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Capítulo 48. Alessia

"Recuerda mirar hacia las estrellas y no hacia bajo a tus pies. Intenta darle sentido a lo que ves y pregúntate sobre lo que hace que el universo exista. Sé curioso. Aunque la vida parezca difícil, siempre hay algo que puedes hacer y en lo que tener éxito. Es importante que no te rindas" 

- Stephen Hawking

Nunca he entrado en una cafetería con un aroma familiar tan grande. Las paredes pintadas de diferentes colores cada tres meses, según me cuenta Logan, ahora se reservan por un color tan acogedor como lo es el beis. Las sillas, permaneciendo como si fuera un café de los ochenta me hacen reír.

Es tan bonito que te da pánico dañar algo.

El Doll's siempre ha conseguido captar mi atención desde que era una niña. Recuerdo que junto con mis padres me trajeron aquí, antes de que todo esto de tener dinero y ser medio ricos sucediera. Recuerdo a un hombre joven y apuesto traer nuestros pedidos a la mesa y ese chico era Luca, que recién aprendía el oficio.

Ahora miro a Logan, girado de espaldas a mí preparando alguna bebida de la que no sé su existencia mientras a su lado, Luca, me guiña un ojo sonriendo al verme entrar. Aguanto la respiración. Con solo contemplar a Luca puedes comprobar como ama tanto a Logan que parece que sea su propio hijo, un chico en el que puede confiar su vida sin arrepentirse por un instante.

En el exterior ya comienzan a encenderse las farolas para una mejor visión de la calle, el interior de la cafetería está desierto menos para nosotros tres. Echo un vistazo a Logan sonriéndole a su espalda, se encuentra tan ensimismado en lo que está haciendo que no tiene ni idea de que estoy aquí. Miro de refilón por el rabillo del ojo a Luca tratando de aguantar la risa, sofoco la mía también haciendo sonido con una silla como si tuviera la mínima intención de sentarme.

Las alertas de Logan se disparan girándose.

— Lo siento, vamos a ce...

Sus palabras se quedan suspendidas en el aire, su ceño se frunce al contemplarme y una sonrisa empieza a escalar las esquinas de sus labios cuando me reconoce. Sus ojos pardos se achican provocando el revoloteo de sus lunares como pájaros surcando el cielo

— ¿Qué estás haciendo aquí?

— ¿Acaso no puedo ver a mi novio después de trabajar? — interrogo jocosa, su sonrisa se ensancha al igual que la mía. Sacude la cabeza como si fuera incapaz de creer de que he venido a por él, de que, por una vez, los hombres machotes no son los que tienen que recoger a sus respectivas novias de sus extra escolares o de sus trabajos adicionales.

Se acerca hasta mí y se inclina dejando un casto beso sobre mis labios, cierro los ojos a la espera de que siga. Sus dientes apareciendo tras una sonrisa me dan la mejor bienvenida.

— ¿Me esperas aquí? Me quedan unas cosas y ya salgo — avisa, no me da tiempo a asentir cuando la voz fuerte de Luca se hace presente irrumpiendo en nuestras burbuja.

— ¿Estás de broma, no? — le miro confundido, le echo un vistazo a Logan descubriéndolo de la misma forma. Suelta un bufido como si estuviera molesto, sin embargo, una pequeña sonrisa se crispa en sus labios —. Ha venido tu novia a recogerte, sé un buen adolescente hormonal y sal con ella, Logan. No quiero que te conviertas en un anciano aburrido tan pronto — espeta con una enrome sonrisa.

Suelto una risa sucumbiendo a las carcajadas que Logan deja escapar. Se lleva las manos a la espalda quitándose el nudo del delantal, niega con la cabeza igual que divertido que yo. Las arrugas de Luca se visibilizan tras esa capa de felicidad que se apodera de él.

Es imposible no admirar la complicidad que se tienen, los ánimos y favores que se brindan entre ellos como si formaran parte de la familia del otro. Espero a que Logan se desabroche el delantal y coja la chaqueta, su rostro se inclina sobre el mío permitiéndome observar esos maravillosos ojos pardo con esas motas doradas que me vuelven loca y esos lunares que me hacen desear recorrerlos con las yemas de mi dedos.

— ¿A dónde quieres ir?

Sigo embelesada con su rostro incluso mientras habla, entreabro mi boca cuando su manos se entrelaza con las mía y acarician el dorso de ella con suma tranquilidad. Alzo la que me queda libre posándola sobre su cuello, su respiración se entrecorta con el simple tacto y sonrío al sentirlo. Es increíble como me importa tan poco la opinión de los demás cuando estoy con él.

— Cualquier sitio está bien — susurro.

Sonríe siendo rápido cuando pocos segundos más tarde me dejar un beso en las comisuras de mis labios que me desestabiliza. No encuentro el paradero del suelo pues noto mis piernas como gelatina a punto de ser ingeridas por una persona de rostro pecoso y traviesos ojos pardos.

— ¿Nos vemos mañana, Luca? — interroga alzando unos decibelios la voz para que el señor le escuche. Luca deja de lavar los pocos platos que Logan se ha dejado a medias. Una taza de té se encuentra encima de la mesa de enfrente afirmándome que era para él la bebida que Logan hacía al entrar.

Su rostro se llena de unas cuantas arrugas cuando sonríe.

— Por supuesto, chico. Ni un minuto más tarde — manda bromeando, nos guiña un ojo esperando a que nos demos la vuelta para poder seguir con lo que hacíamos.

Logan sujeta la puerta para que salga, aún sin soltarme la mano. Pasa detrás de mí permaneciendo con sus dedos sobre el dorso de mi mano enviando corrientes eléctricas por todo mi cuerpo que me hacen desear estar con él, a solas, mientras puedo disfrutar de su calor y compañía.

Se mueve colocando su brazo al completo sobre mis hombros, me acerca a su pecho convirtiéndome en una chica enamorada hasta las trancas de su novio. Deja un beso en la cima de mi cabeza recordándome la razón por la que le amo, por la que sería capaz de enfrentar a mis padres por él.

No he conocido una persona que tenga tanta devoción por los que ama, que tenga la necesidad de cuidar de ellos como si le fuera al vida en ser responsable de todos. A veces parece mentira que una persona como él se fijara en alguien que, en un principio, era la persona más fría que podías llegar a encontrarte.

Recuerdo esos días en los que nos mirábamos y quería matarlo por estar haciendo daño a Tommy, por creer que su simple presencia estaba poniendo toda mi vida en el infierno cuando en realidad la estaba haciendo ascender hasta al cielo.

Me habría muerto si él no hubiera llegado a mi vida.

— ¿En qué piensas, dulzura? — pregunta con tanto cariño que me endulza el alma como si fuera algodón de azúcar —. Llevas desde que hemos salido callada.

Levanto la mirada encontrando ese rostro lleno de sentimientos, el intenso amor que siente por mí se identifica en sus ojos, en su mirada que analiza cada movimiento que hago. Mi alma retiene en su memoria cada parte de su cara, todas y cada una de sus pecas, sus ojos pardos, su boca pequeña pero que sabe a lo mejor del universo.

— ¿Por qué te fijaste en mí? — pregunto, el interrogante escapa antes de poder analizarlo. La sangre sube hasta mis mejillas en cuestión de segundos pero es imposible detenerse ahora que su ceja se alza y una sonrisa comienza a crisparse en sus labios. Carraspeo —. Quiero decir, era bastante idiota cuando te conocí y no me lo has echado nunca en contra — susurro.

— Nunca he conocido a otra persona que recogiera a un ser querido del suelo por estar borracho — susurra, le echo un vistazo descubriendo una mirada perdida. Sonríe pero no llega a sus ojos —. Supongo que me provocó curiosidad que una persona estuviera en una situación parecida a la mía y cuando me diste el dinero pensando que te cobraría algo solo quería seguir sabiendo qué era lo que debía tenerte así para que pensaras que todos necesitamos dinero a cambio de un favor — declara.

No he dejado de mirarle, sin embargo, su atención vuelve a posarse sobre la mía y el intenso dulzor que le invade me parece lo más bonito del mundo.

— El caso es que me enamoraste desde el primer momento, dulzura, y cuanto más te conocía, más me gustabas — una piedra se atasca en mi estómago formando un nudo, tampoco puedo formar palabras —. Creo que no he fallado al estar contigo, al fin y al cabo — murmura, me voy a terminar cayendo al suelo como siga así. No siento las piernas —. He encontrado a la persona más increíble del universo gracias a un estúpido alcohólico que obligó a mi ahora novia a pedirme que le llevara a su casa — bromea —. Al final voy a tener que darle las gracias y todo.

Me inclino hacia él eliminando la distancia que nos separa, una pared se encuentra detrás de nosotros y la manera en la que le sorprendo le impulsa hasta ella. Sus manos se colocan en ambos lados de mi cara acunando mi rostro y permitiendo que saboree cada parte de su boca.

Nuestras lenguas se entrelazan como hacen unos segundos estaban nuestras manos. Enredo mis dedos en su cabello sedoso tirando de él hasta sacarle un gruñido. Su cuerpo se mueve rápido sin que deje que me percate de cómo me gira hasta que él está sobre mí y su boca besa con fiereza la mía. Con necesidad.

Pretendo no notar como mi corazón bombea con tanta rapidez que me duele el pecho. De como un calor se extiende por todo mi cuerpo mandándome al infierno de su boca y sus caricias. Sus dientes me provocan mordiéndome el labio inferior y retengo un jadeo que al final termina huyendo de mi boca como si necesitara estar fuera.

— ¿Enserio quieres seguir con esto aquí? — pregunta volviendo a dejar un beso rápido en mi boca. Miro sus ojos oscuros con un brillo que me cierra la garganta, respiro aire como si fuera el agua que exijo para vivir.

— Me gustaría que estuviéramos solos pero no tenemos ni una casa en la que podamos ir — susurro, puede que sea una aguafiestas pero no tengo ganas de soportar a una madre malhumorada porque cree que estoy saliendo con el chico equivocado y tampoco quiero ir a casa de mi suegro ebrio que piensa igual que mi progenitora.

Suelta un gruñido apoyando su frente sobre la mía, permanezco con los ojos abiertos observando sus labios. Mi aliento roza con el suyo y un olor a café y otras bebidas se filtra por mi nariz. He de suponer que estar metido en una cafetería juega sus propias cartas.

— Si sigues sonriendo harás que te lleve a un maldito motel para que te encargues de los problemas que me causas — espeta consternado. Ni siquiera me había percatado de que estaba sonriendo hasta que lo ha dicho. Sin embargo, el oxígeno se queda atascado en mi garganta impidiéndome tomar una mínima bocanada de aire.

— ¿Quién dice que no puedas llevarme ahora? — cuestiono, sus párpado se levantan de golpe. No he pensado dos veces en lo que he dicho antes de que las palabras salieran escopeteadas de mi boca como el coyote tras el correcaminos.

Esa mirada cargada de tensión y de lujuria me provoca la muerte, su atención se dirige hasta mis labios que los vuelve a besar como si los necesitara para vivir. Yo lo necesito para vivir.

— Me terminarás matando, dulzura — murmura, enserio parece estar a punto de ser asesinado por alguien.

— Te amaré incluso muerto — suelto. Vuelve a mirarme esperando a que esté bromeando.

Nunca he sido más sincera. Tampoco he sido capaz de dejar escapar las palabras sin pensar hasta que él llegó a mi vida, hasta que me enseñó que no siempre hace falta ser tan precavida como para reflexionar mil veces lo que vas a decir antes de soltarlo.

Con él soy yo misma, Alessia Murphy, una chica simple con unos padres rectos y serios a quienes les importa más el qué dirán los demás que lo que diga su propia hija. Sangre de su sangre. Sin embargo, gracias a dejar escapar lo que siento de un tirón logro que Logan me vuelva a besar otra vez y que con ese beso sienta que puedo hacer cualquier cosa.

Que podría morir ahora mismo y sería la mujer más feliz del universo por estar jugueteando con sus labios y amando cada segundo que paso a su lado de la misma forma que le amo a él.

Infinitamente.

¡Nuevo capítulo, chicxs!

Espero que os guste mucho, un poco de amor nunca viene mal y parece que están demasiado amorosos últimamente ;)

Los capítulos que vienen serán un poco más complicados, he estado mirando y queda poco para que la novela acabe. Veinte capítulos más o menos :(. Peeeero, habrá un capítulo extra que creo que os encantará y hará cambiar un poco las perspectivas :D

También quería agradeceros una cosita. ¡Hemos llegado al puesto 117# en el ranking de novela juvenil! Muchas gracias, lindxs. Es increíble que me hagáis llegar tan lejos. Espero que me podáis seguir en las demás, vuestra opinión es muy importante para mí <3

Y bueeeno, no tengo nada más que decir soo...

¡Pregunta Random!: ¿Preferirías escoger sobre vosotros mismo, sobre vuestra familia o sobre un amor verdadero? Quiero decir, en caso de estar en situación que cambiaría totalmente vuestro futuro, ¿os escogeríais a vosotrxs mismxs, a tu familia o a tu amor verdadero?

Besos y ¡XOXO!

NHOA

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