-------Capítulo 40: Verdugo-------

Ochako: ¿C-como...? ¿D-de qué habla? ¡¿A que se refiere que soy la nueva dueña de Midoriya Industries?!

En una oficina alejada del resto de los héroes, Ochako estaba reunido con Mark Spector, abogado de Midoriya.

Mark: Si, así lo estipulo el joven Midoriya. Se lo contaría dentro de unos días pero viendo las circunstancias no me queda de otra que decirle ahora.

Ochako: ¡No puedo tomarla! ¡Debe haber mejores candidatos!

Mark: Joven Uraraka...

Ochako: No esto no es posible, Izuku debió haberse equivocado en algo — Dijo desesperada sintiendo como ahora tenía un peso que le caía sobre sus hombros y no solo eso la desaparición reciente de su novio.

Mark: Entiendo su confusión pero quiero que entienda que el joven Midoriya. Le dio su confianza. El no quiso entregarle esta confianza a otra persona que no fuera usted, dentro de la jerarquía de la empresa. Midoriya está a la cabeza de ahí le sigue usted como su segunda al mando pero si usted rechazase esto... El tercero sería Kai Chisaki.

Aquel nombre hace palidecer la piel de la castaña, sintiendo una mezcla de frustración y enojo. Ella más que nadie sabía lo mucho que sufrió su novio cuando Kai quiso tomar el control de la empresa, noches en vela y pensando en cómo combatir a Chisaki. Pero ahora lo podría perder todo. Sonará egoísta pero ella no quería cargar con ese peso.

Era agobiante que no solo una empresa dependiera de ti. Sino varias agencias incluso su propia escuela dependería de ella si Izuku no aparecía.

Ochako: ¿Cuáles son las consecuencias de no aceptar el puesto?

Mark: Chisaki quería que Midoriya Industries se deslindara de las agencias de héroes y todo lo heroico. También despediría a gran parte del personal. También se cerrará el hospital... eso sería demasiado problema para varios pacientes...

Se formó un silencio que dominó la sala entera, Ochako se puso pensativa meditando qué hacer. Ante ella no solo ya héroes o alumnos dependen de ella, sino varias personas. Personas con necesidades.

Al pensar en ellas, pensar en cuánto podrían sufrir. El solo hecho de pensar en ellos. Le despejó las dudas de su mente con firmeza levantó la mirada viendo fijamente a Mark.

Mientras tanto, en la base del Hassaikai. Midoriya meditaba o más bien tenía una conversación consigo mismo.

Steven: "¿Qué crees que planee, el pajarraco?"

Midoriya: "No lo sé. Pero siento que tiene que ver con Eri..."

Las puertas se abrieron llamando la atención del pecoso, el cual alzó la mirada viendo como entraban lacayos de Chisaki los cuales empezaron a armar una mesa de exploración mientras traían varios instrumentos quirúrgicos y químicos.

Midoriya: "¿Que planean...?"

Steven: "¿Piensan hacer una cirugía? esto pinta fatal..."

En cuestión de segundos ya todo estaba armado. Midoriya analizó el lugar detalladamente lo que se acababa de colocar. Nuevamente la puerta se abrió, Midoriya observó atentamente quien entraba sus ojos se abrieron de par en par al ver quien ingresaba.

Midoriya: ¡Eri!

La pequeña entraba con la mirada gacha detrás suya Chisaki entraba.

Chisaki: No te hablara ni siquiera lo intentes.

Midoriya: Ts, te juro que cuando salga de aquí te mataré con mis propias manos, Chisaki.

Chisaki: Parlotea todo lo que quieras, Midoriya te explicará qué harás. Eri posee el don de rebobinacion con el rebobina las cosas a un estado anterior. Lo he podido sintetizar para que elimine dones...

Midoriya: "¡¿Elimine dones?!"

Steven: "¡Izuku! ¡Esto es malo! ¡Una bala así podría ser el caos en la sociedad de héroes!"

Midoriya: "Lo se... no solo la vende su cue- lo siento no puedo decirlo sin que me den ganas de matarlo... no solo hace eso... también la usa como objeto para crear sus balas... lo mataré... lo mataré y le sacaré las tripas y con ellas lo ahorcaré hasta que me pida clemencia..."

Chisaki: Quiero que tu perfecciones la bala, para que los dones sean borrados totalmente y también una bala que vuelva a activar los dones.

Midoriya: Bien, pero quiero que dejes a Eri aquí. Sin ella o su adn no podré hacer mucho...

En el poco lapso que pasó ahí, Midoriya perfeccionó un plan con el cual podría sacar a Eri y pedir ayuda a la vez, Chisaki asintió para después irse de la habitación pensando que Midoriya no era más que un simple humano sin poderes.

Vaya error cometió.

Eri empezó a sollozar silenciosamente, el peliverde sintió una punzada en el corazón. Había matado a cientos de criminales y había visto los actos más deplorables que se le podía ocurrir pero jamás. Jamás en todo su tiempo presenció una súplica de ayuda por este tipo de problema.

Midoriya: Tranquila no llores — Intentó consolar a la pequeña limpiando sus lágrimas con su dedo.

Eri: Ah, ah... n-no... ¿n-no me hará daño? — Los sollozos de la pequeña eran como golpes directos al corazón del peliverde.

Rápidamente y con lágrimas en sus ojos, abrazó a la pequeña un abrazo que le intentaba transmitir tranquilidad y paz a la pequeña pero también era un estímulo relajante para que el peliverde no sacará la faceta de Moon Knight en ese instante y matara a todo aquel se le atraviese.

Pero si eso pasaba... ¿Cuál sería el mal que podría ocasionar? no habría consecuencias ¿verdad?

Eri: Sniff... sniff... s-señor... n-no ¿no piensa hacerme daño? — Preguntó ya calmada viendo como el pecoso no la observaba con ojos que le asustaban.

Midoriya: No, no pienso hacerte daño. Jamás pensaría en hacerlo. Te prometo sacarte de aquí. Ya nadie te hará nunca más daño — Prometió con ojos llenos de tranquilidad y paz.

La pequeña que lo único que había conocido era la maldad humana, observó al peliverde sorprendida, nadie se había preocupado por ella desde hacía tiempo y este chico con apenas conocerla le prometió protegerla y salvarla de este martirio.

Eri: ¿Cómo me salvará...?

Midoriya: Soy una persona muy lista y estos idio- — Regreso a ver a la pequeña la cual tenía un rostro de inocencia — Je, y estas personas me subestiman... tranquila todo saldrá bien...

El peliverde encargó a Eri llevándola a aquella mesa de exploración para seguidamente empezar a usar todo lo que tenía a su alcance para pedir ayuda.

Steven: Ts, estos tontos si que me subestiman. Solo con dejarme esto puedo pedir una ayuda en código morse. Pero eso sería tardado.

Eri: ¿Código morsa?

Preguntó con inocencia, Steven regresó a verla al solo verla y ver su rostro tierno e inocente fue suficiente para que sintiera un golpe potente le diera en la cara. Un golpe de ternura.

Steven: "¿Qué fue eso...? eso no lo vi venir..."

Midoriya: "Esa niña tiene un don que hace que me rinda ante su ternura..."

Se recompusieron de inmediato, siguiendo con sus labores para poder ayudar a la pequeña y ayudarse a sí mismo a pedir ayuda.

Eri: Oh, ¿qué hace?

Steven: Je, eres una niña muy curiosa Eri. También eres una niña muy tierna... te explicaré — Mostró su reloj el cual por una estúpida razón no se lo quitaron.

"Enserio este Hassaikai, son demasiado estúpidos. Primero dejar sin supervisión a lo que puede ser la persona más brillante del mundo. Segundo le dieron materiales. Tercero no le quitaron una posesión la cual podría usarse en su contra y cuarta lo hicieron enojar haciéndole daño a Eri"

Eri: Oh... ¿Qué es eso?

Steven: "No debe saber mucho del exterior... maldita sea... tal vez si sepa pero no sabe como se usa... tal vez los haya visto en h-"

Midoriya: "No tienes porque decirlo, quedó claro. Ella tal vez los vio pero antes, tal vez los vio en posesión de otras personas. Personas que le hicieron daño. Pero no sabe nada de su utilidad y menos para que sirve..."

Steven: Je, bueno pequeña. Esto se llama reloj sirve mayormente para ver la hora del día. Pero este reloj es especial... si abro esta parte... — Quitando la tapa del reloj mostro una especie de aparato gris — Y activo esto... vendrán por nosotros.

Al poner su dedo en el aparato gris este mandó una señal a Midoriya Industries el cual se redirigió al maletín que estaba en la Agencia de Sir Nighteye.

En la sala donde estaba Ochako junto con el abogado estos estaban terminando los trámites para que Ochako pase a ser la propietaria provisional. Cuando los trámites terminaron, Mark guardó los papeles en el maletín.

Mark: Bueno, señorita Uraraka. Pasa a ser la propietaria legal de Midoriya Industries. Estaré a sus servicios y como petición especial de su parte. Estaré tomando las decisiones importantes. Sería to-

Antes de que terminase de hablar, el maletín empezó a parpadear llamando la atención de Mark, apresurado lo tomó empezando a abrir una compuerta secreta del mismo maletín revelando que era una computadora.

Ochako: ¿Qué sucede?

Mark: Esta es una alarma de ayuda. Que solo Midoriya puede activar con su dedo... puede mandar su última ubicación y un mensaje de vo-

{Midoriya: Mark, se que tu recibirás esto. No tengo más que 30 segundos para hablar en directo. El Hassaikai me secuestró, hay una niña de por medio, debes avisar a los héroes. No tengo mucho tiempo antes de que el mensaje se acabe. Si no salgo de esta... prioricen a Eri a toda costa... es mi última voluntad... Ochako se que oirás esto... quiero que sepas que te...}

El mensaje terminó llegando a sonar pura estática. Uraraka la cual había escuchado atentamente el mensaje se llenó de frustración a los pocos segundos.

Mark: Siempre te metes en líos, señor Midoriya. Todo cambio, señorita Uraraka le pido que vaya al departamento de Midoriya y se quede ahí hasta que todo ter-

Ochako: No... — Interrumpe al abogado poniéndose de pie y regresando a la sala de reuniones — Izuku me necesita y no pienso abandonarlo... No me importa que ahora yo sea la nueva directora de Midoriya Industries. Yo decido lo que quiero hacer...

Mark: ¡Pero señorita! ¡Si muere en batalla Chisaki tendrá lo que quiere!

Ochako: Bueno entonces declaró aquí mismo. Que si no estoy para continuar a la cabeza de la empresa. Tu Mark Spector tomarás el rol como es debido.

El abogado se quedó sin palabras procesando la declaración, cuando pudo salir del trance ya la castaña estaba con los demás héroes informando de lo sucedido.

En pocos segundos, héroes y policía ya estaban listos para partir a la ubicación donde estaba el Hassaikai.

Mientras tanto en la base del Hassaikai, el peliverde estaba contándole un cuento infantil a la pequeña, la cual estaba durmiendo sobre su regazo.

Midoriya: Y colorín colorado, este cuento se ha terminado.

Eri: ZzzzZzzzzZzzzz...

Midoriya: Ya está... no te preocupes... yo te salvaré... estos monstruos jamás te volverán a hacer daño...

Recosto a la pequeña con cuidado y la arropo cubriendo su cuerpo lo mejor que pudo para que no la descubrieran a su vez dejó el reloj debajo de la mesa de exploración para que los héroes fueran directamente por Eri.

Eri: Gra...gracias papá...

Aquellas palabras, fueron sorpresivas para el pecoso, el cual regresó a ver a la pequeña que yacía dormida plácidamente con una sonrisa tranquila y con confianza de que todo saldría bien.

Midoriya sonrió viendo que de una u otra forma la pequeña le había agarrado cariño al peliverde rápidamente viendole ya como figura paterna.

Midoriya: Es hora...

Los vendajes del traje de Moon Knight empezaron aparecer y en pocos segundos, el traje de Moon Knight apareció, sus ojos brillantes en una poderosa luz blanca los cuales proyectaban un enojo profundo a las personas que habían agredido a la pequeña con la que se había encariñado.

Y no solo eso, había despertado el enojo de Moon Knight, el aura intimidante que desprendía por si solo, era tan poderosa que los guardias que custodiaban la puerta, voltearon a ver la puerta asustados.

—¡Ah! ¡¿Qué está pasando ahí?!

—¡No lo se! ¡Abre la maldita puerta! ¡Le daré una paliza a ese millo-

La cabeza del guardia fue atravesada de un segundo a otro, por una luna creciente el otro guardia que seguía de pie dio un paso atrás asustado y temeroso.

—I-imposible... ¡El, el, el no puede estar aquí!

Intentó huir del lugar pero antes de poder hacerlo, tres lunas atravesaron su cabeza dejándolo muerto en el suelo. La puerta que mantenía presos al peliverde y a Eri cayó en segundos.

Mostrando cómo Moon Knight salió caminando con firmeza, al dar solo dar un paso fuera de aquella sala una fuerte tensión se formó empezando a transcurrir por todo el pasillo, haciendo que los villanos más cercanos al pasillo sintieran una presión poderosa que había aparecido.

—¿Q-qué es esto?

—E-es como si... como si una fuerte presión asesina apareciera de golpe...

Moon Knight: Me han provocado... yo no seré compasivo... yo no tendré clemencia... yo no seré su juez ni jurado. Seré su verdugo.

Sentenció empezando a caminar entre los dos primeros cadáveres que dejó en su camino llevándose sus armas para no dejar pruebas.

Moon Knight: Tus horas están contadas, Kai Chisaki...

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