- ¡¡TARA!!... Contaré hasta 5!!...- y su cuerpo empezó a temblar, la voz de Jungkook sonó diferente, le daba miedo, ese tono más grave de lo usual le causaba pavor, vio al castaño a su lado que no parecía inmutarse, Tara estaba, confundida, asustada y no podía procesar todo a la vez.

Tenía miedo...

¿Jungkook lo sabía?

¿Seguía dormida?

¿Por qué le estaba faltando el aire?

- Tara tranquila.. Jungkook no te lastimaría jamás...- Dijo Taehyung abrazando el cuerpo de la pequeña chica, intentaba brindarle protección, intentaba convencerla de que Jeon Jungkook no era lo que aparentaba pero jamás la dañaría.

- Y si me deja... No quiero que me deje...- Dolió, dolió mucho, Tara no parecía comprender...

¿A este punto seguía eligiendo a Jungkook?

A pesar de la presión que impartía en ella y el miedo que le estaba provocando, a pesar de todo lo que él ha echo.

Se aferró a Tara con mucha más fuerza, tal vez así se diera cuenta de lo acelerado que se encontraba su corazón junto a todos los sentimientos que provocó en él a pesar de parecer imposible.

- Tara!! - Los ojos de la azabache se cristalizaron...

- Voy a abrir Taehyung, gracias por estar aquí.- Aún no era el final tenía dudas sobre el castaño, Tara aún tenía esa inmensa curiosidad, y ese sentimiento que no podía existir hacia el chico del cual habían brotado dos grandes alas...

La habitación pareció sumirse en un inmenso silencio, Tara avanzo sin prisa a la puerta y Tae estaba ahí plasmado viendo cada uno de sus pasos.

Algo no concordaba bien.

No era igual que antes, todo pareció muy diferente a lo que recuerda, ella jamás habría la puerta.

Pero aquí no dudo en hacerlo.

Ella lentamente quitó el seguro para luego girar la perilla, la que encontró tras la puerta fue a Jeon Jungkook con los ojos de un intenso azul sumido en la irá indigna de un ser celestia, Tara vio plasmado a su dulce novio, no estaba contento pareció querer destruir todo a su paso, obviamente el llamativo color de sus iris llamo la atención de la muchacha.

El también era algo sobrenatural...

¿Por qué le mintió?

¿Estaba soñando?

Su respiración se entre corto, sus ojos soltaban pequeñas lágrimas de miedo.

-Jungkook...- Susurro bajito aterrada, este solo la miro con una sonrisa cínica en su rostro, su mente estaba sumida en pensamientos impropios de un Ángel, Miro toda la habitación y cuando sus ojos dieron con Kim Taehyung todo rastro de conciencia se fue.

Odiaba mucho a Taehyung.

Alejo a Tara de la entrada y la ignoro pasando a su lado, vio fijamente al castaño que parecía no inmutarse ni un poco.

- ¿Tú enserio no tienes ni una pizca de decencia? - hablo el castaño sin previo aviso dejando la habitación en silencio.

- ¿Yo? Tú eres el que está en casa de mi novia, regresas después del jodido castigo eterno a cometer el mismo error.- La verdadera imagen de Jungkook estaba saliendo a la luz, un bello Ángel el cual estaba sintiendo cosas que no debería y rompiendo reglas a su paso.

- Mi único error fue sentir lástima por ti, debí saber que serías un traicionero, pero me deje llevar por los estereotipos celestiales, por el aura buena que te rodeaba, lo sabías Jungkook, Tara no puede amarte, Tara está destinada a mi desde tiempos inmemorables, estás rompiendo los acuerdos de dios, y yo ya pague mis pecados.- Decir que a Taehyung no sentía irá era mentir, el odiaba a Jungkook, ese horrible sentimiento formaba parte de su sistema.

- No me pidas que te compadezca, por qué ni dios lo hará.- las palabras sonaron crueles, la verdad suele sonar así.

Tara observó todo con sus ojos muy abiertos, no tenía idea de que hacer o decir, su cerebro humano era incapaz de procesar todo de inmediato, solo sabía que debía tomar una decisión aunque no sabía con exactitud para qué.

- Taehyung... No es mi culpa, esto es todo tu culpa, solo quieres hacerme sentir miserable.-

- ¿Enserio Jungkook? Quieres engañarte de esa manera, tu misión en la tierra no era enamorarte de una mortal, ni tampoco intervenir en mis planes, la tuya Jeon era ser mi mano derecha y el informante del todo poderoso, por qué Dios estaba deacuerdo en dejar a Tara enlazada a mí por toda la eternidad, él me debía una, tú fuiste el que violó las reglas manipuló a una mortal causo una pequeña guerra entre el cielo e infierno y yo a final de cuentas pague por ello de forma injusta, si yo cometí errores tú llegaste a un nivel que creí imposible , está vez ni tu título, ni Tara, ni Namjoon, ni siquiera yo intervendrá en las consecuencias, por qué tengo permitido quedarme.- sus celo fruncido y sus ojos aterradores y determinados no mentian.

Taehyung hablaba enserio...

Jungkook lo sabía pero que más podía hacer, estaba enamorado, era una sensación egoísta.

No quería ser egoísta.

- Tara. - llamo el azabache, la muchacha inmediatamente lo vió prestando total atención.

- ¿Te quedas o te vas conmigo?- y esa pregunta la desconcertó, su mente estaba echa un lío...

¿Enserio quería hacerla tomar una decisión ahora?

Pero aún así no entendió de qué?

Su rostro mostró una expresión confundida, Jungkook estaba serio esperando una respuesta.

¿A dónde iría?

No tenía idea de a qué se refería, Taehyung observó la confusión en Tara y le pareció algo cruel de parte de Jungkook, aún no recordaba con exactitud, ella estaba confundida en su ingenuidad.

- ¿A donde? - y Jungkook no pudo más, salió de la habitación con toda prisa al no escuchar la respuesta que esperaba.

Tara sintió que lo perdería todo, no entendió bien la situación pero el miedo llegó a su corazón..

- ¡¡Jungkook!! ¡¡Espera!! - Tara estaba a punto de ir tras el, pero un fuerte agarre la detuvo, Taehyung la miro fijamente sus ojos brillaban esperanzados, rogaba que no se fuera, tenía miedo, ninguna de sus vida fue así, en ninguna Tara corría tras Jungkook, ella lo miro fijo buscando una definición diferente en su expresión...

Solo había dolor, pareció que le decía "no me dejes" con la mirada.

Tara negó y lo dejo ahí solo, no como las otras veces.

Esta vez ni quiera había un sentimiento correspondido, no había confusión, ella fue más firme en su decisión, no sabía si era bueno o malo...

¿Ahora qué?

Sonreír de forma lamentable...

(...)

Tara corrió por los pasillos hasta llegar a Jungkook.

Él solo caminaba molesto, sintió su presencia pero la ignoró, Tara no lo amaba nunca lo amo, ella a fin de cuentas jamás lo elegía.

- Jungkook. - llamo una vez, y fue ignorada.

- Jungkook porfavor háblame. - rogó Tara mientras jalaba su camiseta.

- Hace frío deberías estar más abrigado. - dijo Tara preocupada mientras intentaba seguirle el paso, este se detuvo bruscamente.

Recordó a su novia con el abrigo de Taehyung puesto, lo contenta que estaba, lo enamorada que se veía.

Odia sentirse tan celoso...

- Vete Tara. - murmullo intentando retener su enojo.

- Se que está molesto, yo estoy muy confundida, aún no comprendo todo por completo pero Jungkook yo...-

- No digas más, hay que acabar con esta mierda de farsa de una vez por todas.- a la pelinegra se le cristalizaron los ojos, miraba a su novio con suplica.

- ¿Cuál farsa? - su voz se entrecortaba, ¿por qué decía todo esto?

- No quiero más un título que no me corresponde, nunca e sido realmente tu novio Tara.-

-Jung—. - Él solo se safo de su agarre caminando rápidamente por los pasillos ignorando las suplica y lloriqueos de la persona que amaba. Estaba cansado del mismo cliché tonto y aburrido, a final de cuentas siempre sufría alguien aquí.

Era mejor dejarle la decisión más fácil.

- ¡!Jungkook porfavor!! - Odiaba ver rogar a Tara.

Así que avanzo sin parar.

- ¡¡Jungkook!! Te amo...- y fingir que no lo escucho sería mentira, anhelo tanto esa palabra, sus pasos se detuvieron y tenía ese impulso por regresar.

En sus anteriores vidas a pesar de quedarse con Tara jamás logro escuchar un te amo de sus labios , no sabía que dolería tanto oírlo.

Aún con la rabia dominando su ser, dejo de lado su palpitante corazón y sus deseos de regresar y la dejo...

A pesar de oír su llanto la dejo.

A pesar de que ella lo eligió de forma sincera está vez la dejo.

Y se arrepentiría de esa decisión por mucho tiempo si no es que siempre...

(...)

Hace millones de años conoció a Tara sus sentimientos salieron a la luz se enamoro de ella irremediablemente, dios se enteró y debía impedirlo.

La existencia de Taehyung no estaba planeada durante la primera guerra entre angeles y demonios, Nació él hijo de una híbrida de Ángel con humana que fue abusada cruelmente por un demonio, Se supone que no tendría que tener la habilidad de embarazarse de un demonio pero al ser parte humana se volvió posible, cuando despertó no se hizo polvo como los Angeles comunes después de ser profanados, solo tenía un dolor inmenso en su zona baja, sangre y muchísimo miedo...

Fue un tiempo donde los llamados tres mundos se convirtieron en un caos, el pecado reinaba.

El padre de Taehyung era un demonio de rango alto con cabellos azabaches y unos resplandecientes ojos miel, este estaba molesto con Dios e hizo incontables maldades para desquitarse, cuando vio a la pequeña mujer con aura de Angel los deseos impuro vinieron a él... ¿Al final? se arrepintió al ver cómo la pequeña muchacha no se convertía en ceniza y lloriqueos sin parar se colaban en sus oídos, se detuvo, la vio dormir en sus brazos y su corazón latió de forma sincera por primera vez en su vida.

Nunca había sentido arrepentimiento, era la primera vez y lo atormento, pensó que tal vez fue un castigo divino.

Se alejo del lugar dejando a la joven,

No sabía por qué regresaba a verificar que ella se encontrara bien, lo hacía sin falta alguna, la vio llorar sin para, la vio maldecirlo, la vio tener miedo, la vio aprender, la vio reír y la protegió de todo lo que intentará hacerle daño.

Cuando un demonio se enamora sinceramente por primera vez queda condenado a amar a esa persona de forma permanente en el transcurso de su existencia, la mayoría al encontrar esto lo consideraba un castigo ya que se condenan a ellos mismos, seres que no sabía cómo amar amando, solo lastimaban a quienes adoraban y añorando atención por primera vez.

Se sentía débiles, terminaban en tragedia la mayor parte del tiempo.

Y eso paso con él, el demonio de Nombre Taehyung era curioso y malévolo pero tenía una pequeña debilidad.

Aveces miraba como la muchacha al sentir su presencia tenía horribles escalofríos...

Y por primera vez un demonio quiso llorar de frustración, estaba enamorado pero había quitado la pureza de la muchacha mitad Angel cosa que para ellos era un pecado mortal que no se podría pagar ni con mil años de condena.

Todo dio un giro inesperado cuando en una de sus supervisiones para ver a la bella chica empezó a notar como su vientre empezaba a abultar.

El demonio jamás fue ingenuo así que se dio cuenta de que eso era gracias a él, cosa que lo dejo en Shock, él sabía que las Angeles no podían embarazarse de demonios en cambios los Angeles hombre podían tener hijos con humanas?...

Era algo raro de explicar, la pureza de las femeninas solía ser mayor así que se convertían en polvo, y los hombre solían ser desterrados o convertidos en polvos de igual manera, pero había casos donde se cambiaban de bando convirtiéndose en demonios, eso no dejaba su pasado de lado.

Tenía la teoría de que la bonita mujer fue hija de una humana común y un Ángel que decidió dejar su vida como tal para ser un humano.

Ya que era imposible lo que sus ojos apreciaban.

Ese bebé no iba ser bien recibido.

Dios no perdonaría su existencia.

Quiso acercarse, quiso acariciar ese abultado vientre.

Pero cuando sus ojos se encontraron con los de la muchacha vio el terror reflejado en ellos, ella empezó a lloriquear sin para poniendo nervioso al demonio.

Este se disculpaba una y otra vez dejando su orgullo y convicciones de lado, estaba arrepentido, pero sabía que ya no podría enmendarlo.

Tuvo que huir de nuevo, tuvo que esconderse en la sombras nuevamente observando desde la distancia, pero está vez la chica sabía que estaba siendo observada, al principio sentía mucho miedo pero después se dio cuenta de que jamás le volvería a hacer daño.

El tiempo transcurría y cada vez su estómago estaba más hinchado ella con curiosidad solía verse así misma, jamás aprecio un embarazo de cerca y la pequeña estaba facinada, aunque una parte de ella sentía un ligero odio por ello, después de todo no surgió de una linda manera.

Y eso la hacía sentir culpable, siempre que sentía ese entusiasmo los malos recuerdo lograban desvanecerlos.

Empezó a perdonar al demonio, no quería sentir ese horrible rencor nuevamente, en ella no cabía el odió, lo dejo observarla a la distancia y más cuando Ángeles que parecían ser dulces intentaron atentar contra la vida de lo que estaba creciendo dentro de su vientre.

Ella no quería eso, a pesar del dolor le tomo cariño y sentía una emoción por traer una vida al mundo.

Pero al finalizar esa guerra lo híbridos estaban siendo exterminados uno por uno, ella estaba asustada.

Así que dejo que el demonio se acercara con la condición de no ser lastimada ni ella ni su bebé.

El demonio protegía a la mujer sin condición alguna, ahora ella formaba gran parte de su vida.

Cuando el pequeño nació, noto lo idéntico que era a él, sus ojos con ese único color miel, su piel morena y brillante y sus mismas facciones ecepto por su cabello era un poco más claro, sonrió sinceramente al tenerlo en sus brazos, noto que a pesar de tener las mismas facciones era un poco más delicadas dando la apariencia de un pequeño Angelito singular.

No sé parecía mucho a su madre quien al contrario su cabello era un castaño muy claro una piel extremadamente blanca y ojos grises y grandes.

El demonio con miedo a ser echado de esa casa nuevamente vio a la mujer, ella parecía dormir, estaba cansada, y no dudo en quedarse a cuidar al pequeño.

Jamas gano su amor ni lo ganaría, él lo sabía muy bien, pero era feliz con recibir su perdón, el pequeño niño fue llamado Kim Taehyung al igual que él.

Aunque esa pequeña felicidad no duro mucho, después de todo el era un demonio incapaz de tener una familia feliz y su linda compañera una híbrida junto a su hijo.

Su existencia era una molestia para dios.

Es por eso que corría peligro.

Sabían bien que él no viviría para contarlo.

Gracias por leer.

Faltan un aproximado de máximo diez capítulos para que esto finalice.
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