Capitulo 7: Cara a cara
-¡De vuelta en casa! –Alan Cortes se paro en lo alto de las escaleras de acceso al avión y sonrió mirando a su alrededor
-Señor, su padre nos espera –El guardaespaldas, que estaba parado tras el, le miro impaciente
-Relájate ¿Quieres? –Alan rodo los ojos y bajo las escaleras tranquilamente –Voy a echar de menos a las chicas italianas
-Apuesto a que ellas a ti no –El guardaespaldas hablo en voz baja para que no le oyera
-Kike –Alan dio una palmada en la espalda al chofer que les esperaba junto a la limusina -¿Qué tal todo por aquí?
-Muy bien señor –el le abrió la puerta para que entrara –La invitada de su padre llego ayer
-¿Así que ya esta en casa? –Sonrió divertido mientras tomaba asiento en la limusina y miro a su guardaespaldas entrar por el otro lado –Me han dicho que es muy guapa ¿Lo es Kike? –fijo la vista en el chofer que ya estaba arrancando la limusina
-La verdad es que si, señor –Kike asintió mientras conducía
-Algo me dice que esto será divertido –se movio en el asiento para alcanzar el minibar de la limusina y se sirvió un coñac –Deberias relajarte un poco –Miro a su guardaespaldas y levanto una ceja –Tomate una copa Jackson, no le dire nada a papa
-No, gracias –Kevin suspiro mirando por la ventanilla
Realmente estos meses junto a ese niñato insoportable habian sido horrorosos, lo unico que había echo era seguirle en sus viajes y observar como vivía ostentosamente entre la riqueza y mujeres. Supuestamente era facil sacarle información, claro que Néstor no tenia los atributos necesarios. Y la verdad es que en los ultimos tiempos, ni el ni su padre se habian movido mucho Parecían estar esperando algo, o a alguien Y al fin Néstor sabría a quien
-Llegamos –Alan ni siquiera espero a que el chofer le abriera la puerta, la abrió el mismo y salio de un salto de la limusina
-Genial –Kevin suspiro y salio con desgana del auto para seguirle
-Buenos dias Señor –La empleada se sonrojo al ver como el la miraba de arriba abajo
-¿Dónde esta mi padre? –Como de costumbre Alan hablo con superioridad
-Aquí mismo –Andrés salió de la sala y se paro en la entrada de la casa –Parece que el viaje te ha sentado bien
-Oh si, papa –Alan sonrió divertido y se acerco a dar un abrazo a su padre –Las italianas son todo un descubrimiento
-Me alegro, pero se acabo la diversión –Andrés miro seriamente a su hijo –Hay mucho que hacer
-Y si no estoy mal enterado ya tenemos aquí a nuestra invitada –Alan se mordio el labio
-Y su visita sera muy productiva, a ver si aprendes algo de ella –Andrés miro a la empleada –Avísela de que mi hijo a llegado
-Si señor –La muchachas subió las escaleras rápidamente
-Pues si que te ha causado buena impresión –Alan rio mirando a su padre
-Lo entenderás en cuanto la conozcas –Andrés miro a Kevin –Jackson, si no estoy mal informado, tu ya la conoces
-¿Yo? –Kevin se tenso ¿El? ¿Y si se trataba de algunas de las hijas de los socios de Giovanni? ¿Y si le reconocían?
-Buenos días –Dana bajo las escaleras con total tranquilidad prestando especial atención al hijo de Cortes. Pero cuando sus ojos recorrieron la estancia no pudo evitar que su cuerpo temblara al verle allí. Por su parte Kevin se quedo mirandola como si fuera un fantasma
-Dana, este es mi hijo –Andrés señalo a Alan
-Alan Cortes –El dio un paso adelante y tomo la mano de ella para llevarla a sus labios mirándola a los ojos –Para ayudarla en lo que necesite
-Creia que la que vino a ayudar fui yo –Dana recupero la compostura y aparto la mirada de Kevin para centrarla en el
-Sagaz –El sonrió divertido –Ahora entiendo por que en tan poco tiempo se ha ganado la estima de mi padre
-¿Cree que tardare el mismo tiempo en ganarme la suya? –Dana le miro con una sonrisa
-Yo diría que ya se la ha ganado –Alan respondió en voz baja, mirándola de forma seductora
-Entonces eres tu quien tiene que esforzarse por ganarse la mía –Dana retiro su mano con altanería y camino hasta Andrés
-¿Ves? –Andrés comenzó a reir mirando a su hijo –Te dije que nos sera de gran ayuda
-Ya lo veo –Alan la miro con interés
-Dana –Andrés coloco un mano en su espalda y señalo a Kevin –Por supuesto a el le conoces, trabajo para tu padre
-Claro que le conozco –Los ojos de ella se encontraron con los de el, aun así se mantuvo fria –Jackson –Pronuncio su nombre con resentimiento
-Señorita Evans –El asintió sin apartar los ojos de ella
-Parece que una vez mas le toca hacer de niñera –Dana lo miraba fijamente
-¿Eso me convierte a mi en un niño? –Fue Alan quien pregunto ofendido
-Quizas –Dana le miro de reojo y sonrió levemente
-¿Estabas a punto de salir? –Andrés la miro de arriba abajo
-Si, iba a comenzar con nuestra ayuda mutua –Dana le miro y el sonrió
-Coje el coche que necesites –Andrés asintió -¿Quieres alguno de mis hombres?
-No –Dana nego con la cabeza –Tengo a los mios
-Claro –Andrés miro a su hijo –Alan, ve a darte una ducha, después te espero en el despacho para arreglar ciertos asuntos
-Quizás debería acompañar a la señorita Evans –Alan la miro divertido
-Yo no necesito niñero, gracias –Dana miro a la empleada –Llame a mis hombres, les espero en la sala –y camino hacia el salón
-Tiene temperamento –Alan observo como se alejaba –Me gusta
-A mi no me importaría que se uniera a la familia –Andrés miro a su hijo y sonrió, después se retiro
-Jackson –Alan le miro mientras caminaba hacia las escaleras –Puedes tomarte dos horas de descanso
-Si –Kevin reacciono al oír su nombre y asintió. Permaneció durante unos segundos ahí parado, mirando la puerta por la que ella acababa de desaparecer y finalmente tuvo valor para seguirla. Entro a la sala y la vio parada ante la chimenea, de espaldas a el. No pudo evitar el impulso de acercarse, paro su cuerpo pegado al de ella y apoyo el rostro contra su pelo, oliendo su aroma, cerro los ojos y susurro su nombre –Dana
Dana se tenso al sentirle tras ella, las lagrimas se amontonaron en sus ojos y sus manos temblaron Trago saliva despacio y cerro los ojos, consiguió recuperar el control de su cuerpo y cuando sus ojos volvieron a abrirse, era de nuevo la mujer fria que necesitaba ser. Su mandíbula se tenso, sus ojos se tiñeron de odio y se aparto bruscamente de el
-Agente Macquenzi –Se giro hacia el para mirarle, cara a cara
-Por favor –Kevin dio un paso hacia ella
-Mantenga su lugar agente –pronuncio la ultima palabra con desprecio –No me obligue a decirle a Andrés quien es
-Dana, ¿Nos llamaste? –Jack entro a la sala y se paro en la puerta mirando a Kevin con los ojos abiertos de par en par
-¿Qué coño haces tu aquí? –Walter cruzo la sala de dos zancadas y Dana tuvo que agarrarle para que no lo golpeara
-Calma –Dana le miro a los ojos –No lo estropees
-¿Qué necesitas? –Walter apretó la mandíbula y respondió sin apartar la vista de Kevin
-Carlos prepara un coche, me da igual cual –Dana miro a Carlos que estaba junto a Jack en la puerta –Vosotros dos vendréis conmigo, tengo que comenzar a moverme
-De acuerdo –Jack asintió
-Walter –Dana coloco una mano en su mejilla y le obligo a mirarle –Espérame fuera, con Jack
-No creo que sea buena idea –El la miro a los ojos
-No te he preguntado tu opinión –Dana le soltó y se alejo mirándole fijamente –Te he dado una orden que vas a cumplir
-Si –Walter asintió de mala gana y se giro para salir de la sala tras Jack
-Voy a darle un consejo Néstor –Dana le miro de reojo –No se cruce en mi camino, o tendre que quitarle de en medio –y camino hacia la salida de la sala con paso decidido
Cuando salio de la casa, el coche ya estaba parado frente a ella, Carlos lo mantenía arrancado y Jack y Walter la esperaban junto a la puerta
-¿Estas bien? –Jack la miro precabido
-Si –Dana respondió cortante y entro al coche, ellos la imitaron
-¿Qué esta haciendo aquí? –Walter apretó los puños furioso
-Sigue haciéndose llamar Kevin –Dana se quedo pensativa –Creo que esta usando el haber trabajado para mi padre para estar infiltrado aquí –miro a Jack -¿Lo tienes?
-Si –El asintió y le tendió un teléfono móvil –En cuanto lo uses destruyes la tarjetas y le pongo otra
-Bien –Dana marco un numero en el teléfono y espero a que diera llamada, tras dos pitidos, fue descolgado –Tenemos un problema
-¿Y cual es? –Brad se notaba tenso al otro lado
-Néstor Macquenzi –Dana miraba por la ventanilla
¿Por qué el? ¿Por qué había tenido que volver a verlo? Ahora no solo tenia que luchar contra el odio y la rabia que tenia hacia Cortes, sino tambien el resentimiento que guardaba contra ese hombre, el dolor que había logrado esconder en su interior. Por dios, su sangre clamaba venganza y su corazon se derritio cuando sus ojos volvieron a cruzarse.
A VECES LA VIDA NOS HACE ENFRENTARNOS A LO QUE MAS TEMEMOS; A VECES EL DESTINO CRUZA NUESTROS MIEDOS EN EL CAMINO QUE SEGUIMOS; PERO SI TRATAS DE HUIR DE ELLOS; ESTOS VOLVERAN A ENCONTRARTE. QUIZAS LO MEJOR ES ENFRENTARLOS ¿NO? CLARO QUE HABLAMOS DE MIEDOS ¿Y QUE PASA CON EL RESTO DE SENTIMIENTOS? EL ODIO; EL RESENTIMIENTO; EL DOLOR; LA PASION; EL DESEO… ¿EL AMOR?
OS DEJO UNA FOTO DE DANA Y KEVIN,,, EN ESE MOMENTO EN QUE EL SE ACERCA A ELLA EN EL SALON; EN ESE INSTANTE EN QUE SUS CUERPOS VUELVEN A ESTAR TAN CERCA,,, DESPUES DE TANTO TIEMPO
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