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Capitulo 19: Perdida

-¿Y que se supone que habia en la tarjeta? –Carlos miro a Dana por el espejo retrovisor mientras conducía

-Informacion –Dana se quedo pensativa –Informacion sobre los posibles puntos de terrorismo y de sus principales financiadores.

-¿Terrorismo? –Carlos casi frena de golpe -¿Estas hablando en serio?

-Eso es lo que yo estoy haciendo aquí –Dana miro al retrovisor –Vijilo al hombre que probablemente quiere controlar el terrorismo en este pais

-¿Cortes quiere eso? –Carlos suspiro –yo pensaba que solo era traficante

-No hablo de Cortes –Dana sonrio –Sino de Alan

El coche volvio a quedar en silencio. Como si lo que acabara de soltar fuera una autentica bomba.

-Hemos llegado –Carlos paro el auto y miro con el ceño fruncido el edificio -¿Quieres que te acompañe?

-No –Dana se bajo del coche y cerro la puerta. Camino con total tranquilidad al interior de .los apartamentos y una vez en el ascensor pulso la segunda planta.

Esta mañana bien temprano, Nestor le habia echo llegar una nota en la que decia que sus jefes necesitaban verla. Justo en esa nueva direccion. Aunque le resultaba extraño que hubieran cambiado el piso franco.

Al llegar al apartamento, la puerta de este estaba entreabierta. Dana saco su pistola y entro despacio, tratando de no hacer ruido. Atravesó el pequeño salon con su arma en alto, apunto a la cocian, después miro en el baño.

-El arma no es necesaria –Nestor se paro en la puerta de la habitación mirandola

-¿Qué coño haces tu aquí? –Dana lo miro sorprendida, aun con el arma en alto

-Sabia que no vendrias si te decia que queria hablar contigo –Nestor la miro a los ojos

-Me has engañado –y rapidamente ella camino hacia la puerta

-¡Ah no! –Nestor alcanzo la puerta antes que ella, cerro con llave y guardo esta en su bolsillo –No te vas a ir de aquí hasta que hablemos

-Hare que te echen de la mision por esto –Dana le miraba con los ojos entornados

-Como quieras –Nestor le sostuvo la mirada –Pero tu y yo tendremos esa charla

-¿Qué charla? –Dana camino por el salon aun en guardia -¿Qué es lo que quieres hablar?

-No soy idiota, se que estas liada con ese agente de la CIA –Nestor dio un paso hacia ella

-Brad, si –Dana le miro de reojo -¿Y?

-¿Tan pronto me has olvidado? –Nestor lo dijo con rabia

-¿Acaso tenia que recordarte? ¿Tenia que guardarte algun luto o algo? –Dana lo miro furiosa -¡Es mi padre el que murio! ¡Fui yo la que estuvo encerrada en una carcel! ¡Mientras tu dedicabas a tirarte a la sobrina de cortes para poder entrar en su mundo!

-¡Yo quise ayudarte! ¡Quise sacarte de alli! ¡Pero no me dejaste! –Nestor apreto los puños

-¡Claro que no te deje! ¡No queria nada de ti! –Y Dana lo miro con dolor –Desde que tu llegaste a mi vida no hice mas que sufrir. Tu tragiste el dolor a mi mundo, lo destruiste todo. Lo perdi todo.

-Yo no queria hacerte daño Dana –Nestor suspiro –Era mi mision, me entrenaron para esto. Pero nunca pense que pudiera enamorarme. Me enamore de ti.

-Pues para no querer hacermelo, te esmeraste –Dana lo miro a los ojos fijamente

-No podia dejarlo, era mi mision –El cerro los ojos –Es lo que soy.

-Ya lo veo –Dana respondio con rabia –Lo unico que tienes es tu FBI y eso es lo unico que tendras en tu vida.

-¡No podia dejarlo maldita sea! ¡Era mi vida! –Nestor camino hacia ella furioso

-¡Y la mia! ¡Tambien era mi vida! ¡Y yo si estaba dispuesta a dejarlo todo! –las lagrimas salieron de sus ojos -¡Yo si iba a dejarlo todo atrás! ¡Incluso a mi padre! ¡Yo lo traicione por ti!

-¿De que estas hablando? –Nestor se paro muy cerca de ella

-Yo estaba dispuesta a dejar mi mundo, mi vida. Solo para que tu salieras de ello, para que pudieramos tener una vida normal, juntos. Traicione a mi padre, estando dispuesta a alejarme de el, por ti. –lo miraba con un dolor infinito –Por ti. Por ti, un agente del FBI que me estaba usando para acercarse a el, para destruirle, para destruirnos. –miro sus manos que temblaban -¿Y querias que aun asi te recibiera en la carcel? ¿Qué te escuchara? Aun hoy, cuando te veo, cuando te hablo, cuando te escucho, siento que lo estoy tracionando.

-Tu no le traicionaste –una lagrima resbalo por la mejilla de Nestor

-Por mi culpa, llegaste hasta el, por mi culpa, pudiste enviarle a la carcel. Y aun asi tuvo la desgracia de oir como su hija estaba dispuesta a olvidar su propio apellido, a olvidarle a el. A el, lo unico que tenia. Por ti –Dana cerro los ojos sintiendo como se liveraba, como al fin dejaba salir el dolor –Y tu, tu no podias dejar tu mision. –abrio los ojos y lo miro –Tu mision.

-Dana –y Nestor dio un paso hacia ella y la abrazo con fuerza

-¡No me toques! –Dana se removio con rabia entre sus brazos, tratando de liberarse, pero el la sujetaba muy fuerte -¡No quiero que me abraces! ¡No quiero verte! ¡No quiero oirte! ¡No quiero que existas!

-Lo siento, lo siento –Nestor la apretaba contra el, mientras apretaba su mandibula conteniendo la rabia –Siento haberte echo tanto daño

-¡Tu no puedes tener una idea del daño que me hiciese! ¡No puedes imaginar como me siento! –Dana siguió peleando contra el

-No, no puedo –Suspiro –Pero tampoco puedo dejar de quererte, aunque eso te lastime. Lo siento –y se alejo lo suficiente como para mirarla a los ojos. Y entonces la beso.

Dana le golpeo en el pecho tratando de alejarse, pero el la atrajo aun mas hacia el para poder profundizar su beso. Ella siguió resistiendose, hasta que al fin correspondio al beso, con rabia, con fuerza, con desesperación, mientras las lagrimas seguían brotando de sus ojos.

Nestor adentro su lengua entre aquellos labios que tanto habia extrañado, apreto el cuerpo con el que soñaba cada noche. Y sintió como ella también se derretía ante las sensaciones.

Dana enrroyo los brazos en su cuello, apretandose aun mas contra el, jugo con su lengua, y mordio sus labios. Bajo con las manos por sus hombros y su pecho, al mismo que sentia como el desabrochaba su camisa.

Se dejaron llevar por esa pasion que tanto tiempo habian tenido escondida, al fin la dejaron liberarse. Y con rabia, con desesperación se arrojaron a los brazos del otro. Se empujaron a traves del salon hasta llegar al sofá y se arrancaron la ropa sin delicadeza ninguna. No hubo caricias, ni besos delicados, solo dos bocas jugando, luchando mientras sus cuerpos se unian bruscamente. Se unieron con desesperación, con prisa, como si temieran que de un momento a otro todo acabara.

Y realmente asi era. Ninguno queria pensar en lo que estaba haciendo, en lo que pasaria después. Solo importaba lo que estaban sintiendo en ese mismo instante y no era mas que un inmenso placer, que ambos habian extrañado en lo mas profundo de su ser.

Los gritos de los dos inundaron el apartamento, Dana araño los hombros de Nestor y le mordio el cuello marcandoselo. Era como si pelearan, como si a pesar de estar entregandose el uno al otro, estuvieran peleando, luchando.

 

 

 

 

 

Dana abrio los ojos bruscamente al sentir algo bibrar a su lado, tomo su telefono y vio un nombre en la pantalla. Brad.

Algo dentro de ella estallo en ese momento. Recordo donde estaba, recordo como habia llegado alli, pero sobre todo recordo lo que habia pasado. Se levanto del suelo totalmente desnuda y miro a su lado. Alli estaba Nestor, acostado bocabajo, desnudo.

Trago saliva despacio mientras buscaba la ropa por el .lugar. Cuando la localizo se vistio con prisa, busco en el pantalón de el las llaves y salio de aquel lugar sin volver a mirar al hombre con el que acababa de acostarse.

-Ya me estaba asustando –Carlos la esperaba apoyado en el coche .-Llevas alli dentro casi cuatro horas.

-Vamonos –Dana se subio al coche cerrando la puerta bruscamente

-¿Estas bien? –Carlos se subio y arranco el coche -¿Pasa algo?

-¿Puedes sacarme de aquí de una maldita vez? -.Dana respondio sin mirarle

-Esta bien –Carlos fruncio el ceño y acelero saliendo del aparcamiento

El camino de regreso a la casa de Cortes, transcurrio en total silencio. Dana no levanto la vista de sus manos, que no dejaban de temblar. Permaneció con la mente en blanco, incapaz de pensar. Cuando el coche al fin paro ante la casa, se bajo de el rápidamente y entro en esta como si de su salvacion se tratara. Subio las escaleras y atraveso el pasillo como alma que llevaba el diablo, entro y cerro la puerta echando el pestillo.

Y se quedo alli de pie, apoyada en la puerta, con la mirada puesta en ningun sitio en contreto. Al fin dio un paso adelante, desabrocho su camisa y la dejo caer al suelo, después el pantalón y por ultimo la ropa interior. Desnuda camino por la habitación hasta el baño, entro en este y se acerco a la ducha para abrir el grifo. Mientras el sonido del agua inundaba el baño, se paro ante el lavabo y se apoyo en el mirandose al espejo.

Su mirada estaba vacía, como si no se viera a ella misma. Se giro y entro a la ducha, dejando que el agua rociara su cuerpo, llevo las manos a su cabeza y acaricio su cabello.

 

 

Cuando desperto en aquella blanca habitación, cuando aquel olor a legia inundo sus fosas nasales, supo que algo no iba bien. La imagen de sus piernas manchadas de sangre le vino a la cabeza y entonces se incorporo de golpe en la cama. La cama de un hospital.

-Tranquilicese –Una enfermera la obligo a tumbarse de nuevo

-¿Qué ha pasado? –Dana la miro con desesperación

-Sufrió un aborto –la mujer la miro con lastima –Necesita reposo

-¿Un aborto? –Dana sintio que su cuerpo entero temblaba. Y entonces no pudo controlarse mas. Estallo en lagrimas mientras aferraba su vientre con fuerza.

-Le dare un calmante –La mujer inyecto algo en su gotero y tras unos minutos en los que su llanto no ceso, al fin, se quedo dormida.

Hasta que la voz de un hombre la desperto.

-¿Estas dormida? –Abrio los ojos y le reconocio

-¿Qué quiere? –Se incorporo despacio

-Supe lo que te paso, un aborto –Treint la miro a los ojos –Fue lo mejor

-Fuera de aquí, vayase –Dana apreto la mandibula

-No has sido mas que un juguete para el, un arma que tenia que usar para completar su mision. Y ese niño no era mas que un daño colateral, lo mejor es que no nazca. Comprendelo Dana. –sonrio friamente –El es un policia, tu una criminal. No vales nada para el.

-¡Fuera! –Le grito con rabia, con dolor.

-Como quieras –Treint se encogio de hombros –Espero que no volvamos a encontrarnos. Ahora cada uno estara donde debe.

Y Dana escucho la puerta de la habitación cerrarse.

 

El agua dulce de la ducha se mezclaba con sus lagrimas saladas. Apreto las manos en torno a su cabeza, se tambaleo hacia delante y apoyo la frente en los frios azulejos. Pero no era suficiente, nada era suficiente.

Su dolor estallo, un suave grito salio de sus labios mientras lloraba desesperada, se dejo caer hasta estar sentada en la ducha. Y alli, abrazando sus rodillas, totalmente desnuda, mientras el agua bañaba su cuerpo y sus lagrimas se liberaban con total libertad, sufrio. Sufrio como nunca antes. Porque de nuevo estaba perdida.

Estaba perdida en su vida.

 

UN DIA COMPLETO.. UN ENFRENTAMIENTO CON NESTOR, ¿UNA RECONCILIACION? AL MENOS SE HAN DEJADO LLEVAR POR SUS SENTIMIENTOS, AUNQUE SOLO FUERA POR UN INSTANTE ¿Y DESPUES? LOS RECUERDOS VUELVEN A DANA,,, DURAS PALABRAS LAS QUE TREINT LE DEDICO ¿NO? ENTONCES EL SABIA LO DEL BEBE…. NO ES FACIL DEJAR ATRÁS EL DOLOR….

 

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