Me despierto con pereza sintiendo algo debajo de mi cuerpo, el cuál me causa mucha incomodidad, por un momento recuerdo que Sansa está acá y tal vez la este aplastando, pero es algo muy pequeño y bueno ella es realmente  pequeña pero a ese extremo no llega, tanto asi no.

Noto que es mi teléfono y levanto mi trasero para sacarlo rayos, al menos el pobre sigue con vida.

Sansa no se encuentra en mi habitación, y tengo el presentimiento que está en mi cocina ya que, me da el olor a pan quemado.

Me levanto con la pereza del mundo, creo que en mi otra vida probablemente según mis características sería un perezoso, me muevo arrastrando mis pies y doy un vistazo rápido por la puerta antes de dirigirme al baño y efectivamente es mi amiga quien está en la cocina, supongo que si la dejo sola unos minutos mientras me baño no me incendiaria mi departamento.

                           ● ☆ ●

Afortunadamente mi pequeño departamento sobrevivio a una Sansa concinando, yo también pude sobrevivir a su comida que no estaba nada mal, ella sientiendose mucho mejor que ayer decidio marcharse en el transcurso de la mañana y ponerse al día con sus tareas pendientes.

Me encuentro sentada justo en la orilla de mi cama haciendo absolutamente nada, me dió por ver  una chancleta mordida y vieja que traje de casa de mis padres, me traslado a través de ella en pensamientos súper imaginarios, imagino de cómo sería mi vida en otro país, o siendo una actriz sexy o siendo atropellada por un chico sexy Ahs, tantas cosas que nuestras mentecillas pueden imaginarse, estoy segura que si fuera dicho eso frente Austin lo fuera tomado doble sentido rápidamente.

Tras imaginarme cosas que seguramente no me pasaran en ningún momento de mi catastrófica vida, decido no ser vaga y salir a comprar algo para mí despensa, ya que solo tengo agua y tal vez un pan tieso o mordido de alguna rata. duro mas de lo que pretendía en el baño y otro rato más al arreglarme, con arreglarme significa volver a sentarme en la orilla de mi cama pensando en que ponerme solo para ir al centro, termino por colocarle unos jeans rasgados y una camiseta con un logo de Nirvana, una de mis bandas favoritas.

Ya son más de las tres de la tarde cuando salgo con mis auriculares puestos, pasando rápidamente por la casa que hace pocos días descubrí que vive uno de los chicos de los Reyes, mi mente viaja a ese día  Uuh que pesados.

Tras comprar lo necesario para sobrevivir otras semanas más, paso por una tienda que llama mucho mi atención, específicamente una librería. Me adentro en ella y solo se encuentran pocas personas las cuales no le prestó mi valiosa atención, me dirigo con el dolor de mi alma a los libros que deseo y anhelo Tu puedes con esto Annie, Me digo a mi misma ya que, osea es un inmenso dolor saber que no saldré con ninguno de ellos en mis manos cada uno ellos cuesta la mitad de lo que vale mi departamento, ja, cosas de la vida.

Sigo caminando por los pasillos viendo perfectas hermosuras y dañando a mi pobre corazón, libros que no podré llevarme por mi escaso dinero, me llevo una mano a mi pecho sabiendo que no puedo disfrutar al cambiar las hojas o doblar alguna para saber en qué capitulo me quede Oh mi corazón. Dejo mis delirios y drama al sentir una presencia a mi lado, la cual no me molesta siquiera en voltear y ignoro siguiendo en lo mío pero al notar que se pega más a mi lado, se torna incómodo, pero ignorando a quien sea que está a mi lado sigo viendo a los amores de mi vida, de inmediato mi mano va a un libro que llama mi atención y justo en el momento que voy a tomarlo otra mano llega a la meta primero que la mía, rápidamente volteo frunciendo el ceño y veo a esa persona que se atrevió a tomar mi libro, vale no es mío, pero estoy segura que yo lo ví primero. Me llevo una mega sorpresa con la persona que encuentro justo a mi lado y muy pero muy cerca, Hola policía invaden mi espacio personal.

Me quedo intacta, no sé cuál es mi cara en esto momentos, pero yo solo me he quedado como una estatua  mirando fijamente y sin apartar la vista, wow cuánta belleza puede a ver en el mundo, no exagero y realmente no me esperaba este reencuentro, y mucho menos en la manera que se quería llevar mi libro que no es mio pero ese no es el punto, capaz posiblemente solo yo recuerde su existencia aunque tampoco es fácil ignorarla. Salgo de mi trance soltando unas simples palabras, esas palabras que han dado vueltas desde ya hace un tiempo en mi mente.

—  Chico lectura — digo finalmente sin dejar de mirarlo a sus ojos fijamente.

Hooooolaaa personita que se toma su valioso tiempo para leer mi historia, gracias por seguir haciendolo, a pesar de mis desapariciones. Seguiré actualizando  poco a poco esto es lo realmente me ayuda a despejar mi mente y adoro hacerlo, pese a que me cuesta en ocasiones. Saluuxx2

Abrazos de oso🐻