En aquella época, donde sólo torturar, asesinar y vencer para así demostrar quién era el más fuerte parecía ser lo único que importaba.

Para la desgracia de Yūgen, cayó completamente enamorada de quien era su enemigo, y que en el pasado fue el mejor amigo de su hermano, Madara Uchiha. Él era un hombre de carácter, fuerte, estratega, varonil y un espíritu de lucha enorme, aun así, en el fondo, ese hombre no sabía el porqué de esa guerra eterna y su único escape eran esas palabras de aquella desconocida, las palabras formaron un lazo que quizá nunca debió nacer.

Porque enamorarse de él fue un error de ella y desarrollar sentimientos por un desconocido fue un error de él.

¿Pero quién iba a pensar que esa carta traería tales consecuencias? No, no fue eso... lo que provocó todo esto fue verlo. Quizás sea cierto y ese hombre sólo sea sinónimo de destrucción.

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[¡Aquí tenemos nuevamente a Dear madara! ¡Gracias por leer, eres un sol! Si eres una de las personas que leyeron esto antes, sabrás de antemano que esto no era el primer capítulo como tal, pero enseguida estará con ustedes esa parte completamente nueva, con amor —Albysoo]