5 de Septiembre de 2015

Me vieron... igual dudo que me hayan reconocido, digo me camuflé bastante bien, y estuve de costado a ellos, pero ¿y si me reconocieron? ¡Van a arruinar todo! Por dios, que estén acá ya arruina todo, maldito y estúpido Fury, ¿por qué no los mantuvo alejados un poco más? Ya casi lo tengo a este desgraciado... ahhhhhh van a arruinar todo y son casi dos años de mi vida desperdiciados.

-Esto me pasa por mentir- susurré para mí misma en voz alta

-Jenn, ¿a quién le mentiste?- preguntó extrañada mi amiga saliendo del cubículo del baño, ¡que estúpida! Me había olvidado que seguía ahí. Ella sin saber de mí situación, se puso junto a mí mientras lavaba sus manos.

-Ehhhh a... a nadie Sam, a mí misma- dije tartamudeando y mi amiga me miró interrogante, esperando una aclaración de lo dicho -Es que... me compré un vestido el otro día, y no me entra, todo por fingir que soy talla 2, ósea soy claramente talla 3, entonces lo tengo que cambiar, y bueno, siento que me mentí a mí misma- la excusa sonaba convincente, me aplaudí internamente

-¡Ay Jenn! Pensé que era algo grave, fiiiiiiu- comentó exagerada y yo suspiré realmente tranquilizada -Bueno, lo cambias, si no me lo das a mí y te comprás otro- dijo alzando las cejas emocionada, haciendo que me ría fuertemente

-Ni se te ocurra, es mío- dije seria, y volvimos a reír

-Bueno, Jenn, yo ya estoy ¿vamos?-

-No...digo, si, ya voy Sam, vos volvé tranquila, en cinco voy al lobby, quiero refrescarme antes un poco el cuello-

-Okay, pero no te olvides nada-

-No, obvio que no- sonreí de lado a la que es mi mejor amiga desde hace más de 1 año y medio.

Una vez que me cercioré que se había ido, y que el baño estaba vacío, me miré al espejo.

Rubio, un horroroso pelo rubio enmarcaba mi cara desde el 2014, y casi dos años después no solo que no me había acostumbrado, sino que lo seguía odiando.

Apoyada sobre el lavamanos, abrí la canilla y dejé correr agua, mojando así mis muñecas y parte del antebrazo.

-Ahora que te olvidaste Sam...- dije divertida, al sentir la puerta abrirse, mi amiga era una descuidada total, pero al no escuchar ninguna respuesta y sentir pasos de más de una persona me puse alerta.

Siendo sinceras, es completamente normal entre mujeres, ir al baño en grupitos; lo anormal, es que ninguna diga una palabra, por eso estaba alerta, aunque lo más probable es que fueran ellos...

Si eran ellos, los ignoré, y si no lo eran también, por lo que seguí haciendo lo mío, mojando mis muñecas, nuca, y jamás levantando la cara, así no verían mi rostro en el espejo.

Cuatro armas desenfundadas, eso fue lo siguiente que escuché. Si, estaba jodida. Muuuy jodida... sea quien sea, lo estaba.

-Levante las manos lentamente, donde las pueda ver- esa voz... hacía casi 4 años que no la escuchaba, y como lo extrañaba... -Señorita, aléjese de lavatorio, sin hacer ningún movimiento brusco- lo hice pero sin darme la vuelta

-Nos volvemos a encontrar, agente Coulson- engrosé un poco la voz y reí -Perdón, siempre quise decirlo- volví a reír, pero me puse seria rápidamente -Eso sí, horrible que no me reconozca, agente- comenté en tono recriminador, pero bueno iba a ser difícil si hablaba así, como sea.

-Director, y dudo que la reconozca si no le veo la cara- finalmente me dí vuelta aún con la cabeza a gacha, amaba las entradas dramáticas, debería de haber sido actriz...

-¡Ah no! Encima no me invitaron a la fiesta- comenté divertida -porque seguro que hubo, no se es director de S.H.I.E.L.D todos los días-

-Puede levantar la cara de una vez- dijo May algo exasperada

Sonreí y lo hice -Si, yo también te extrañaba May-

Los cuatro, Clint, Nat, May y mi papá, o el -actual- "director Coulson", me miraban asombrados, apuntándome con sus armas.

-___- dijo tartamudeando

-La misma e irreemplazable- ensanché mi sonrisa

-Pensé que estabas en París- dijo padre confundido, las chicas no paraban de mirarme

-¿Qué demonios le pasó a tu pelo?- ese era Clint

-Van a pasar los años, y las coartadas de Fury van a seguir siendo tan malas como esas...- dije un poco divertida -y mi pelo- suspiré desganada -fue por decisión de él, yo también lo odio- esta vez me dirigí al arquero.

-¿Cómo...?-

-Yo... eh... estoy feliz de verlos y eso, pero en menos de- comenté con rapidez y miré el reloj de mi celular -dos minutos, van a venir o Samanta, o en el mejor de los casos, alguno de los monos sin evolucionar, que Harrison tiene por guardaespaldas. Por lo que sería mejor que salgamos todos lo más disimuladamente, y los encuentro en...- los miré fijo -la camioneta está acá a la vuelta ¿no?- Clint asintió -entonces los veo ahí-

Dicho esto y un poco nerviosa, me di la vuelta, agarré mi bolso y salí del baño, encontrándome con Sam, quien al parecer, me estaba yendo a buscar.

-¡Jenn! Tenemos que irnos, papá dice que la reunión va a terminar más tarde y no es necesario esperarlo-

-Emmm... ¡buenísimo! Decile muchas gracias a tu papá. Pero yo... te alcanzo después, voy a... cambiar ese maldito vestido, ¿sí? Lo tengo que pasar a buscar antes, y... eso- añadí no muy convencida.

-¿Segura?-

-Sí, por supuesto, es solo que... quiero usarlo cuanto antes, ¡cuando lo veas te morís! Es divino-

-Buenisimo, pero me lo prestas ¿no?- asentí -Genial, ¿Querés que le diga a Marco o Bob que te acompañen?- comentó señalando a ambos guardaespaldas

-¡No!- dije demasiado rápido para mi gusto, estúpida y mil veces estúpida -no es necesario, quiero estar un poco sola- hice una pequeña mueca

-Bueno...- no lucía como si me creyera-si llegás a encontrarte con un chico y no me estás diciendo, te asesino Jennifer- suspiré aliviada

-No es un chico... son dos y con dos mujeres diosísimas- dije en tono burlón, aunque técnicamente, le estaba diciendo la verdad

-Sí, claro- dijo mofándose -más diosa que yo no hay nadie- reí fuertemente

-Obviamente, ahora, si me permites, hay un hermoso Dior, esperándome- le guiñé un ojo y comencé a caminar a la salida -Te mando un mensaje cuando esté volviendo, no te preocupes si tardo- grité ya en la puerta del lobby.

Dí la vuelta a la esquina, y vi la camioneta, una lujosa 4x4 último modelo, negra por supuesto, con un gris y ENORME LOGO DE S.H.I.E.L.D. en un costado.

Rodé los ojos, es una maldita organización secreta... o por lo menos lo fue hasta hace dos años, ¿es necesario andar por ahí con un vehículo que dice a gritos "soy un espía súper entrenado y monto esto, que lo último que hace es mantenerme de encubierto"?

Suspiré fuertemente y caminé hacia ella.

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Primer capítulo!! que nervios, por dios , espero que les guste, ya saben, tienen que comentar y votar, así soy feliz, y se que les gusta lo que escribo, o si tengo que cambiar algo, lo que sea diganme.

Voy a actualizar todos los miércoles sin falta, y algún que otro viernes también.

Saludos, Barby

Pd: perdonen ese edit asqueroso del color de pelo, pero fue la mejor aplicación que encontré....