Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Song 014

Song 014

Sugar, We're Going Down-Fall Out boy

"Am I more than you bargained for yet?
I've been dying to tell you anything
You just say, 'Hey'
I'm a rebel just for kicks now
I've been feeling it since 1966 now"

La casa estaba llena del cálido aroma a galletas recién horneadas y pino navideño. Emma estaba sentada en el sofá junto a Rowley, quien tenía el brazo enyesado después de haberse lastimado jugando en la nieve con Greg, su mejor amigo.

-Listo, ahora sí tienes el yeso más épico de todos -dijo Emma, terminando de pegar pequeñas calcomanías navideñas en el yeso blanco-. Los renos y copos de nieve son una obra de arte.

Rowley sonrió mientras observaba su brazo decorado.

-Gracias, Emma. Aunque Greg diría que se ve demasiado cursi.

-Bueno, él no se rompió nada, así que su opinión no cuenta -respondió Emma con una sonrisa divertida.

El sonido de pasos acercándose interrumpió el momento. Robert, el padre de ambos, entró al salón con una expresión seria en el rostro. Emma lo notó de inmediato y dejó los marcadores a un lado.

-¿Qué ocurre, papá?

Robert miró a Rowley, luego a Emma, y cruzó los brazos.

-Rowley, ¿puedes dejarnos solos un momento?

Rowley miró a su hermana con curiosidad, pero asintió y salió de la habitación, llevándose con cuidado su brazo decorado.

-¿Es sobre Rodrick, verdad? -preguntó Emma antes de que su padre pudiera decir algo.

Robert asintió lentamente.

-Emma, sé que crees que Rodrick es un buen chico, pero no puedo ignorar lo que ha pasado. Primero, Rowley se lastima mientras juega con el hermano de Rodrick, y luego resulta que él estuva jugando al chef conrigo cuando ocurrió. No quiero que te arrastre a su mundo.

Emma lo miró, confundida.

-Papá, Rodrick no tiene nada que ver con lo que pasó. Él ni siquiera estaba jugando con ellos, y Rowley se lastimó porque estaba jugando. Esto no tiene nada que ver con Rodrick.

Robert suspiró, como si quisiera encontrar las palabras adecuadas.

-Emma, escucha, Rodrick no es alguien en quien pueda confiar para que cuide de ti. Es inmaduro, rebelde, y no tiene ningún plan para el futuro. Me preocupa que estés dejando que alguien como él te influencie de la manera equivocada.

Emma se cruzó de brazos, sintiendo una mezcla de frustración y tristeza.

-Papá, Rodrick no es perfecto, lo sé, pero no es justo que lo juzgues solo por lo que crees que es. Me hace feliz, y sé que me cuida a su manera.

Robertnegó con la cabeza.

-Él no es lo suficiente para ti, Emma. Quiero que lo termines antes de que te arrastre con él.

Emma sintió un nudo en el estómago, pero su determinación creció.

-No voy a hacer eso, papá. Rodrick me respeta, me apoya, y sí, es diferente, pero no necesitas entenderlo. Yo lo elegí porque él me hace feliz.

-¿Y qué pasa si él te lastima, Emma? -insistió Robert, alzando la voz levemente-. Yo quiero protegerte de eso.

Emma respiró profundamente para calmarse antes de responder.

-Rodrick no me lastima, papá. Él siempre está ahí para mí. Y sé que no es lo que tú esperabas para mí, pero no voy a dejarlo solo porque a ti no te guste.

Robert la miró durante unos segundos, como si estuviera procesando sus palabras. Finalmente, dejó escapar un largo suspiro.

-Solo quiero lo mejor para ti, Emma. No quiero que cometas un error.

Emma suavizó su tono, dando un paso hacia él.

-Lo sé, y agradezco que te preocupes por mí, de verdad. Pero necesitas confiar en mí. Yo sé lo que estoy haciendo.

Robert asintió lentamente, aunque su incomodidad seguía presente.

-Espero que tengas razón.

Emma lo observó salir de la sala y luego se dejó caer en el sofá con un suspiro. Unos segundos después, Rowley asomó la cabeza por la puerta.

-¿Estás bien?

Emma le sonrió, tratando de aliviar la tensión.

-Sí, no te preocupes. Solo un poco de drama navideño.

Rowley entró en la sala con su yeso decorado y se sentó a su lado.

-Papá solo quiere protegerte. Es un poco torpe al decirlo, pero sé que le importas.

Emma lo miró y pasó un brazo por encima de sus hombros.

-Lo sé. Pero también quiero que entienda que puedo tomar mis propias decisiones.

Rowley asintió, y ambos se quedaron en silencio por un momento, observando las luces del árbol de Navidad parpadeando suavemente en la esquina de la sala.

Era tarde, y la casa estaba tranquila, con el árbol de Navidad iluminando suavemente el salón. Emma estaba acomodando las cajas de adornos cuando sonó el timbre.

-¡Yo abro! -gritó Rowley desde el sillón, donde descansaba con su brazo enyesado.

Con algo de torpeza, se levantó y abrió la puerta. Ahí estaba Rodrick, con su habitual chaqueta de cuero y una sonrisa despreocupada. Sostenía una bolsa de regalo en la mano.

-Hey, pequeño cuñado. Esto es para ti -dijo, lanzando la bolsa hacia Rowley sin mucho cuidado.

-¡Oye! -protestó Rowley, atrapándola con su brazo sano-. Gracias, supongo.

Sin esperar respuesta, Rodrick pasó junto a Rowley y entró al salón, sus ojos buscando a Emma. La encontró inclinada junto al árbol, colocando cuidadosamente un adorno.

-Hola, hermosa -dijo con esa sonrisa que siempre parecía desarmarla.

Emma se giró, sorprendida, pero sonrió al verlo.

-¿Rodrick? ¿Qué haces aquí?

Él se encogió de hombros, como si su visita fuera completamente casual.

-Solo vine a ver cómo estaba tu hermano con su súper brazo navideño... pero, ya sabes, también quería verte.

Emma puso los ojos en blanco, aunque no pudo evitar sonrojarse un poco.

-Claro, seguro. Estoy segura de que tu prioridad era Rowley.

-¡Oigan! -se quejó Rowley desde el sofá, abriendo la bolsa de regalo y sacando una figura de acción envuelta descuidadamente en papel de periódico-. ¿Esto es todo?

-Sí, sí, no te quejes. Es edición limitada... probablemente -respondió Rodrick sin siquiera mirarlo, su atención completamente enfocada en Emma.

Emma caminó hacia él con los brazos cruzados, tratando de mantener la compostura.

-Rodrick, mi papá está en casa. No es buena idea que te vea aquí.

Rodrick, despreocupado, solo se encogió de hombros y sonrió.

-Oh, vamos, tu papá me adora.

Emma soltó una carcajada sarcástica.

-¿Adorarte? Rodrick, ¿olvidaste la vez que intentaste impresionarme con esa serenata y él te corrió con la manguera?

Rodrick frunció los labios, como si estuviera luchando por no reírse, y el recuerdo de aquel día inundó su mente.

---

Flashback

Era una cálida noche de primavera, y Rodrick estaba de pie bajo la ventana de Emma, sosteniendo su guitarra. Vestía su chaqueta de cuero y botas desgastadas, luciendo como el rebelde encantador que siempre era. Emma lo miraba desde su ventana con una mezcla de incredulidad y diversión.

-¿Qué estás haciendo? -susurró Emma, tratando de no despertar a sus padres.

-Dándote una serenata, como en las películas -respondió Rodrick, rasgueando un par de acordes desafinados antes de cantar con entusiasmo-. "Emma, eres más dulce que un pastel de cumpleaños..."

Emma se tapó la cara, riéndose por lo bajo.

-¡Cállate! Vas a despertar a todos.

Pero Rodrick, como siempre, no se dejó intimidar.

-"Y tu sonrisa hace que el mundo se detenga..."

Antes de que pudiera continuar con su improvisada balada, la puerta principal se abrió de golpe. Robert, salió con una expresión de furia y una manguera de jardín en la mano.

-¿Qué demonios crees que estás haciendo aquí a esta hora?

Rodrick dio un paso atrás, levantando las manos como si estuviera siendo arrestado.

-Solo... expresando mis sentimientos.

Robert no le dio tiempo de reaccionar. Encendió la manguera y un chorro de agua fría golpeó a Rodrick en el pecho.

-¡Lárgate antes de que llame a la policía!

-¡Está bien, está bien! Ya me voy -gritó Rodrick mientras intentaba proteger su guitarra de la cascada de agua.

Desde la ventana, Emma intentaba contener la risa mientras veía cómo su novio huía empapado hasta la camioneta destartalada de los Heffley. Antes de subirse, Rodrick la miró y gritó:

-¡Valió la pena por ti!

---

Fin del flashback

De vuelta en la cocina, Emma cruzó los brazos, sonriendo con ironía.

-Sí, claro. Mi papá te "adora".

Rodrick se pasó la mano por el cabello, fingiendo indignación.

-Primero que nada, tu papá no apreció mi arte. Segundo, creo que exageras. Fue solo una pequeña diferencia de opiniones... y de temperatura.

Emma se echó a reír, negando con la cabeza.

-Rodrick, eres imposible.

-Lo sé, pero también soy persistente. Y, admitámoslo, eso fue algo romántico.

-Romántico no es la palabra que usaría para describirlo -bromeó Emma, aunque no pudo ocultar el brillo en sus ojos al recordarlo.

Rodrick sonrió, inclinándose ligeramente hacia ella.

-Bueno, valió la pena. Porque, después de todo, aquí estoy, y sigues dejándome entrar.

Emma negó con la cabeza, aunque su sonrisa lo decía todo.

-Por ahora. Pero si mi papá entra y te encuentra, dudo que uses otra vez esa excusa.

-Tranquila -respondió Rodrick, guiñándole un ojo-. Siempre tengo un plan de escape.

Ambos se rieron en voz baja, mientras Rodrick, como siempre, lograba hacer que cada visita suya fuera tan caótica como inolvidable.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro