XVII
Asegúrame que nunca vas a volver a lo mismo, por favor, dime que las líneas sobre tu piel no volverán nunca a abrirse bajo tu tristeza.
Si sientes esa necesidad llámame.
Aun siendo yo el problema.
Tú eres lo más importante entre nosotros.
Déjame besar tu piel maltratada.
Desnúdate, metafóricamente, el alma; así podré ver como de rota está y cuanto debo zurcirla con trozos de mi piel.
Desnúdate, literalmente; besaré tu cuerpo diciéndote con mis labios cuanto deseo verte feliz.
Desnudémonos para saber más el uno del otro, destapando nuestros amaneceres abrazados.
Desnúdame.
Desnúdate.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro