___Capitulo 47: De luto___
___Capitulo 47: De luto___
El centinela termino de reacomodarse dándole la oportunidad a MODOK de tomar el control.
Izuku: "¿Qué tan rápido?" — Cuestiono viendo como la mano del centinela desviaba los sables del pecoso. Este se vio obligado a retroceder amarrando uno de sus sables alrededor del brazo del centinela.
MODOK: Tienes razón, niño. no debí haber nacido. Soy una escoria para la humanidad. Mi propia madre me lo decía y ahora lo veo más real que nunca. Pero eso no significa que tenga ambiciones aún tengo un sueño que quiero cumplir. Y la única forma que lo haga es con tu poder. ¡Ese poder cósmico debe ser mío! — El centinela empezó a moverse intentando quitarse de encima al peliverde.
Este se mantenía aun en aquel brazo, intentando no caerse, pero al ver que el centinela estaba empezando a brillarle los ojos lo supo. Debía atacar ya. No debía perder más tiempo.
Izuku: Tal vez pasaste por mucho... — El pecoso desapareció sus espadas para empezar a caer lentamente viendo fijamente a MODOK.
MODOK: ¡No me hables con palabras bonitas ahora! — El villano preparo su rayo de la frente listo para dispararle.
Izuku: No me arrepiento de mis palabras. Lo que dije fue sincero.... — Para suerte del chico sus botas se auto-repararon, dándole de nuevo la posibilidad de flotar.
MODOK: ¡Esta sociedad me dio la espalda! ¡¿Por qué yo no darles algo de su propia medicina?! — Cuestiono viendo al pecoso.
Izuku: Porque aún hay personas que proteger. Niños y niñas a los cuales tienen grandes sueños. Adultos que sueñan ver a sus hijos graduarse. Ansíanos que atesoran jugar mañana con sus nietos. Amigos que quieren verse, pero debido a la lejanía no pueden.... parejas que sueñan tenerse el uno para el otro, aun con la distancia — Dijo el pecoso mostrando una sonrisa pequeña mientras aquel brillo aparecía nuevamente y una tipo bufanda de energía aparecía alrededor de su cuello.
MODOK: ¡Simples emociones humanas que yo ya dejé de sentir!
Izuku: Es una pena. Por qué las emociones son lo que motiva el corazón.... y te da la razón de seguir adelante es como una motivación que hace que sonrías. Como engranajes del cuerpo que necesitas para despertar cada mañana — Todos en el mundo estaban expectantes ante las palabras del pecoso muchos de ellos sonrieron ante tales palabras dándole la razón y otros lloraban por que unas palabras de verdad le llegaron al corazón.
MODOK: ¡¿Por qué salvar a una sociedad que se autodestruirá?! ¡Yo soy la evolución! ¡Deja que salve a este mundo de su propia destrucción!
Izuku: Tu mismo te contradices. ¿quieres destruir la sociedad o quieres salvarla? Tú mismo no lo sabes. Perdiste tu humanidad, y eso te hace no pensar con claridad...
MODOK: ¡Nononono yo soy MODOK mi mente es de las más brillantes en el mundo! ¡Yo soy la evolución! — Grito con desesperación.
Izuku: La evolución es cuando dejas que algo pase por sí solo, no cuando obligas algo. Tú no eres quien para decidir cuándo eso sucederá. Pero te daré mis misericordias, MODOK.... — El pecoso creo una espada larga la cual empezó a emanar fuego dorado de la hoja.
MODOK: ¡Yo seré el que gane esta contienda! Me convertiré en el patriarca en la mente colmena de la nueva evolución — Dijo ordenando al centinela a lanzar un rayo de los ojos.
El peliverde cerro los ojos sintiendo todo a su alrededor, para después dejarse caer con ello el centinela lo siguió con la mirada. Ya en el suelo el peliverde abrió los ojos.
Y con una velocidad sorprendente empezó a subir por el centinela empezándolo a cortar dejando fuego color dorado sorprendiendo a los héroes de fuego que veían lo que sucedía, desde sus casas o los que habían llegado al lugar.
El centinela dejo de atacar al perder de vista al pecoso, el cual estaba escalándolo haciendo varios cortes dejando partes de fuego dorada los cuales esta vez estaban haciendo un efecto en las cortadas. Rápidamente el pecoso subió hasta quedar a la altura de la cabeza estando un tanto lejos de la cabeza dejando varios cortes en brazos, piernas y torso por todo el cuerpo del centinela.
Izuku: Te mostrare que es la evolución. Y que eso no es un simple juego de niños — El pecoso empezó a moverse evitando los ataques de MODOK y del centinela los cuales lanzaban rayos de energía o misiles, empezándolo a cortar nuevamente por diversas partes de cuello para arriba dejando una estala de luz detrás suya hasta que termino de atacar quedándose estático en el aire mientras la forma de un dragón dorado se veía detrás suya — Halo de luz del Dragón...
El centinela empezó a caer parte por parte, MODOK vio como el pecoso lo veía sintiendo un enorme desprecio hacia él, incluso en el borde de su muerte.
MODOK: "Eres un maldito niño... ¿Así termina mi historia...? creo que sí..." — Se dijo en sus pensamientos mientras era sepultado en los escombros del centinela.
Izuku: Espero que encuentres la evolución y la paz que buscas en tu otra vida... — Dijo empezando a bajar poniéndose encima de los escombros de lo que fue el helitransporte.
El peliverde miraba a su alrededor todo destruido y lo que más le dolía, el director había muerto. El peliverde cayo de rodillas mientras las lágrimas transcurrían en sus mejillas. No pudo salvarlo, lo dejo morir.
Al lugar acudieron el resto de los Ultimates, los cuales al ver el estado emocional en el que se encontraba el chico se quedaron sentados a su lado en silencio, recordando al director como lo que fue un gran coronel y director que se sacrificó para que otros pudiesen vivir.
Minutos después de que cayera el centinela los héroes por fin llegaron, pero ¿para qué? Ya era demasiado tarde ya hubo un muerto y ya el villano había caído.
Por fortuna para todos no hubo civiles muertos debido a la rápida evacuación de los aspirantes a héroes, pero debido a que no tenían sus licencias no les podían dar el crédito de su valía.
Lejos de ahí viendo todo, un hombre vistiendo una gabardina café con ropas para invierno debajo, flotaba en el aire viendo lo que había pasado, viendo que aquel centinela había caído.
—Ya cayó. Creo que no tendremos que intervenir — Dijo llevando su mano a la oreja aquel hombre.
—Está bien, gracias Ikaris... — Se despidió la mujer.
El ahora nombrado Ikaris vio al pecoso el cual estaba en un estado emocional fragmentado, al verle acompañado se fue volando rápidamente del lugar alejándose de Japón.
Días más tarde en una isla cercana a Japón, una base de SHILED estaba terminado de ser inaugurado y todos los agentes que vivían en el helitransporte empezaron a vivir ahí.
Los Ultimates estaban reunidos en su nueva sala de reuniones con las dos agentes especiales de Nick Fury las cuales eran Mockingbird y Silver Sable, las cuales eran agentes especiales de misiones de infiltración y asesinato que el propio director Fury les encomendaba.
A la sala ingreso la ahora nombrada directora de SHIELD, María Hill la cual después de la muerte de uno de sus amigos más cercanos fue ascendida al puesto casi de forma inmediata.
María Hill: Sé que todos tienen dudas de lo que pasara ahora. Pero por ahora estaremos trabajando de forma normal como de costumbre. No habrá muchos cambios — Aviso la ahora directora.
Black Widow: Entiendo.
Hawkeye: ¿Tenia familia? — Cuestiono interesado. La agente negó — Entiendo.
Todo se volvió un enorme silencio, aun la muerte del director se sentía presente y no sabían cómo procesarlo.
María Hill: Un punto que el director le interesaba es que se completaran las 6 vacantes de los Ultimates, sé que tal vez no sea el mejor momento, pero me gustaría que ese plan se diera por terminado lo antes posible. Midoriya ¿alguna idea? — El peliverde levanto la mirada viendo a la directora.
Izuku: Algo así. No sé si acepte. Iré a verle — Dijo poniéndose de pie yendo a la salida — Por cierto, directora, con su permiso me ausentare unos días quiero un descaso tanto en estos meses me agobio espero no le moleste — Dijo sin verle.
María Hill: Esta bien Midoriya. Tomate una semana, que tu candidata venga a verme más tarde — Dijo sabiendo quien sería la propuesta del peliverde.
El pecoso camino por los pasillos del enorme cuartel de SHIELD hasta llegar a las afueras del cuartel encontrándose a Luna viendo el horizonte el pecoso se acercó a la chica y se puso a su lado viendo al igual que ella el horizonte.
Luna Snow: ¿Vienes a proponerme que me una a los Ultimates no? — Pregunto como si hubiese leído los pensamientos del pecoso.
Izuku: ¿Lees mentes también? — Dijo bromista, la bicolor rio un poco ante su comentario — ¿Qué dices te unes?
Luna Snow: Fungía como agente de misiones especiales de SHIELD, jamás me metí en asuntos relacionados con villanos de esa magnitud debo admitir que me sorprendió ver lo que sucedió hasta admito que sentí miedo. Pero ver en primera persona lo que viven los héroes día con día, me hizo entender algo...
Izuku: ¿Qué cosa...? — Cuestiono viendo a la bicolor, esta volteo a verle mostrando una sonrisa.
Luna Snow: Que el mundo necesita más héroes y si puedo ser una de esos héroes que protejan a las personas. Lo hare — Dijo mientras alzaba su mano haciendo un corazón de hielo negro.
Izuku: ¿Es un sí? — Pregunto.
Luna Snow: Es un. Tendré varios descansos para giras o para dar conciertos. Pero sí. Estoy dentro — Dijo para después irse hacia dentro de las instalaciones dejando a un Izuku solo viendo el horizonte mientras el aire pasaba por su cuerpo sintiendo la brisa que transcurría.
Ya solo el peliverde miro hacia abajo decaído, sentía como aun la muerte del director estaba presente. El pecoso decidió irse del triskelion rumbo a un lugar en el que se sintiera bien.
En la UA, la castaña estaba en su habitación viendo las estrellas, estaba tranquilamente sonriendo sintiendo el viento que había en la noche.
Izuku: Las estrellas están hermosas ¿no?
Uraraka: ¡AH! — Grito de miedo volteando a ver hacia atrás encontrándose al castaño recargado en la puerta de su cuarto — ¿Qué haces aquí Izuku? — Cuestiono ya relajándose viendo a su novio.
Izuku: Siendo honestos, quería despejarme un poco. ¿vienes? — Le propuso ofreciéndole su mano, la castaña aceptó tomándola.
El peliverde la jalo hacia ella empezándola a cargar de forma nupcial, saltando hacia un lugar alejado de los dormitorios para tener más privacidad.
Ya estando lejos de los dormitorios entre los árboles, la parejita se encontraba acostados en el pasto viendo las estrellas.
Uraraka: ¿Cómo te sientes? — Pregunto recargada en el hombro de su novio sabiendo que el chico aun pasaba por una fase de luto por la pérdida del director.
Izuku: Sabes es raro. No era un familiar cercano, pero sufro su perdida como si lo hubiese sido. No sé por qué... — El peliverde se sinceró dejando caer su cabeza en la cabellera de la mochi.
Uraraka: Tal vez sea porque lo consideraste un buen amigo...
Izuku: Tal vez. Pero quiero entender el por qué no dejo que lo salvara. Rody o Riri pudieron haberlo salvado ¿por qué quiso que pasara eso? — Cuestiono viendo las estrellas.
Uraraka: No lose. No te tengo una respuesta — Dijo mientras hacía círculos en la pierna del chico.
Izuku: No la necesito. Solo te necesito a ti. Con eso me sentiré bien... — Dijo relajándose abrazando a la castaña de la cintura.
Ambos se quedaron callados disfrutando de la calidez del otro mientras veían las estrellas en un hermoso momento de pareja.
(...)
El peliverde abrió los ojos rápidamente y reacciono empujando a la castaña lejos y creando un escudo. Uraraka miro eso extrañado, pero al ver como algo lo embistió, entendió. El chico sintió la presencia de lo que le iba a atacar y se protegió a él y a la chica.
El peliverde estaba siendo empujado por una estela dorada, con mucha dificultad el pecoso se recompuso y le dio un golpe en la cara aquel hombre que lo embistió.
Por fortuna para el chico el golpe le sirvió para liberarse del agarre del atacante el cual lo solto, el peliverde salto alejándose de aquel hombre viéndole de pies a cabeza.
Un hombre de piel y de cabellos dorados con una especie de joya en la frente vistiendo un traje dorado con partes rojizas y una capa dorada. El peliverde vio a este hombre extraño ¿Quién era aquel hombre y por qué vestía tan raro?
Izuku: ¿Quién eres...? — Pregunto viéndole creando una espada y un escudo.
El hombre no respondió, actuó lanzando un rayo de su frente. El peliverde se defendió creando nudillos dorados con los cuales hizo que el rayo se dividiera empezando a chocar con los árboles.
El chico empezó a correr hacia el ser dorado aun con los nudillos de energía ya estando cerca de él, con su mano derecha creo un mazo con el cual le dio en la cara al atacante, al recibir el golpe se quedó consternado por unos segundos los cuales el peliverde aprovecho creando tres garras que salieron del dorso empezando a atacarle como si de un animal se tratase.
El ser dorado apenas y podo defenderse, ante tantos ataques. El peliverde dejo de atacarle con las garras para darle una patada que lo mando a chocarse con un árbol dejándolo de rodillas.
El ser dorado al verse tan herido vio al pecoso el cual se acercaba hacia él. Este sin más opciones empezó a volar huyendo del lugar. El peliverde vio esto pensaba seguirlo, pero no traía consigo sus botas.
Izuku: Lo que me faltaba otro lunático que me quiere matar ¿Cuántos van? — Dijo deshaciendo sus armas para después ver entre los arboles a la castaña que se acercaba a él corriendo — ¡Ochaco! ¿Estás bien? ¿no te hice daño? — Cuestiono abrazando a su chica.
Uraraka: No, estoy bien. No te preocupes Izuku — Dijo dejando de abrazar al chico tomando la mejilla de este — ¿Quién era ese sujeto? — Pregunto.
Izuku: No lose. Pero creo que venía por mí — Dijo acariciando la mejilla de su chica.
Uraraka: Todo estará bien, Izuku lo prometo — Dijo empezándose a acercar al peliverde para besarlo.
Cuando ya estaban a escasos centímetros, una luz los hizo mirar a su derecha viendo una nave grande. El peliverde al no reconocerla por instinto puso a la castaña detrás suya la cual también veía atenta la escena.
La nave dejo de iluminarlos para aterrizar enfrente suya, el pecoso puso una mano detrás suya creando una espada por si acaso.
—¡Eh! Con que esta es la tierra — Se escuchó una voz que se acercaba.
—Es igual de verde que tu — Dijo una voz de hombre.
El peliverde observo como 8 siluetas se acercaban, 6 de ellas parecían humanas, pero dos de ellas eran raras uno era pequeño como un animal y el otro era alto como si fuese un árbol.
Izuku: ¡Alto ahí! — Dijo sacando su arma. Los visitantes se detuvieron en seco al ver el arma del pecoso — ¿Quiénes son ustedes? Hablen.
—¿Todos en terra, son así de mal anfitriones? — Pregunto el bajito del grupo.
—Creo que sí. Míralos uno parece una planta andante — Dijo un hombre robusto.
—Yo soy Groot — Dijo el alto del grupo.
La castaña y el pecoso se miraban de reojo confusos.
—Escucha, escucha no venimos hacerles daño — Exclamo una voz el cual parecía ser el líder del grupo.
Izuku: ¿Ah no entonces responde, quienes son ustedes? — Pregunto esta vez ya al borde de atacarlos.
—Bien. Bien. Nosotros — El hombre saco un artefacto el cual soltó en el suelo iluminando un poco el lugar mostrando la apariencia de los visitantes — Somos los Guardianes de la Galaxia — La apariencia del hombre era de un hombre de aproximado 20 años con un poco de barba cabellera castaña y vistiendo un traje azul con líneas rojizas y con un tipo de logo amarillento café en el centro.
Izuku: Bien, guardián. ¿Quién eres? — Pregunto viendo filosamente al líder. El líder sonrió ladinamente viéndole.
—Star-Lord...
El pecoso bajo sus armas confuso viéndole.
Izuku: ¿Quién...? — Dijo confuso
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Fin del arco: Disonancia de la fría noche.
Próximo Arco: Guardins Of the Galaxy
Bueno después de este arco el cual salió de la nada (literalmente) ya que solo tenia pensado hacerlo especial pero termino siendo un arco.
Ahora sigue un arco mas digamos fuera de la tierra o del océano y estaremos con los Guardianes de la Galaxia.
Debo admitir que este arco me emociona mucho escribirlo ya que los Guardines se convirtieron en uno de mis equipos de Marvel favoritos y traerlos a este fanfict me emociona y mucho.
Peroooooo eso tal vez tarde ya que tal vez me tome un descanso de este fanfict para enfocarme en otros, ya que estoy haciendo demasiados spoilers de uno adelantando cosas jejeje.
Pero bueno sin mas que decir bye!
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Escena Post-Créditos...
En una barbería en una habitación secreta se podía ver a Silver Sable y Mockingbird esperando a alguien.
Ese alguien abrió la puerta, las dos mujeres voltearon a ver viendo como entre las sombras Nick Fury entraba a la sala.
Los tres se acercaron a una mesa en donde había una persona tumbada de piel verde con las orejas puntiagudas.
Mockinbird: ¿Qué significa todo esto? — Pregunto viendo al hombre.
Nick Fury: Significa que tenemos un enorme problema...
Exclamo mientras observaban al hombre trajeada con un gafete de SHIELD.
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