Severus se quedó un momento callado, que pareció una eternidad y después viendo a la nada volvió a hablar:

-. La Amortentia es una sustancia muy interesante, no sola por los ridículos efectos que produce de un amor loco, sino que tiene más cosas extraordinarias ocultas si se realiza correctamente-.

No sabía Hermione que quería decir, pero quería escuchar algo positivo o su alma se rompería.

Él continúo.

-. Puede causar una gran necesidad si tiene contacto con la piel, pero... solo causa efectos sobre el indicado, solo tu otra parte puede sentir el olor y caer hipnotizado bajo sus efectos.- 

Severus clavo su mirada en Hermione y sonrió, esperando si su pequeña sabelotodo capto el mensaje.

Era obvio que sí, Hermione sonrió y lentamente se acercó a él, si eso era cierto entonces solo Severus sintió su aroma, lo que significaba que él era el indicado y eso era más que obvio; lo tomo por el cuello y le repitió lo mismo que le dijo en su almacén de pociones pero ahora con más seguridad que ninguna poción le podía otorgar:

-. Me gustas Severus-.

-. Me gustas Hermione-. 

Y demostrando su amor se unieron en un tierno beso pero no un beso como los anteriores en este demostraba devoción y lo que le hizo pensar a Hermione:

-. ¿Sabias que no había usado la poción la noche que estuve contigo?-.

-. Si, y te adore porque al saber la respuesta sabia que ya eras mía, por eso no te tome; quería que fueras cien por ciento consciente de cada emoción mía, y que te dieras cuenta de tu pequeño error-.

-. Bueno, ahora soy cien por ciento consciente y por eso te pido que me tomes ahora-. 

Severus sonrió ampliamente y la cargo llevándola a la habitación, esta vez si le demostraría cuanto la amaba.