Yoongi llego a la oficina de su padre, paso derecho sin importar que la secretaria le dijera que estaba ocupado.

Fue entonces que su admiración hacia su padre se cayó, ya que lo vio besar y manosear a una joven, que parecía ser su hija, se notaba.

Su padre al verlo, bajo a la chica de sus piernas y se acomodo el traje.

— ¿¡Que haces aquí!?— pregunto el hombre molesto.

— Vine a decirte que...— yoongi vio de reojo a la chica y sonrío sinico— veo que te diviertes, tu si puedes engañar a mi madre,  pero yo no puedo hacer lo que quiera, porque me reprochas pero veo que eres peor que yo, tu ocultas tu engaño,  yo no seré como tú,  te vengo a decir que tengo pareja, soy gay padre y me vale lo que digas, si quieres quitame la herencia y dásela a tu zorra, pero aléjate de mi vida— advirtió el joven y salió, pero ante...— Descuida no le diré a madre de tu engaño, aunque lo más probable es que sepa, después de todo siempre te sigue y te mande el divorcio,  adiós— se despidió ignorando los gritos de su padre.

—¡Min yooongi!— exclamo su padre momesto.

Al salir sintió un peso de encima, como si le quitaran miles de piedras de la espalda, sentía la brisa de aire agitar su cabello, suspiro tranquilo y decidió caminar un rato.

Lo más probable es que padre cancele todas sus tarjetas y lo despida, pero no le importaba.

Escucho que su teléfono sonaba era un mensaje de jungkook mandandole la ubicación de su trabajo.

Vio el mensaje y le respondió que luego lo vería.

Caminaba tranquilamente por las calles de la ciudad.

—Destino, dios, astros, lo que sea, dame una señal,  quiero pasar más tiempo con jungkook, quisiera estar cerca de él — confeso mirando el cielo.

Y como si fuera por arte de magia, apareció un letrero en un pequeño local, este vendía instrumentos musicales, estab en la esquina, y entonces a un metro se encontraba una cafetería, lugar donde trabaja jungkook.

—Eres rápido — dijo mirando al cielo m, entonces corrió y entro al local.— Disculpe, vi que solicita alguien,  puedo servirle — se ofreció.

—Oh que joven tan amable, ¿sabes algo de música?— pregunto un hombre canoso y viejo.

—Si— aseguró.

El hombre lo examino de pies a cabeza y entonces le ofreció que tocara el piano qué tenía de exhibición.

Yoongi acepto y toco una melodía.

El hombre asombrado y tranquilo lo acepto.

—El trabajo es tuyo chico— dijo el mayor estrechando su mano.

—Gracias señor— agradeció con una reverencia y sonrío.

Entonces vio la hora de su reloj y se dispuesto a salir para encontrar a su novio.

Sentía un poco de frío en su cuello, paso por una tienda de ropa y compro una pashmina roja, misma que le daría a jungkook con el tiempo y sería el recuerdo de ambos.

Antes de llegar compro un ramo de flores para su amado, entonces al abrir la puerta de la cafetería vio a su chico despedirse de otros jóvenes.

Jungkook al voltear se sorprendió de que yoongi le llevara un detalle.

—que hermosas— dijo asombrado añ ver el ramo—gracias — sonrío

—Qué detalle— comento sarcastico y divertido un castaño claro.

Yoongi al escuchar una tercera voz más grave le intrigó y frunció el ceño.

—Qué metiche eres hyung— dijo Jungkook molesto pero con un tono divertido.

—¿Tu eres?— pregunto yoongi intrigado.

—Cierto,  amor, el es kim taehyung,  hijo del dueño de la cafetería,  es el gerente, básicamente mi jefe.— Hyung,  el es Min Yoongi,  mi novio— señalo a ambos.

—Un gusto— dijo el de sonrisa cuadra y estiro su mano

Yoongi dudo un momento, pero acepto y estrecho sus manos

— El gusto es mió — sonrío.

—Nos vamos jk— pronunció dudoso

—Si, nos vemos Hyung hasta el lunes— se despidió el menor y salió tomando del brazo a su novio.

—Estás celoso gatito— insinuó el menor viendo de reojo a su novio serio.

—Obvio, viste a ese dios escultural qué tal si en una de esas te roba de mi lado, que puede hacer este vil y sencillo hombre— dijo indignado

El menor rio por el comentario, pero negó.

—No importa que no seas un dios griego ,jajaj, o que seas un gatito gruñón, o simplemente un humano normal, siempre te elegiré a ti, solo te amo a ti— confeso el menor.

—Lose— afirmo el mayor, detuvo su andar y tomo de la cintura a su novio para apegarlo a su cuerpo y besarle.

Ambos jóvenes se besaban con ternura y dedicación, mientras se ocultaba el sol dando lugar a un bello atardecer.

El menor fue el primero en separarse

—Tengo hambre— anuncio en un puchero

—Bueno, tendrá que ser tacos porque es lo único que me alcanza ahora— dijo el mayor.

—No importa,  acepto — sonrío el menor.

Así ambos salieron caminando,  entrelazando sus manos.

Esta vez disfrutaría su segunda oportunidad yoongi junto a jungkook.

Fin.