La mayor parte de mi vida fui una mujer sumisa, lo seguí siendo cuando entré a trabajar a la casa del que sería el amor de mi vida y sufrí por ese amor como no tienen idea; incluso, aún lo hago. Pero cuando descubrí que estaba embarazada me convertí en una mujer decidida y luché por mi bebé, debía ser fuerte por las dos. Ahora mi única misión en la vida es protegerla para que no sufra lo que yo.

Mi único temor es retroceder y que vayamos de vuelta al pasado, que ella descubra una verdad que anhela saber y termine odiándome por habérselo ocultado tanto tiempo.

Sin embargo, esta historia no es solo sobre mí, también es sobre mi hija. La historia de mi hija relata como sin querer volvemos a toparnos con nuestro pasado y pueden ocurrir cosas sorprendentes.