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07


Los besos entre ellos poco a poco se fueron profundizando, Hanielle sentía que su corazón iba explotar porque su cuerpo estaba controlando lo que su alma podía llegar a sentir, era ahora cuando comprendía que las emociones en ellos eran aumentadas, es que sentía un deseo e incontrolable por sentir más de los que estaban experimentando, que para Lucifer no era nada nuevo, para el ángel era demasiado confuso porque ella sabía que estaba pecando pero no podía dejarlo, no podía evitar que su anhelo siguiera creciendo, quería sentir más de eso que ella desconocía y que Lucifer estaba dispuesto a darle.

El arte de la lujuria era parte importante de Taehyung, una de las siete emociones o pecados que traía consigo, pero ahora le estaba enseñando a Hanielle a conocer el pecado original, mismo que lo hacía sentir tan bien, porque tenía ya mucho tiempo, desde que la madre de Abigor se había ido que no se sentía tan bien, Hanielle era algo diferente porque en ella había mucha pureza, misma que no podía pasar desapercibida, saber que la estaba llevando al pecado solo lo hacía sentir bien pero no en mal plan, más bien era como si él tomara parte de la gracia que la hacía celestial a ella.

─Tengo miedo de seguir pero tampoco quiero parar, quiero que seamos cómplices hasta que nos descubran... ─ fue todo lo que Hanielle pudo decir antes de sentir como la ropa que alguna vez la cubría ahora estaba en el pasto.

─Así será, porque no quiero dejarte ir nunca, quiero que estemos juntos sin pensar en las consecuencias, no me quería enamorar de nuevo pero llegaste en el momento en que menos lo esperaba ─Lucifer prosiguió tanto con las palabras como con lo que estaba haciendo, estaba recorriendo con sus manos el cuerpo desnudo del ángel, mientras que ella también se deshacía de la ropa de él.

Los seres estaban firmando su condena en ese momento, Taehyung podría recibir un castigo cruel porque tenía terminantemente prohibido tocar a los ángeles y lo mismo corría para Hanielle, aunque ellos para ese momento no pensaban en nada más que cumplir con lo que sus cuerpos les pedía, las prodigiosas manos del demonio hacían que la zona más íntima del cuerpo del ángel desbordara de pasión, sentía su cuerpo temblar, el masculino la acomodó sobre el pasto para que fuera más cómodo para ella toda la preparación a la que él pensaba someterla a una experiencia mucho más grande y diferente a lo que ella algún día conoció.

─Estamos por llegar a un punto en el que no habrá vuelta atrás, es necesario que me digas si quieres seguir porque yo voy respetar tu decisión, voy a aclarar todas las dudas que tengas y haré que te sientas segura si es lo que sientes pero si quieres detenerte y dejarlo entonces también lo voy a entender porque no voy a obligarte a nada que tuno quieras hacer ─explicó Taehyung al mismo tiempo que se detenía y solo acariciaba las piernas de la joven dejando de tocar la intimidad para que sus pensamientos no siguieran nublados.

─No quiero que te detengas porque no sé cuándo será la última vez, quiero aprovechar en este momento todo lo que estoy sintiendo porque es nuevo para mí, porque no sé hasta cuando vaya a llegar, el tiempo que dure lo nuestro quiero aprovecharlo ─respondió la joven ángel, dejando que la mano experta del demonio se adentre entre sus piernas, su intimidad y que toque con su gran pericia esa zona sumamente sensible, tacto que sin que ella lo quisiera la estaba haciendo gemir, no había otra manera de liberar lo que sentía, cerraba las piernas buscando más placer, acto que hizo dibujar una sonrisa en el rostro del demonio.

Era un hecho que ambos iban a consumar un hecho genuinamente humano, Lucifer se arrodilló frente a ella mientras acariciaba su palpitante miembro, mientras la observaba cargado de amor y lujuria, tomó las caderas de Hanielle y siendo que ella se estaba dejando manipular la atrajo sobre si para empezar a penetrar lentamente, los ángeles no sentían más dolor que el del espíritu por lo que no era necesario que fuera tan delicado, sin embargo, para él eso era un acto del más profundo y prohibido amor que pudo llegar a sentir, ella si podía sentir el placer que él le daba, se aferró a los fuertes brazos del que ahora la sometía y la hacía suya mientras que cerraba los ojos y mordía su labio inferior.

─Este es el pecado más grande que he cometido, pero del que jamás me arrepentiría y lo haría las veces que me fuera permitido... ─dijo el demonio una vez que estaba completamente dentro ella, pronto el vaivén comenzó, la joven sentía aquel roce de la piel dentro de cuerpo y esto generaba una sensación similar a la electricidad de baja intensidad, su cuerpo estaba tan extasiado que los gemidos se unieron a una respiración agitada y desordenada, las manos grandes del regente de los infiernos se marcaba en las piernas de la joven mientras que el arremetía aumentando gradualmente la velocidad.

Hanielle sentía que su cuerpo no podía con tanta pasión, era un sueño o algo parecido, sentía como sus piernas empezaron a temblar, arqueó su espalda sintiendo como los espasmos empezaban a llegar, tenía los ojos cerrados mientras se acercaba el orgasmo, Taehyung se inclinó sobre ella poder besar uno de los pezones de la joven para que se enloqueciera más aún, esto mientras él empezaba a arremeter con lentitud y más fuerza porque el orgasmo estaba cerca, un gruñido fuerte se escuchó proveniente desde su garganta a la vez que dejaba salir su semilla en el interior de su hermoso ángel.

Habían consumado el amor con un pecado original, pero sonreía el uno para el otro estando cansados, sudorosos y entre jadeos, ellos se habían demostrado ese sentimiento de la manera más humana que conocían pero más condenada que había.

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