Narra Emily.

Saqué vacaciones en la concecionaria. Empezaba hoy

- Ya voy.

Me acomode mi pijama y abrí la puerta. Encontrándome con un conejo de peluche gigante.

- ¿Emily Moledo?

- Si, soy yo.

- Firme aquí por favor.

El chico me dio una hoja.

- ¿Quien lo envió?

Le devolví la hoja ya firmada.

- No se. Me dijeron que se lo entregue y ya.

Asentí.

- Gracias.

Sonreí amable y agarré como pude el peluche para entrarlo.

Despegue un sobre de este y lo abrí. Sacando una carta.

"Querida Emily:
Ya lo se. Estoy molestando de nuevo. Pero realmente necesito aunque sea una última noche contigo. Se que no quieres meterte en mi relación y lo entiendo. Pero aunque sea un último beso, abrazo, mirada, algo.
Mira, he hecho una reserva en un lugar sólo para los dos... Iré a la puerta del edificio a las 22:00. Si bajas, pasamos la noche juntos. Si no lo haces, me alejaré por completo y no volveremos a vernos nunca mas...
Por cierto, te regalo ese peluche. Se que el otro día lo viste y te gustó así que te lo regalo. Conservarlo, quizás sea el último regalo que te doy...
Te amo.
Juan..."

Guarde la carta junto al resto y me quede pensativa.

¿Que hago?