El tiempo ha pasado.

Las cosas han cambiado mucho.

Demasiado, diría yo.

- ¡Federico te bajas de ese árbol!

- ¡No tío!

Rode los ojos y traté de treparme al arbol.

- Te vas a partir la cabeza, baja.

Manuela le gritaba desde abajo. Llegue y lo agarré.

- Te vas a hacer un mapa en el cuerpo como yo mientras sigas así. Tres años de terrible.

Bajé despacio y se lo di a mi hermana.

- Tu hijo es terrible.

- Lo se.

Reí y me alejé de mi familia.

Como todos los días desde hace cuatro años.

"Emily" "Adam" ¿Quienes son?

Me senté en el césped, mirando al cielo.

Estos años, decidí volver a Colombia. Con mi familia. Hermana, sobrino, padres y hasta mi tía.

¿Que pasó con Martina?

Pues nada... Y a la vez todo.

Ella me engañaba. Nos estamos divorciando. Hace unos meses se fue a vivir con su novio y no hemos vuelto a hablar.

Me acosté en el césped. Aún los dos nombres resonaban en mi cabeza. Después del accidente, recuerdo todo menos a esas personas.

Miraba las nubes. Era un día hermoso, aún así me sentía incompleto, raro.
Quizás sea la ausencia de Martina. Pues, después de 3 años casados no es muy fácil asimilar que ya no me pertenece.

Decidí entrar a casa y darme una ducha. Queria despejarme, quería salir. Si bien salgo a cada rato, esta vez lo necesitaba mas. Necesitaba alejarme un poco de todo lo que me rodea.

Me dispuse a buscar ropa. Cuando de repente cae una caja de mi armario y se abre.

Miles de papeles se esparcieron por el suelo.

- Mierda...

Me agache y los levante, dejándolos donde estaban. Entre medio de estos, cayó una foto de una chica. Tenia el pelo rapado, teñido de rubio.

Era una mujer muy hermosa. Los ojos color gris, o asi se veía por la luz. Una sonrisa blanca y sus pestañas definidas.

¿Que hago yo con esto?

Saqué un papel y lo desdoble para ver que tenía.

"Querida Emily..."

- ¡Emily!

Grite levantándome rápidamente.

- Emily...

Murmuré mas calmado.

Esto lo he escrito yo...

Empecé a revolver los papeles. Tenía que haber una carta sin leer. La que me dejó en el hospital.

Hasta que la encontré.

Estaba sucia, pero que mierda me importaba. Necesitaba leerlo.

"Juan Luis:
Se que quizá sea tarde cuando leas esto. Pero debes hacerlo.
Quiero que sepas que eres y vas a ser siempre el amor de mi vida. Y por ello, es tiempo de dejarte ir. Te casaste, formaste tu vida conmigo lejos de ella y eso está perfecto. Las pasaste por mi culpa, porque te hago daño. Y precisamente, quiero que dejes de sufrir.
Es muy probable que sea la última carta que escriba. Pues, pienso irme de Miami en unos días.
Quizás el destino nos junte y Adam te reconozca como su papá. Él crecerá bien, tranquilo. Ya dije que mi hijo no precisa un padre. ¡Pero adelante! Puedes encargarte de él a la distancia.
Ojalá y te recuperes pronto... Me alejo por el bien de ambos...
Te amo.
Emily"

La guarde y miré a mi alrededor.

Adam... Mi bebé...

Busque por todos lados algún contacto con ella, pero no lo encontraba.

Pues... Es hora de recuperar al amor de mi vida.

Tengo que buscarla. Necesito hacerlo.

Emily... Te encontraré.