Todos se presentaron con Felix.

Con las mejillas enrojecidas y apunto de colapsar,
afortunadamente para ellos el dueño de la casa era la
amabilidad en persona. No cuestiono nada y les permitió quedarse a dormir en su departamento.

Ahora todos cenaban, se suponía que Minho cocinaría algo antes de que llegara Felix, pero dada la situación terminaron ordenando comida china de un restaurante con pocas opiniones positivas.

– Lamentamos los malentendidos y mentiras – Se volvió a disculpar Chan – Y agradecemos su hospitalidad – Felix miro al alfa esbozando una sonrisa.

– No hay de que, Hyunjinnie me aclaro todo – El mencionado tomo su mano por encima de la mesa – Sus amigos siempre son bienvenidos aquí.

– Que lindo – Chilló Jeongin – Me mudare aquí.

– Ni lo pienses – Siseo Hyunjin provocando que Jeongin le sacara la lengua y Felix riera bajito.

– ¿Vivirán juntos? – Pregunto Changbin de pronto, Felix miro a su novio, aún había una conversación pendiente.

– No quiero separarme de mi omega – Dijo sin soltarlo – Y ambos lo hablamos, queremos vivir juntos y planear una vida normal.

La mesa se hundió en un silencio abrumador.

Ninguno decía nada, solo se dedicaban a mirar a la pareja.

Como si a estos les hubiera salido otra cabeza.

– ¿A que te refieres?

– Voy a dejar el equipo – Sus amigos abrieron los ojos
sorprendidos, sin embargo, antes de que pudieran comenzar a atacarlo con sus preguntas, Hyunjin volvió a hablar – No quiero poner la vida de mi novio en peligro, en verdad que es traumatizante.

– Pero... ¿Dejar el equipo? – Pregunto Minho por todos.

– Creí que éramos una familia – Murmuró Jeongin.

Felix se hundió en su silla, a pesar de haberlo hablado con anterioridad se sentía incómodo.

– Podremos ser amigos aún – animó Hyunjin.

– No puedes dejar el equipo Hyunjin – Dijo Seungmin.

– ¿Por qué no?

– Creo que nos estamos precipitando – Chan intento
calmar la situación, sin embargo, Seungmin se puso de pie.

– Porque... – mordió su labio inferior y suspiro – Precisamente estaba pensando en hacer lo mismo – Lentamente volvió a ponerse los pies.

– ¿Tú también? – Minho miro a su novio esperando que interviniera, pero Chan estaba igual de sorprendido que él.

– ¿Por qué todos quieren irse? – Jeongin dejo caer sus mejillas sobre sus manos.

– Seungmin, ¿Por qué? – Changbin lo miró visiblemente afligido, Seungmin no le había comentado nada al respecto.

– Chan podrá encontrar un remplazo para entonces –
Volvió a decir Hyunjin, pero Felix apretó su mano
tratando de llamar su atención. No funciono.

– Tal vez pueda hacerlo – murmuro Chan – Pero... ¿Qué haré si no lo consigo? Ambos son de los mejores cadetes que hay.

– Además – Jeongin golpeo la mesa – Hyunjin, tus amas golpear alfas y Seungmin adora ser cruel y despiadado. ¿Por qué quieren irse?

Felix miro a su novio en silencio, el alfa lo miro
igualmente pero solo por un momento pequeño.

– No quiero que le hagan daño – murmuro.

– Hyun – llamo el omega, pero nuevamente fue ignorado.

– Es una decisión tomado chicos, lo lamento – Jeongin suspiro frustrado reclinándose en la silla.

– Hyun...

– Podremos tomar medidas de seguridad – Interrumpió Minho – No tienen por qué marcharse.

– Piénsalo bien Hyunjin, te tomo más de una década llegar donde estas, ¿En verdad lo tiraras a la basura por un mal episodio? – El alfa apretó la mano del omega al escuchar a Chan.

– En las misiones Felix podrá quedarse en la base –
Hyunjin miro a Changbin, pero este solo sonrió
alentadoramente.

– Podremos solucionarlo – Dijo Jeongin igual de sonriente – Yeonjun es un maldito enfermo y no tiene que repetirse las cosas.

Hyunjin miro a Felix.

Amaba su trabajo, le gustaba golpear a personas realmente malas, ayudar a los desprotegidos y sentir que hacia algo bueno por el mundo.

Pero amaba mas al omega rubio, el pensamiento de no correr con la misma suerte y perderlo, le paralizaba el corazón.

– No tienes que hacerlo – Le dijo el omega sonriéndole con tranquilidad, Hyunjin apretó su mano con todavía mas fuerza – No te preocupes por mí, estaré bien.

– Bonito...

– Tus amigos te necesitan Hyunjin, tu necesitas a tus amigos cerca y no quiero ser la razón por la que te conviertas en un tipo aburrido – Río – Haré lo que ustedes me digan que haga, si hay peligro, no causaré problemas.

El alfa lo miro.

Lo miro hasta que esos hermosos destellos que el rubio tenia por ojos lo cobijaron con una manta suave y cálida, una manta llamada cariño, porque ver los bonitos ojos del omega lo hacían recordar el propósito de su existencia.

Hacer el bien.

– No sobrevivirías a un trabajo común Hyun, no te gustan las ordenes – El alfa sonrió igualmente – Confía en mí, todo saldrá bien.

Miro a sus amigos que esperaban impacientes su respuesta.

– Bien seguiré dentro – Los demás comenzaron a saltar y gritar emocionados, incluso le lanzaron un par de besos al omega rubio – Pero solo si Seungmin también lo hace.

– Nunca dejaras de ser un idiota – masculló – No puedo hacerlo.

– ¿Por qué no? – Cuestiono Changbin – No nos habías dicho nada, ahora lo sueltas de sorpresa.

– Por favor Seungmin – Pidió Jeongin juntando ambas manos frente a él.

– ¿Qué es lo que te preocupa? – Chan lo miro con el ceño fruncido.

– Estoy en espera.

Nuevamente el apartamento entero se quedo en silencio, incluso Kkami dejó de beber de su boul.

– ¿A quien estas esperando? – Pregunto curioso Jeongin – ¡¿Aceptaste otro empleo?! – Seungmin frunció el ceño a la vez que gruñía.

– ¡Tarado estoy embarazado!

Felix tuvo que sostener la otra mano de Hyunjin para que este no cayera de la silla, Chan y Minho se vieron sorprendidos, la mandíbula de Jeongin casi estaba en el piso.

Y Changbin solo estaba analizando las palabras del omega, se había perdido desde "estoy en espera" estaba estático.

– ¿Tú? – titubeo Minho.

– ¿De quién? – Completo Chan.

Seungmin se hundió asiento, en verdad había planeado decirle a su alfa de una manera única y especial, pero Jeongin siempre lo sacaba de sus casillas.

– El gato infernal va a tener un bebé – Dijo Hyunjin a nada de reírse, sin embargo, Felix lo golpeó en el estómago.

– Cállate Hwang Hyunjin – siseó Felix.

– ¿Vas a tener un bebé? – Jeongin sonrió enormemente – ¿Y quién es el padre?

– Que les importa – Contestó de mala gana.

– Seung... – Tartamudeo Changbin, por fin había vuelto en sí – ¿Por qué...?

– Jeongin arruina todo – mascullo nuevamente – Me entere hace un mes – Dijo en un tono mas bajo, cerciorándose que solo el alfa lo escuchara.

Changbin comenzó a contar con los dedos.

Las fechas coincidían.

– ¡Fuiste a una misión sabiendo que estabas embarazado!

– ¡No me grites!

– ¡Es nuestro hijo Seungmin !

– ¡¿Qué?! – Grito el resto al unisonó (a expresión de Felix quien solo se cubrió los oídos), como si se hubieran puesto de acuerdo para soltarlo en el momento exacto.

Seungmin miro al alfa con el ceño fruncido, lo había arruinado por completo, Pero al demonio todo.

– Nos casamos hace cinco años – Confesó al fin, Felix no pudo evitar que Hyunjin cayera de la silla, Minho cubrió su boca con sorpresa mientras que Jeongin y Chan se miraron cómplices.

– ¡¿Cinco años?! – Recalcó Minho en lo que Hyunjin se ponía de pie – ¡¿Por qué no lo dijeron?!

– Cálmate Minhonnie – Chan le sonrió apacible mientras le sobaba la espalda.

– ¡¿Cómo voy a calmarme?!

– Seungmin no quería juntar lo laboral con el trabajo, por eso lo mantuvimos en secreto – Explicó Changbin.

– Me va dar algo – Exclamó Minho mientras limpiaba su frente con una servilleta.

– ¿Ustedes dos van a ser padres? No cabe duda que dios castiga a los más inocentes – Se burló Hyunjin – Una mamá hijo de satanás y un padre que se la pasa en la luna.

– ¿Quieres quedar otra vez en silla de ruedas? – Amenazó Seungmin mientras empuñaba un tenedor.

– No puedo entender como pudieron mantenerlo en secreto, pero... Felicidades a los dos – Dijo Chan – Claro que puedes tomarte los días que quieras Seungmin .

– Un bebe – Chilló Jeongin – Que lindo, lo cuidaré todos los días, lo llenare de regalos y le enseñare como defenderse.

– Es una buena noticia después de todo – Sonrió Minho – Muchas felicidades chicos.

– Es un experimento muy extraño, pero felicidades – Dijo Hyunjin fingiendo desinterés, aunque por dentro fuera un tío emocionado.

– Idiota – masculló el omega, aunque dejo el impulso de iniciar una pelea al sentir la mirada de su alfa sobre él.

Estaba sonriendo, pero era realmente una sonrisa enorme y preciosa.

Las mejillas del omega se tornaron color rojo por ese
pensamiento.

Quería decirle tantas cosas, besarlo hasta que ambos se
hartaran el uno del otro, dormir y despertar juntos.

Realmente era un alivio el hecho de no esconderse más, así Changbin ya no tendría que ir con Hyunjin a esos bares de omegas y Seungmin podría besarlo y abrazarlo aún el trabajo.

Porque ese siempre había sido su mayor anhelo.