él tiene en el cuello, también lo tendrá su omega.
El demonio debe velar por su pareja, sobre todo protegerlo de aquel que quiere poseer a su querido, ese espectro que merodea por los alrededores. Jimin sabía que el padre de los demonios no descansaría hasta tener a Yoongi entre sus brazos, por ello él tiene que proteger a su compañero, incluso daría su vida por él.
Ambos se aman y su camino apenas empieza, pero juntos lo venceran todo, ahora ya no estaban separados, ahora Yoongi era el omega de un DEMONIO.
- FIN -
Aleister_Grey «
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