Anastasia POV

-¡Oh, Dios!- Así, más duro Cristian, no te detengas- Cristian amaneció caliente y yo no le niego nada en lo que a sexo se refiere, pero hoy se esta conteniendo, eso me jode, no soy de cristal para romperme, hoy quiero que me folle duro y no que me haga el amor.

-Tranquila nena, no quiero correrme todavía-

-Cristin tenemos toda la noche- Pero como mi cincuenta no me escucha como puedo, me aparto de él dejándolo desconcertado, lo que me facilita empujarlo para que quede bocarriba y me siento sobre él tomándolo por sorpresa.

-Señor Grey es mi turno de tomar el control- Tomo su hinchado y duro pene colocándolo en mi entrada, bajo de golpe provocándome mil sensaciones y a Cristian lo hago gruñir de placer, pero me toma las caderas y me detiene.

-Tranquila nena- Pero yo tomo sus manos y se las pongo a cada lado de su cabeza.

-Señor Grey le recuerdo que estoy al mando- Y le beso la nariz. Empiezo a moverme salvajemente provocando en Cristian innumerables gruñidos; me muevo mas rápido al sentir que me voy a venir.

-Vamos amor juntos- Y así lo hacemos.

-¿Satisfecha señora Grey?-

-Muy satisfecha, señor Grey- Me estoy quedando dormida pero mi móvil empieza a sonar.

-Quien mierdas llama a esta hora- Gruñe Cristian.

-Aló-

-¿Anastasia Steel?- Pregunta la mujer, es alguien que no me conoce ya que me llamo Anastasia Steel.

-Anastasia Grey, Señora- Le informo.

-Señora Grey. Disculpe, Le hablamos del hospital general de Montesano- Me levanto de golpe creo que no me gustara lo que me va a decir.

-¿Qué le paso a mi padre, Raymond Steel?-

-Lo siento, señora Grey entre sus documentos encontramos su nombre y número de referencia por si se presentaba una emergencia. Su padre tuvo un accidente y esta muy grave. Necesitamos que venga-

-Estaremos ahí-

-La esperaremos, señora- Y cuelga.

Mis lagrimas no tardan en salir y Cristian me mira se acerca a mi tan rápido como puede.

-¿Qué pasa nena?- Cristian me abraza y sollozo.

-Es mi padre, me han llamado del hospital. Tuvo un accidente y esta grave. Cristian tenemos que volver- Lo miro a los ojos suplicándole.

-Llamaré a Taylor, para que coordine nuestro regreso a Montesano-

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Horas más tarde estamos llegando al hospital, Cristian pregunta por Ray, pero la estúpida mujer que atiende lejos de darle la información que mi esposo pidió coquetea con el.

-Señorita, haga su trabajo y deje de coquetear con mi esposo. ¿En que piso está Raymond Steel?- Le digo golpeando el mostrador para demostrarle que Cristian no esta solo y que me note.

-Tranquila nena- Cristian me habla apretando su agarre para tranquilizarme. Al fin la mujer repara en mi y nos brinda la información.

Nos dirigimos al tercer piso donde esta cuidados intensivos, ahí nos encontramos al señor José Rodríguez padre y a mi amigo José su hijo. Don José esta con vendas y golpes. Él debió estar con mi padre.

-Señor Rodríguez-

-Anni. Mi niña. Lo siento no pude hacer nada-

-¿ Esta usted bien?-

-Yo si, pero tu padre recibió todo el impacto. El infeliz se dio a la fuga; era un camión. No pude ver la placa, Anni-

-No se preocupe, señor Rodríguez de eso me encargare yo- Dice Cristian mu serio.

-¡Hola! Ana- No había reparado en mi amigo por preocuparme por su padre.

-¡Hola José!-

-¿Han Sabido algo de Ray?- Pregunta Cristian.

-No señor Grey. Lo que supe era que estaba en cirugía. Pero al no ser familia no me brindan información-

-Yo le dije a papá que nos fuéramos, pero no quiso- Dice José hijo molesto y no lo entiendo-

-Hijo, Raymond es mi amigo y excompañero de regimiento. Uno no abandona a sus compañeros. Tu no estuviste en el ejercito por eso no lo entiendes- José se levanto y se va sin decir nada. No entiendo su actitud.

-Anni, señor Grey disculpen a mi hijo esta preocupado. Ya se le pasará-

-Señor Rodríguez entiendo su lealtad a mi suegro, pero debería ir a casa y descansar; Ana lo mantendrá informado de la salud de Ray-

-Gracias, señor Grey pero no me iré, hasta saber que mi amigo esta fuera de peligro-

Por la paz dejamos el tema y Cristian se va a hablar con Barney y Welch para averiguar sobre el camión que golpeo el auto de mi padre.

Durante las semanas siguientes mi padre fue inducido a un coma para que su cerebro se desinflamará. Pero Cristian al notar el desinterés de los médicos locales hace venir al doctor Bernard amigo de Grace para que se haga cargo de la salud de mi padre.

José regresó hace unos días con una actitud diferente, se preocupa mas por mi padre y hablamos más recordando los tiempos de la universidad.

Una llamada de la doctora Greene me recuerda que me he saltado la inyección casi tres meses, me sugiere hacerme una prueba de embarazo y luego aplicarme la inyección de no estar embarazada.

Aprovechando que Cristian, Taylor y Luke no están, hablo con la ginecóloga de turno, realizo las acciones de rigor, en este momento estoy esperando el resultado que fue a recoger la doctora Cortez, la mencionada entra con una sonrisa de oreja a oreja que no me agrada.

-¡Felicidades señora Grey!, esta embarazada- Dice la doctora. Mientras asimilo la noticia recuerdo que Cristian no quiere tener niños y se me estruja el corazón, ¿Cómo le daré la noticia a Grey?.

-Señora Grey. ¿Quere saber de cuanto esta?- Asiento por inercia, la doctora me pide cambiarme para realizar la ecografía. Después de unos minutos el fuerte corazón de mi bebe se deja escuchar en el lugar-

-¿De cuanto estoy?- Es lo único que logro preguntar.

-De diez semanas. Mírelo, ahí esta- Señala un punto en la pantalla. Es el tiempo exacto que Cristian y yo llevamos de casados, lo concebí en la luna de miel. Mi móvil suena en mi bolso, me recompongo y trato de parecer feliz por la noticia, me despido de la doctora dándole las gracias y recibiendo la factura, la pagaré cuando valla a la cafetería, por ahora necesito salir de aquí antes de que Cristian me localice y envíe a Luke.

Mi cara de preocupación se confunde con la preocupación por la salud de mi padre, por lo que Cristian no lo nota.

-Nena surgió un contratiempo en Grey House, tengo que ir a Seattle con Taylor, Luke y Ryan se quedaran contigo y tu padre. Yo regreso en dos días, come nena, has bajado de peso nuevamente. Lo entiendo por la salud de Ray, pero si él te ve así se molestará conmigo-

-Esta bien, comeré algo-

Los dos días siguientes, pasan muy lento y Ray nada que reacciona, le hablo constantemente, el hace dos días que Cristian se fue, no tuve le valor de darle la noticia por miedo a su reacción pero hoy a su regreso se la daré, si el no quiere a nuestro bebe, lo haré sola.

-Ana, vamos a comer algo- La vos de José me saca de mis pensamientos , ha estado muy raro me lleva a comer y él no come nada, siempre esta pendiente de su teléfono y esta extraño, no es el José que conozco, es diferente.

-Vamos a una cafetería a dos calles de aquí, la comida aquí no es buena-

-No lo sé José, no vi a Luke ni a Ryan para informarles donde estoy por si llega Cristian-

-Envíales un mensaje-

-Claro- Le envío el mensaje a Luke, pero no me contesta. Dos calles y llegamos a la cafetería, no es un lugar agradable que digamos, pero las sillas se ven cómodas.

-Voy a ir a ordenar. ¿Una ensalada y un té, Ana?- Pregunta José.

-Por favor- Respondo, miro a mi alrededor y me siento incomoda, hay algo que me causa escalofríos, esto nunca me había pasado con José nuca, solamente me pasaba cuando Jack estaba cerca de mi en la editorial. José regresa con nuestro pedido. Empezamos a comer en un silencio incomodo, pero José lo rompe.

-¿Grey te hace feliz Ana? Me refiero a que si te traba bien. Tú sabes el tiene dinero y tu familia no-

-José cuantas veces tengo que decirte, que yo amo a Cristian y él a mi. A mi no me interesa el dinero y su familia no son los ricos normales que menosprecian a las personas que no son como ellos. Tu conoces a Mia y a Elliot. Grace te ha abierto las puertas de su casa y no te ha tratado con indiferencia-

-Si, si lo siento Ana. Es que me cuesta creer que Grey se haya fijado en ti, pudiendo tener las mujeres que desee-

-Cristian es diferente, José- De pronto me siento mareada.

-¿Te pasa algo Ana-

-Es hora de irnos José no me siento bien. Iré a pagar-

-No te preocupes yo ya lo hice. También tengo dinero para hacerlo-

-Vamos- Le digo, pero solamente logro caminar una calle cuando todo se vuelve negro y ya no logro escuchar nada.

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Cristian POV

Dos miserable días de mierda separado de mi nena quien esta sola y preocupada por su padre, pero lo que me tiene molesto es que mi venida a Seattle pudo haber sido resuelta por Ross y tras de eso Elena tratando de acercarse a mi. Esta mujer es persistente, acaso no entiende BSDM ya no me interesa, que todo lo que necesito me lo da mi esposa.

De solo pensar en engañar a Ana se me revuelve el estomago, no niego que los hombres se la comen con los ojos, pero ella solamente tiene ojos para mi, como yo a ella. Pero ya en minutos la veré y podre estrecharla ente mis brazos. Lo extraño es que le he escrito y los mensajes no le están llegando.

-Taylor. ¿Sabes algo de Luke y Ryan? Ana no responde a mis mensajes-

-No señor no responden a mis llamadas tampoco. Pero casi llegamos-

Veinte minutos después estamos llegando al piso donde esta mi suegro, veo a Sawyer y a Ryan en una de las bancas sosteniéndose la cabeza.

-¿Dónde esta mi esposa?- Pregunto al no verla con su padre.

-No lo sabemos señor. Alguien nos drogo- Dice Sawyer.

-Señor, yo fui por café y un té para la señora Grey. Pero de pronto nos sentimos muy mareados y de ahí no recuerdo nada- Responde Ryan.

Taylor inmediatamente llama a Barney para que localice el móvil de Ana. En cuestión de minutos lo localiza y Taylor va en busca de mi esposa, a los minutos regresa sin ella.

-Señor creo que su esposa fue secuestrada, encontré su bolso en el callejón a una calle de aquí- Mi ira crese a niveles exponenciales y empiezo a golpear las paredes.

-Ustedes están despedidos, los responsabilizo de lo que le pasea mi esposa. Recen por que nada le pase si no me conocerán-

-Pero señor nos drogaron- Alude Ryan.

-¡LARGATE!- Le grito y lo coy a golpear pero Taylor me detiene.

-Cálmese, señor. Creo que todo esto fue planeado- No tengo tiempo de decir nada cuando mi teléfono suena en mi saco.

-Grey-

-Siempre tan arrogante, ni porque tu esposa esta desaparecida dejas de lado tu orgullo-

-¿Qué quieres? ¿Cuánto quieres? Solamente di una cifra y te la doy pero devuélveme a mi esposa- Se que la tiene.

-¿Por qué crees que todo es por dinero? No queremos tu dinero Grey. Es a ella a la que queremos- Y cuelga el teléfono.

-Señor no fue tiempo suficiente para rastrear la llamada. Y Welch dice que el camión fue robado y el mismo aprecio quemado en un lugar alejado de la ciudad-

-¿Qué insinúas Taylor?-

-¿Qué el ataque a los servidores de Grey House y el accidente del señor Steel, todo fue arreglado para hacernos venir, pero en especial la señora Grey-

Ese día por recomendación de mi padre tuve que interponer la denuncia de la desaparición de Ana y de la llamada que recibí de su captor o captores, no habían vuelto a comunicarse conmigo, Karla al enterarse de la noticia vino a Montesano solo para culparme de la desaparición de Ana, me culpaba por no cuidarla como lo había prometido en mi votos matrimoniales.

Rey despertó al cuarto día de secuestrada Ana, y como si no fuera suficiente preguntando por su hija, no sabía como decirlo, pero lo hice le conté todo lo sucedido. Amenazo con matarme de no encontrar a su hija, el señor Rodríguez padre lo calmo y le aseguró a Raymond que él y su hijo ayudarían en la búsqueda de Ana, lo extraño era que desde que Ana desapareció el no venia a acompañar a su padre para estar con mi suegro. Por lo que mis sospechas hacia él crecieron.

-Taylor, que investiguen a José hijo. Quiero informes diarios de sus movimientos-

-Ya lo hice desde hace días, se me hace extraño que no este aquí, él siempre esta rondando cuando la señora Grey esta cerca-

-Es la unca persona con la que se iría sin Luke y Rayan-

-¡Te lo juro Taylor, si José esta en esto no seré nada piadoso con él-

-Yo me ensuciaré las manos por usted señor-

Mi celular vibra en mi bolsillo con un mensaje, lo abro y lo que veo en los adjuntos, hacen que, miles de lagrimas corran por mis mejillas, no me importa que los cinco pares de ojos que tengo en frente me miren. Las fotos de mi esposa donde su cuerpo esta siendo profanado, me impacta al ver sus lagrimas correr por sus ojos. Taylor, me quita el teléfono y mira las fotos.

-Son unos hijos de puta-

-¿Qué pasa Cristian? Déjame ver Taylor-

-Señor Steel, no creo que sea conveniente que mire las fotos- Pero Ray logra arrebatarle el móvil a Taylor y empieza a mirar las, negando.

-Grey dime que sabes quien es-

-No lo sé, el muy hijo de puta me dijo que no era por dinero que se la llevaron, que era sólo por ella. Le propuse que me dijera una cantidad, Ray, cualquiera que fuera yo la pagaría para tener conmigo a Ana. Pero no quieren dinero Ray. Daría toda mi fortuna por ella. El dinero no importa si no la tengo a mi lado-

-José, llama a los chicos que nos vean en mi casa- Ordena Ray.

-Pero Ray, no te han dado el alta- Dice José padre.

-Yo, me la estoy dando. Así que salgamos de aquí- Dice mi suegro y nadie discute. Al salir del cuarto con mi suegro en la silla de ruedas, una doctora me detiene.

-¿El señor Grey, verdad?-

-¿Quien quiere saberlo?-Pregunta Taylor.

-Días atrás, la señora Grey fue a mi consulta, se realizo unos exámenes y me fijé que no había regresado por la orden de la farmacia para las vitaminas que le prescribí. Dígale que esas vitaminas son muy importantes en su estado- La miro y no entiendo de lo que me habla. Todos deben ver mi confusión. Pero quien se atreve a preguntar es Ray.

-¿De que estado habla? ¿Qué tiene mi hija, doctora?- La doctora nos mira y no esta segura de hablar delante de tantas personas.

-¿Doctora que tiene mie esposa? Los aquí presentes a excepción de ellos dos, somos familia-

-Su esposa tiene once semanas de embarazo- Esto no puede estar pasando.

-Gracias doctora, mi yerno se encargará de las vitaminas de mi hija. Buen día-

-Con gusto señor-

Horas después la casa de Ray, se había convertido en un centro de operaciones, los excompañeros de regimiento de Ray y Rodríguez sabían como moverse, Welch y Barney estaban de camino en el jet, con mi familia, quienes se habían enterado por mi padre y los medios de comunicación. No sabía como los medios se habían enterado y extrañamente Kate, estaba en silencio, debe estar preocupada por Ana, se que me matará cuando me vea.

Los días pasaban y nada; hasta que Wellsh logro jaquear el sistema de cámaras, logramos saber que paso con mi esposa ella salió del hospital con José hijo y no regreso, José padre se enfureció y lo llamaba constantemente a su celular y ese lo apagaba, así paso por carios días hasta que Barney lo localizo, algunos de mi seguridad junto a Elliot y los chicos del señor Steel fueron en su búsqueda, a mi no me lo permitieron porque sabían que lo mataría al verlo.

Mamá, Karla y Mía no paraban de llorar, solo Kate se mantenía estoica en la que fue la habitación de Anastasia, no permitía ni que Elliot entrara. No sabía hasta que grado Kate veía a Ana como una hermana, esta ves lo demostró, algunas veces la escuche gritar y eso me hizo sentir pésimo.

Mamá trato de hablar con ella pero no quería ver a nadie, ni a Ray. Mi mente solamente imaginaba las cosas que esos tipos le hacían a mi esposa; no se tentaron en enviarme fotos de los que hacían con su cuerpo, vi sus ojos pero ya no eran los mismos después de tres semanas eran vacíos ya no tenían brillo. Pienso que lo único que la mantenía viva era nuestro bebe.

Mi teléfono vibró en mi pantalón, lo mire por inercia que podrían hacerle más; pero nada me preparó para lo que vendría a continuación.

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Anastasia POV

Despierto con frio, mucho frio, oigo voces masculinas que hablan en susurros.

-Señor, Hyde. ¿Qué piensa hacer con ella?- Esa es la vos de Paul Clayton.

-Mira niño, si no tienes estomago para hacer esto, no voy a permitir que lo arruines-

-Jack, cual es el plan?- Esa es la vos de José, él fue el que me trajo aquí.

-Todos queremos lo que Grey tiene. El me debe una vida. A ustedes les quito la zorra de Ana, nosotros tres la deseábamos. Bueno aquí esta así que disfrutemos-

¡Por Dios! Van a violarme, no José; él es como mi hermano. Paso mis manos por mi cuerpo encontrando la razón por la que siento tanto frio; estoy totalmente desnuda. Un sollozo escapa involuntariamente de mi y los tres hombres lo notan.

-Por fin despierta la bella durmiente- Dice Jack.

-Bueno ya que despertaste empecemos la fiesta dice Paul- No puedo hablar ya que me tienen una mordaza en la boca, es una parecida a las que Cristian tenía en el cuarto de juegos. Trato de hablar para que no lo hagan, si lo hacen podría perder a mi bebe. Empiezo a forcejear para ver si me puedo soltar pero no puedo las ataduras están muy apretadas.

-Ana, te harás daño- Dice el idiota de José.

-Déjala Rodríguez, si ella no disfruta de la fiesta es su problema, porque yo si lo haré- Dice Paul.

-No, no. Yo seré el primero. La zorra me lo debe. Rodríguez tu que eres fotógrafo tu harás las fotos. La jefa las querrá para divertirse- La jefa, sólo hay una persona que me odia tanto en este mundo para realizar este plan. Si Cristian no me ha encontrado aun es porque me tienen bien escondida y eso solamente se hace con dinero. La perra de Elena debe estar detrás de todo esto.

-Hay que enviárselas a Grey- Sugiere José. No, no por Dios. Eso matará a Cristian

-Buena idea Rodríguez- Dice Jack

Y así inicia mi muerte, mi bebe no sobrevivirá a esto. Mi rutina es ser violada a cada momento que se les ocurre una y otra vez; mis ojos se secaron ya no hay lagrimas que derramar, mi cuerpo no siente, no responde, a cada minuto deseo que la muerte nos lleve a mi y a mi bebe. Pero la tortura no había terminado la peor de mis pesadillas entro por la puerta, reconocí su asqueroso perfume sin hablar en ese momento confirmé que Elena era la que había orquestado todo esto. No podía ver pero sabía que era ella.

-Hola, querida Ana ¿Estas disfrutando?- Pero no obtuvo respuesta, no le daría ese gusto.

-Así, es por la mordaza y el antifaz. Te lo voy a quitar, nada de gritos, sino tendrás tu castigo- La perra me quita en antifaz, pero la luz del día es como asido en mis ojos desde que me tienen aquí he tenido los ojos cubiertos. Luego me quita la mordaza, no voy a desperdiciar la oportunidad y empiezo a gritar, lo que hace ganarme un golpe de Elena peo eso no me detiene; hasta que llegan los tres desgraciados. Miro a Paul y a José con odio, ellos serán los primeros en morir si logro escapar de aquí.

-Atenla a la cruz de espaldas a mí, hoy recibirás tu primera lección de obediencia. Sabes Cristian era bueno impartiendo castigos, no se que le hiciste tu para que no te disciplinara, pero hoy aprenderás a obedecer-

Soy tomada por Jack y Paul que son los más altos y me sostienen mientras el Judas de José me ata- Ordena Elena.

-Le pondré la mordaza- Dice José.

-No quiero oírla suplicar. Que dejará a Cristian dejándome el camino libre para que él vuelva a mi- Me rio en su cara.

-Estás loca Elena, si crees que yo apartándome del camino Cristian volverá a tu lado, le provocas asco, así como este trio me lo provocan a mi-

-Calla zorra, no te he dado permiso de hablar. Estas tres semanas con los chicos no te han servido de nada. Pero ya aprenderás a obedecer- Y el primer latigazo me golea, uno tras otro, pero recuerdo a mi bebe y empiezo a suplicar que pare.

-No por favor, no lo hagas-

-La fiesta apenas empieza. Disfrútalo como yo- Y suelta una carcajada. Pasan las horas apenas soy consciente de lo que pasa a mi alrededor, cuando siento los brazos de José, soltar mis ataduras.

-Ana, si te hubieses fijado en mi no estarías viviendo esto, Cristian es el culpable él te apartó de mi. Yo siempre te ame Anastasia-

-Suéltame José, deja que me vaya. Por el cariño que siento por ti. No sigas haciendo esto que pensará tu padre cuando se entere-

-Él nunca lo sabrá Ana- Eso me deja claro que nunca volveré a ver a Cristian porque cuando se cansen me mataran.

-Lárgate José. Moriré odiándote. Nunca te perdonaré por lo que nos haces. Ahora lárgate- Y así lo hace.

Mi cuerpo de adormece del dolor, mi cuerpo esta débil, pero mi bebe es fuerte muy fuerte, tengo que serlo por él, para volver con su padre. A l día siguiente obtengo otra sesión de lo mismo, latigazos van y vienen, mi cuerpo ya no siente, solo respiro porque mi cuerpo aún me obliga a respirar.

-Paul, ve a la farmacia y consigue adrenalina. Elena la necesitará, para reanimarla-

-Hay que curar sus heridas, Jack- Sugiere José.

-Que quieres que sea a mi al que golpeen, no. Esa mujer es brutal. Es mas Rodríguez, ¿Le enviaste los videos y las fotos a Grey?-

-Si, si lo hice-

-Lo malo de esto es que no puedo ver la cara de Grey cuando ve las fotos de su mujercita siendo follada y castigada. Eso no tiene precio-

Mi cincuenta debe de estar sufriendo ya no debe de tener su hermoso cabello de tirar de él por la falta de control en esta situación y mi papá. ¿Habrá salido del coma? Dios debe de estar sufriendo por mi.

Los siguientes días van de lo mismo, ultrajada y golpeada esa es mi rutina diaria, apenas me dan de comer para mantenerme viva. Bebe tal ves pienses que mamá es egoísta pero, deseo la muerte, solo me mantengo por ti, tu eres mi fuerza.

La puerta se abre de golpe.

-Hay que irnos, Cristian esta tras de mi. Han agarrado a José. Cristian sabrá como sacarle la información-

-Es mejor deshacernos de ella Elena. De todos monos ese es el plan- Sugiere Jack

-Si pero todavía no me he cansado de ella- Dice Elena.

-¿Qué haremos, José hablara y sabrán de nosotros. ¿Qué pensarán mis padres, Grey los destruirá por venganza- Dice Paul.

-Eso lo debiste a ver pensado cuando me buscaste, Paul- Se ríe Elena.

Pero chirridos de llantas golpes de puertas suenan fuera de la habitación.

-Te siguieron Elena- Le grita Jack.

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Luke POV

Desde que Grey nos despidió a Ryan y a mi me he dado a la tarea de seguir cada rastro de Ana, por nuestro descuido se la llevaron, ni cuando estuve Afganistán, permití que ninguno de mi escuadrón fuera capturado, ahora quien sabe que mierdas le hacen a Ana, ella es una mujer hermosa. Le escribo a Smith para que me ponga al tanto de lo que pasa con Ana. Después de tratarme mal y culparme por mi descuido, me cuenta todo lo que le han hecho a Ana.

Los recuerdos de la muerte de mi hermana inundan mi memoria, como fue brutalmente violada por su pareja y luego la mato de una forma cruel. Y recuerdo como murió él. Anastasia es como una hermana, le prometí al señor Grey cuidarla con mi vida y le falle a ambos. Pero el último mensaje de Smith me deja helado.

-Luke, la señora Grey esta embarazada-

Esto no puede estar pasando, el señor Grey debe sentirse morir.

-Ryan tenemos que encontrar a la señora Grey. Ella esta embarazada-

-¡Mierda Luke!, eso si es realmente malo-

-Si, pero la suerte de Ana acaba de cambiar. Mira quien viene por la acera, apuesto que este infeliz tiene mucho que ver-

-José "mierda" Rodríguez, dice el jefe-

-Si, que no nos vea, creo que tomará el callejón. Ahí lo agarraremos-

-Voy a pagar- Dice Ryan

-Yo lo vigilo-

Dos horas después a punta de golpes le sacamos la ubicación de Ana a José, lo atamos bien atado y le envío la ubicación de José a Taylor, a su ves le digo que tengo una sospecha de saber don de esta Anastasia. Le prometí enviarle la dirección cuando estuviese seguro que la tienen en el lugar descrito por la basura Rodríguez.

-¡Suéltenme!- Pide Rodríguez.

-Si, si claro, Para que les avises a tus compinches. Ni en sueños- Dice Ryan.

-No. Sabes, Grey y el señor Steel vendrán por ti. Estropeaste una amistad de años entre el señor Steel y tu padre-

Nos largamos rumbo a la dirección que nos dio José. Armándome de valor para afrontar lo que me encontraré en ese asqueroso lugar. Dos horas después nos encontramos una lúgubre cabaña, en medio de la nada, según lo que encontró Rayan, le pertenece a Linch Lincoln, lo que me indica que Elena, es la mente maestra detrás de todo.

-¿Cómo sabremos si la tienen aquí, Luke?- Pregunta Ryan.

-Esperemos unos minutos a ver si sale alguien- Pero nuestra espera no dura mucho un lujoso auto amarece por el camino y de él sale la bruja Lincoln.

-¡Bingo! Aquí la tienen Luke. Si ese vejestorio esta aquí. Es porque aquí tienen a la señora Grey-

-Si, tienes razón. Solo te pido que tengas bloqueados tus sentidos Ryan, no sabemos en el estado que la encontraremos. Tenemos que dejarlos vivos para que el jefe se las cobre-

-Esta bien-

Seguros de lo que hacíamos le envié la dirección a Taylor, nos dispusimos a atacar, poniéndonos nuestros trajes especiales. Cortamos las llantas del auto de la perra Lincoln para evitar su escape, nuestro auto quedo impactado en el otro auto para que no lo usaran tampoco.

Ingresamos, al hacerlo escuchamos los gritos de Elena dando ordenes, ya sabe que la encontramos lo que la vuelve peligrosa al verse acorralada.

-¡Mantenla!- Ordena.

-Hágalo, usted- Grita un hombre que no reconozco.

-¡Cobarde!-

-No iré a la cárcel por homicidio-

-Yo lo haré- Esa voz si la conozco es Hyde. Menuda bolsa de mierda, debí haberlo supuesto, el jefe sospecha que esta mierda trataba de matarlo, pero como no pudo se fue contra Ana.

-Vamos Ryan es hora. Nada de muertos- Sentencio.

El asunto de detenerlos fue fácil, nunca se esperaban que los encontraran y no tenían armas, sólo la pistola del puto de Hyde, que me roso el hombro.

-¿Cuanto quieren? Les puedo dar mucho dinero- Dice la zorra.

-¿Donde esta la señora Grey?- Pregunta Ryan.

-Búsquenla ustedes- Se ríe el otro hombre.

-No te reirás cuando el señor Steel y el señor Grey te estén golpeando- Les digo.

Y voy en busca de Anastasia.

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Cristian POV

Las fotos y videos de mi Ana siendo mancillada, me han sumergido en hoyo de miseria e impotencia. Apostaría toda mi fortuna que quien esta detrás de todo esto es Elena pero la muy hija de perra no aparece, tengo su casa vigilada; así como todos sus salones, mismos que ya liquidé. También sé que Jack esta detrás de esto, hace unos días salió bajo fianza después que Linch la pagará. Es su manera de vengarse por haberme acostado con Elena; pero también lo destruiré, tengo setenta porciento de las acciones de sus empresas, las cuales liquidaré y lo dejaré en la calle, pero esa solo es una parte de mi venganza casa golpe que Anastasia a recibido de ellos lo pagarán con sangre.

-Señor, le tengo noticias- Las palabras de Taylor me sacan de mis pensamientos.

-Dime Taylor-

-Es Sawyer-

-¿Qué quiere ese hijo de puta? Si por él y Ryan se llevaron a Ana-

-Lo sé señor. Pero ellos no han dejado de buscarla. Tienen una sospecha de saber donde la tienen. Nos dejó a Rodríguez hijo en un callejón cerca del hospital, para que dispusiéramos de él. Señor él es parte de todo esto- Lo suponía desde el principio, porque no me extraña, lo siento por su padre pero él pagará con sangre también.

-¿Qué has dicho Taylor?- Preguntan al mismo tiempo Ray y Rodríguez padre.

-Lo que oyeron. Señor Rodríguez se que es su único hijo pero me cobraré cada golpe y cada ultraje que mi esposa e hijo han recibido-

-Lo entiendo señor Grey. Crie a mi hijo con valores, cuando Anni, se casó con usted él se molesto. Yo le hice ver que ella lo veía como un hermano. Pero que a usted lo ama, que lo aceptará y que le deseará lo mejor a Anni, pero en el corazón nunca se deja de amar-

-Pero, eso no justifica todo lo que le han hecho a Ana, señor Rodríguez y me lo voy a cobrar. Ana es como mi hermana, Grey sabe que no me agrada, pero se que la ama, como Ana lo ama a él. José tenía que aceptarlo así, uno no le hace daño a lo que ama- Las palabras de Kate me asombran, nunca creí que viera a mi nena como su hermana.

-Basta de palabrerías. Taylor ve por él y ya sabes a donde llevarlo-

-Señor, Grey, Raymond, déjenme hablar con mi hijo un momento. Solamente eso les pido- No respondo nada pero Ray si le responde.

-Por nuestra hermandad y por que sé que no tienes nada que ver en esto te lo concederé, pero tu hijo tendrá que pagar lo que le han hecho a mi niña-

-Gracias, Ray- El señor Rodríguez vuelve a sentarse y se queda callado.

Taylor me avisa cuando recoge a la "mierda" Rodríguez y que lo tiene en el mismo lugar que Linch. Al regresar me informa que Luke y Ryan encontraron donde esta Ana. Ray insiste en ir así como Kate, mi padre y mi hermano, Bob se queda con Carla, mi madre y hermana.

Al llegar al lugar es un lugar muy alejado de todo. Pero nada me detiene aunque todos me gritan que me detenga, no los escucho de reojo solo veo a Taylor corre junto a mi y detrás de mi a como puede Ray. Veo a Luke y a Ryan pero ambos me detienen.

-¿Dónde la tienen?-

-Señor, es mejor que espere aquí-

-No, no. Ella no puede estar...-

-Tranquilo señor Grey. Deje que valla el señor Steel y la señorita Kate-

-¿Qué pasa Luke?- Pregunta Taylor.

-La señora Grey no permite que la toquen T- Ryan le dice a Taylor.

-Le di una manta para que se cubriera. Es conveniente llevarla a un hospital y que la doctora Grey la trate- Dice Luke.

Todo pasa de prisa veo como Ray y Kate traen a mi nena. Pero quiero ser yo quien la cargue. Al tratar de hacerlo sus palabra acuchillan mi corazón.

-¡No me toques!-

-Taylor llama a Flynn. Que desocupe su agenda lo quiero trabajando en exclusiva para mi. No importa el precio-

-Si, Señor-

-Luke, ¿Dónde los tienen?-

-Sígame- Y sigo a Luke.

En una mugrosa habitación encuentro a tres de los cinco seres más despreciables de este mundo.

-Se confiaron jefe. Creyeron que nunca los encontraríamos, por lo que no estaban armados; solo el perro de Hyde tenía una, pero gracias al que el idiota no la supo usar- Dice Luke.

-Señor ¿Qué haremos con esta basura?- Pregunta Ryan.

-Coordinen con Smith, el sabrá donde llevarlos-

-Señor, Ryan y yo queremos ser parte de lo que tiene para ellos. Se que por notros José se la llevo, pero aunque no lo crea nos drogaron. Queremos cobrar la factura-

-Esta bien, pero hablaremos después-

-Gracias, señor. No se arrepentirá-

-Eso espero. Ahora llévenselos. No quiero ver esta basura- Elena hace intento a hablarme pero de una sola mirada la hago desistir sin decir nada. Un día le confié en ella. Pero esto rebaso todos los límites.

Los días ha pasado y el infierno no termina. Nuestro bebe resistió todo lo que su mamá sufrió. Es un luchador o luchadora. Sin nacer se ha ganado mi respeto por no dejarse vencer. Pero la situación con mi Ana es otra historia, no me permite tocarla de hecho a casi nadie, a duras penas permitió que mi madre la tocara, para hacerles los exámenes y saber si esa basura no la habían contagiado de alguna enfermedad y gracias a Dios no lo hicieron. Mamá y Carla todos los días le curan sus heridas físicas, pero las heridas de su alma, según dice Flynn me tocaran a mi.

El oírla cada noche gritar entre sus pesadillas poco a poco me han ido matando, porque no la puedo consolar, Gail hay momento que si logra calmarla, pero ni de ella se deja tocar, lo pobre también igual que nosotros vive su infierno, mi Ana logra que todo mundo la quiera.

Solo el recordarle que si se altera afectara al bebe la logra calmar, sus revisiones prenatales se hacen desde casa, mamá a tenido que asesorarse en obstetricia para controlar el embarazo de Ana. Mi madre a logrado que ella la toque al menos en el vientre. Yo solo logro verla a cierta distancia. Mi presencia la pone nerviosa. Flynn entra a su sesión con ella y yo les doy su privacidad. No se cuanto tiempo pasa sumido en mis pensamientos cuando diento la mano de Flynn en mi hombro.

-Quiere hablar contigo. A solas- Mi corazón da un brinco, pero es de miedo, miedo a que me diga que va a dejarme. Pero me levanto para hablar con mi nena, ya son cinco meses desde que la recuperé y todo sigue mal, pero que quiera hablar conmigo a solas desde ese día es algo. Entro en la habitación de invitados la cual ha sido estos meses la habitación de Ana.

Entro despacio y la miro acariciando su abultado vientre, no sabemos el sexo de nuestro bebe porque Ana se negó a saberlo. Ella le habla, le da las gracias por mantenerla viva. Mi asombro es ver como mi bebe se mueve al oír a su madre, me pregunto si reaccionara de la misma manera conmigo, él o ella no han mi voz nunca.

-Hola- Le digo cuando me mira.

-Hola- contesta.

-Esta muy activo-

-Si. Y hoy es el día Cristian-

-¿Porque lo dices?, te faltan dos semanas-

-Porque acabo de reventar fuente, cariño-

-Llamaré a mamá- Le digo.

-No, llévame. Quiero que tu me cargues- A penas puedo procesar lo que me ha dicho.

-¿Quieres, quieres que te cargue?-

-Si, nadie más- Llamo a Taylor para que me ayude con el bolso de las cosas de mi bebe y cargo a Ana; ella se recuesta en mi pecho con las manos en su vientre, bajamos al sótano y nuestra seguridad ya nos esta esperando.

-Señor, ¿Quiere que le avise a la doctora Grey?-

-Por favor, Luke- Ana Empieza a quejarse de las contracciones, que con los minutos empiezan a ser seguidas.

-¡Dios, Cristian esto duele!-

-Ana. Lo haremos por cesárea-

-No Cristian será por parto natural. Tendré a mis niños, te guste o no-

-Nena, ¿Son dos? ¿Cuándo me lo dirías? ¡Mi madre lo sabía!-

-Si, son dos. Porque crees que parezco ballena. Si, Grace lo sabía la hice jurar que no te lo diría, amor ya has sufrido suficiente conmigo para darte una preocupación más. Es más no sé porque sigues conmigo-

-No, llores nena. Primero no eres una ballena. En tu vientre esta el resultado de nuestro amor. Y tu eres la mujer más hermosa del mundo, me salvaste del mundo de oscuridad en el que me había sumergido, eres la razón de mi existir. Si algo te pasa nena yo no podría seguir viviendo tu eres mi oxigeno. Prométeme que te harás la cesárea. Yo estaré contigo-

-Cristian, podrías darme un beso?-

-¡Por Dios nena!, todos los que tu quieras- Y la beso como había estado deseando. Mi madre nos recibe con el equipo médico que atenderá el parto, mamá le explica a Ana que harán mientras ella este dormida. Así lo decidí para evitarle el trauma de que tantas personas la tocarán. Creo que Ana en su interior lo sabe, pero por lo menos acepta lo que le pedimos.

Yo estoy siguiendo cada uno de los pasos en el nacimiento de mis hijos, a los treinta minutos el llanto de mi bebe número uno se deja oír.

-Señor Grey en un niño-

-¿Y el otro?-

-Ya casi lo sacamos- Contesta la doctora Greene.

Beso a Ana en la frente, mientras escucho el llanto de mi otro bebe.

-Es otro, niño. Pero son mellizos no compartían el mismo saco- Me explica la doctora.

-Nena, son dos hermosos niños, gracias, amor. Los cuidare mientras despiertas. TE AMO- Le digo en su oído se que ella me esta escuchando.

Horas después Carla, Bob y Ray llegan al hospital, así como mi familia y Kate, todos preguntan por el bebe Grey y les cuento que no solo era uno sino que dos; todos se sorprenden y se alegran más. Me felicitan por los bebes. Ray llama mi tención y me pide hablar en privado, imagino el tema y creo que es momento de ponerle fin a todo.

-Cristian, se que no es el momento pero ¿Has pensado en que hacer con la basura?-

-Si. Ray. Lo he pesado y quiero deshacerme de ella. Si los dejamos; Ana y yo no podremos ser felices y para dañarnos más, esta vez serán mis hijos el blanco. Ana y yo no lo soportaríamos-

-Yo, he pensado lo mismo. ¿Lo haces tú o lo hago yo?-

-¿ Piensa el señor Rodríguez?-

-Desconoció a su hijo, siente vergüenza por lo que José hizo-

-No será un problema-

-No lo será- Ratifica Ray.

-Bueno, vamos a que conozcas a tus nietos Ray- Y así lo hacemos.

-Mira Cristian este se parece a mi Anni, y este es igualito a ti. Hasta el entrecejo lo tiene arrugado. Mi hija y tu tienen buenos genes. Son niños hermosos- Eso infla mi ego y me hace sentirme orgullos. Quien se iba a imaginar que yo sería padre.

Al regreso de Ana al Escala, me sorprende ver como le pide a Gail que lleve toda su ropa a nuestra habitación, lo que refleja alegría en el rostro de nuestra ama de llaves; aunque pone a nuestros hijos entre ambos eso ya es un avance para nuestro matrimonio.

Mamá viene dos veces a la semana para revisar a los gemelos, que ahora se llaman Theodore y Raymond Grey Steel mis campeones, a ellos les debo mantener con vida a su madre. Mientras le cambio el pañal a Teddy y Ana toma una ducha, recibo un mensaje de mi suegro.

-Es hora de deshacerse de la basura mañana a las diez-

Respondo con un simple – OK-

Al levantar la vista mientras me acomodo a Teddy en mi pecho, Ana sale del baño con una bragas diminutas y una camiseta mía. Lo que me excita, pero el recordar que todavía no se a recuperado de sus traumas, mi libido se enfría.

-¿Todo bien por aquí-

-Si, solo que su hijo Ray ensucio el pañal y papá lo tuvo que cambiar-

-¿Y Teddy?-

-Teddy esta esperando a su mami- Respondo a mi nena.

Mientras veo como Ana alimenta a Teddy yo trato de dormir a Ray pero quiere la leche de mamá por lo que tiene que esperar su turno. Cuando Teddy se duerme Ana lo pone en su cuna y le paso a Ray para que lo alimente. Minutos después Ray es puesto en la cuna al lado de su hermano.

Me giró a mi espacio para no tocarla aunque será mu difícil. Pero su mano en mi hombro me hace girarme de nuevo.

-Te amo- Me dice.

-Yo también te amo nena-

-¿Me puedes abrazar?-

-¿Estas segura? Porque yo quiero abrazarte toda la vida- La abrazo y ella se acomoda en mi pecho.

-Cristian, perdóname- Iba a decir algo pero me tapa la boca con su mano.

-Yo no debí salir con José ese día. Debí esperar por ti. Lo siento- Y empieza a llorar.

-Tranquila. Mira yo se que no es el momento. Los tenemos a todos. Y tu padre quiere deshacerse de la basura. ¿Qué piensas de eso?-

-Cristian lo único de lo que quiero saber es de ti y nuestros niños. Se los dejo a ti y a mi papá, el que harán con ellos- Se acomoda en mis brazos y se queda profundamente dormida. La abrazo como he estado deseando y le digo al oído lo tanto que la amo.

A las diez de la mañana deje a Ana con los niños, mamá y Mia; para encontrarme con Raymond y los chicos que han custodiado a la basura. Al llegar los miro a todos en una Cruz de San Andrés con sus espaldas, marcadas por los latigazos. Todos a excepción de Hyde piden piedad, pero no la tendrán, no se la concedieron a Ana; es más planeaban matarla.

-Cristian, ayúdame- Me pide Elena.

-Tu, eres la que menos se merece piedad perra, tu fuiste la que le marco la espalda a mi hija y orquestaste todo esto- Le dice Ray.

-No, ellos me pidieron ayuda. Más ese chico José-

-¡Hola, José!- Saluda Kate a mis espaldas, no sabía que ella vendría era de suponer.

-Kate, ayúdame-

-Claro que voy a ayudarte. Recibirás lo que te mereces José. Te lo dije muchas veces que Ana te quería como un hermano, yo también. Cuando Ana se caso con Grey te lo dije. Te dije que buscaras a alguien a quien amar y que dejaras a Ana ser feliz, pero no y mira lo que hiciste. Ni tu padre quiere verte, le has causado vergüenza- Kate toma aire con cada golpe José pide perdón sin recibirlo, hasta que Ray la detiene.

-Ya hija déjalo, ve con Anni y hazle compañía mientras Cristian y yo nos hacemos cargo- Kate suelta el látigo pero antes de irse me habla.

-Grey, que mueran sufriendo- Y se va, esta mujer me da miedo, espero que mi hermano nunca la engañe, sólo me imagino lo que le esperaría.

Unos a uno sufren lo que mi Ana vivió de todas maneras posible, Clayton sus padres están desesperados por encontrarlo, pero no lo harán nuca. Por último Ray me pide que vaya con Ana y los gemelos que él se encargara de desaparecer la basura, no quiere que me involucre por lo que me llevo a mi personal de seguridad y lo dejos con sus ex compañeros de escuadrón. En el auto mientras Taylor conduce Sawyer va de copiloto, me desconecto de todo deseando estar con mi mujer e hijos. Pero una idea me llega a la mente, el Escala no es el lugar idóneo para crear a mis hijos por lo que busco casas y encuentro la que me gusta; es la que vimos Ana y yo la primera vez que navegamos en el The Grace. Me contacto con la agente vendedora y concertó una cita con ella para el día siguiente.

Tres meses después nos estamos mudando a la casa del Sound, Elliot y sus muchachos hicieron un excelente trabajo. Par la cena de bienvenida invitamos a toda mi familia inclusive mis abuelos han venido, también lo hicieron los padres de Ana. Elliot y Kate anunciaran la fecha de su boda y Ana esta más que feliz por ellos.

La cena transcurre entre los malos chistes de Elliot y las anécdotas de papá y Ray en sus días de pesca. Esto me alegra lo único que me tienen inquieto es que Ana todavía tiene esas malditas pesadillas que rivalizan con las mías. Lo que yo viví no se puede comparar con lo que ella vivió. Hoy le haré una propuesta que espero que acepte.

Tarde por la noche mi familia se despide; Carla, Ray y Bob deciden quedarse en un hotel del cual me hago cargo de sus gastos, según ellos que por irse a primeras horas no quieren molestar. A regañadientes acepto.

Ya en nuestra habitación Ana insiste en que los niños deben de dormir en su habitación que ya tienen tres meses y pueden hacerlo. Los llevamos; los ponemos en sus cunas y conectamos el monitor para despertarnos si lloran en la madrugada ya casi no lo hacen a no ser de tener el pañal muy mojado.

En la habitación Ana, se cambia su ropa por una bata de satén que deja ver cada una de sus curvas tengo que voltear para no calentarme, Ana aun no logra que podamos tener sexo, aunque hace algunos meses permitió que la abrazara. El día que los niños nacieran, creo que quería sentirse segura; también las sesiones con Flynn la han ayudado a hora se han reducido a una cada quince días. Ana se acuesta a mi lado.

-Cristian, abrázame- Hado lo que me pide, pero lo hago con vergüenza ya que mi amigo no quiere clamarse y me preocupa que Ana se aparte de mi.

-Tienes un problema ahí- Lo dice señalando mi entre pierna.

-Perdóname nena, pero es que verte así no ayuda-

-No, no Cristian. Perdóname tu, por no cumplir mi papel de esposa. Si quieres buscar a alguien que te satisfaga yo lo entendería- Lo dice llorando, se que no quiere eso, lo dice porque me ama y yo a ella, nunca buscaría otra. Esperaré todo el tiempo que sea necesario. Por ella, por mi amor.

-¡Oh, nena! No tengo nada que perdonarte Amor, tu eres la mujer más maravillosa que conozco. Es más perdóname tu nunca debí dejarte aquel día, sabía que no debía ir pero aun así lo hice-

-Cristian, hazme el amor. Borra todo lo que ellos me hicieron ámame-

-¡Oh, nena! Déjame curar tus heridas- Y voy de apoco haciendo lo mejor que sabemos; amarnos como solo nosotros sabemos.

FIN