De mal en peor
—Ese es el asunto, no importa que tan mal estén las cosas, van a seguir empeorando. Tarde o temprano nos vamos a ahogar en toda esta porquería, nuestra porquería
—Jack
...
Febrero 4
No tenía caso seguir fingiendo, las cosas estaban mal, no podían manejarlo.
Habían pasado dos meses desde que María... ¿huyo?, ¿la mataron?.
La verdad para este punto eso ya no importaba, ella se había ido; Marcus era quien más resentiá su ausencia, intentaba calmar ese sentimiento con drogas y alcohol, pero... eso nunca bastaba, lo único que quedó de ella fue una carta repleta de tonterías melancólicas.
Lex estaba muerto, los jóvenes asesinos mintieron y lo culparon de todo, solo les quedaba rezar por un olvido misericordioso para su amigo.
Durante todo este tiempo, Chris lidió como pudo con las hermanas Nero, lo cual se tradujo en un par de puñaladas y más ratas muertas en su casillero; afortunadamente Angie quemó las fotos que le tomó Alessandra y los chantajes disminuyeron, al menos por el momento.
Estaban en las afueras de un club nudista, Christopher y Marcus discutían sobre música, mientras Billie les conseguía un auto.
—¡Hey, idiotas! Su carro aguarda.—les grito, Billie; quien finalmente pudo abrir el Toyota a espaldas de los chicos.
—Extremo...—dijo Marcus con una amplia sonrisa.
Chris logró encender el motor en tiempo récord de 8.98 segundos. Y ante una muy molesta insistencia, dejó que Billie conduciera.
—Intenta no matarnos...
—Anotado.
Acababan de robar un auto por mera diversión, aunque el único que parecía divertirse era Billie. Marcus estaba serio, perdido en sus pensamientos y Chris... bueno, el solamente los acompañaba para no estar solo.
El Punk conducía como un maldito loco, cantando y riendo, totalmente fuera de control, sus acompañantes lo imitaron preguntándose si estaban tratando de sentirse vivos... o de matarse.
La noche fue de lo más horrible, al menos para Marcus y Christopher. Además de robar el auto fueron a ver una banda gótica junto a Petra. Billie conoció a unas chicas Punk y Marcus enloqueció de la nada; lo sacaron del lugar entre puñetazos e insultos, algo estaba mal con el, necesitaba ayuda.
Chris conoció a una gótica, parecía agradable pero estaba muy drogada, así que la cuido hasta que recupero la conciencia, entonces la subió a un autobús y le deseó suerte.
Luego regreso al Dominio, estaba tan cansado como aburrido, sin importar que hiciera, nada lo reconfortaba.
No había sabido nada de Lin o de su familia, eso era casi una buena noticia; por desgracia la manera de dirigir el Dominio de Gao era mucho más estricta y despiadada, ahora los entrenamientos y clases eran mas sádicos.
Willie se fue durante 2 semanas, pero su madre lo encontró, le dió una golpiza y lo regreso a la escuela, cuando Marcus le pregunto por su novia el no respondió y decidió no preguntar más, era mejor así.
Por la mañana Chris y Marcus caminaban a su clase matutina con Miss De Luca.
—Rompí la maldita carta, no decía más que tonterías, a la mierda ella...—decía con rabia.
— Me encadenó, solo quería desaparecer a Chico y a su familia, María me uso, nos uso a ambos.
—No lo sé, tal vez Gao la mato...—le respondió Chris—Lin me dijo que alguien nos delató.
—No digas idioteces viejo, sabemos que Gao quería la puta escuela y utilizó al cartel a su favor, no tendría caso matar a María, y si lo hubiera hecho nos lo abría escarmentado, no estaríamos vivos ahora..
—Solo decía...—Chris estaba algo preocupado por Marcus, la depresión y los malos pensamientos destruyen a las personas.
—María no es a la que quería de todos modos, ¿sabes?, cuando vio lo cerca que yo y Saya nos estábamos volviendo se interpuso, estaba celosa.
—Aja...
—Voy a hacer algo está noche, haré que me crezcan las bolas, iré con Saya y le diré... le diré que la amo, le diré todo.—Marcus sonaba muy decidido.
—Ve por ella tigre...—le respondió Chris con pesimismo.
....
Luego de otro tedioso día aprendiendo el arte del asesinato, Christopher entro a su dormitorio allí lo estaba esperando Angelique, sentada en la cama.
—Largate—le ordenó a la italiana con desdén.
En respuesta ella le apuntó con un revolver.
—Sientate... necesitamos hablar.
Lejos de asustarse Hart se enfureció.
—¿Que mierda quieres?.
—Sientate...— respondió amartillando el peligroso artefacto.
De mala gana el estudiante obedeció sentándose en la silla del pequeño estudio.
—¿Que?.
—Yo...—Angelique bajó la pistola—queria disculparme por todo, se que Alessandra te ha estado fastidiando los últimos meses, me ocupe de las fotografías así que ya no tiene nada contra ti... He reflexionando sobre todo esto y se que estoy haciendo de tu vida un infierno, lo lamento.
Chris asintió, el tono de la nerd parecía sincero.
—¿Era necesaria el arma?
—Lo siento, realmente necesitaba hablar contigo.—la chica de anteojos se arrodilló frente a el.
—Te amo Christopher, no puedo dejar de pensar en ti... se que te parecerá una locura pero, realmente te quiero, tu y yo necesitamos estar juntos. Te ayudaré a matar a Alessandra... nosotros...
—Angie...—le interrumpió—solo escuchate, quieres matar a tu hermana para quedarte conmigo, eso es retorcido. Soy una persona, no un objeto del que puedes simplemente apropiarté; se lo he dicho a tu hermana un millón de veces y ahora te lo digo a ti... por favor déjame tranquilo, lo que sientes no es amor, es una obsesión enfermiza que va a terminar con la muerte de ambos. Y si es cierto que me amas entonces vete y no vuelvas a hablarme...
Chris le abrió la puerta, en esta ocasión la joven no explotó en cólera, solamente derramó algunas lágrimas; le dedicó una mirada triste y se fué.
—Lo lamento...
.....
Cafetería Lucky Penny
—A la mierda The Psychedelic Furs, vendidos del soundtrack de Jhon Hughes—soltó Marcus.
—Eres un idiota. The Furs todavía son geniales, cada álbum—le respondió Saya. Ambos habían quedado para cenar.
—Pretty In Pink, fin de la historia...
—Esa es una buena canción—espetó Saya—la mayoría de las cosas indie que amas eventualmente se volverán mainstream, pero eso no significa que debas dejar de amarlas... Es como una prueba sobre si realmente te gusta la música o solo estás preocupado por ser genial... Disculpa, querida, un poco de café—pidió la asiática a la nada amigable mesera.—Puedes tomar de ejemplo a Chris, no pasa de escuchar nada que no sean los Rolling Stones o The Doors.
—No soy el inconformista superficial que quieres pintar... "This is the end" por Agent Orange
—¿Que con eso?—inquirió Saya con aburrimiento.
—La gente dice que es su peor album pero no me importa, a mí me gusta y la canción me hace llorar por algun motivo. Es más, quiero que la toques en mi funeral...
—¿Que te hace pensar que estaré en tu funeral?—pregunto la Yakuza sin entender a su amigo.
Debajo de toda esa discusión sobre música, Marcus formulaba la manera de decirle a su compañera lo que sentía por ella, pensaba en lo mucho que la amaba, cuan desesperadamente quería estar con ella, como podrían ayudarse mutuamente si estaban juntos; sin mayores rodeos soltó la bomba.
—Te amo, Saya...
En respuesta la asiática encendió un cigarrillo y negó con la cabeza.
—Mierda, eso... eso es pesado, y me siento halagada Marcus, pero... es complicado, hay algo más aquí, más allá de ese obvio rechazo neon parpadeando sobre tu cabeza. También tengo cosas que están jodiendome, lo que pasó con María, la perra de Gao vigilando cada paso que doy, Alessandra intentando matarme... no es buena idea que salga contigo, no lo haré.—Saya desvío la mirada.
—Lo siento, Marcus...
—Oh...
....
El rechazo duele, el retiro de María dolía aun peor, todo el sacrificio y heridas habían servido para nada.
Los siguientes días fueron realmente difíciles para Marcus, todo le parecía una mentira, tiempo perdido aprendiendo las mismas lecciones.
Para él ya era normal ser un marginado, escondido en una cueva de inadaptados despiadados.
La insidiosa depresión llegó a tal punto que se sentía contento de no tener que participar en el mundo normal. ¿Que había allá arriba? ¿Mentirosos, prostitutas manipuladores, víctimas, estafadores y actores?, Para el nada valía la pena, en el Dominio ya estaba muerto y eso de una divertida forma le agradaba.
11 de Mayo
En las criptas del Dominio, Christopher escuchaba a Billie y Marcus discutir sobre una droga amarilla que el nicaragüense acababa de comprar.
—El amarillo es solo basura yonqui casera—explicó Billie.
—Es todo lo que pudimos pagar, necesitamos conseguir más dinero—le respondio Marcus. Una playera de manga corta revelaba una gran variedad de cicatrices en ambos brazos.
—Esas cicatrices, no las había visto—señaló Chris.
—¿Tu papá?—preguntó Billie.
—El maldito orfanato, cuando no estaban golpeando, quemando o cortando... comencé a hacerlo yo mismo, supongo que para ejercer algún tipo de control sobre mi situación, crear la ilusión de que las heridas eran mi decisión y no la suya...
Billie puso una mueca.
—Mierda, supongo que el Dominio es como vacaciones comparado con eso.
Marcus inhaló la droga amarilla y le ofreció a su amigo punk, pero el lo rechazó; con Hart ya sabía la respuesta de manera que ni siquiera considero ofrecerle un poco de ésa basura.
—Son diferentes niveles...
—Marcus, necesitas dejar esa mierda—le advirtió Chris con seriedad.
—Si, el Chrisopata tiene razón estás cayendo por un agujero. Quiero decir, no está mal querer sentirse bien, pero tienes una familia aquí, quizá deberías estar contento de que Saya no quiso salir contigo, no es tan malo tener tiempo para aclarar tu mente de toda tu mierda...
De pronto Saya y Willie llegaron hasta ellos, se notaban algo preocupados.
—¿Que hay?—preguntó el pandillero.
Marcus no respondió, siguió inhalando esa porquería amarilla
—Estas fuera de control, ¿consumiendo en el almuerzo?, bajen y hablamos.
Quizás la droga habló por Marcus, eso o la creciente frustración y depresión, ya no había diferencia.
—¡¿De pronto les importa una mierda si me drogo?! ¡¡Da lo mismo a final de cuentas, vamos a morir como Lex o a huir de todo como María!!
—Lex y María no fueron tu culpa—le respondió Willie.
—No... fue tu culpa—Marcus saltó y enfrentó a Willie—¡Huiste cuando te necesitábamos!—le recriminó; su amigo bajo la cabeza—llagaste tarde...
—Y tu—dijo señalando a Saya—ocultaste lo del Maestro Lin y usaste a Christopher para zafarte de esa mierda, si hubiéramos estado todos juntos Lex seguiría vivo.
—No lo entiendes...—gruño ella, conteniendose para no arrancarle la lengua.
Willie intento calmar al eufórico y enfurecido individuo—hicimos lo que pudimos... Yo...
—¡Nos jodieron!, ¡Mataron a Lex!—inesperadamente golpeó a Willie con un fuerte derechazo que lo tumbó.
Billie intento intervenir pero igualmente recibió por accidente, un golpe de Marcus. Christopher fue quien lo detuvo antes de que hiciera otra estupidez.
—Ya, relájate, somos amigos, está bien, nadie tiene la culpa de esto...
—A la mierda—bramó empujando a su amigo.
—Diles a todos la verdad, Willie, sobre matar a los que le dispararon a tu padre, ¡Di que todo es una puta mentira! Si hubiera sido por ti, Chico me habría aplastado el cráneo en la acera.
—Hice lo que pude, lamento que no haya sido suficiente...
Finalmente los gritos terminaron por alejar a Saya y Willie.
—Vamonos de aquí...—murmuro la asiática.
—¡¡Eso larguense!!—Marcus no podía contener su ira.
—¡¡Ahora yo soy el malo de mierda, cuando ustedes mataron a Lex!!
Desde las sombras, Viktor escuchaba los coléricos gritos, y una sonrisa despiadada se formó en sus labios
13 De Mayo
Los siguientes días, Marcus se alejo de sus amigos, evitaba incluso a Christopher; quien de todos era el más neutral, no comía con ellos, ni les hablaba.
En el almuerzo Hart iba a sentarse con él, pero ante la mala vibra del nicaragüense decidió dejarlo solo, fue entonces cuando Alessandra lo abordó y lo obligó a sentarse con otros tipos italianos.
—Ya recuerdo porque no desayuno en la cafetería...
—Chris, mi amore, haremos nuestro movimiento contra Saya a fin de curso—dijo la despiadada estudiante en voz baja—tengo todo preparado, le sacaremos las viceras.
El joven se limitó a suspirar
—Como quieras...
Angelique estaba en otra mesa mirándolo con una mezcla de tristeza e ira. Dentro de la mafia italiana se habían armado dos bandos, cada uno liderado por una de las hermanas Nero, una bomba de relojería a punto de estallar por el control del grupo criminal más importante de Italia que controlaba el tráfico de armas en occidente. Christopher estaba en medio de eso.
—Iremos a una fiesta está noche, estoy harta de que me evites, apenas y te veo en las classi, eres mi novio..—decia Alessandra abrazándolo, obligando al joven a besarla.
Chris, resignado a la voluntad de la maniática vio de soslayo a Petra, esta hablaba con Marcus, ella también se había vuelto distante desde el asalto fallido.
—No iré contigo a ninguna parte y no soy tu novio...—dijó Christopher con renovada y decidida irritación.
La mafiosa tomó un tenedor y lo clavó en la pierna de su "amor" el muchacho ahogo el grito de dolor.
—No te lo estaba preguntando... stupido idiota.
...
Más tarde, él y Alessandra arribaron a la fiesta, había pocos rostros familiares, Shabnam, Marcus, Brandy, Petra y otros de distintos grupos del Dominio.
—¿Que hacemos aquí?—pregunto Chris.
—Reabastecerme...—respondio Alessandra mirando a Kendal, el líder de los Preps (hijos de funcionarios políticos y la CIA) el joven rubio era famoso por posser el mejor material en polvo.
—Ya vuelvo...—avisó la chica mafiosa guiñándole un ojo.
Chris se sentó en un sucio sofá y durante el resto de la noche observó la decadencia y desinterés de sus compañeros: Shabnam vómito cuando bebió de una pipa intentando impresionar a "Kelly" una voluptuosa chica de la que el gordo estaba enamorado; ella tenía kilos de más, parecian tal para cual.
Luego de meterse nieve de felicidad junto a Kendal y otros idiotas entre los que se contaba Marcus. Alessandra regreso con su "pareja" se colocó sobre el, besando y manoseando más de lo debido.
Christopher la empujó para quitarsela de encima, ella le dió un golpe en el estómago que le saco el aire, luego volvió a lanzarse sobre el como una pantera.
—Si no cooperas... El siguiente ira a la entrepierna, eres mi novio, actúa como tal... marica.
—Estas drogada...— respondió Hart, intentando hacer reaccionar a la joven.
—Más placentero—la italiana volvió a besarlo con pasión, luego lo obligó a bailar y a hacer otras cosas a las que no estaba acostumbrado. El tiempo pasó y el efecto de las drogas parecía intensificarse más; de manera que lo arrastró hasta una de las habitaciones para satisfacer los bajos instintos.
El no quería hacerlo con ella, no otra vez; si bien era atractiva, su espantosa personalidad opacaba eso totalmente; para su fortuna, tanta basura en el organismo de Alessandra termino jugandole en contra, haciendola vómitar y degenerando su aspecto de manera preocupante, su falso novio tuvo que darle una ducha fría y cuidarla durante toda la noche para evitar una tragedia.
Al día siguiente, la italiana despertó a su lado, con una jaqueca terrible, medio muerta de cansancio.
—¿Estas bien?—pregunto él, preocupado.
Al ver que ambos estaban vestidos la chica se llevó la mano a la cara, gruñendo.
—¿Tuvimos Sesso, l'abbiamo fatto?
—No... Te vomitaste encima..—respondió el estudiante, entendiendo a medias la pregunta.
—Puto, Marica...—dijo ella tomando sus cosas y saliendo rápidamente de la habitación.
Chris se quedó allí unos minutos, cansado por no haber dormido, apestando a vomito y muy molesto.
—De nada, hija de puta...
Cuando finalmente salió del cuarto, se encontró con Marcus, quien se veía incluso peor que él.
—Cielos, vaya mierda ¿eh?
Sin embargo el nicaragüense no le respondió, salió rápidamente sin mediar palabra; lo había ignorando por completo. De la habitación que Marcus había salido, Chris escucho unos ronquidos, allí vio a Kelly, desnuda y apenas cubierta por una manta, su voluminoso cuerpo le daba el aspecto de un ogro.
—Dios....
....
El tiempo siguió su curso, Marcus fue cayendo cada vez más por esa espiral de locura y decadencia; las drogas y apatia no ayudaban en absoluto, para desquitarse salía en las noches, disparaba en contra de anuncios políticos y participaba en peleas callejeras.
Los pensamientos delirantes y la falta de amigos lo llevaron a deducir cosas sin sentido, en especial luego de ver qué Willie y Saya se habían vuelto más cercanos.
El Dominio
Chris había decidido dejar la escuela luego del fin de año, no podía seguir lidiando con tantas locuras, tal vez podría buscar a alguien sin tendencias homicidas y sentar cabeza, lo que ahora añoraba era una vida normal, aunque no fuera para el.
Unos golpes en la puerta lo sacaron de sus pensamientos, al abrir se encontró con su amigo Marcus, se notaba nervioso e inquieto.
—Gracias por dejarme entrar.
—¿Cuanta metanfetamina tienes en el sistema?—le pregunto Christopher.
—Vete a la mierda, se que estás enojado conmigo pero esto es realmente importante—empezó a balbucear.
—No estoy enojado contigo, tu eres el que no me hablas, maldito loco.
—Solo, solo escucha es sobre Saya ella es mala, hombre; está jugando conmigo, me convenció de unirme a la escuela me dijo que era su protegido, luego me da drogas y me seduce, ahora está saliendo con Willie.
—¿Esta saliendo con Willie? No parece su tipo—inquirió el oyente levantando una ceja.
—Yo tampoco lo creí al principio, Saya está en mi contra o algo, no lo se. Pero no estoy loco, ¡María y yo estábamos bien! ¿porque ella huiría luego de todo lo que paso?, no hay explicación..
Marcus daba vueltas en círculos exponiendo sus paranoicos argumentos.
—Entonces lo descubrí. De no ser por ti, ella habría matado a María en la cafetería y luego en casa de FuckFace... Saya nos abandono ¿Sabes lo que eso significa?, estaba jugando con nosotros, p-para matarnos...
—Tranquilo Marcus...
El joven hizo caso omiso, su voz se estaba volviendo cada vez más estridente.
—La graduación de primer año se acerca, ¿no? algo malo se acerca, ella sabe de eso... ¿te has dado cuenta de que cada clase por encima de la nuestra tiene la mitad de tamaño?
—De hecho, ahora que lo mencionas, es extraño, ya lo había pensado pero...
El nicaragüense lo interrumpió abruptamente.
—¡Hay solo 30 de segundo y 15 de tercero!
—Habran huido o dejado la escuela...—intento justificar su amigo.
Marcus agitó a Chris violentamente.
—¡Despierta, viejo, son números divisibles, a-ambos estamos aquí gratis! Nadie paga la colegiatura. E-El padre de Billie está muerto, ¡nadie paga por el tampoco!, ¿Que mierda es eso? ¡¡¿Porque?!!
Algo apenado, el mexicano se safó del agarré del delirante individuo.
—Sabes, a pesar de tu tono de lunático, entiendo lo que dices, pero todo esto de la escuela para asesinos es ilegal, no hay lógica en algo así, y no sabemos cómo se administran, debe haber una explicación...—respondió tranquilamente.
—Necesitas olvidar a Saya, y por tu propio bien dejar las malditas drogas... María ya no esta, se fue, debes aceptarlo.
Esas palabras no tuvieron efecto en el atribulado muchacho.
—Eso es, soy un imbécil, la respuesta estuvo frente a mi todo el tiempo.—decia Marcus abriendo los ojos y volteando en todas direcciones—Saya estaba nerviosa por María, temia que alguien se quebrara por la muerte de Chico y Lex, y de lo que hicimos así que la hizo desaparecer y... ahora está saliendo con Willie para abrir una brecha entre nosotros, separarme de mis amigos, ahora es Willie mañana será Billie y luego tú...
—Ok, suficiente, deja de pensar toda esa mierda, estás enloqueciendo; necesitas un descanso—finalizó Christopher, ya cansado de la insensata discusión.
—Estas de su lado; tu, tu deberías odiarla luego de lo de Lin... Pero sigues hablandole con normalidad.
Hart ya estaba empezando a molestarse .
—No la odió, trato de envitarla luego de lo que pasó con Lin, ella es un maldito imán de problemas igual que tú... Si vas a seguir con esa actitud demente es mejor que te vayas.
Marcus se rascó la cabeza y se fué murmurando, necesitaba pensar. Caminó a las lápidas del campus para estar solo.
—«Nadie en quien confiar, nadie me cubre la espalda, nunca lo hicieron, me expuse, ahora ella lo sabra»—decia entre dientes.
—¿Que estás murmurando, idiota, débil y desquiciado?—Saya tomó por sorpresa a Marcus, descendiendo de un triste y retorcido árbol.
Él intento ignorarla.
—Vete a la mierda... no me hables.
—Tienes algo que decir, dímelo en la cara—reclamó la Yakusa tomándolo por el brazo.
—¿Quieres darle la espalda a todos tus amigos?, termina el trabajo.
—Yo no les di la espalda, ustedes me la dieron a mi. No eres amiga de nadie, ves la amistad como una debilidad táctica—reclamó el nicaragüense.
—¿Todo esto es por haberte rechazado? Siento que seas demasiado débil como para superarlo—contraatacó la asiática.
—Eso no es todo y lo sabes, estás tratando de joder mi cabeza; estás tramando algo.
Saya puso los ojos en blanco.
—¿Todo tiene que girar en torno a ti, no es asi?, alguien debe tener la culpa de que seas una mierda. ¡¡Yo no hice que vinieras corriendo a mi cuando María se fue!!
—¡Claro que sí!, Porque ella no se fue, ¡Tu la mataste!—bramó el enfurecido estudiante, sin pensar en las consecuencias de sus reclamos.
Saya se quedó pasmada unos segundos y casi automáticamente le asestó un brutal puñetazo a Marcus en la quijada, el impacto fue tan rápido y fuerte que lo derribó e hizo sangrar la nariz del joven.
—Di eso de nuevo y te mato... ¿Entiendes? Eres débil y venenoso, alejate a la mierda de nosotros, estás solo...
La asiática se fue, Marcus se quedó tendido sobre una lápida, ingirió un ácido y se quedó con la única compañía de una grotesca alucinación, un payaso neon igual al que había visto en las Vegas.
—Lo entiendo, es duro... pero no te preocupes amiguito, sin importar lo duro que se ponga yo siempre estaré aquí...—le dijo la alucinación sentándose a su lado.
—Lo se...
....
Mayo 29
Christopher fue al gimnasio de la escuela, Alessandra seguía acosandolo, pero ella odiaba los deportes y no podría encontrarlo allí. Viktor y sus compañeros comunistas tenían un juego se baloncesto. Moría de aburrimiento, ver jugar a esos imbéciles no era grato.
Fue entonces cuando Angelique se sentó a su lado, de alguna forma lo había encontrado.
—Lo se todo...
—¿A que te refieres?—le preguntó sin voltear a verla.
—Se lo que le pasó a Lex y no soy la única que lo sabe... Él murió por culpa de ustedes, si está información cae en manos de Gao...—decia la chica de anteojos con preocupación.
—Estaremos en problemas—Hart suspiró—¿quieres chantajearme?
—No—respondio inmediatamente la italiana—quiero ayudarte, el que está difundiendo los rumores es Viktor, ten cuidado con el; escuché que desde la desaparición del maestro Lin, él y Brandy son los soplones de Gao...
Una vez más las cosas estaban por irse al carajo.
—Gracias por la información... supongo.
—Es una forma de disculparme por todo, no quiero que pienses que estoy loca... cómo mi hermana. Tengo problemas de control de ira pero ya estoy lidiando con eso.
—Siempre que no intentes dispararme o acuchillarme otra vez, estoy bien—le respondió Chris con una media sonrisa.
Mirando atentamente a su compañero Angie dijo la verdadera razón por la que lo había buscado.
—Kendal hará una reunión privada está noche, ¿Podrías venir conmigo?
Christopher no estaba seguro si aceptar.
—No lo sé, la última vez que fui a una fiesta... no fue agradable...
—Estoy en guerra con mi hermana, no puedo confiar en nadie, tu eres diferente; se que te está jodiendo y que no puedes hacerle nada por las represalias, pero creo que puedo ayudarte a sacartela de encima sin necesidad de matarla... ¿Podrías confiar en mí una última vez?.
Angelique se quitó los anteojos revelando una mirada terriblemente triste.
—¿Que fue lo que te pasó?, ¿De pronto cambiaste?
Ella asintió con vehemencia.
—Volvi a tomar mi medicina y he estado visitando a un doctor. No te preocupes por Alessandra o los que están de su lado, ellos no saben nada de la fiesta privada...
Está podría ser una oportunidad para terminar con las hermanas Nero, o al menos con una de ellas, cualquier cosa con tal de alejarlas valía la pena.
—Esta bien, pero nada de drogas...
.....
Esa noche, Chris y Angelique asistieron a la fiesta privada de Kendal, el sujeto estaba jugando videojuegos con uno de los integrantes de la pandilla de Willie
—¿Vaya, vaya, no puedes decidir que hermana es la indicada?—dijó Kendal burlándose de Chris.
—¿Lo tienes?—interrumpio Angelique con tono serio y molesto.
Kendal sonrió y le entrego una cinta VHS.
—Alessandra Nero, la hija del señor Nero; drogándose, vomitando, teniendo sexo salvaje y matando vagabundos por placer—dijo con tono triunfante.
—Fue difícil, pero soy un buen cineasta...
—Una vez que mi padre vea esto, todo habrá terminado para ella; entonces cumpliré mi parte del trato. Proiettile Nero ayudará a tu padre con los recursos que necesite...
—Eso es música para mis oídos, querida—respondió el rubio.
Chris no sabía cómo reaccionar a eso
—Y tambien es bastante turbio...
—Vamos a quedarnos un rato—dijó Angie—no llamemos mucho la atención.
La sorpresiva presencia de Petra y Marcus llamó la atención de Chris, ambos estaban elevados de cocaína, besandose sobre un sofá.
—Oh si... la rata gótica le vende hongos a Kendal—comento la italiana—¿Siguen siendo tus amigos?
—Es complicado... creo que Billie tardo demasiado en hacer su declaración... ¿Que rayos está pasando con todos?, nos estamos volviendo salvajes...
—Asi es la vida Chris, debes vivir mientras puedas, yo... en serio te amo, lo sabes ¿no?.
—Apenas y nos conocemos...
Angelique lo tomó de la mano.
—No puedes ocultarlo para siempre, debajo de toda la seriedad y madurez, en realidad estás asustado, temes caer aún mas bajo, estás solo; necesitas compañía, yo te puedo ayudar...
—¿Vas con un psicólogo por algunas semanas y ya te sientes apta para analizarme?—Chris se hizo a un lado, tratando de ignorar a su compañera.
La italiana lo jalo violentamente y le dió un beso; el estudiante no se movió y tampoco sintió nada.
—¿Que es lo que quieres, Angelique?
La chica de anteojos bajo la mirada con pena.
—Esta bien, seré honesta contigo... se acercan días difíciles y no quiero morir virgen...
Esa declaración lo tomó por sorpresa, pasaron algunos segundos hasta qué encontró las palabras adecuadas para responder.
—¿Cómo sabes que vas a morir?
—Lo presiento...
Christopher tomó aire, si lo hacía, Alessandra lo mataría y si no seguramente Angelique no tomaría nada bien el rechazo; tendría una recaída, algo malo pasaría.
Igualmente estaba muerto, fuera cuál fuera su decisión, aunque en el fondo quería dejarse llevar al menos por una vez, igual que sus amigos.
De manera que, sin mas dilaciones aceptó.
—Esta bien, no puedo creer que vaya a decir esto; trae una botella y un ácido, voy a necesitarlo...
Los ojos de la italiana se abrieron con emoción.
—Sabia que terminaríamos juntos.
Él se quedó en un incómodo silencio, observando a su compañera de anteojos acercarle una botella de alcohol...
.
.
.
Las drogas disuelven las conductas socialmente aceptables revelando los orígenes arbitrarios.
Tanto Marcus como Chris habían caído en eso. En el caso del torturado nicaragüense las alucinaciones se hicieron demasiado vividas.
Era el viaje a un infierno terrorificamente real, Nixon lo perseguía felizmente por un tobogán.
—Despierta hijo, tu país te necesita, lucha por tu nación, mata por tu nación, muere por tu nación ¡¡EUA!! ¡EUA!
Muerte y colores brillantes, María lloraba en el fondo, y alguien mataba a la madre de Marcus, era el presidente.
—No se puede tener a gente café al sur de nuestra frontera. No se puede tener esa enfermedad tan cerca de nuestra grandiosa nación. Sabes hijo, me cogería el cadáver de tu madre para mantener nuestros ideales a salvo.
Claro, solo Marcus podía ver esos delirios.
—La gente malvada está ganando...
Petra lo tranquilizó, últimamente ella y él se habían vuelto muy cercanos, podría decirse que estaban en la misma sintonía en cuanto a emociones pesimistas.
—Esta bien, no caigamos al lugar oscuro—dijo antes de fundirse en un beso, luego de unas caricias se trasladaron a uno de los cuartos.
En el caso de Chris, al ingerir el ácido y el alcohol paso algo extremadamente raro y no solo era la ahora actitud relajada; alucinaba que hablaba con la Muerte, era una chica pálida, vestida de negro, sus manos eran de hueso y tenía un sombrero de copa en la cabeza.
—Me fascinan los regalos que me das, Chris, es increíble tener a alguien que me ame tanto, ¡¡mientras más regalos, más besos míos tendrás!! ¿no es maravilloso?
La sensación del alcohol combinada con la droga le hacía sentir que volaba libremente por el espacio, los rostros de todos a los que había visto morir lo miraban desde las distantes estrellas.
El rostro pálido de la muerte le susurraba al oído.
—Vas a seguir consintiendome, ¿Verdad?, Lo necesito... te amo tanto.
—Yo no...—el drogado muchacho no pudo responder; no entendía absolutamente nada.
De pronto Jack apareció detrás, junto a Júpiter; cabalgaba una botella de Jack Daniels como si fuera una especie de cohete espacial.
—Estas en la mierda, muchacho. No te distraigas, ellos son incluso peores que nosotros. Ahora dale duro a esa perra antes de que lo haga yo, y sabes que lo haré.
La muerte lo obligó a mirarla, sus ojos eran oscuros e insensibles, pero hermosos.
—Matalos a todos por mi, sabes que quieres hacerlo, no te preocupes no voy a cambiar... Siempre estaré aquí para ti, puedes besarme; puedes hacerme el amor, puedes hacer lo que quieras...
Chris beso a la alucinación quien obviamente resultaba ser Angelique.
—Eso es...
Y todo se torno borroso.
.....
5 de Junio
Un montón de cosas habían pasado desde la alocada fiesta, para empezar, aparentemente ambas hermanas Nero pensaban que el era su novio. Además alguien había crucificado a un estudiante de color en el campus, eso desató un ambiente problemático en el Dominio, Chris tuvo que conseguir armas para protegerse, lo cuál fue sencillo gracias a los contactos de Angelique en el mercado negro: una escopeta corta, un arco, gas lacrimógeno y un revolver, se traducian como "estar preparado para el apocalipsis mismo" de igual manera le dijo a Saya sobre el plan de los italianos para matarla en el fin de curso, ella se mostró confiada.
Angie aun no había jugado la carta maestra contra su hermana, lo estaba guardando para el final de año.
Luego de la clase matutina del maestro Zane, Marcus interceptó a Chris.
—Ok, estás con las italianas e igual de jodido que yo, confío en ti.
—Viejo... ¿Que demonios hacés? ¿Sigues con esa locura?
—Necesito ayuda, tengo un problema...—decia bajando la voz
—¿De qué se trata?
Marcus miro a los lados con una mezcla de inquietud y vergüenza.
—Creó que tengo herpes...
Chris levantó una ceja.
—Eso... es asqueroso, ¿Acaso tengo cara de doctor?
Marcus lo miro con seriedad, realmente necesitaba un amigo en esos momentos.
Christopher entendió la situación y accedió a prestarle su ayuda, después de todo, aún eran amigos; no estaban completamente solos en esa horrible escuela.
—Mierda, está bien, te acompañaré a una clínica...
....
Caminando por las calles de San Francisco, Christopher hizo la pregunta del millón
—¿Con cuántas chicas has estado?
Marcus frunció el seño.
—... bueno, está; María, Saya, Petra y el Troll...
Chris abrió los ojos sorprendió.
—El Troll es Kelly ¿no?
—Si...
—Y Saya, entonces si engañaste a María o...
—¿Vas a juzgarme?—le reprochó con molestia.
—No, en absoluto, la verdad tengo un poco de envidia, llevas 4 y yo solo 2, Angelique y Alessandra.—mintió Chris.
Marcus soltó un risa.
—Alessandra te violó entonces no cuenta como sexo, no como tal... Y ¿Angelique? ¿De verdad?, creo haberte visto en una fiesta de Kendal con ella, pero estaba tan drogado que el recuerdo es confuso.
—Me deje llevar, tome ácido y mucho tequila...—le respondió con algo de vergüenza—al día siguiente desperté con ella desnuda sobre mi, creo que Alessandra aun no se ha enterado pero la verdad ya no me importa...
—¿Enserio hiciste eso?, ¿Te acostaste con la otra mafiosa?, esto lo confirma, somos una mala influencia...—señaló Marcus sorprendido.
Su amigo sonrió—Si, vaya que lo son...
Finalmente, luego de caminar algunas calles, llegaron a un consultorio gratuito.
—Ok, estaré en la sala de espera, suerte viejo...—dijó Christopher señalando el modesto lugar.
Marcus asintió e hizo fila para ser atendido, había dos personas mas adelante de él; la espera se sentía eterna. Su mente no paraba de imaginar lo peor con respecto al sarpullido en su pequeño amigo: Sida, Herpes, Clamidia o alguna otra espantosa enfermedad de transmisión sexual.
Luego de una espera que se sintió como el paso de mil evos, llegó su turno, el doctor le hizo algunas preguntas propias de su caso ¿Cada cuando tenía relaciones?, ¿Cuántas chicas?, etc, y comenzó con la revisión...
Chris estuvo esperando un buen rato, llegado un punto se preocupó por Marcus. Cuando vió a su amigo salir, lo notó tambalearse adolorido, pero extrañamente con una tonta sonrisa de satisfacción en su rostro.
—Entonces, ¿Que es?
—No, no es nada—le respondió con alivio el nicaragüense—el doctor dijo que es una infección del folículo piloso, nada de que preocuparse; lo jodido es que tuvo que limpiar por dentro y arde como el infierno...
—Me imagino, la vida no siempre es tan mierda; tuviste suerte. Regresemos, tengo examen con la maestra De Luca en un par de horas y si llego tarde me rompe los brazos...
—Gracias por acompañarme, Chris...
—No es nada...
—Necesito otro favor—la voz de Marcus salió apagada.
—¿Que?
—Vamos a otro lugar, esto es aún más serio.—Le contesto furtivamente.
...
Azotea del Dominio
—Olvidalo, no lo haré—respondió Christopher con firmeza.
—Viktor va a delatarnos con Gao... el maldito también sabe que ayudaste al maestro Lin a escapar—se justificó Marcus.
—¿Cómo demonios sabe eso?—inquirio Chris.
—Ni idea, ha estado amenazándome los últimos días, dice que si no los entrego a ustedes, el nos entregará a todos.
—Angie me contó algo al respecto, pero no pensé que fuera tan grave...
Marcus hablaba muy enserio, la única manera de hacer que Viktor guardara silencio era cortando su cuello.
—Solo necesito el arma, la familia Nero es la principal traficante de armas sin registrar. No te preocupes yo me encargaré del puto comunista, parecerá un accidente...—le aseguró sin alterarse, Marcus ya hablaba como un asesino.
Por su parte Christopher no podía pensar con claridad, todo era una bomba a punto de estallar: las hermanas, el atentado contra Saya, Gao, los exámenes finales y ahora Viktor, era una pesadilla emergiendo del infierno.
—Ok, bien, bien... Puedo intentar conseguirte algo—dijó finalmente, bajando la cabeza e intentado formular un plan para evitar, tanto como fuera posible, a la muerte.
—Gracias....
10 de Junio
Los exámenes finales estaban a la vuelta de la esquina, Chris tuvo que rogarle a Angelique para que le consiguiera el equipo a Marcus, incluso podría decirse que tuvo que comprometerse con ella de una manera más seria, aunque todo esto lo hacían a escondidas.
Con Alessandra su relación se torno aún más tóxica, había muchos rumores de que la estaba engañando con su hermana; a esto Chris tuvo que metir, diciendo que todo era obra de Angelique para fastidiarla, lo cual no era suficiente y tenía que pasar los días escondiéndose.
A media noche, sigilosamente le llevo el paquete con las armas a Marcus; simplemente lo entrego y desapareció, no había nada que decir, los dados habian sido tirados.
Marcus tomó aire y abrió la caja.
-Arma corta con silenciador
-Cuchillo de combate de 25 cm.
-2 cargadores, 16 balas
-Pantalon y botas militares
—Opcion A: delatarme, opción B: delatar a mis amigos... tomaré la opción C..
....
Las criptas
Era un nuevo día, el primero de la semana de exámenes.
Todas las tardes Viktor corría hasta el extremo más alejado del cementerio y de vuelta, lo único que el nicaragüense debía hacer era esperar en el punto adecuado y efectuar su letal movimiento.
Viktor corría despreocupado, con una gran sonrisa en el rostro, ignorando el terrible peligro unos pocos metros delante, cuando Marcus lo tuvo a tiro los altavoces a su espalda le destrozaron los tímpanos obligándolo a cubrirse.
—¡Atención a todos los de primer año! Abra una orientación de fin de año en el auditorio en 20 minutos. La asistencia es obligatoria...—dijo la voz de madame Gao con cierto tono de satisfacción en la misma, algo extraño.
Al escuchar el mensaje Viktor dio la vuelta, Marcus intento hacer el tiro desde esa distancia pero varios amigos del comunista aparecieron para decirle que no podía faltar al evento en el auditorio.
—Si, si ire en unos minutos, tengo que darme una ducha.—decia el rubio.
—Muy bien pero no llegues tarde, el rumor es que nos darán grandes noticias...—sus amigos se despidieron de él.
Marcus se sentía como un verdadero imbécil, había perdido posiblemente su única oportunidad
—Mierda, no, no...
Viktor fue a las duchas, el lugar estaba desierto debido al misterioso evento en el auditorio. Pese a ello el maestro Zane le advirtió que se diera prisa, mientras tanto lo estaría esperando en el pasillo.
—A la mierda contigo, maestro Zane, nombre estúpido...—murmuro para si mismo.
Tranquilamente abrió las llaves, el agua estaba caliente, como a él le gustaba, pasado un momento el baño se llenó de vapor.
Tras unos segundos volteo para tomar el jabón, en ese momento un relámpago de dolor le atravesó la mejilla, una bala le había arrancado un centímetro de carne destruyendo un cuadro de losa frente al comunista, Viktor contraatacó con el jabón. Marcus estaba justo detrás de él, recibió el impacto en la cara, en ese momento ambos se enfrascaron en una sangrienta lucha mano a mano.
—¡Hijo de puta!
La balanza se inclino a favor de Marcus cuando tomo el cuchillo de combate y le hizo una herida de 15 cm a Viktor en el brazo.
—¡Buenas noches, tu..!!!
Estaba por rematarlo con la pistola cuando accidentalmente resbaló con el jabón, eso le dió el tiempo suficiente a Viktor para correr por su vida.
Marcus se levantó tan rápido como la adrenalina se lo permitió y abrió fuego, por desgracia en ese mismo momento el maestro Zane apareció reclamando el alboroto y una de las balas pérdidas le atravesó la cabeza esparciendo los cesos en el piso...
Aprovechando la confusión, Viktor alcanzó a tomar su ropa y largarse.
—Oh... Mierda, ¡¡Mierdaaa!!—exclamó el agresor llevándose las manos a la cabeza.
«Esta bien, puedo con esto, Zane humilló a Viktor en clase» pensaba Marcus mientras retomaba la persecución contra el ensangrentado comunista y disparando «lo mato, pongo sus huellas en el arma, que lo culpen a el, funcionará, tiene que funcionar»
Cegado por la rabia y miedo, Marcus persiguió a Viktor hasta el auditorio, ahí estaba Madame Gao sobre el escenario, esperando a ambos.
—Gracias por honrarnos con su presencia, tomen asiento.
Debido a que la única luz era la del escenario y la de la puerta, Gao no noto a Viktor terminando de colocarse la camiseta y la sangre en su brazo.
Sin opciones y acorralado, Marcus guardo el arma, de manera torpe se se abrió paso sentándose detrás de Saya.
—Como decía—interrumpió Gao sonriendo—el fin de primer año es un momento especial, han aprendido y trabajado mucho hasta convertirse en adultos. Ustedes han recibido el mejor entrenamiento en el mundo en las artes mortales, son los engranajes que un día girarán el mundo...
Chris estaba junto a Alessandra a unos metros de Viktor, vió la sangre y la actitud desesperada de Marcus, todo se había ido a la mierda.
—Ahora, muchos de ustedes han preguntado acerca de la validez de algunos estudiantes. ¿Porque están aquí si nadie paga su colegiatura?, ¿porque permanecen aquí a pesar de tantas infracciones...?
Gao caminaba de un lado a otro mirando a todos y cada uno de los jóvenes.
—Ratas... ratas que mataron a Chico, que mataron a Lex... que mataron a María.
Esa declaración le helo la sangre a Marcus y compañía.
—Han visto que a cada rata se le entregaron huesos de sus hermanos, ustedes saben quiénes son; pero recuerden, una rata es un sobreviviente virulento y tenaz, son increíblemente adaptables y atroces cuando se les empuja a una esquina...
Madame Gao tomó la cuerda que bajaba el telon y por consiguiente la única luz en el auditorio
—Si alguna rata sobrevive a la cacería, esa rata tendrá un lugar aquí. Por siempre un legado....
La maestra de la muerte hizo una pausa.
—Hay una rata en especial que vale por cien de ellas, el peligro recorre sus venas y hay una clara ventaja de esta rata con respecto a las demás... Ya saben de quién hablo, la rata más peligrosa y temida del Dominio, su caja era diferente; quien me traiga su cabeza recibirá una recompensa excepcional, incluso si lo hace otra rata... la familia de quién cumpla con el objetivo recibirá un trato especial por parte del gremio...
—Su examen final comienza en el momento en que está luz se apague, vayan trabajen juntos... Maten a las ratas...
En ese momento el telón se cerró y el auditorio quedo en la más profunda y detestable oscuridad imaginable.
.....
Nota
¡Gracias por tener paciencia!
nos leemos en el siguiente capítulo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro