⚠️ ⁰²⁵ ⚠️
⚠️
Park había obedecido las súplicas del mayor, quien ahora se encuentran sobre su cuerpo rogándole que le tocará.
— Por favor, hazme sentir bien Hoon — Sunoo se movía inquieto en el regazo del delta, estaba impaciente por sentirlo.
Los labios del menor se dirigieron a su cuello, quería hacer saber a todos que efectivamente, Sunoo era suyo... Recorrió con besos su pecho, de vez en cuando dejaba algunas mordidas y esto ocasionaba que los jadeos del Omega se convirtiera en grillos más sonoros.
— Eres precioso Hyung — Park lamía con delicadeza uno de los pezones del rubio, Sunoo no podía hacer más que soltar sonoros gemidos, el delta adoraba eso.
— ¡Agh... D-Delta! — Los ojos del mayor se abrieron de sorpresa al sentir los dientes de Sunghoon mordiendo delicadamente su botón. — Más... Ah — El ex alfa apretaba con fuerza las sábanas, nunca se había sentido como aquél día.
— ¡Aah, Ahí, Sí... Mgh... — Sunghoon embestía a su mayor sin piedad alguna. El sonido de ambas pieles chocando era muy fuerte, en cualquier momento los padres de Sunoo podría entrar y sacar al Delta a golpes, ero en ese momento les daba igual. — ¡Oh, Dios... Me encanta!
— No Hyung... — Park lamía su cuello con ímpetu, dispuesto a remarcar la mordida en su piel. — No es Oh Dios, es Oh Delta, o algo así — Kim sonrió, ese niño le producía tanta ternura a pesar de que en ese momento lo estaba preparando para no caminar en un largo tiempo.
— S-Sunghoon... Aah — El menor se sintió extasiado al escuchar su nombre saliendo de los labios del mayor, y sin previo aviso mordió el cuello de Sunoo nuevamente — ¡A-Aah! — Un gritillo anuncio como su ahora Omega llegaba al orgasmo.
Ambos se abrazaron mientras el nudo comenzaba a hacer acto de presencia, los ojitos de Kim soltaban lágrimas. No recordaba que doliera tanto, pero los besos de su Sunghoon le hacían que el dolor disminuyera.
— Hyung, no sabe cuánto había deseado estar así con usted — Dijo Park acariciando la cintura de su mayor. — Usted al fin está aceptando mis caricias, y no solo por su instinto — Sus besos no paraban — Hyung, voy a prometerle una cosa.
— ¿Qué haces? — Sunoo se estremeció cuando el menor le abrazo de tal forma de que su cabeza quedará en contacto con su pecho.
— ¿Lo escucha? — sonrió, el nudo comenzaba a desaparecer. — Mi corazón está latiendo rápido, muy rápido... ¿Sabe quién es el culpable? — Sunoo sintió como su pulso también se aceleraba — Así es, Kim Sunoo... Me gustas, no... Me encantas, me fascinas — Sunoo solo quería escuchar las dos palabras salir de los labios del delta.
"Te amo"
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro