A la mañana siguiente, Leonardo estaba preparando un pequeño obsequió. Mientras en las camaras del hogar, veia los movimientos de la família. De vez en cuando notaba como Splinter miraba fijo el lugar donde estaban dos de las camaras.

Eso le causo gracia, pues ver lo minucioso que era la rata le divertia. Fijo su mirada en donde estaba su proxima víctima, no podia parar de imaginarselo bajo suyo suplicando por mas.

Con una pequeña sonrisa termino con el regalito, lo cual eran simples caramelos. Luego en un bolsito guardo dos botellas de jugo, no estaba seguro cuando darselo; pero ya allaria el momento indicado.

Por mientras jugaria con la inocente mente del menor, tomo la bolsita y miro las camaras, pudo verlo entrar a su respectivo cuarto. Esto le dio la oportunidad que necesitaba.

Salio de su dormitorio tranquilo y fue hasta el que tenia enfrente, golpeo gentil la puerta y espero a que le respondieran.

Michelangelo habia terminado de desayunar y lavar los trastes, ya que su servicial hermano de rojo, estaba ocupado con mejores cosas según él. Después de terminar se retiro a su cuarto un momento, pues no habia dormido bien ya en tres semanas y eso le tenia agotado.

Antes de que siquiera pudiera cerrar sus ojos, escucho un gentil golpe en la puerta. Pensando que seria su padre fue abrir.

Ambos jovenes se miraron un momento. Leo tomo valor y le dijo.

Leo: eh venido a pedirte una disculpa -viendole arrepentido- la otra vez hice algo muy malo, y estoy sumamente arrepentido

Mikey: -dudoso asiente suave-

Leo: te traje algo -le enseña las golocinas- realmente lo siento hermanito -sonrie con cariño-

Mikey: -mira la bolsita y enternecido la acepta- hay Leo, tu siempre has sabido como buscar mi perdón -le abraza feliz-

Leo: -corresponde y le besa la frente- jaja, si no lo supiera, me sentiria de lo peor -rie suave-

Mikey: jaja, cierto -sonrie con cariño- gracias Leo

Ambos se dieron otro calido abrazo, Leo dejo que su hermanito disfrutase de aquella falsedad. Mientras pensaba en como entregarle la dichosa sustancia.

Mikey volvio a dentro y con rapides cambio las golosinas por otras que el tenia, escondio las que eso le habia dado y luego se quedo tranquilo, comiendo unas cuantas mientras leia un comic con total calma.

En el laboratorio, Raph y Donnie seguian pensando como liberar a su hermano de aquel ser. Antes de que pudiese seguir con su plan. La única pista que tenían era evitar que su pequeño hermano, estuviese a solas con él.

Para mala suerte de ellos, el demonio ya había visto todo desde sus cámaras. Debia admitir que ese par eran fuertes aun aterrados, pero no les daria la oportunidad de fastidiarle su jugada.

Leo por otra parte luchaba por llegar a ese dichoso cuarto, pero sus energías se le estaban llendo y ya no sabia si podria evitar que lastimaran a su hermanito. Necesitaba ayuda, pero no tenia forma de que le oyeran.

Cerca de las diez de la noche, habian llegado, Casey y April para ir a patrullar con los ninjas. Mikey fue el primero en llegar a saludarlos, después Leo y al final Donnie y Raph. Los seis se despidieron de su maestro y fueron arriba.

Leo dividió al grupo en tres. Casey y Raph, Donatello y April, Miguel Ángel y él. Después de darles donde patrullar, fue con su menor por su sector, hiban tranquilos charlando de todo un poco. Luego de una hora se detuvieron a descansar, Leo llevaba consigo un bolsito, en el cual tenía dos botellitas con jugo, le dio uno al menor y el tomo del otro.

Mikey miro dudoso aquello, pero notando que la botellita estaba cellada, la abrio y bebió. Aquéllo por alguna razón le quemaba por dentro y con temor miro a su lado, topando con aquellos tetricos ojos y una sonrisa burlona.

Leo: sucede algo hermanito?

Mikey: que... que me diste? -respirando agitado-

Leo: nada malo mi ángel -suave le acaricia la mejilla- te sentiras bien al rato -viendolo desmayarse-

Dentro suyo, el lider veía con miedo aquello. Se maldijo por no poder evitarlo y aun peor, por no ser lo suficiente fuerte para evitar lo que estaba por pasar.

El demonio tomo al menor y le llevo a su citio escondido, lo dejo dentro de una jaula comoda, le quito sus armas y el t-phone. Luego regreso al lugar, realizo un par de ematomas en aquel cuerpo y destrozo el movil y las armas de su menor.

Después llamo entre llantos a sus hermanos, estos no tardaron mucho en llegar donde estaba el lider. Al verlos sus ojos se llenaron de lágrimas y terror, Donatello le atendió con cuidado, mientras este se aferraba a lo que restaba del arma de su hermano.

Raphael y los humanos buscaban algun indicio de aquella cosa que habia poseido a su hermano. Deseaban poder allarlo y evitar que pasara por lo mismo.

Dentro de Leo, el ente se deleitaba con lo que habia echo. La mente del joven lider estaba cellada por lo cual no recordaba nada a no ser ese momento en que evito que esa cosa le hiciese algo sucio a su pequeño hermano, desde allí no recuerda más.

Desvastados fueron a casa de la peliroja, pues el mayor apenas podia andar y a demas de que aun no estaban listos para decirle a su padre por todo lo que pasaron. Raphael llamo a su padre y le dijo que se quedarian esa noche en casa de April, que ya mañana irían.

April le dejo su cama al lider, mientras ella y Casey dormían en los sillones y los otros dos junto a la cama donde estaba su lider.

Cerca de las cuatro de la noche una de las tortugas salia de aquel departamento. Al llegar al techo, se quedo viendo el oscuro cielo, donde apenas se veian algunas estrellas. Leves lágrimas recorrían sus mejillas, mientras se maldecia una y otra vez, por no haber luchado mas contra aquéllo que estaba destrozando a su família.

Despues de un rato regreso al cuarto y trato de dormir. El demonio tomo control nuevamente de aquel cuerpo. A paso suave, se acerco y alzo a uno de los humanos, llevandoselo a otro citio, allí lo despojo de su ropa y le ato las manos a la espalda. Le sacudió un poco despertando.

El humano lo miraba con asombro, pues no esperaba verlo asi de bien a pesar de los golpes. Lo que mas le sorprendio fue aquella mirada que le dirijia, tan llena de locura y lujuria.

Leo: vamos a pasar un buen momento -le lame el cuello- veras lo bueno que soy en esto

Casey: n-no, dejame ir -le ve con miedo-

Aquella mirada exito muchisimo al demonio y sin preparación alguna lo penetró y embistio con locura su estrecha entrada, mientras los gritos y llantos de aquel joven hacian eco en el lugar.

Lentamente desgustaba aquel cuerpo dejando leves marcas, salio de él y le dejo boca abajo, penetrandolo de nuevo, entrando mas en él. Apreto con un poco de fuerza las caderas del joven, clavandole un poco las uñas y lastimandolo. Realmente le gustaba cuando sus victimas rogaban, eso le exitaba mucho mas.

Dando unas ultimas estocadas se corrio dentro de él. Mientras este involuntariamente se corria en la mano de aquel que suponia era su amigo. Salio sin cuidado de él y lo miro tranquilo, lo limpio un poco y luego lo vistió, llevandolo de nuevo al departamento.

Le dejo en el mismo sitio y luego volvio con cuidado a la cama, dejando que el dueño tomará posesión del cuerpo. Sin percatarse de lo que habia echo con aquel humano.

Bueno aquí les traigo otro cap, que lo disfruten ❤