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nine.

jimin duró una semana más sin salir de su habitación, su madre se encargaba de llevar la comida hasta su cama y esperar pacientemente a que acabará hasta el último bocado.

muchos dirían que estaba mal el que hiciera todo aquello con jimin, pero ella era su madre y lo amaba demasiado como para dejarlo pasar el dolor solo. jihyun lo acompañó un día más, y tuvo que volver a su jornada de trabajo normal puesto que nuevos inversionistas llegaban cada día y no queria acumular trabajo.

los amigos de jimin fueron a visitarlo, con la preocupación al máximo por no saber nada del rubio. pasaron la tarde con él para subirle el ánimo.

el día que jimin decidió que había sido suficiente sufrimiento por jeon, fue un domingo a media noche. bajó hasta la cocina donde escuchó a sus padres conversar, se enteró que jungkook había sido despedido y, por desgracia no sé había mudado del país, citando las palabras de su padre.

jimin respiró hondo tratando de no sentirse afectado.

cuando retomó las cenas con sus padres, les comentó su deseo de seguro estudiando su carrera en el extranjero.

"quiero olvidar lo que pasó. dejar el país un tiempo me ayudará a no pensé mucho en eso. "

sus padres lo apoyaron y una semana después, estaba frente al aeropuerto con su pasaporte en mano y despidiéndose de sus padres. le deseseon un feliz viaje y le hicieron prometer que llamaría todos los días.

jimin llegó a New York horas después, sonrió apenas salió del aeropuerto, estaba feliz de empezar de nuevo, si podría llamarse así. tomó un taxi hacia el hotel en el que su padre habaj decidido se hospedaría, le quedaba cerca de la universidad y era una zona tranquila. todavía no empezaría la universidad pero jimin había decidido llegar un mes antes para explorar Nueva York, a pesar de haber tenido muchos viajes familiares nunca habían tenido como destino Nueva York.

todos los días llamaba a su madre para contarle su día y enseñarle las fotos que tomaba con su cámara instantánea, en la primera semana la cinta se acabó y tuvo que comprar otra. cuando llamaba a su madre, pocas veces estaba su padre por lo que le dejaba mensajes personales, audios preguntando por su día y fotos, jihyun le respondía cada una de ellas.

jungkook se enteró por tzuyu, la amiga de jimin, que este se había marcado a Nueva York a continuar con sus estudios, su corazón dolió pero sintió felicidad por él, porque tenía merecido empezar de nuevo.

el tiempo pasó rápido, mucho más rápido de lo que esperaba.

su día de graduación llegó así como su último día de estadía en Nueva York, sus padres lo ayudaron a empacar y volvieron juntos a Corea.

estaba de más recalcar que jimin había superado por completo el tema de jungkook, tuve terapias con una psicóloga y esta lo ayudo a entender muchas cosas, ya no odiaba a jungkook, lo había perdonado hace mucho y se había perdonado a si mismo.

volvió a Corea para empezar a trabajar con su padre, para ganar experiencia en el negocio y aprender estrategias que su padre se encargó de enseñarle paso a paso, sin prisas. jihyun aún tenía mucho tiempo por delante para ser el presidente de la empresa pero queria tener preparado a jimin para tomar su puesto, por si alguna situación desafortunada llegara.

jimin se mudó a un departamento que sus padres le dieron como regalo de graduación, su madre lloró y su padre no pudo estar más orgulloso de ver a su hijo ya casi realizado en la vida.

la tarde de un domingo, ese día que tenían libre del trabajo en la empresa, salir al cine como familia, vieron una película de comedia y fueron al parque a caminar mientras comían helados. por supuesto que alguien tuvo que aparecer en el campo de visión de jimin.

jungkook estaba sentado a metros de ellos, no se había dado cuenta de su presencia, estaba sentado con un hombre a su lado, tomados de la mano. jimin miro sus manos juntas por un rato, tragó saliva y para cuando quiso desviar la mirada, jungkook se había dado cuenta de que él estaba ahí, junto a sus padres.

se miraron fijamente, ambos tuvieron sus momentos juntos reproduciéndose frente a sus ojos como una cinta de película. la madre de jimin se dió cuenta y tomó el brazo de su hijo con fuerza, para tratar de hacerlo retroceder, jimin se opuso, quitó el agarre de su madre con suavidad. una sonrisa se ensanchó en sus labios y saludo a jungkook con sus manos derecha, importandole muy poco si era correspondido al saludo.

para su sorpresa, jungkook también le sonrió y movió su mano, saludándole. le dijo algo al hombre a su lado y se puso de pie, para empezar a caminar hacia jimin.

- jimin, vamos. - le dijo su padre.

el rubio negó, le dijo que estaba bien y caminó también hacía jungkook. estando de frente, los nervios se apoderaron de ellos.

- hola.

- hola jungkook. ¿cómo has estado?

- bien.. pero tú, ¿tu cómo has estado? lamento mucho lo de hace años, yo.. de verdad te amaba jimin pero espero ahora entiendas que era lo mejor para ti.

- ahora lo entiendo jungkook, por mucho tiempo te odié pero ahora entiendo todo y te agradezco por desear mi felicidad aún cuando ambos salimos lastimados. -jimin le sonrió pequeñito.

- gracias, escuchar esto me quita el peso que he llevado encima.

- ¿tu novio? - señaló con su barbilla al hombre que esperaba en la banca, mirándolos hablar.

jungkook giró para verlo un momento y luego volvió su vista a jimin.- si, mi novio. prometido si acepta mi propuesta. - susurró bajito, señalando su bolsillo dónde se marcaba una pequeña caja donde aguardaba un anillo de compromiso.

jimin cubrió su boca emocionado, observó sonriendo a jungkook y palmeo su hombro.

- seguro que lo hará.

- jimin.. si el acepta, me gustaría verte.el día de la boda.

- si me llega una invitación, ahí estaré, no lo dudes. ya te superé jungkook, no ibas a ser el centro de mi mundo por siempre. - bromeó, volteando sus ojos.

jungkook rio y asintió.

- te enviaré la invitación, gracias por todo, jimin.

- a ti, jungkook. nos vemos en unos meses, entonces.

- claro que sí, hasta luego.

se despidieron con un corto abrazo y volvieron con sus familiares.

los padres de jimin lo observaron preocupados.

- yaaa~ estoy bien, les dije que la terapia funcionó. - se quejó jimin.

- y me alegra que lo haya hecho.

jimin arrugó su nariz y se dió la vuelta para caminar hasta el auto, sus padres rieron por su actitud y lo alcanzaron para abrazarlo por los hombros.

entonces jimin supo que todo estaba bien ahora, era feliz sin tratos de por medio.




fin.

ahhh, lo que sufrí escribiendo casa capítulo de esta historia, no estoy conforme con la redacción pero algo es algo ;)

espero pronto corregirla y quedar conforme.

gracias por leer!!!!!

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