Tras caminar un poco, los tres llegaron a una puerta enorme que, extrañamente, se encontraba abierta desde antes que llegaran, por lo que ambos cruzaron sin mucho problema y llegaron a una capilla donde no había nadie, más no parecía abandonada en lo absoluto

- Qué raro... Usualmente hay gente aquí. - dijo el peregrino mientras se ponía en el centro de la habitación, buscando algo interesante con la mirada - ... Bueno, supongo que es mejor para nosotros. -

- ¿Alguien más se siente... Observado? - preguntó Ralsei, sintiéndose algo incómodo en ése lugar mientras miraba a los alrededores, para asegurarse de que sólo estuvieran ellos ahí

- Nah, sólo exageras, Rals. - fue lo que dijo la monstruo, algo relajada justo antes de que, de arriba, cayera un poco de cemento sólido, cosa que hizo que el trío mirara hacia el lugar de donde cayó, pero sólo uno de los tres (Ralsei) alcanzó a ver algo más que un poco de sombras... El movimiento de una criatura... - ... ¿Ves? No fue nada, te preocupas de más. -

Yoel se quedó callado ante las declaraciones de la chica y sólo continuó caminando, llegando a unas escaleras que subió con cuidado pues podía llegar a caerse por ellas, seguido de los otros dos que lo hicieron de una manera un poco más veloz, a lo que los tres continuaron por los pasillos solitarios de la catedral, donde no había nadie más que ellos, sin embargo, eso no evitaba que el Darkner sintiera que, cerca de ellos, había una cuarta presencia acechando...

No fue hasta que llegaron a una sala relativamente grande en la que Ralsei pudo comprobar que, aunque no asegurada, su corazonada no estaba del todo equivocada, pues ahí encontraron unos papeles no muy viejos con dibujos y diseños dignos de ciencia-ficción en un escritorio que, a comparación, llevaba al menos dos décadas sin moverse de aquel lugar

- Un momento... - fue lo que pronunció la monstruo, quien no le había dado mucha relevancia a la situación hasta ahora, que estaba ojeando las hojas de una manera rápida, no viendo los diseños, sino las escrituras, como si... - Yo... Yo conozco ésta letra... Es la misma que la de mi profesora... -

Mientras ella revisaba las hojas, el anciano revisó otras partes de la no tan grande habitación, viendo por los cajones de otros escritorios y los materiales que estaban reunidos igual sin mucha importancia, hasta que abrió uno donde encontró unas tablas de madera que también tenían sus escrituras, escrituras que le eran extrañamente familiares al de Londor

- Interesante... Quienquiera que haya sido capaz de coleccionar éstas, ha obtenido escritura directa de Yahar'gul... Vaya, y yo creyendo que sólo era un mito entre los propios habitantes de Yharnam, pero resulta que puede llegar a ser real... Una pena que nadie ha sido capaz de descifrar sus símbolos hasta la fecha. - pronunció el peregrino en voz alta, inexorablemente llamando la atención de los otros dos presentes en la sala, siendo que el más viejo deja las tablas en el escritorio permitiendo que el chico cabra se acerque a verlas - Si se lo preguntan, Yahar'gul es un antiguo pueblo mitológico fundado por los Grandes, tenían su propia forma de hablar, su escritura y hasta su propia civilización, pero no se sabe dónde queda o si de verdad existió, pues lo único que se tiene de él es unos símbolos de escritura y mitos de boca en boca que... -

- Oigan, éste es el mismo idioma en el que está escrita la leyenda de la Runa Delta. - dijo Ralsei interrumpiendo lo que Yoel estaba contando, cosa que hizo que el mismo cierre la boca y lo mire directamente, preguntándose qué era la mencionada "Runa Delta"

- ¿La Runa Delta? ¿No es ésa leyenda que nos contaste a mí y a Kris el día en que nos conocimos? - preguntó Susie mientras veía al Darkner, confindiendo más al peregrino a la vez que el otro daba una respuesta afirmativa

- Así mismo, además de que ya me memoricé ésa historia, y puedo basarme en ella para leer éstas cosas, sólo necesito algo de tiempo. - fue lo que pidió Ralsei, a lo que en poco o nada de tiempo consiguió saber lo que decía la escritura, aunque con un par de problemas pues habían palabras que no conocía hasta el momento - Bien... Ya lo tengo. -

- ¿Y qué dice? - preguntó Susie, aunque antes de poder obtener respuesta, el príncipe de la oscuridad miró atrás de ella, cosa que hizo que la misma también ponga su mirada hacia allá, viendo a... - ... ¿P-profesora Alphys...? -

- Oh... Em... H-hola Susie... Jeje, creí que habías... Em... Que habías muerto... - saludó ella viendo a su alumna a los ojos, sus ropas se notaban desgastadas, ella estaba sin ningún tipo de cuidado en la apariencia y parecía nerviosa, pero mucho más de lo usual

- ... Yo... ¿Cómo...? - la monstruo morada era incapaz de articular una palabra, a lo que la otra tuvo que interpretar lo que trataba de decir

- Jeje, bueno, la que hizo ésas armas en el pueblo no va a morir tan fácilmente como creen. - declaró la científica con orgullo, llamando la atención de los otros dos presentes, y aún más la de la chica - A pesar de que uno de los dragones artificiales haya destruido todas con un sólo ataque... Tal vez debí reforzarlas cuando las construí... -

- ¿De qué estás hablando? ¿Cómo que tú construiste las armas? ¿Por qué estás tan mal si sólo pasó un día? ¿Y cómo sabes el nombre de ésa cosa? - preguntó la menor de forma consecutiva, queriendo que sus dudas se respondieran lo más pronto posible, a lo que la mayor simplemente evadió la mayoría de las preguntas

- Daré las explicaciones a su debido tiempo, pero Susie... ¿A qué te refieres con que sólo pasó un día? El ataque de los dragones ocurrió hace meses... - reveló la dinosaurio amarilla, cosa que le dió muchas más dudas y preguntas a la menor, además de impactarla por medio segundo - Pero bueno, llevo un tiempo intentando descifrar ésas tablas, así que por favor, ¿Podrías decirme qué está escrito allí? -

- Eh... Pues... Es complicado, pero intentaré decirlo de tal manera que puedan entender qué es lo que dice... - dijo Ralsei antes de ver la tabla y empezar a leer su contenido - No tiene mucho más que una historia... Se llama "El Vacío" ... -

El Vacío, el lugar de donde surgió el principio de todo

Es impresionante cómo de un lugar tan poderoso, pero al mismo tiempo tan vacío, todo lo que existe es creado

Pero, ¿Qué es lo que pasa cuando una creación, digamos, un dios, decide experimentar con un poder que no conoce y menos comprender? ¿Y qué ocurre cuando utiliza ése poder para jugar con la vida y la muerte?

El Grande Nyxaris es la respuesta a éstas preguntas, o bueno, es otra pregunta sin respuesta que complementa a las demás

Su primera creación masculina, también llamada "Cthulhu" por algunos, tuvo la mala suerte de querer imitar a su creador, cosa que lo llevaría a intentar seguir sus pasos, lo que acabaría cambiando su forma de ser por su falta de poder

¿Quién diría, de forma no irónica, que el poder onírico es la clave?

- ... No entendí absolutamente nada. - dijo Susie sentada sobre uno de los escritorios de allí tras haber pensado el texto unos segundos, rindiéndose inmediatamente para acto seguido levantarse y dirigirse a la puerta, abriendo la misma - Voy a salir a caminar, quienquiera venir está invitado. -

Tras ella salir, deja a los otros tres sólos más Ralsei no pudo evitar preocuparse por ella, pero al mismo tiempo sintió una antigua necesidad de continuar investigando los secretos del mundo, a lo que, tras dudar un poco, se decidió por seguir traduciendo aquellas tablas de madera no sin antes dirigirle una mirada al anciano, indicando que acompañe a la menor en aquella caminata, por lo que el mencionado sulfuró y salió por la misma puerta por la que lo hizo la otra

El peregrino no tuvo que caminar demasiado para llegar a una parte sin techo y redonda de la catedral, algo así como un pequeño parque, en donde la chica se encontraba viendo hacia el cielo, desde donde las estrellas y la luna iluminaban el terreno, por lo que el de Londor se acercó a la monstruo y se quedó parado al lado suya

- ... He notado que estás mal, y a pesar de que no nos conozcamos, debo de preguntarte... ¿Qué ocurre? - pronunció Yoel sosteniéndose de su bastón, viendo a la chica quedarse callada por unos segundos antes de atreverse a responder

- Yo... Es que... No sé por qué vine aquí... - fue lo que dijo la monstruo, quedándose pensando unos instantes para acto seguido proseguir - Cuando los dragones atacaron y quemaron mi hogar, y cuando ése sujeto raro me dijo que no valía la pena... No pude evitar sentirme... ¿Enojada? No lo sé... Pero mi amigo Kris vino conmigo... Y ahora me dicen que pasaron meses desde eso, ¡Meses! Tan sólo piensa... No sé qué le pasó, sólo quiero volver a verlo... -

Luego de haber escuchado lo que dijo su compañera, el mayor se sentó a su lado mientras la veía taparse la cara por la frustración y por la tristeza, a lo que él decidió hablarle nuevamente

- No sé cómo decirte esto, pues de verdad parece que no te queda nada... - el peregrino hizo ambos quedaran en el peor de los silencios antes de continuar - Pero, todavía tienes a Ralsei, y acabamos de ver que tu profesora aún sigue aquí, ¿Qué te dice que tu amigo no sigue presente en alguna parte? -

Ella lo pensó un par de segundos, a lo que ambos se levantan, siendo que Susie ahora se sentía mucho mejor por las palabras que le había dicho el otro, a lo que ambos se disponen a volver adentro

- Muy bien, ahora vam... - pero Yoel fue interrumpido por un silbido que conocía de antes, uno que te toma desprevenido y que arruina tu vida incluso si a ti no te ocurre...

Fue entonces cuando el cielo nuevamente se llenó de nubes oscuras, las estrellas brillantes perdieron su luz rápidamente, y la luna, antes un símbolo de seguridad y protección, ahora se tiñó de rojo sangre, a lo que los dos vieron a la misma que generaba un ambiente de inseguridad y miedo, escuchándose el aullido de un lobo a la distancia

Poco fue el tiempo en el que Ralsei tardó en llegar hasta ahí corriendo, habiendo dejado a Alphys sóla en la habitación donde estaban

- ¡Chicos...! - dijo el príncipe llegando en el momento justo, antes de respirar aceleradamente enfrente de ambos - ¡Tenemos que irnos de aquí! -

- Ralsei, ¿Qué... Qué es lo que ocurre? - fue lo que preguntó la reptil morada, antes de verse obligada por el otro a empezar a caminar fuera de allí, al mismo tiempo que Yoel miraba paralizado a la luna de sangre y se escuchaban aullidos, gritos de agonía y... Cambios fisiológicos de fondo

- ¡No hay tiempo para explicar, YOEL, ven aquí! - gritó el Darkner, sacando al de Londor de su trance y haciendo que ambos salieran de allí, corriendo a la entrada más cercana de la catedral, aunque por si acaso, el anciano se dió la vuelta y vió directamente a la luna otra vez, encontrándose con...

El ver ésa escena fue razón más que suficiente para salir inmediatamente de allí, siguiendo a los otros dos quienes se encontraban conversando cerca del lugar donde debían estar

- Rals, ¡¿Qué carajos está pasando?! - preguntó la monstruo justo detrás del mencionado, quien no paraba de correr ni un segundo al mismo tiempo que se dispuso a responder rápidamente

- ¡Después de un evento del cuál no pude descifrar nada, un dios de muy alto rango declaró que casi todas las noches, de la medianoche hasta que se levante el sol, serán noches de cacería, noches donde los desafortunados sucumbirán ante su propia locura y se volverán bestias con sed de sangre, pero si nos refugiamos en una zona como la catedral, podremos estar a salvo! - respondió la cabra mientras llegaban a la puerta donde debían estar, pero ambos se detuvieron y miraron hacia atrás, donde Yoel aún estaba a una distancia no tan larga de allí, por lo que se quedaron a esperarlo impacientemente - ¡Vamos vamos, ven más rápido o sino todos vamos a...! -

Pero antes de que el anciano llegue y de que el príncipe termine la oración, una entidad cuadrúpeda hizo su presencia desde uno de los lados y arrasó con todo lo que estaba allí, destruyendo por completo la entrada y llenándola de escombros, al mismo tiempo tirando hacia el lado contrario a los Delta Warriors y quedando de tal manera que el de Londor pueda verlo a la cara, de nuevo...

- No... N-no tú... - pronunció el anciano con tartamudeo mientras daba unos pasos para atrás y temblaba del miedo, viendo cómo es que él, Nyxaris, estaba nuevamente enfrente suyo

- Nadie puede huir de su destino, Londoriano. - respondió el dios mientras se le acercaba con cada paso que el otro daba, haciendo que la distancia entre ambos sea cada vez menor, al mismo tiempo que el Grande mostraba su apariencia frente a los tres mortales...

Los otros dos se levantaron mientras veían cómo es que el dios amenazaba al tercero, para que luego éste los mire a ellos dos

- Tampoco me he olvidado de su presencia... Ésta noche, fragmentaré la oscuridad. - tras terminar su oración, Nyxaris produce una explosión de luz lunar cuya potencia es tan alta que hace al equipo salir volando en distintas direcciones, aunque los tres cayeron sobre distintas partes del tejado de la Cathedral Warth, a lo que cada uno se levantó con sumo cuidado para evitar una caída evidentemente mortal, para que acto seguido el dios de la noche aparezca frente al de Londor - Después de ésta noche, tú no volverás a Astra en la cima del cielo. -

- ... Eso no significa que te vas a llevar mi vida tan fácilmente, creador de bestias. - fue lo único que respondió el anciano justo antes que su bastón brille de un color azul claro, indicando que, efectivamente, ya no iba a huir más, a lo que el Grande simplemente se preparó para darle una última pelea a su mayor presa

Ralsei no se quedó sólo viendo desde la distancia y lanzó una bola de fuego hacia el dios, aunque una flecha de alma impactó en ésta y la destruyó al instante, diciendo así que ésta batalla era sólo entre Nyxaris y Yoel

Susie simplemente vió y quiso ir a ayudar, hasta que un portal se abrió enfrente suyo, dejando salir a un sujeto que portaba una espada llameante en la mano derecha y una espada mágica en la izquierda, a la vez que tenía unas alas oscuras tanto por el arte de la destrucción como por el poder putrefacto que yace en su interior...

- Ni creas que vamos a dejar que intervengan, Susie. - fue lo único que dijo el sujeto antes de que ambos se pongan en una posición de pelea

El príncipe también vió ésta escena, pero lejos de siquiera poder hacer algo, unos rayos azules aparecen y abren otro portal del cuál sale alguien que ya se ha encargado de otra persona, sólo que ésta vez se quedó en completo silencio y preparó su espada para el ataque...

... Continuará...