Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Lee Sabes pt.2

Una semana entera había pasado, Félix se la pasaba más con Jeongin y con Cris, Minho dejó de lado la investigación y Jisung odiaba solo hablar del tema, Yeonjun podía pasar algunas horas con ellos pero luego se perdía.


—No creen que Yeonjun pasa mas tiempo fuera que en la universidad— murmuró Minho, Jisung le dio una mirada asesina— lo siento ¿Dónde rayos estará Changbin?


—Se fue de viaje con su mamá porque lo de Seungmin le afectó mucho— comentó Jisung.


Luego un largo silencio entre los tres, no habían ocurrido muchos crímenes en esos días, algunos eran solucionados por Félix, alguno que otro mutante aparecía y eso solo avivaba las ideas de Félix de que Yeonjun era el culpable, decía que eran puntos exactos, que esos sitios eran donde había estado el pelirrosa pero Minho se negaba a aceptarlo y Hyunjin y Jisung ya no le dirigían la palabra.


Hartos de solo sentarse en la cafetería de la universidad los tres chicos comenzaron a caminar hacia algún lugar, Hyunjin extrañaba pasar tiempo con el de pecas pero a la vez lo odiaba por dudar de su mejor amigo, un debate estaba en su interior, sabía que Félix no era malo pero le molestaba que fuera tan testarudo con eso, Minho y Jisung hablaban algo pero Hyunjin estaba un poco perdido de eso.


Jeongin se apareció enfrente, llevaba una sonrisa, Hyunjin quería quitársela de un buen golpe pero el chico no lo merecía, no era malo, simplemente se conocieron de mala manera, igual le agradaba Jeongin por ser tranquilo y hasta un poco infantil.


—Hola chicos.


—Hola— murmuraron los otros tres.


—Hyunjin ¿crees que podemos hablar solo nosotros dos?


Minho y Jisung se alejaron un poco así que Hyunjin se quedó con el chico de negros cabellos que parecía un poco nervioso, como si sabía algo importante.


—Vamos a mi laboratorio un rato ¿te parece?


—Claro.


Recorrieron el campus de Ingeniería en silencio, Hyunjin no tenía ganas de hablar y Jeongin no era de hablar mucho cuando tenía algo serio que decir, entraron a un laboratorio viejo, habían pocas cosas, una computadora, un montón de cajas en la esquina izquierda y una pequeña ventana por la que entraba luz casi azul, Jeongin sacó una silla de una esquina para Hyunjin y se acercó por una propia.


—Tengo una teoría sobre Seungmin.


—No me digas que...


—No, Yeonjun no tiene nada que ver— dijo Jeongin antes de voltear a su computadora, revisó unos documentos y luego seleccionó uno en específico— encontré algo raro cuando jugaba con los servidores de la policía— Hyunjin lo vio raro— si me gusta jugar un poco ¿y qué?


—Nada solo que... es la policía.


—Créeme no tiene nada de raro— dijo acercando la imagen en la computadora— mira es un mapa de la ciudad pero hay algo que no me cuadra, hice que las maquinas pasaran registros de la geografía pero por alguna razón hay un punto en específico que no puedo ver.


Era un viejo almacén a las afueras de la ciudad, un poco cerca de donde encontraron el primer mutante.


—Y... eso no es todo, — acercó la imagen a otro sitio— este tipo compró hace poco ese lugar y desde entonces es el único que entra allí.


—A veces...


—Que no funcionan los sistemas por geografía y minerales— interrumpió Jeongin, Hyunjin asintió— no lo creo he revisado los registros previos y no había anomalías en ese punto hasta hace unos años e igual, antes era un laboratorio de Oscorp pero estaba normal.


—Y qué tiene que ver el hombre en todo esto?


—No lo ves? — gritó el menor pero se calmó cuando Hyunjin enarcó una ceja— lo siento, es solo que a veces creo que todos ven lo que yo veo fácilmente.


—Se nota.


—Bueno, dejando de lado eso, no sé por qué el haría esto pero creo que es porque fue parte de Oscorp, Xu Minghao era uno de los científicos más reconocidos dentro de la empresa, era casi el mejor de su clase y... recuerdas a un mutante?


—Claro, cual de todos veamos si conozco a sus nietos y sobrinos o cual doctor lo trajo a la vida.


—Ya no ironices tanto idiota— dijo el de cabellos negros— era uno con forma de rana ¿creo?


—Trató de matar a Félix lo recuerdo casi me lleva la mano.


—Bueno, resulta ser que ese era uno de los científicos de Oscorp, se llamaba ¿Kumbab Kuwa-Kuwamul? Ay ni siquiera puedo decirlo yo le digo Bam bam porque está bien raro el nombre— se quejó al trabarse la legua, Hyunjin sonrió— el caso es... que se relacionan Minghao era amigo de Bam Bam y ambos trabajaban en Oscorp hasta que tú mi querido araña amigo...


—Félix te dijo? — interrumpió Hyunjin, el de cabello negro asintió con una sonrisa cuadrada— sigue como sea.


—Hasta que se develó su corrupción y cayó así que supongo que quieren volver a formarla pero no sé que otra persona sigue, ósea... tenemos a Bam bam pero luego deberían haber más y eso no me ayuda mucho porque Seungmin... puede estar allí involucrado.


—Estás diciendo que Seungmin es un criminal.


—Su padre trabajaba en Oscorp, puede ser.


—El p-ad-dre de Seung-min?


—Si, Félix no quiere investigar así que te digo a ti que estás libre porque Lix está metido en que es Yeonjun aunque las pruebas solo son lo que dice y que al parecer se la pasa enojado.


—Crees que podamos ir a ese lugar que dices Jeongin? —preguntó Hyunjin, el de cabello negro lo pensó un momento.


—Tendría que pedirle permiso a mi papá para salir contigo.


—Pero ni que fuéramos a salir como novios no digas tonterías.


—No es eso, es que mi papá es complicado a veces y...— miró al techo tratando de pensar en lo que iba a decirle— me habían sacado de la universidad por meterle virus a los programas para no tener que recibir clases junto a mi amigo que ahora se fue a estados unidos así que papá no confía del todo en mí por eso lo digo.


—Eres todo un criminal enano.


—Ya sé, ¿si vas a decirle a papá?


—Bien en ese caso mañana en la tarde, pero necesito que lleves todo lo que podamos para la misión llevaré a Minho y a Jisung, nunca es bueno ir pocos.


—Bien.


Hyunjin salió de allí como si nada, buscó a Minho y Jisung pero los perdió, al parecer las clases ya habían terminado, tomó su celular tratando de llamarle a Jisung pero su celular solo tenía uno por ciento de carga así que no podía hasta cargarlo un poco. Tomó el metro en dirección a casa de Jisung, seguro estaba allí con Minho.


Tocó el timbre pero nadie abría, estaba un poco cansado, había caminado desde la entrada de la residencial gasta esa casa solo para que al final ni estuviera allí, una llamada le llegó, era Félix, estaba molesto con él pero contesto, si se apagaba el móvil podía culparlo de no hablar con el rubio más bajito.


—Hyunjin tengo la prueba contundente de que es Yeonjun te lo juro.


—Félix si ibas a llamarme para esa estupidez mejor no hubieras llamado.


Una foto le llegó, dentro de un almacén había lo que parecían cuerpos de personas y manchas rojas en las paredes, luego una foto de Yeonjun saliendo de allí y luego de nuevo una foto en la que se veía la cabeza de alguien sobre una mesa aunque por la oscuridad no se veía del todo bien.


—Entré pero me quedé atrapado no hay mucho oxigeno eso empeora y mi celular está a punto de apagarse ¿crees que puedas venir por favor?


—Mándame la direcc--


Y se apagó, la poca energía que le quedaba a su celular se fue, Hyunjin lo lanzo lejos, estaban perdidos, notó a Jisung acercarse con Minho mientras llevaban bolsas de supermercado.


—Minho dame tu teléfono.


—Lo de héroe no te dio dinero y ahora asaltas?


—Dame el maldito teléfono— se quejó, al quitárselo de las manos al de cabellos naranjas llamó a Félix pero no había nada, seguro su teléfono igual se había apagado— sabes el numero de Jeongin?


—No— dijo Minho— ¿qué te pasa?


—Félix está atrapado en un sitio sin aire y puede morirse en minutos ¿tu lo sabes Sung?


—No pero creo que Cris lo sabría.


—Tienes su numero?


—No.


Hyunjin tiró de sus rubios cabellos, estaba desesperado, buscó algo que le ayudara entre todas sus ideas, trepar edificios no le ayudaba, de todas formas no podía, volver a lo de Spiderman ni loco, mató a alguien la ultima vez, aunque no técnicamente, un poco de aire le hubiera ayudado, aire que Félix necesitaría si no se apresuraba a ir.


—Y qué hacía Félix?


Eso, Minho le dio la respuesta, tomó el teléfono de nuevo marcando un numero, aunque arriesgase todo lo importante era salvar al chico de pecas, marcó y empezó a esperar contestase, no hubo respuesta, de nuevo, nada.


—Maldita sea Yeonjun ¿dónde te metiste?


Marcó a Soobin, este no contestaba, una y otra vez hasta que alguien atendió y no precisamente Soobin.


—Qué quieres Hwang mocos Hyunjin.


—Yeonjun ¿dónde queda el almacén en dónde estabas?


—Qué?


—El almacén donde estabas hace veinte minutos o no sé cuánto— Minho sonrió pero no había gracia.


—Em, ¿para qué? Además ¿cómo lo sabes?


—No es importante ahora necesito la dirección. — tic tac, tiempo que se acababa al igual que su oxígeno.


—Es lejos y no creo poder enviarte la dirección, pero puedo llevarte si quieres.


—Claro ¿tengo que ir a casa de Soobin.


—si queda un poco cerca ven al edificio yo estaré abajo y vamos juntos.


Hyunjin colgó la llamada, estaba arriesgándose ,aunque dudaba Yeonjun tuviera algo que ver, estaba más que seguro de que Jeongin tenía razón, aunque las imágenes que envió Félix no eran lindas, apenas podía ver bien pero suponía que el de pecas estaría bien. Tomó un taxi en dirección al edificio donde vivía Soobin, allí lo esperaba Yeonjun.


—¿Para qué quieres ir?


—Es Félix, creo que le pasó algo por allá.


Claro, super llena de sentido la excusa.


—Entonces hay que apurarnos— dijo Yeonjun, subieron a un taxi que los llevó lo más cerca posible.


A lo lejos de un valle enorme de terrenos de cosecha se veía un viejo almacén, quizá de unos veinte años de antigüedad, Yeonjun le dijo que era allí, la noche estaba presente, eran casi las siete u ocho de la noche, costó un poco llegar pero cada vez estaba más cerca, corrió lo que pudo hasta que con la poca luz que había divisó una silueta acercarse, corrió aún más chocando con Félix que lo abrazó con las piernas temblando.


—¿estás bien? —preguntó revisándolo, Yeonjun acercó la luz a su cara dejando que pudiera verlo mejor.


Sus mejillas estaban llenas de tierra y su cabello era un desastre, su ropa estaba sucia, su pantalón roto y sus rodillas raspadas, temblaban sus piernas y la respiración era frenética.


—Eres un idiota— dijo el de mechones rojos como pudo— lo...


—Hay que darle agua— dijo Yeonjun sacando una botella de su bolso, se la entregó a Hyunjin que la abrió para el de pecas y trató de hacer que bebiera aunque este lanzó la botella lejos.


—Estás loco— le reclamó Hyunjin, Yeonjun levantó la botella, limpió de neuvo y se la entregó.


—No pienso beber eso— dijo Félix, se sintió débil, pero Hyunjin lo cargó ayudándole a mantenerse en pie entre sus brazos.


—Te vas a morir si no lo haces vamos.


Lo obligó a beber tapando su nariz, el de pecas tragó con fuerza casi ahogándose, Hyunjin sonrió y volvió a repetir el proceso aunque daba ligeros manotazos al aire, al terminar Félix ya no necesitaba agua, su respiración aún era acelerada y no se pudo mantener en pie mas tiempo.


—¿Qué hacías por aquí? — preguntó Yeonjun acercándose.


—Por ahora solo debe descansar— dijo Hyunjin, cargó a Félix que estaba un poco mal— lo llevaré a su casa y luego le preguntamos.


—Iré contigo— dijo Yeonjun, Félix negaba pero Hyunjin no sabía que hacer.


—Yo lo llevaré no te preocupes.


—Si le pasa algo en el camino no sabrás que hacer yo he atendido cosas así antes así que déjame ir.


—Bien, vamos a dejarte a casa Lix.


Félix negó pero Hyunjin no podía hacer mucho, cargó al pequeño rubio en brazos hasta donde el taxi los había dejado, Yeonjun dijo que por allí no pasaban mucho los autos así que debían caminar mas, lo hicieron hasta llegar a un sitio más frecuentado aunque la calle era conocida como la calle de las luces rojas.


Un grupo de chicas se acercó a ellos pero se alejaban al ver a Félix casi inconsciente, un grupo de hombres los rodeo pero Yeonjun parecía desinteresado en ellos, iban caminando como si nada rodeados de aquellos hombre de gran estatura.


—Te compro al rubio ese por doscientos mil— dijo uno señalando a Félix— lo conozco y quiero follarmelo ya.


—No lo creo— dijo Yeonjun alejándolo— si no les temes no siguen molestando— le susurró a Hyunjin.


—Que dices güero? ¿O es tu putita?


Hyunjin sentía que le hervía la sangre, quería meterle un palo por algún lado, donde fuera y hacerle saber que no podía meterse con Félix, notó que el rubio que llevaba en brazos levantó el dedo medio así que sonrió y le hizo bajarlo.


—Vaya la pequeña zorra está viva todavía— comentó el hombre, Yeonjun detuvo a Hyunjin antes de que hiciera una tontería— sabes, podría comprarlos a ambos, tu serías para los lunes y este pequeño para todo lo demás.


—Escúchame idiota si no quieres terminar peor que él será mejor que te vayas ¿me oyes gorila imbécil sin cerebro? — gritó el de cabellos rosas empujado el pecho de aquel hombre que se fue luego de eso.


Hyunjin se quedó en silencio, comenzaba a tener miedo de Yeonjun, llegaron por fin a un sitio en el que había transporte, tomaron un taxi en dirección a un hospital podía llevar a Félix a ese lugar, era mejor que llevarlo a su casa, después de todo le hacía falta ayuda médica.


Al llegar lo atendieron, Yeonjun se quedo con Hyunjin en la sala de espera, recibió una llamada así que dejó a Hyunjin de lado, este solo esperaba que Félix estuviera bien, si pensaba bien, quizá la falta de oxigeno le había afectado, pero no lograba explicar los raspones y tierra, notó a Yeonjun hablar con alguien, al parecer estaba molesto, desesperado quizá.


—Hyunjin— dijo regresando— tengo que irme pasó algo y no puedo quedarme pero me avisas como sigue Lix después ¿sí?


—Claro, te escribo luego.


Yeonjun ni siquiera respondió simplemente se fue corriendo, Hyunjin comenzaba a creer un poco lo que decía Félix, pero temía perderlo también, no habían quedado en buenos términos así que esperaba al menos poder disculparse con el de pecas.


—Familiares de Lee Félix? — dijo el doctor, Hyunjin se acercó— ¿usted que es?


—Em, su novio— mintió, era mejor que decir que su amigo.


—Bien, ya despertó pero tendría algunos problemas ¿sabe que le ocurrió?


—No


—Bien, como sea, está estable pero se recomienda más descanso ya que expuso su cuerpo a un cansancio extremo y tiene algunos efectos de lo que parece asfixia así que necesita mucho reposo y haremos exámenes para saber si su cerebro no fue afectado.


—Puedo ir a hablar con él?


—Si, la habitación 143 al fondo del pasillo.


Hyunjin fue hasta la habitación, allí Félix se desconectaba de las máquinas, le hizo sentarse de nuevo en la camilla pero el de pecas se levantó molesto.


—Hyunjin arruinaste todo!


—¿De qué hablas pudiste haber muerto?


—Claro que no, me regenero pero tú, tú me llevaste a la boca del lobo, solo necesitaba ayuda para salir pero tú llevaste a Yeonjun ¿sabes que demonios le diré ahora?


—Félix estabas mal no podía hacer nada si no sabía como llegar a ti además estaba demasiado preocupado como para pensar.


—Tú nunca piensas! — gritó, Hyunjin se quedó en silencio— siempre haces lo que se te da en gana y me tomas como si no valiera, siempre me quieres tener lejos, siempre tratas de hacer todo solo y aunque te diga que puedo hacerlo aún me ignoras no has cambiado ¡no confías en que puedo hacer las cosas ah!


—Yo no te pedí que siguieras a Yeonjun ni te dije que empezaras con locuras.


—¡Pero lo hacía por ti! — y de nuevo el silencio— hago todo para que Seungmin regrese y estés bien porque no quiero verte paranoico y de nuevo en el fondo destruido pero no confías en mí nunca.


—Y yo siempre he querido protegerte y evitar que sufras.


—Pues parece que ambos hacemos lo contrario.


Ambos se quedaron en silencio sin poder verse a los ojos, Hyunjin salió de allí, no planeaba seguir con todo eso, simplemente debía darse un espacio, últimamente nada iba bien, desde su mente hasta la vida con Félix, simplemente abandonó el hospital, afuera llovía pero eso era lo de menos, caminó a casa como si no hubiera lluvia, como si nada le importara.


Ingresó a la mansión en silencio, no tenía ganas de cenar, su mente de nuevo se debatía, comenzaba a pensar que Félix estaba en lo correcto, que pudo perderlo, que aún eran opuestos totalmente, eran tantas cosas que su cabeza estaba por estallar, recibió una llamada al teléfono de la casa, era Jeongin.


—No le pediste permiso a mi papá.


—Ocurrió algo con Félix— dijo casi en un suspiro— pero está bien descuida.


—Entonces no saldremos mañana?


—No le dije a Jisung ni a Minho.


—No importa podemos ir solo los dos.


—Bien, mañana en tarde iremos lleva cámara, micrófono y una cinta de grabación por si acaso.


—Descuida, ya tengo todo cubierto.






Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro