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Capítulo II

—No puedo creer que esté haciendo esto —murmuró BaekHyun para sí mismo mientras se ponía la falda escocesa de tonos rojos y negros.

Estaba casi seguro de que se largaría a llorar en cualquier momento debido a la imagen que tenía de sí mismo frente al espejo.

—¿Estás listo? —Saltó del susto al escuchar a ChanYeol hablarle desde el otro lado de la puerta.

—Sí, ya estoy por salir.

Tomó una profunda respiración antes de dirigirse hacia la puerta del baño. Una vez que salió se encontró directamente con ChanYeol, cosa que provocó que se desequilibrara, aunque se pudo afirmar del marco de la puerta para mantenerse estable.

—Lo siento. —ChanYeol le dio una mirada apenada antes de dar un paso hacia atrás—. Las cosas ya están preparadas.

Se encontraban en la misma habitación que la vez pasada, así que BaekHyun no se sintió tan tímido a la hora de dirigirse hacia la cama que estaba en el centro de la habitación, aunque eso no quitó la vergüenza que experimentó al andar por ahí con esa ropa, que no era nada más que una corta falda que le llegaba por medio muslo y unas medias largas que cubrían las rodillas, las cuales consistían en rayas alternadas de negro y rojo, como si combinasen con su falda.

—BaekHyun. —El camarógrafo se apoyó sobre el mueble de la televisión mientras metía ambas manos en los bolsillos delanteros de sus pantalones—. Sé que YiFan dijo que debía... colaborar en esto, pero no pienso hacerlo si no estás de acuerdo con ello. No quiero que te sientas presionado o algo así.

Por alguna razón suspiró al escuchar las palabras de ChanYeol y relajó un poco los músculos. Le dio una suave sonrisa en forma de agradecimiento antes de agachar la cabeza y pensárselo un poco.

—Si no hago el vídeo con tu ayuda no obtendré el mismo monto que me dijo YiFan, ¿cierto?

—Probablemente no. —El chico hizo una mueca—. Solo espero que tomes tú la decisión. Por mí no hay problema con lo que escojas.

Hubo un momento de silencio y decidió hacerlo por el dinero. Era lo que más necesitaba, después de todo.

—Hagámoslo —dijo decidido.

—¿Sí? —ChanYeol elevó ambas cejas, a lo que él solo asintió—. Está bien.

El chico en ese momento se sacó la delgada chaqueta que llevaba, mostrándole una camiseta negra sin mangas que le quedaba un tanto suelta. El solo hecho de que el chico se estuviera desnudando lo sorprendió y lo puso alerta.

—¿Qué haces? —preguntó con miedo, a lo que ChanYeol rio.

—Necesito mostrar mi brazo. —El chico elevó su brazo derecho y lo sacudió un poco. BaekHyun asintió y se sonrojó de inmediato al comprender a lo que se refería—. ¿Quieres prepararte solo mientras tanto?

Recibió el pote de lubricante que le extendía ChanYeol, pero se mantuvo callado en todo momento mientras se mordía el labio inferior. ¿Cómo se suponía que se lo diría?

—ChanYeol —susurró con timidez y el aludido elevó ambas cejas, dándole su atención—, la verdad es que... nunca hice esto antes.

Las cejas del chico se fruncieron—. ¿Qué quieres decir?

—Nunca me toqué... así —murmuró y agachó la cabeza lo más que pudo para ocultarse.

Sí, era verdad que más de una vez lo pensó y que ya estaba bastante mayorcito como para saciar su curiosidad por sí mismo, pero la vergüenza y el miedo siempre pudieron con él, después de todo, no era común que algo entrara por aquella parte trasera suya y siempre tuvo cierto miedo a siquiera toquetearse mucho.

—¿No sabes? —ChanYeol pareció sorprendido—. ¿Entonces cómo te ofreciste a hacer esto?

—N-Necesito el dinero —dijo de inmediato y de repente sintió unas inexplicables ganas de llorar, casi como si sintiera que ChanYeol lo atacaba.

El camarógrafo suspiró y se llevó ambas manos a la cintura antes de agachar la cabeza hacia atrás. No sé mostró enfadado, pero sí pareció como si estuviera metido en un problema.

—Entonces lo haremos de la siguiente manera. —ChanYeol procedió a sacarse la camiseta, cosa que lo sorprendió a tan nivel que provocó que su cuerpo se inclinara levemente hacia atrás—. Te prepararé un poco y luego, cuando te encuentres bien, comenzaré a grabar y continuaré tocándote hasta que te corras. ¿Está bien?

Que vergüenza, maldición.

—Está bien —murmuró mientras agachaba la cabeza, totalmente abochornado.

—Entonces date vuelta. —BaekHyun pestañeó unas cuantas veces, aturdido—. Pondré un poco de música mientras tanto.

ChanYeol también estaba nervioso, lo notó.

Cuando el chico le dio la espalda para maniobrar el equipo de música rápidamente apoyó las rodillas sobre la cama junto con sus codos y luego enterró la cabeza entre las sábanas. Claramente, debido a lo corta que era la falta se podría ver todo lo que había debajo de esta, que no era nada más que su piel blanquecina al descubierto.

Escuchó a ChanYeol tragar dificultosamente saliva unos segundos después de que la música se reprodujo.

El chico puso una amplia mano sobre su espalda desnuda y apoyó una rodilla sobre la cama, haciéndolo estremecerse ante la anticipación.

—Abre un poco más las piernas —ordenó y él obedeció.

De repente, con la música y las caricias suaves que hacía ChanYeol sobre su espalda baja, todo tomó un connotativo mucho más erótico.

—No q-quiero hacer esto de manera incómoda —tartamudeó un poco ChanYeol a sus espaldas—. Sería feo si simplemente te tocara y ya.

—ChanYeol —lo llamó sin prestarle atención a lo demás mencionado—, soy virgen.

—Lo supuse. —Inmediatamente miró al chico, sorprendido por lo que dijo—. Así que no te preocupes. Seré cuidadoso e intentaré hacerlo de la manera más especial que pueda.

BaekHyun rápidamente volvió a enterrar la cara contra el acolchado.

No era como si ChanYeol estuviera por follárselo, pero aun así apreció infinitamente que el chico tuviera la delicadeza para pensar y cuidar de él.

—Y creo que estaría bien que no fuera todo tan directo —susurró con la voz ahogada por las mantas, esto como una respuesta a lo anteriormente mencionado por el chico.

—En ese caso necesito que te pongas la máscara.

ChanYeol se levantó de la cama y se dirigió hacia el mueble que había a un lado de la puerta, lugar donde solía estar el computador. El chico al volver le entregó una máscara rojo vino mientas que él se puso una de color negro.

—También necesito que te pongas de perfil a la cámara, pero un poco en diagonal. —El otro lo ayudó a ponerse en la posición correcta, de manera que tuvieran un buen ángulo—. Empezaré de la forma más casual que pueda.

BaekHyun no hizo más que asentir, aunque de alguna forma sintió que moriría por dentro.

De improvisto sintió como algo se apretaba contra su trasero, cosa que provocó que se apoyara de inmediato sobre sus manos y mirara sobre su hombro, encontrándose a ChanYeol apegando la entrepierna a su trasero. Fue algo incómodo de ver, pero no anormal.

—La tela del jeans es demasiado dura y rasposa, ¿cierto?

Maldición, lo era.

—Debería sacarme los pantalones. —Cuando ChanYeol dijo aquella frase mientras se sentaba sobre la cama, BaekHyun rápidamente entró en pánico y se puso de pie a la vez que alzaba ambas manos hacia el frente, aunque no lo detuvo. El chico se sacó finalmente la prenda junto con las zapatillas sin mirarlo, quedando solo en bóxers.

—También estoy nervioso —confesó el camarógrafo de improvisto, sorprendiéndolo—. Creo que si hacemos esto de una manera más realista será más fácil.

—Claro —murmuró BaekHyun, pensando que quizás las palabras harían sentir un poco mejor al camarógrafo.

—Entonces ven aquí. —ChanYeol palmeó sus propias piernas—. Es mejor que te sientes sobre mí para que esto sea un poco más normal.

Le hizo caso sin titubear, pensando que sería mucho mejor acabar con ello de una vez e irse a su asqueroso departamento para dormir tranquilo, aunque fuera una noche.

Una vez que quedó sobre el regazo del camarógrafo rápidamente se afirmó a sus hombros y lo miró fijamente mientras sentía sus mejillas sonrojarse. Su piel sensible rozó lo suave de la tela de la ropa interior ajena.

—Muévete suavemente sobre mí —susurró el otro sin quitarle los ojos de encima.

Las grandes manos de ChanYeol fueron a parar a su cintura y lo obligaron a balancearse, a lo que BaekHyun abrió suavemente la boca mientras dejaba escapar pesados suspiros. Después de todo, el contacto que hacía su piel contra la tela le envió pequeñas corrientes por todo el cuerpo.

Ambos brazos llegaron a parar sobre los hombros ajenos mientras que su cabeza se escondió en la pequeña curva que había entre el hombro y el cuello de ChanYeol. El vaivén siguió sin detenerse durante un rato, este cada vez haciéndose más fuerte y dejando totalmente delirando a un BaekHyun que no hizo nada más que mover las caderas con la intención de sentir un poco más de contacto.

Empezó a erertarse y claramente no fue el único. De hecho, pudo sentir cuán duro se puso el miembro de ChanYeol por debajo de su trasero. No estuvieron mucho tiempo así a pesar de que BaekHyun lo quiso porque la sensación lo hizo sentirse malditamente bien, incluso se olvidó del porqué estaba allí en primer lugar.

—Necesito que vuelvas a la posición que anteriormente te mostré.

A pesar de que no quiso perder el contacto, le hizo caso a ChanYeol y se acomodó en la cama como anteriormente lo estuvo, a lo que el camarógrafo volvió a posicionarse por detrás suyo y se restregó contra su trasero ya sensible por el continuo tacto. En ese momento la gran mano de ChanYeol le recorrió lentamente la espalda, acariciando suavemente en algunos lugares con el pulgar, haciéndolo soltar suaves gemidos debido a la exquisita sensación. Lamentablemente, esas caricias se perdieron poco después, dado que la mano ajena se posó sobre una de sus nalgas, lugar donde el otro acarició suavemente. A BaekHyun en primera instancia le avergonzó aquel hecho, pero procuró permanecer tranquilo con la intención de que todo se acabara de una vez. Pensó en eso cuando escuchó cómo el pote del lubricante fue abierto para posteriormente sentir unos dedos helados tantear su entrada, cosa que lo hizo cohibirse.

—Tranquilo —ChanYeol susurró mientras que con la mano libre le acarició la espalda—. Solo imagina que hacemos esto en otra situación.

¿En otra situación?

Con la mente aún nublada por las variadas sensaciones se imaginó un distinto escenario, uno donde ambos estuvieran en las mismas posiciones, aunque en un lugar mucho más íntimo, un sitio donde no le avergonzara las caricias. Quizás podrían estar en su pequeño departamento, sobre el sofá o aquel desgastado colchón que tenía tirado en una esquina de la habitación, el cual durante las noches era iluminado por aquella luz lunar que se esforzaba en ingresar por entre sus cortinas mal cerradas.

Si tan solo estuvieran en otro lado, si se hubieran conocido de otra manera o si la situación fuera distinta, probablemente su vida también lo sería. Quizás el cambio resultaría poco notorio al nivel de rozar lo insignificante, pero de esa manera no le crearía a BaekHyun una opresión en el pecho, casi como si sintiera que desaprovechaba una valiosa oportunidad, la cual no era más que ChanYeol. Una oportunidad de encontrarse con un chico guapo que llamara su atención y que fuera lo suficientemente atento como para no sentirse intimidado por un cuerpo grande y una voz tan áspera y dominante.

El pensamiento en sí no le causó demasiada alegría, para nada, de hecho, le nubló todas aquellas buenas sensaciones que le brindó ChanYeol con sus leves caricias e incluso con esos siseos excitantes entre dientes, como si soltara un soplido retenido.

El primer dedo entró lentamente y BaekHyun contuvo el aire por unos segundos mientras sus manos apretaban las sábanas arrugadas por debajo de él. La acción fue demasiado incómoda como para soportarlo por mucho tiempo, pero se obligó a sí mismo a hacerlo.

El dedo siguió introduciéndose dentro de él hasta que sintió los nudillos de ChanYeol topando contra su trasero, provocando que un suspiro casi de alivio se escapara de entre sus labios en el momento.

—¿Todo bien?

Asintió con poca coordinación y se apoyó sobre sus codos mientras enderezaba la cabeza.

—¿Podrías ir un poco más rápido? —preguntó luego de enviarle una rápida mirada.

—¿Estás seguro? —Volvió a asentir a modo de respuesta—. Está bien.

De improvisto, ChanYeol sacó el dedo, aunque no por completo, cosa que le provocó un jadeo. Luego de eso el chico volvió a meter el dedo profundamente, ocasionando que pusiera los ojos en blanco y apretara los dientes con la intención de contener el chillido que se le atoró en la garganta. Casi de manera inconsciente meneó las caderas, como si quisiera acomodar el dedo dentro suyo.

—Continuaré con el segundo. —La voz desgastada del chico se escuchó a sus espaldas y él solo asintió.

ChanYeol sacó el dedo para posteriormente tantear su entrada con dos dedos bañados con aquel frío líquido espeso.

Probablemente, las cosas serían más difíciles a partir de ahí, al menos BaekHyun lo supuso al sentir cómo algo mucho más grande hizo presión en su entrada para abrirse entre sus cálidas paredes a tan nivel de que estas tuvieron dificultad para dejar entrar a los nuevos intrusos. Un leve ardor recorrió la zona, pero no fue lo suficientemente alarmante como para que le pidiera a ChanYeol que se detuviera. Incluso empujó un poco las caderas contra la mano ajena para introducirse los dedos de una vez y dejar de sentir el constante ardor.

—Ve más rápido —pidió con los ojos cerrados y la voz ahogada por los suaves jadeos.

—¿Duele?

Prefirió no contestar y dejó que el chico se tomará su tiempo para introducir completamente los dedos. Para el momento que los sintió en lo más profundo de sí pasó a preguntarse si el camarógrafo hizo algo como eso antes. No era que BaekHyun tuviera mucha experiencia, para nada, pero parecía que ChanYeol lo único que quería hacer era torturarlo con aquellos movimientos tan lentos y no creyó que el chico tuviera esa intención, mucho menos encontrándose en aquella situación laboral.

—¿Ahora qué viene? —se atrevió a preguntar mientras se apoyaba sobre sus codos y miraba a ChanYeol por sobre el hombro.

—Abrirte un poco más.

Que mal sonaba, maldición.

Los dedos dentro suyo se movieron con lentitud, aunque con cierta fuerza, al parecer con la intención de abrirlo más, así como dijo ChanYeol. Jadeó ante la sensación, pero nunca se movió en el intento de alejarse, a pesar de que en algún pequeño momento pensó en hacerlo, en largarse de allí de una vez y olvidarse del dinero.

—¿Cuánto falta? —preguntó con la cara enterrada en el acolchado.

—Creo que ya estás listo.

El suspiro de alivio no tardó nada en escapar de entre sus labios y apenas escuchó a ChanYeol levantarse de la cama se estiró un poco sobre esta. Alguna de sus extremidades se entumecieron por estar tanto tiempo aguantando su propio peso.

—Empezaré a grabar ahora.

—¿Ya?

Miró hacia ChanYeol, encontrándose con los ojos oscuros a través de los pequeños orificios que dejaba la sencilla y elegante máscara negra. Aparte de eso también pudo notar la erección de ChanYeol ser aprisionada por su ropa interior.

—Una vez que apriete el botón no podrás hablar.

—Está bien. —Asintió como un niño obediente.

El camarógrafo le hizo unas señas con la mano antes de apretar el botón para empezar a grabar y luego acercarse hasta él, poniéndose justamente detrás suyo, lugar donde estuvo antes.

Escuchó al chico cubrirse los dedos con lubricantes y luego estos volvieron a aproximarse a su entrada. Para aquel momento BaekHyun no hizo más que forzarse a sí mismo a imaginarse a ambos en otro tipo de escenario con la excusa de que haría todo más llevadero. A pesar de sus intentos, no dejó de pensar en ningún momento qué hacía y que tenían una cámara grabando cada uno de sus movimientos.

Los dedos de ChanYeol se introdujeron dentro de él con un poco más de fuerza que antes, también con más agilidad y rapidez, todo esto posiblemente porque el chico lo preparó con anticipación, cosa que BaekHyun agradeció.

Esa vez los movimientos dentro suyo no fueron pausados como resultaron antes. De hecho, estos eran tan vivos que su cuerpo se balanceó un poco debido al desenfrenado meter y sacar de los dedos de ChanYeol.

La sensación fue distinta a la anterior, claramente. Los gemidos apenas los pudo contener y los constantes tirones que dieron sus músculos solo provocaron que se debilitara aún más. Debido a este mismo vaivén pudo sentir cómo la punta de su pene rozaba contra las sábanas, estimulándolo cada vez más y llevándolo cerca del delirio.

Prácticamente gritó sin quererlo cuando los dedos de ChanYeol se enterraron con tal profundidad dentro de él que lo hizo temblar mientras recibía una serie de espasmos por todo el cuerpo. El camarógrafo continuó con los mismos movimientos al ver su reacción y no se detuvo hasta que a BaekHyun se le cortó el aire por completo, justo después de eyacular fuertemente contra las sábanas.

Estuvo tan tentado a dejarse caer contra el acolchado, pero la gran y cálida mano de ChanYeol alrededor de su cintura se lo impidió, manteniendo siempre su trasero en alto. Cuando el chico lo soltó procuró quedarse en la misma posición hasta que ChanYeol se dirigió hacia detrás de la cámara y apagó esta.

—Terminamos.

Se dejó caer sobre la cama con los ojos cerrados y la respiración agitada. Se quedó completamente quieto debido al entumecimiento que aún sentía su cuerpo. Nunca antes quedó tan devastado después de correrse.

—¿Estás bien? —Le asintió a ChanYeol sin muchas ganas.

Ni siquiera pudo imaginarse cómo quedaría luego de tener sexo de verdad.

—¿Quieres que te ayude a levantarte? —Pestañeó unas cuantas veces hacia el camarógrafo con la intención de dejar de verlo borroso—. Parece que estás muerto, maldición.

A pesar de que BaekHyun sabía que no lo estaba dejó que el camarógrafo se acercara hasta él para ayudarlo a erguirse, consiguiendo que se sentará sobre la cama. El contacto de la delicada piel de su trasero contra el acolchado lo hizo gruñir suavemente.

—¿No puedo dormir un rato?

—Claro —ChanYeol contestó de inmediato—. ¿No quieres asearte primero?

BaekHyun solo quería dormir.

Cuando se puso de pie con la ayuda de ChanYeol se dirigió hacia el baño y tomó un poco de agua, todo esto con la ayuda del camarógrafo.

No entendió por qué quedó tan agotado si tan solo le metieron los dedos para que se corriera. Por supuesto, estaba claro que los dedos de ChanYeol eran grandes y todo, pero aquello no era razón suficiente como para dejarlo tan destrozado.

Una vez que bebió agua y se lavó la cara se despabiló un poco y pudo estar más consiente de la realidad. Vio a ChanYeol detrás suyo, afirmándolo por la cintura y con la mano sobre la llave del lavamanos, asegurándose que bebiera correctamente. Notó también el bulto que había debajo de su ropa interior y no precisamente porque el chico estuviera apegándose a él o algo por el estilo, este, de hecho, se mantuvo a una distancia prudente para no incomodarlo.

—Eres un caballero —susurró sin planteárselo y sin dejar de mirarlo a través del espejo.

El chico elevó ambas cejas y se acercó un poco más, como si no hubiera escuchado lo que dijo. Y aquello era mejor.

Luego de secarse la cara se sintió un poco mejor y procedió a limpiarse el líquido espeso que había sobre su estómago con papel higiénico. Para esas alturas ya se sentía mucho mejor y más despierto.

Una vez que volvió a la habitación principal se acercó hasta la cama y se sentó sobre esta, ya dispuesto a dejarse caer de espaldas y dormir un rato sobre la blanda superficie. Lamentablemente, fue el hecho de ver a ChanYeol yendo hacia detrás de la cámara lo que lo hizo despabilar lo suficiente como para perder completamente el sueño.

—ChanYeol. —Ante el llamado el aludido dejó ambas manos en lo alto, a un lado de la cámara y esperando a que continuara.

Se tardó un poco en hacerlo, de igual forma. Llegó un fugaz pensamiento a su cabeza y aún no estaba seguro de sí podía exponerlo públicamente. De hecho, no creyó que algo saldría bien de todo aquello.

—Tengo algo que proponerte —volvió a hablar y ChanYeol elevó las cejas con curiosidad como respuesta.

—¿Sucede algo?

—¿Cuánto me pagan por hacer una mamada?

—¿Disculpa?

Baekhyun despegó los labios resecos y se esforzó por continuar con su propuesta, pero las palabras no salieron, la vergüenza las mantuvo atoradas en lo más profundo de su garganta y lo único que logró proyectar fue un par de mejillas sonrojadas a tal extremo que de seguro pareció enfermo.

—¿De verdad tengo que repetirlo? —Bajó la mirada, ya incapaz de continuar mirándolo a los ojos ante semejante atrevimiento.

—B-Bueno —ChanYeol balbuceó—. Sabes que todo depende de si agregan cierto tipo de accesorios o no, pero si lo haces del modo "tradicional" —El chico agregó un gesto de comillas con las manos—, de igual forma una mamada es bien pagada. Quizás salga un poco menos que esto que hicimos hoy. Aunque bueno, también depende de si te tragas el semen o no.

ChanYeol le dio la sonrisa más incómoda que BaekHyun vio en su vida, sonrisa que provocó que se replanteara su propuesta.

—Y-Yo quería proponerte algo... —titubeó y ChanYeol pareció sorprendido—. ¿Qué tal si hacemos una ahora mismo?

Sin poder evitarlo miró hacia la entrepierna del contrario, lugar donde aún se podía apreciar claramente como el gran bulto era aprisionado por la tela y como esta estaba ligeramente húmeda debido al líquido preseminal. El camarógrafo, al ver hacia dónde miraba, rápidamente dirigió su vista hacia allí, cosa que provocó un suave sonrojo en sus mejillas.

—¿Quieres decir que...? —El chico ni siquiera continuó con su diálogo, pero al ver como apuntó su propio pene BaekHyun pudo comprender, a lo que no hizo más que asentir a modo de respuesta—. ¿Esto lo haces por ti o por mí? —ChanYeol preguntó con expresión dura.

De repente BaekHyun se encontró planteándose la misma pregunta. Sí, quería el dinero, lo necesitaba, pero ¿aquello era realmente razón para hacer algo así? Probablemente no lo fuera, pero alguien como él tampoco tenía mucho de dónde escoger.

Sin embargo, y más allá del dinero, también rondó por su cabeza el hecho de que ChanYeol seguía erecto por su culpa y de algún modo lo hizo sentir un poco mal. Se volvió a preguntar si esa fue la verdadera razón de su propuesta. BaekHyun hasta el momento no lo sabía.

—Por mí —contestó finalmente—. Necesito el dinero.

Así mismo como creyó, ChanYeol suspiró aliviado.

—En ese caso podríamos hacerlo. —El chico se encogió de hombros—. Siendo sincero, me gustaría ayudarte.

Las cejas de BaekHyun se elevaron con curiosidad—. ¿Qué quieres decir?

Siente lástima por mí, razonó.

—No conozco el porqué estás aquí, pero siempre nombras el dinero como prioridad y entiendo que sea tu necesidad, así que simplemente quiero ayudarte.

Exacto, siente lástima por un pobre desgraciado que se deja tocar sexualmente delante de una cámara solo por un cheque con falta de ceros, por un estúpido y perdido chico que haría lo que fuera por dinero. BaekHyun pensó aquello y de repente tuvo dolor en el pecho al encontrarse diciéndose aquellas palabras a sí mismo dentro de su cabeza. Definitivamente era un asco de persona.

—Gracias por hacerlo —contestó de igual forma, sin atreverse a desaprovechar la oportunidad—. Entonces ¿no habría problemas si...? —Esperó a que ChanYeol continuara, pero este no lo hizo, al menos no con palabras directamente pronunciadas, sino que el sujeto sacó la cámara del trípode y se sentó a su lado sobre la cama.

—Tendré la cámara mientras tú lo haces. De esta manera es mucho más fácil grabarlo.

Asintió en respuesta—. ¿Debo estar en el suelo?

—Puedes ponerte como prefieras, en la cama o en el suelo.

BaekHyun escogió el suelo, de esa manera supuso que sería más fácil de grabar. Además, así la falda le cubriría su propio pene.

—Sabes que no somos una comunidad normal de pornografía audiovisual, ¿cierto? —BaekHyun frunció el ceño y esperó a que el chico comprendiera su gesto para que siguiera con su explicación—. Solo hacemos unos pequeños vídeos cortos, rozando lo casero, para subirlos a internet.

—¿Qué quieres decir con eso?

—Que lo que haremos a continuación no será como en los vídeos pornos tradicionales. —El chico le sonrió apenado desde lo alto, cosa que lo confundió—. No haremos demasiadas escenas y es por eso mismo que no se ven nuestros rostros. Simplemente grabamos el acto, como si fuera una simple pareja grabándose teniendo sexo y ya. Ese es nuestro estilo.

—Lo sé —susurró mientras se apoyaba incómodamente sobre sus propias rodillas—. Investigué un poquito antes de venir.

—Okey. —El chico suspiró aliviado y sonrió—. Entonces supongo que sabes que tendrás que... hacerlo un poco antes de que empiece a grabar.

—Lo tengo claro.

Bueno, la verdad era que no demasiado.

Pensó que estaba preparado, pero una vez que vio el pene erecto de ChanYeol menearse por delante de sus ojos, luego de sacarlo de la prisión en la que estaba sometido, dejó de sentirse seguro. El camarógrafo era largo y grueso, sobre todo esto último. Tenía poco vello, las venas sobresalían ligeramente y el glande era tan pomposo y rosáceo que lo hizo estremecerse. No era un pene feo, para nada, sacó por conclusión. Aunque sí era el primer pene que veía en vivo y en directo.

—Deja de mirarme —ChanYeol rio mientras decía aquello—. ¿Es muy raro mi pene o qué?

No supo cómo ni por qué, pero él también se encontró riendo ante el comentario del contrario.

—Está bien —susurró casualmente mientras se encogía de hombros y se tragaba la risa.

—¿Está bien? —imitó ChanYeol fingiendo un tono ofendido—. Deduzco que es el primer pene que vez en tu vida, luego del tuyo, claro.

—Y lo es —se encontró contestando con una pequeña sonrisa—. Es por eso que tendrás que enseñarme cómo hacer todo esto.

La sonrisa de ChanYeol se apagó un poco y luego suspiró.

—Creo que es mejor que improvises —terminó por decir, a lo que BaekHyun frunció el ceño.

—Es poco profesional.

—Pero así se disfruta más.

¿Por que pareció como si ChanYeol se divirtiera con la situación? BaekHyun no lo comprendió, aunque quizás para el chico fuera bastante chistoso tener a otro entre sus piernas preparado para lamérsela.

—Entonces ¿simplemente lo hago como pueda?

—Ya me da lo mismo cómo termine esto. —ChanYeol se encogió de hombros y apoyó ambas manos sobre el colchón, echándose un poco hacia atrás en el proceso y dejando la cámara a un lado—. Lamentablemente, no puedo grabar hasta que esté por correrme. De hecho, si quieres, puedo tocarme mientras tanto.

BaekHyun quitó la mano de ChanYeol que se enrolló alrededor del pene y la remplazó por la suya propia. Empezó a bajar y subir continuamente con esta, masturbando al chico. De respuesta no recibió nada más que unas cejas alzadas y posteriormente la imagen de ChanYeol mordiéndose el labio inferior.

A pesar de que vio una variedad de videos pornográficos con temática homosexual a lo largo de su vida, no supo cómo hacer semejante cosa pareciendo casual o al menos un poco menos tensa y más fluida. Su cuerpo empezó a estremecerse no solo por el frío, sino que también por la vergüenza que se ubicó dentro de él al replantearse lo que estaría por hacer.

—Creo que es momento de que empieces.

Miró a ChanYeol una última vez antes de acercar su rostro lo suficiente al pene contrario como para que su pesada respiración chocara contra el glande. Luego de eso esperó un momento para torturar al camarógrafo y para pensar en cómo haría eso sin que fuera un desastre.

Rápidamente rodeó el glande con su cálida boca, sin saber cómo empezar.

Vio a ChanYeol echar la cabeza hacia un lado, como si quisiera mirarlo desde otra ángulo. Él elevó las cejas aún con el pene ajeno entre los labios, curioso por el movimiento del contrario, pero el chico no hizo más que mostrarle una media sonrisa de bastardo antes de empujar las caderas hacia arriba, sorprendiéndolo.

Al final terminó por sacarse el pene de la boca y miró a ChanYeol con el ceño fruncido.

—¿Acaso quieres matarme?

El chico elevó las cejas curioso, sorprendido sobre todo, pero a pesar de tener esa expresión pudo notar claramente que tuvo unas inmensas ganas de reírse.

—Quieres reírte —terminó por decir sin planeárselo y ChanYeol volvió a elevar las cejas, gesto que lo exasperó—. Deja de mirarme así.

Rápidamente se paró y se tiró sobre el cuerpo ajeno, en primera instancia con la intención de atacarlo o algo, al menos quiso que dejara de mirarlo de esa manera, como si quisiera comérselo o algo así. No obstante, terminó con las piernas a los costados de las caderas contrarias y con los labios acariciando la barbilla ajena sin nada de vello. Suspiró fuertemente al caer en la cuenta de lo que hizo y de lo cerca que estuvo de los labios ajenos.

Sin pensárselo mucho más se puso de pie y miró a ChanYeol con los ojos sumamente abiertos desde lo alto mientras el chico seguía sorprendido.

Luego de suspirar profundamente tomó una mano del camarógrafo y tiró de él para que volviera a quedar sentado sobre la cama. Ni siquiera esperó a que el contrario dijera algo, a pesar de que claramente tuvo intenciones de hablar, y solo se volvió a apoyar en el suelo sobre sus rodillas y dirigió la mano hasta el miembro del camarógrafo para masturbarlo.

En cuanto vio de reojo que ChanYeol abrió la boca para hablar él rápidamente se acercó hasta el pene del chico y se lo metió a la boca sin pensárselo demasiado. Movió su lengua alrededor del miembro y bajó la cabeza para meterse dentro de la boca lo más que pudiera el pene ajeno.

—BaekHyun... —lo escuchó gemir.

Se tragó el suspiro que tenía atorado en la garganta y volvió a subir para bajar un segundo después. Estuvo repitiendo eso durante un rato, hasta que sintió como una gran mano se posó un poco más arriba de su nuca para tirar de su pelo. Obligado tuvo que soltar el miembro y miró a ChanYeol con los ojos brillantes al igual que los labios, en espera de que el otro le diera alguna orden.

—Necesitamos empezar a grabar —susurró el chico entre dientes y sin dejar de mirarlo.

El camarógrafo tomó la cámara que descansaba sobre la cama y luego de enrollarse la correa alrededor del brazo procedió a acomodar a BaekHyun entre sus piernas. Después de un asentimiento de cabeza y de un clic por parte de la cámara BaekHyun continuó con lo que hizo anteriormente.

A pesar de que no se lo esperó, ChanYeol se tardó bastante en correrse. De hecho, estuvo mucho rato toqueteando el pene ajeno con la boca y la lengua, incluso fue eso mismo lo que evitó que estuviera pendiente de las circunstancias, por lo que ni siquiera se dio cuenta del momento en que ChanYeol estuvo por correrse, solo sintió de un momento a otro que la boca se le llenó de semen.

—Trágalo. —Miró hacia arriba, justo hacia la cámara, e hizo lo que el chico le dijo.

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