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2: Una amante de los clásicos

Dedicatoria #1: Fue algo sencilla para mi gusto. Eso sí, con toda la muestra de ingenuidad que mantenía en ese momento.

Eres mi cliché.

No sé cuándo te convertiste en eso. Se supone que solo me mirabas con altivez, con sorna, con superioridad. Admito que quizá si le ponía algo de interés a nuestras miradas furtivas, pero, aunque trataba de mantenerla siempre ganabas, tu temple es tan fuerte. Sin embargo, cambio mi forma de verlo, no sé desde cuando fue, pero comencé a darle más importancia, comencé a sugestionar, a sobre pensar en pequeñas y tontas cosas que nunca vas a saber, como por ejemplo la sensación extraña que una vez al mirarte se concentró en mi pecho. Y la reconocí, no sentía algo así en mucho tiempo, y me asuste, fue a partir de allí que me dio temor enfrentarte y comencé a evadirte, según la ley de atracción funciona increíble para atraer, en el fondo deseaba que me buscaras, deseaba que se ablandara el semblante frio que tenías.

Por eso, es por eso por lo que eres mi cliché.

Nunca he sido buena para disimular, para esconder mis emociones, ¿de qué me servía? Pero a la vez no tenía sentido, después de todo no iba a esforzarme porque las cosas entre ambos salieran bien, era lo de menos, pretendía que te olvidaras de mi presencia, me ignoraras y te alejaras a tiempo, para que yo no recurriera a sacarte a las fuerzas. No le tenía miedo a una presunta cercanía, sabría que no ocurriría de ninguna forma y escenario. Y no me equivoque, eso me aliviaba, mi instinto era fuerte, pero pocas veces le hacía caso.

Fingir demencia me toco, no me hacía gracia, hubiera sido muchísimo mejor hacer y deshacer como lo hacía con el ultimo que me gusto, pero no, contigo no podía permitirme eso, aunque admito que estoy en un punto donde ya no tengo ánimos de escapar de lo que siento...

De lo contrario, creo que lo que siento ya ve hora de escapar de mí.

Son épocas a las que le hago caso omiso, en el fondo no quiero nada, si necesito autosabotearme lo haré, porque sé que de este tipo de cosas nunca sale algo bueno.

Es cierto, jamás te tuve fe, fuiste capaz de hacer mi mundo girar apenas te conocí, me dabas unas golpizas irónicas por parte del destino, pero no permitiría que fueras mi karma, no iba a intentar nada, estaba cansada de intentarlo con gente que si se lo había ganado ¿Por qué contigo sería diferente?

En el lugar, en la posición donde estaba no existía el modo de abandonar esas reglas de oro que me propuse cumplir si quería seguir a flote, no quería más olas de inestabilidad.

Me conociste en un momento donde no soy capaz de ofrecer a alguien algo que no pidió, simple, jamás he sido un campo de flores que viene con el único propósito de embellecer la vida de los demás con su presencia. No voy a dejar que se consuma mi luz en un lugar donde no pueden encenderme de vuelta, soy sumamente egoísta y eso me ha servido de mucho, no miento, a veces me quedo con la frustración de no ceder ante mis ganas.

Pero no pienso perder, perder parece no significar nada en la vida de las personas, porque para ellos todo es ganar, ¿sabes lo difícil que es ganar para mí? Las oportunidades me llueven, es cierto, pero ganar para mi es esforzarme, es darlo todo por una causa aparentemente insalvable, para mí lo fácil viene con defecto y a veces eso es con lo que me quedo. Entonces, perder para mi es algo que no me permito, porque me distrae de mi verdadero objetivo.

Como tú, sal de mi vida ya, eres libre, mi mente nunca decidió atarte para no correr con el riego de luego ser yo a la que le duela mandarte a volar.

Me gustas, malvado idiota, pero no quiero escribir una historia contigo, no quiero creer otra vez en las personas, no quiero dar oportunidades, no quiero retractarme, quiero estar en lo correcto siempre.

Quiero tener esa sensación gratificante de que no haberte elegido, al final, fue lo correcto. 

NOTA DE AUTORA:

Puedo fingir que nada está pasando. Puedo fingir que nada...

Aún no sé si fue lo correcto chic@s

¿Les ha sucedido que su corazón y mente no conectan? ¿Qué de su boca salen palabras que ni siquiera el lenguaje corporal puede reconocer como vuestras?

A mí me sorprende la capacidad que tengo para mentir y a la vez no tener ni una pizca de disimulo.

¿Los subtítulos en el rostro pueden desactivarse como las notificaciones en el celular?

Es que, sin dudas, me molestan.

¡Aquí los que detestan las notificaciones!

... Y los que tienen amores que no los llevan a ningún lado.

Consejo: La teoría del etiquetamiento es verdadera y muy peligrosa, nadie es igual a nadie y ninguna señal podrá condenar tu destino, solo haz caso a tu intuición.


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