POV ELLIE

Allison me había llamado para informarnos que todos estaban van a la casa de Scott y yo fui a allí, mientras que Scott iba a otro lado. Al llegar vi a los chicos entrando justo a la casa, así que yo bajo rápidamente de mi auto y corro hacía ellos antes de que cierren la puerta. Al entrar Stiles cierra la puerta con llave, candado y cerrojo. Lydia lo miro pidiendo una explicación al ponerle seguro a la puerta.

- Ha ávido muchos robos por aquí - le explico nervioso Stiles.

Negué con la cabeza disimuladamente, luego pose mi vista a todos. Mire con sorpresa a Jackson, no sabía que el estaba aquí y mucho menos me hubiera imaginado que el quisiera ayudarnos, pero es Lydia, su ex novia, ellos llevaron mucho tiempo juntos y tal vez Jackson quiera protegerla por que siente un gran cariño hacia ella y no quiere que la maten.

Todos estuvimos mucho rato en silencio mientras Lydia pedía explicaciones pero ninguno se las daba, no sabíamos que mierda decirle, ya que en mi caso estaba muy nerviosa y preocupada por lo que pueda pasar ahora y en que terminara mi relación con Derek.

Además de eso tengo miedo, miedo a que Derek y yo ya no estemos juntos.

Al anochecer Jackson se llevo a Lydia ha arriba para hablar, ya que al parecer el quería hablar en privado con ella, pero eso no era lo que mas me preocupaba. Derek estaba afuera de la casa junto a su manada y Scott aun no ha llegado. Ahora todos teníamos los nervios a flor de piel, Allison, Stiles y yo estábamos en la sala mientras Stiles miraba por la ventana - disimuladamente - a la manada de Derek.

- Creó que debemos llamar a papá - dijo Allison muy nerviosa - Ellos están aquí para asustar...

- Ellos están aquí para matar a Lydia - la corregí asustada - no hay que temer nada, estando nosotras aquí ellos no podrán hacer nada - me acerqué a ella y puse ambas manos en sus hombros - somos cazadoras, nos entrenaron para esto, estamos armadas y yo soy mucho mas fuertes que Isaac y Erica. No nos podrán vencer - le dije con una media sonrisa a la cual ella me la devolvió.

- ¿Dónde demonios esta Isaac? - pregunto asustado Stiles mientras miraba por la ventana.

- ¡¿Que?! - dijimos Allison y yo al unísono preocupadas.

Nos acercamos a la ventana y fruncí el ceño al ver que Isaac no estaba ahí. Eso significa que ese idiota entro a la casa.  Stiles fue acarralado por la pared con violencia y vi como Isaac estaba transformado en lobo.

Gruñí enfadada y deje salir mi lobo, pero antes de que pudiera atacar Scott había llegado y le propino un fuerte golpe a Isaac y ambos comenzaron a pelear.

Mire de nuevo hacia la ventana y vi que Erica no esta, eso significa que ella también entro a la casa. Allison corrió escaleras arriba. Yo subí las escaleras con rapidez y me guie por el olor de Erica. Al llegar a una habitación y me tope con Allison quien al verme me sonrió con diversión.

- Alguien tiene que sacar el perro pulgoso de la casa - mire hacia el suelo donde estaba Erica inmóvil.

¡No podría estar mas orgullosa de mi hermana!.

- Bien hecho peque - le sonreí con malicia.

Tome a Erica de su pie y de su brazo, baje las escaleras hacia la puerta principal donde Scott abrió la puerta y lanzó a Isaac afuera y yo hice lo mismo con Erica.  Scott y yo salimos de la casa junto a Stiles y Allison. Fruncí el ceño al ver como Derek sonreía.

- Ahora entiendo porque no te quieres unir conmigo Scott - dijo Derek - no eres un omega, eres el alfa de tu manada.

La verdad es que eso es cierto. Con Scott uno se siente parte de su manada. En cambio con Derek uno siempre debe de estar siguiéndolo a el y uno no se siente parte de la manada.

Es por esa razón que me siento muy a gusto de formar parte de su mandada, mas bien de nuestra manada.

- Pero no podrás vencerme - la sonrisa de Derek se engancha mas.

Que guapo... Creo que ahora mismo debo estar babeando.

- Te detendré mientras llega la policía - le respondió Scott con seguridad y a lo lejos se escucharon las sirenas de las patrullas. Derek borro su sonrisa y se mantuvo serio, parecía un poco asustado.

Así que eso fue lo que estaba planeando.

Pero un raro sonido nos hizo a todos dirigir la mirad hacia el techo donde estaba el Kanima avanzar hacia nosotros. Scott, Allison, Stiles y yo bajamos las escaleras y caminamos hacia donde estaba Derek pero sin quitar la vista en donde esta el reptil. Derek se posiciona en frente mío como protegiéndome.

El kanima se detuvo mientras nos rugía mostrándonos sus afilados dientes negros de manera amenazadora. Luego el Kanima se largo y salió corriendo.

- Llévatelos - le menciono Derek a Boyd y supe que se refería a Isaac y a Erica.

El sonido de unos tacones acercándonos hacia nosotros llamo mi atención. Lydia apareció desde el lumbral de la puerta.

- ¿Alguien puede decirme que demonios está pasando? - pregunto molesta Lydia.

Mire con sorpresa a Lydia al igual que todos. Si ella no era el Kanima, entonces el reptil que estaba en el techo...

- Es Jackson - murmuro Scott completando lo que estaba pensando.

Ahora si que podía estar más tranquila. Lydia no era el kanima así que ella está a salvo y Derek y yo seguiremos juntos. Pero si Lydia no es el kanima ¿Qué es? ya que ella fue mordida pero no le ha pasado nada. Tal ves, solo tal ves la teoría de Scott fue acertada.

Lydia es inmune a la mordida.

Derek salió corriendo hacia la misma dirección que fue Jackson. Yo corro hacia mi hermana y le pido la ballesta y las flechas. Ella me los entrega y yo junto con Stiles y Scott nos subimos al Jeep. Stiles maneja a toda velocidad hacia la misma dirección que fue Derek y Scott y yo olfateamos sus aromas para no perder el rastro.

Llegamos hacia una reja que nos impedía el paso, además que en el suelo había unas púas afiladas y si pasábamos las ruedas de Stiles se pincharían. Antes de que Stiles digiera algo Scott y yo salimos del Jeep y subimos por la raja para luego saltar para el otro lado cayendo de pie. Corrimos lo mas rápido que podíamos hacia donde se escuchaba la pelea de Jackson y Derek. Disparos se comenzaron a escuchar y por el olor supe que los cazadores están aquí.

Al llegar donde estaban todos vi como Derek estaba escondido detrás de unos pilares del edificio. Mi papa fue golpeado por el kanima y yo sin darme cuanta ya estaba disparando las fechas con la ballesta de Allison. Poco a poco me fui acercando mientras seguía disparando, pero el muy maldito de Jackson era ágil y esquivaba a la perfección mis flechas.

El kanima estaba en frente de Gerard y este ni se inmuto, vi como una pequeña sonrisa malévola aparecía en su rostro al ver a Jackson. De pronto, Scott apareció y alejo con brusquedad al kanima de Gerard, luego Scott camino hacia otro lado. Mi padre alzo la vista y me miro sorprendido de que estuviera aquí, pero antes de que digiera algo Derek tomo mi mano y ambos salimos corriendo mientras rastreábamos el olor de Jackson.

Ahora si estoy en problemas. Mi padre sabe que sigo viendo a Derek y que los estoy ayudando al igual que a Scott.

[...]

Derek y yo nos habíamos separado para buscar a Jackson. Iba corriendo mientras olfateaba el aire, pero paro al seco al sentir el olor a Jackson pero también sentí olor a sangre. Corrí guiándome por el olor y vi a Jackson tirado en el estacionamiento con una herida en el pecho.

- ¡Jackson! - grite lo suficientemente fuerte como para que Derek pudiera escucharme.

Al acercarme a Jackson pude ver que tenía una flecha en su pecho y nose porque pero la culpa me invadió todo el cuerpo. Le quite la flecha a Jackson justo cuando Derek llego y me dijo que ahora el se encargaría de el. Yo solo deje que hiciera lo que le diese la gana, pero el aroma de Scott llego a mis fosas nasales y supe que viene para haca.

- Scott se acerca y creo que no querrá que lo mates - le advertí con la mirada y este suspiro cansado.

- Esta bien me iré antes de que llegue - el se acerco a mi y acaricio mis mejillas con sus manos - ¿Todo sigue igual? - me pregunto con dolor en su mirada y sentí rabia porque se que ese dolor lo provoque yo.

- Claro que si - junte nuestras frentes - lo siento yo no quería decirte eso, es que tu querías matar a Lydia y yo no...tu sabes que es mi amiga y y-yo n-no - empecé a balbucear y Derek me dio una sonrisa tierna.

- No te preocupes - susurro cerca de mis labios y yo suspire - te amo - beso mis labios con suavidad y delicadeza.

No puedo evitar soltar un suspiro de satisfacción ya que sus labios son tan perfectos, suaves, sabrosos, además que besa de maravilla.

- Te - le di un corto beso en los labios - amo - volví a darle otro beso y este rio bajito.

- ¿Por que estuviste llorando? - me pregunto preocupado y yo agache la cabeza apenada.

- No me gusto que sufrieras por mis palabras, yo en serio no quería herirte - solloce y el coloco su mano en mi barbilla obligándome a alzar la mirada y verlo directamente a los ojos.

- No llores - seco mis lagrimas y beso mi frente.

Me siento muy patética. En realidad todo el puto día he sido muy patética. Me obligue a mi misma dejar de llorar y me aguanté las lagrimas ya que no quiero que me vea llorar, no quiero que se preocupe.

Unos pasos llamaron nuestra atención y supimos que Scott ya estaba cerca. Mire a Derek y le plante un beso fugaz como despedida.

- Nos vemos - le susurre cerca de sus labios.

El me dio un ultimo beso antes de irse corriendo hacia de seguro en donde esta su manada. Vi a Scott a lo lejos acercándose a grandes pasos hacia aquí.

POV DEREK

- Esta bien me iré antes de que llegue - me acerco ha ella y acaricio sus hermosas mejillas con mis manos - ¿Todo sigue igual? - esa pregunta estuvo rondado por mi cabeza desde que me dijo lo que pasaría si yo mataba a Lydia.

- Claro que si - junte nuestras frentes feliz porque no la voy a perder - lo siento yo no quería decirte eso, es que tu querías matar a Lydia y yo no...tu sabes que es mi amiga y y-yo n-no - empezó a balbucear y yo le sonreí con ternura.

- No te preocupes -  le susurro cerca de sus labios y ella suspiro - te amo - bese sus labios con suavidad y delicadeza.

Ella soltó otro suspiro mientras me correspondía de la misma forma el beso. Sinceramente después de que ella se fuera del subterráneo no pude dormir en toda la noche pensando en ella, en si que las palabras que dijo fueron verdaderas.

Tenía miedo. Sinceramente tenía mucho miedo con solo pensar que la iba a perder. No se que sería de mi si ella no estuviera junto a mi, sin poder mirar sus preciosos ojos marrones, sentir su aroma, abrazarla, sentir su calor, sus labios...todo de ella.

- Te - me dio un corto beso en los labios - amo - volvió a darme otro beso y yo reí.

- ¿Por que estuviste llorando? - le pregunto preocupado y ella agacha la cabeza apenada.

Esa pregunta me la estuve haciendo desde que vi sus ojos rojos he hinchados en el campo de Lacrosse. Además que tenía ojeras de bajo de sus hermosos ojos y me preocupe al pensar que ella paso todo la noche llorando.

- No me gusto que sufrieras por mis palabras, yo en serio no quería herirte - sollozo y yo coloco mi mano en mi barbilla obligándola a alzar la mirada para verla directamente a los ojos.

- No llores - seco sus lagrimas y beso su frente preocupado.

No me gusta que llore, mas bien lo detesto, no quiero verla sufrir, no quiero verla soltar ni una lagrima, solo quiero verla feliz y alegre.

Unos pasos llamaron nuestra atención y supimos que Scott ya estaba cerca. Ellie me miro y me plante un beso fugaz como despedida y yo inmediatamente le correspondí.

- Nos vemos - me susurre cerca de mis labios con la respiración agitada.

Le di un ultimo beso para luego irme a paso rápido hacia donde mi manada. Al llegar vi a todos sentados en el suelo y al verme llegar se pararon rápidamente.

- Entrenaremos y luego se pueden ir a sus casas - mis betas asintieron y rápidamente empezaron a entrenar.

Pasaron mas de dos horas que estuvimos entrenando y luego les digo a mi  manada que se pueden ir y que mañana nos veíamos. Ellos al rato se fueron dejándome solo y yo entre al vagón del tren y me senté en un asiento mientras me ponía a pensar en todo lo que esta sucediendo.

- Hola - levanto la mirada y veo a Ellie parada justo en la puerta del vagón, yo me quedo sorprendido al verla ya que no la escuche llegar.

La mire de pies a cabeza y luego la mire con incredulidad. Ella estaba en ropa interior color rojo pasión y me miraba con deseo, como yo ahora mismo la estoy mirando yo.

- ¿Qué haces aquí? - le pregunto mientras sigo mirando embobado su cuerpo.

- ¿Tu qué crees? - dijo coqueta mientras caminaba con pasos sensuales y seguros.

Mientras caminaba hacia mi se quito el sostén dejando ver sus preciosos senos. Al llegar al frente mío se sentó a horcajadas sobre mi y me dio un beso apasionado en los labios. Agarré su cintura y la atraje mas hacia mi mientras le correspondía el beso.

Se separo de mi con la respiración agitada y me quito mi polera tirándola hacia el suelo. Luego volvió a besarme y sus manos se dirigieron hacia mi pelo y lo jalo provocando que gimiera.

- ¿Y esto a que se debe? - le pregunte cuando empezó a  besar mi clavícula.

- Calla y hazme el amor - sonreí con los ojos cerrado y con la idea de cumplir con sus deseos.