Capítulo 15: Extremista.
Una semana después de que el grupo comenzara a entrenar arduamente. Llegó la hora para los hombres, ha llegado el día que entrenarían con cuchillos reales.
- Bien, ahora entrenaremos con cuchillos reales, recuerden que pueden salir heridos, con cortes, tranquilos, si les intento apuñalar me detendré en el momento adecuado. - Explicó Alexander mientras se levanta del suelo.
Los hombres, dudosos, no querían entrenar de una forma tan peligrosa, solo unos pocos tenían la convicción y voluntad para hacerlo, esos valientes eran Alexander, Biagio, Eduardo y Dmitry.
- ¡Yo voy primero! - Respondió Biagio a Alexander con una voz firme y con determinación.
Todos los chicos estaban sorprendidos de que alguien en verdad se ofreciera a pelear con cuchillos reales, consecuentemente los demás hablaron.
- Yo seré segundo. - Dijo Eduardo mientras levanta el brazo sonriendo.
- Entonces yo el tercero... Maldito me ganaste yo quería ser el segundo. - Dijo Dmitry sonriendo mientras le agarra del hombro a Eduardo.
- Bien chicos, no se impacienten. - Dijo Alexander con una sonrisa mientras hacía señas para que lo sigan.
Alexander quedó realmente sorprendido, él pensaba que nadie iba a aceptar ese trato tan incomprensible, es como pedir que pelees en un duelo a muerte con cuchillos.
- «Me alegro de que haya verdaderos hombres valientes en nuestro grupo, si es con nosotros cuatro, podremos defender el grupo de los peligros que acechan fuera de la montaña, igualmente, hay que seguir entrenando a la nueva gente que llega al campamento.» - Pensó Alexander mientras veía a Biagio, Eduardo y a Dmitry hablar entre ellos riéndose y emocionándose.
Nadie se había percatado bien de las cosas, ellos ya hace casi dos meses que están en el entretenimiento mortal, desde que se conocieron ha pasado mucho tiempo, así que, aun siendo un lugar tan horrible y peligroso, surgió la amistad, también surgió el amor, como Alexander y Anikka o Biagio y Kristen.
El grupo de los cuatro valientes jóvenes llegaron al lugar del entrenamiento, es un lugar plano de la montaña, sin nada alrededor, perfecto para entrenar duramente.
- Bien, entrenaremos aquí, ven Biagio, ya dijiste que eres el primero ¿No te arrepientes ahora cierto? - Preguntó Alexander con una expresión burlona, para burlarse amigablemente de su amigo.
- Mentiría si dijera que no tengo miedo. - Dijo Biagio mientras mira hacia abajo nervioso.
Alexander cambia su cara rápidamente a la de una sorprendida, ya que hasta ahora Biagio había demostrado anular el miedo si implicara salvar a Kristen.
- ¿Eh? Enton... - Decía Alexander, pero fue interrumpido rápidamente por Biagio.
- Tengo miedo, pero para poder proteger a Kristen, no me importa lo que me pase, daré más que mi cien porciento, seguro que piensas lo mismo con Anikka ¿No? - Preguntó Biagio con una sonrisa de honestidad, confianza y camaradería.
Alexander se quedó boquiabierto, Biagio es el prototipo de un verdadero hombre, alguien que protege a sus seres queridos sin importarle si su propia vida o salud está en juego, el hombre siempre fue así desde tiempos inmemorables hasta la actualidad y en el futuro seguirá igual, si no se olvidan de estos valores, el futuro será prospero.
- Si, tienes razón, para mí... Anikka... Es alguien especial, mientras estábamos en el grupo anterior, ella me salvó la vida incontables veces, en el tiempo que estuvimos uno al lado del otro... Yo la amo genuinamente y estos sentimientos nunca desaparecerán ¿No es lo mismo que tú con Kristen? Yo te entiendo y por eso te respeto. - Dijo Alexander con una sonrisa honesta, ha expresado todos sus sentimientos a sus amigos.
- Si, es lo mismo que mi situación con Kristen, yo me he enamorado de ella y si aunque yo no le importara, igual daría mi vida por ella. - Dijo Biagio mientras choca los puños con Alexander.
Eduardo y Dmitry quedaron con los ojos abiertos por la situación que estaban presenciando con sus ojos y oídos.
- ¡Increíble! Alexander ha expresado sus sentimientos, tanto tiempo intentando que admita que ama a Anikka, por fin lo hizo. - Dijo Dmitry todavía sorprendido por la situación.
- Es cierto... Por cierto, yo también quiero conseguirme una novia y protegerla con mi vida. - Dijo Eduardo triste y sintiendo envidia de la buena por Alexander y Biagio.
- Concuerdo amigo, pero parece que aquí no hay mujeres de la madre rusia. - Dijo Dmitry con una expresión de decepción.
- Jeje, somos privilegiados. - Dijo Biagio mientras se ríe inocentemente de Eduardo y Dmitry.
Así es como se ha fortalecido enormemente la relación de amistad de este cuarteto, ya no son más desconocidos que se encontraban en la misma situación, es una amistad que puede perdurar para siempre.
- Pero, que ahora nos hayamos abierto emocionalmente entre nosotros, no quiere decir que vaya a ser más suave con ustedes ¿Lo saben no? - Dijo Alexander mientras pone una cara aterradora y los mira con dedicación.
Biagio, Dmitry y Eduardo pusieron expresiones de miedo, porque el entrenamiento que les espera es el infierno.
*******
Mientras tanto, en el sector del grupo de las chicas, iban a seguir entrenando el entrenamiento de batalla con cuchillos de madera falsos, ya que Anikka no quiere arriesgar tanto como Alexander.
- Dime Anikka, nunca te lo preguntamos, pero siempre que estás con Alexander, tienes una sonrisa que brilla desde lejos. - Dijo Amelia mientras se sienta en el suelo para esperar su turno del entrenamiento.
- ¡Es cierto! ¿Te gusta Alexander? - Preguntó Eun-ji mientras levanta los brazos de la emoción.
- O... Oigan ¿De qué están hablando ahora? - Preguntó Anikka sorprendida y avergonzadas por las repentinas preguntas.
- Vamos, solo dinos, no le contaremos a nadie ¿Sí? - Dijo Camille con una expresión que solo lo haría una persona chusma.
- No se habla de eso ahora... - Dijo Anikka intentando cambiar el tema de conversación.
- Dinos Anikka, yo les dije que me gusta Biagio, es injusto que haya secretos entre nosotras, somos amigas todos ¿No? - Preguntó Kristen triste y decepcionada porque no había confianza entre ellas, aunque ya lleven casi dos meses juntas.
Anikka vio la situación y se dio cuenta que ya no tiene salida, también sabe que sus amigas desconfiarán de ella si no es honesta, ya que las cuatro están haciendo una expresión triste.
- Está bien, lo admito. Me gusta Alexander y daría mi vida por él, lo veo como susceptible, siento que debo cuidarlo, protegerlo y añorarlo. - Explicó Anikka con una sonrisa que solo podría hacer una mujer enamorada.
Las chicas se pusieron a gritar de la emoción, lo que había dicho Anikka fue tan dulce que cayeron de espalda del shock.
- ¡Vamos! ¿Por qué se ponen así? Reaccionen, no debí decirles nada. - Dijo Anikka mientras se tapa la cara de la vergüenza.
Kristen es la primera en volver en sí misma, admirando a Anikka, ella también habla de su percepción sobre su enamoramiento.
- A mí me gusta Biagio, como ustedes saben, en mi caso él siempre me protege y no sé qué tan lejos llegaría para salvarme la vida, siempre me ayuda en todo lo que necesito, también siempre está pendiente de mí. Pero yo... También quiero poder protegerlo, quiero siempre estar ahí para curarlo física como mentalmente, yo, creo que te comprendo Anikka, quiero atesorarlo. - Dijo Kristen mientras expresa lo más recóndito de sus sentimientos.
Las chicas estaban encantadas por lo que decían Anikka y Kristen sobre el amor y todo lo que esto conlleva.
- Desearía estar enamorada... Pero todos los chicos que conozco y conocí fueron todos idiotas. - Dijo Amelia enojada con la vida que el destino le dio.
- Yo también... - Dijo Eun-ji mientras pone una expresión de decepción.
- Eun-ji, tu solo eres una pervertida. - Dijo Camille mientras se ríe de Eun-ji.
- ¡Oye! ¡No es cierto! - Gritó Eun-ji enojada por lo que dijo Camille tratando de negar lo que la acusaron, aunque es imposible.
- Bueno, ya es suficiente ¡Vayamos a entrenar! ¡Para proteger a nuestros hombres! - Gritó Anikka mientras se reía de la situación.
- ¡Si señora! - Respondieron Kristen, Amelia, Camille y Eun-ji a la vez.
La última en abrirse sentimentalmente por fin cedió, ahora la amistad de las chicas se ha incrementado mucho también, ahora son verdaderas amigas.
*******
Mientras fortalecían la amistad los chicos y las chicas, debajo de la montaña, llegaron unas cuantas personas, eran un grupo de unas cinco personas, dos chicos, dos chicas y una persona transgénero. Con arneses y cuerdas que compraron a quinientas monedas en la tienda, comenzaron a escalar la montaña, ellos habían visto fuente de luz y fogatas en la parte grande y planta de la montaña, ellos saben que por lo menos debe haber un grupo grande viviendo allí arriba.
- ¡Vamos! Esto no debe ser tan difícil. - Dijo un hombre de unos treinta años con apariencia de hippie.
- ¡No debe serlo! - Gritó una chica que debe rondar entre los veinte y treinta años, con una apariencia no tan saludable.
Comenzaron a subir lentamente la montaña y llegaron a la zona en la que Biagio y Kristen descansaron antes de subir a la zona más importante y privilegiada que es en la que se encuentran ahora, ellos escucharon voces y murmullos de chicas arriba de ellos.
- ¡Hola! ¿Hay alguien ahí? ¡Por favor ayúdenos a subir! - Gritó el hombre con una apariencia hippie.
- ¡Si! ¡Por favor! - Gritó una chica con apariencia con gafas, frenillos y una apariencia física descuidada.
Anikka escuchó los gritos así que rápidamente miró hacia debajo de la montaña, esto ya había sucedido varias veces en las últimas semanas, ya que mucha gente se unió al grupo día tras día.
¡Hola! Si, vamos a ayudar ¡Estén tranquilos! - Gritó Anikka mientras indica a Kristen para que la ayude a subir a las nuevas personas.
Anikka y Kristen ayudan uno a uno a subir a la parte grande y privilegiada de la montaña, al subir se dieron cuenta que eran personas bastante más diferentes de los que habían subido al grupo anteriormente.
- Muchas gracias, chicas ¿Quién es la líder? - Preguntó la chica con la apariencia nada saludable.
Ella miró una a una a las chicas y entonces concluyó que la líder era Anikka, por su apariencia fuerte, que parecía irradiar respeto.
- Debes ser tú la líder, muchas gracias por ayudarnos. - Dijo la chica con una apariencia nada saludable.
Anikka y las demás chicas del grupo se miraron entre ellas, ya que todas sabían que Anikka no era la líder en realidad.
- Eh, no. Se está equivocando, yo no soy la líder, ahora mismo buscaremos al lider del grupo, vamos Kristen, ayúdame a buscar a Alex. - Dijo Anikka mientras señala a Kristen.
- Está bien ¡Ya volvemos! - Exclamó Kristen y se va corriendo con Anikka a la zona de entrenamiento de los chicos.
Después de un tiempo, Anikka y Kristen llegaron a la zona de entrenamiento de los chicos, cuando llegaron vieron una escena fuera de lo común.
Estaban Alexander y Biagio, sin playera ni nada puesto en el tren superior, lleno de cortadas, en el brazo, hombro, costillas y cara. Aunque Alexander estaba mucho menos herido claramente, este era un entrenamiento para Biagio, no para él, solo que como siempre Biagio se adapta rápidamente a todo y Alexander tuvo que esforzarse más.
- ¿Qué demonios? ¡Alex! Al final si entrenaron con cuchillos reales, realmente son idiotas. - Dijo Anikka mientras se agarraba su cabeza y la sacudía decepcionada.
- ¡Biagio! ¿Otra vez herido? Deja de lastimarte por favor. - Dijo Kristen preocupada, pero también decepcionada de la estupidez masculina.
- Jeje, lo siento, pero Biagio es increíble. - Dijo Alexander mientras señala con su cuchillo a Biagio.
- Es porque me enseñaste tu. - Dijo Biagio mientras lo señala con su cuchillo.
Inmediatamente Alexander y Biagio relajan sus poses de pelea y caminan hacia el centro, encontrándose cara a cara.
- ¿Al final fue un empate? - Preguntó Biagio mientras levantaba su puño, en frente de Alexander.
- Si, dejémoslo así. - Respondió Alexander y luego le choca los puños a Biagio.
Anikka y Kristen mirando la situación, no se habían sorprendido para nada, ya conocen bien la estupidez masculina. Anikka estaba todavía suspirando resignada, pero recuerda la razón por la que vinieron buscándolos.
- ¡Cierto Alex! Nuevas personas llegaron y pidieron ver al líder. Ven, vamos. - Dijo Anikka mientras señala a Alexander para irse rápido.
- Pero te dije que tú también eres la líder. - Dijo Alexander mientras mira confundido a Anikka.
- Eso no se decide así sin más, todos están de acuerdo que tú eres el líder y así será. No hay tiempo ¡Vamos! - Dijo Anikka mientras se va corriendo.
Los cuatro se fueron corriendo hacia el campamento para encontrarse con los cinco que recién subieron la montaña.
- ¿Y díganme? ¿Cómo es la líder? - Preguntó la chica con apariencia nada saludable.
- No es una chica, el líder es un chico, enseguida debería llegar. - Dijo Amelia mientras mira hacia el lado que se fueron Anikka y Kristen.
Rápidamente la chica con apariencia nada saludable cambio drásticamente su personalidad.
- ¿Un chico? ¿Es un hombre transgénero? - Preguntó la chica con apariencia nada saludable con una expresión extraña.
- ¿Eh? No, claro que no, es un hombre que nació hombre. - Dijo Camille mientras se ríe levemente por la interpretación de la chica con apariencia nada saludable.
- ¿¡Eh!? Ah, ya entiendo ¿Es un hombre que ama a otros hombres como Klaus? - Preguntó la chica con apariencia nada saludable mientras señala al hombre con apariencia de hippie.
Las chicas del grupo ya estaban hasta sorprendidas, primero que nada, no entendían a que venían esas preguntas, es decir, eso no es algo que deba importar.
- ¡No! Alexander es un hombre heterosexual y que desprende hombría. - Dijo Eun-ji mientras pone una cara extraña,
- ¡Para ya! No seas pervertida, Anikka se molestará si se entera. - Dijo Amelia a Eun-ji mientras le sacude el hombro.
- ¡Ah! Lo siento, olviden lo que dije. - Dijo Eun-ji mientras intenta cambiar de tema.
- ¡Es imposible! - Dijo Amelia con una expresión de decepción.
Mientras sucedía la charla de Amelia, Camille y Eun-ji, la chica con una apariencia nada saludable explotó.
- ¿¡Un hombre cisgénero heterosexual es el líder de este grupo!? ¿¡Están locas!? ¿¡Cómo van a dejar que un posible violador sea el líder de todas ustedes chicas!? Reaccionen, tienen que cambiar de líder ya, alguna de ustedes está bien. - Dijo la chica con una apariencia nada saludable mientras escupe odio por la boca.
Las chicas se quedaron de piedra, nunca habían conocido a una chica así en sus vidas y no entendía a dónde quería llegar esta chica.
- ¡Oye! No puedes acusar así sin más a la gente, obviamente no todos los hombres son violadores o posibles violadores ¿Qué sucede en tu cabeza? - Preguntó Amelia enojada porque insultó a sus amigos, padre y hermano al decir que todos los hombres son posibles perturbados.
- Amiga ¿En serio eres mujer y piensas así? Entiende, el líder de tu grupo las va a violar algún día solo está esperando el mejor momento ¡Huyan ahora! - Gritó la chica con una apariencia poco saludable mientras escupía odio hacia los hombres.
- ¡No voy a permitir que insultes así a Alex! - Gritó Anikka mientras llegaba con Kristen, Biagio, Alexander y los demás chicos.
Anikka estaba realmente enojada por lo que había dicho de Alexander esta chica desconocida.
- ¡Lo voy a decir claramente! ¡No se puede confiar en un hombre cisgénero heterosexual! Mira, están lleno de heridas y encimas sin ropa, así son todos los hombres cisgéneros, son unos degenerados cavernicolas, aléjate de él ya. - Dijo la chica con una apariencia nada saludable mientras se aleja de Alexander, Biagio y todos los hombres.
Esas palabras tan hirientes lastimaron gravemente los sentimientos de los chicos, que miraban y escuchaban desde atrás en silencio, se deprimieron y miraron hacia el suelo, estaban siendo calumniados e insultados sin haber hecho nada malo.
- ¿Tan poco confiables somos? - Preguntó Eduardo mientras mira hacia abajo deprimido.
- Parece que si, al fin de cuentas somos todos posibles violadores para las chicas. - Dijo Dmitry mientras mira deprimido hacia abajo.
- Me esforcé para que me van como alguien confiable, pero parece que las mujeres siempre nos tendrán miedo, lo siento Anikka, si tienes miedo de mí, no era mi intención. - Dijo Alexander mientras mira deprimido a Anikka.
- Yo creo que deberíamos alejarnos un poco de las chicas, quizás así puedan estar más tranquilas, lo siento Kristen, si me tuviste miedo me disculpo ahora mismo. - Dijo Biagio mientras la mira con expresión de cachorrito y luego mira hacia abajo.
Las chicas del grupo sintieron un fuerte golpe en el corazón, pues, nunca pensaron que verían a esos esos hombres tan confiables que cazaban y hacían las tareas difíciles en el campamento, podrían verse tan vulnerables al punto de casi llorar.
- ¡Oye! ¡Deja de insultarlos! - Gritó Anikka mientras miraba enojada a la chica con apariencia poco saludable.
- ¡Es cierto! ¡No insultes a los chicos! ¡Ellos no son como tú crees! - Gritó Kristen mientras mira enojada a la chica con apariencia poco saludable.
Al poco tiempo las demás chicas del grupo comenzaron a defender a los chicos que fueron heridos en sus sentimientos, los elogios hacia los chicos del grupo y los abucheos hacia el grupo de cinco que subieron la montaña, era grande.
- ¡Estúpidas! ¡Pronto se darán cuenta de su error! Yo tomaré la posición de líder, me llamo Agustina Fernández, soy de Argentina y tengo veintiséis años y soy una progresista hecha y derecha, también soy feminista, socialista y de la comunidad LGTBI+, con eso ya saben que soy buena persona, él es Klaus Dolberg de treinta y un años, es un chico cisgénero de la comunidad LGTBI+, así que se puede confiar en él, ella es Trinidad Acosta, una chica cisgénero de veintitrés chilena de la comunidad LGTBI+, ella es Lena Pálsson, una chica transgénero y transexual de cuarenta años, pero en Islandia los apellidos no existen y son solo los nombres del padre o madre y se le agrega son si es chico o dóttir si es chica, pero ella todavía no tuvo tiempo de cambiar su apellido y por último él es José Antonio García, un chico cisgénero de la comunidad LGTBI+ de veintiún años. - Terminó su gran discurso y presentación mientras señalaba a cada uno de su grupo.
Las chicas del grupo del campamento no podían creer lo mucho que hablaba Agustina, fue una locura.
- Bueno chicas, llevémonos bien. - Dijo Agustina con una sonrisa en su cara.
- Está bien, pero no insultes más a nuestros chicos. - Dijo Amelia mientras la mira enojada, pues los chicos seguían deprimidos.
- ¡No lo haré! Los hombres cisgéneros heterosexuales son todos enfermos, no dejaré que ustedes se acerquen a ellos. - Dijo Agustina con una expresión confiada y luego se va caminando hacia la derecha.
Cuando todo se calmó los chicos se fueron deprimidos hacia la zona de entrenamientos, Anikka siguió a Alexander para animarlo.
- Biagio ¿Estás bien? - Preguntó Kristen mientras ve a Biagio triste.
- Está bien, déjame solo. - Dijo Biagio y luego se marchó junto a los demás chicos, deprimido.
Es normal que los chicos del campamento estén así de deprimidos, los insultaron y les dijeron que son violadores, sin haber hecho nada de eso y nada malo, se esforzaron para que las chicas los vean confiables, nadie estaría feliz si te dicen que eres parte de las peores escorias del mundo, era normal que quieran estar solos y lejos de las mujeres, puesto que no querían seguir siendo lastimados y tampoco querían hacer sentir miedo a las mujeres.
- Biagio... - Dijo Kristen mientras no puede hacer otra cosa que ver la situación sin poder hacer nada.
Fin del capítulo 15.
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