Narrador

—¡Auch!— Se quejo la pequeña niña al recibir un golpe en la cabeza de parte de su madre.

—¡Me tenias preocupada! ¿¡Como pudiste ir te así!?— La madre de la joven regañaba a su hija, ya que se fue apurada de la casa y cuando ella fue donde la vería no estaba, entro en pánico.

—Pero al menos estoy viva, incluso. Ese chico de allí me trajo— Apunto al pequeño castaño de ojos verdes.

—¡Sabes que te vendrá un castigo!—Finalizo con mucho enojó.

El Kazegake había llegado en ese momento, claro que la pequeña niña reaccionó de inmediato haciendo que el niño de ojos verdes y su propia madre se avergonzaran de ella.

—¿¡Usted es el Kazekage!? WOW, ¡¡USTED ES GRANDIOSO!!— Chillaba la pequeña niña dejando algo confundido al de mayor autoridad.

La niña no tardó ser callada por su madre en cuestión de segundos.

La niña balbuceaba cosas mientras la madre, aún tenia su mano en la boca de la menor para que dejará de chillar cosas. El Kazegake sorprendido por la actitud de la menor, se inmuto a dar una pequeña sonrisa cosa que le dio ternura y se puso algo embarazoso al escuchar ciertas cosas que dijo la pequeña.

—Hija, puedes ir a jugar con el hijo del Kazegake, ¿Por favor?— La madre miro a su hija que raramente la miro desconcertada.

—¿Hijo del Kazegake?— Repitió la menor —La única persona de mi edad que conozco es el idiota de ahí —Sin vergüenza ajena, apunto al niño de ojos verdes.

El Kazegake la miro con sorpresa para luego dar otra diminuta sonrisa.

—Perdón por no presentarlo. El es Shinki, mi hijo adoptivo — El pelirrojo abrazo de los hombros al chico, pero tuvo que agacharse por la diferencia de estatura.

— ¿¡S-SU HIJO!? —Grito plasmada la pequeña, quien veía a cierto niño de ojos verdes.

— ¿Acaso no sabias eso?—La madre de la joven se sorprendió ya que sabia que su hija es muy fanática del Kazegake, tanto así que sabia su vida completa. Bueno, casi toda.

—Esto es muy nuevo para mi— Pronuncio la pequeña poniendo una de sus manos en su pequeña frente haciendo una pose dramática.

—Bueno, ahora lo sabes. ¿Vamos?—Hablo el niño de hermosos ojos verdes. Claro que quería salir rápido de ahí ya que se le hacia aburrido las conversaciones de adultos..

—¡Obligame prro! — Chillo la niña frunciendo el ceño de una forma retante y divertida.

—Si tú lo dices— Se encogió de hombros el pequeño castaño.

❍━━━━❑❒❖❑❒━━━━❍
8:48 P.M

—¡Ouch, Ten más cuidado para la otra! — La niña fue literalmente arrastrada por su nuevo amigo que sin su consentimiento la llevo a otro lado.

— Si claro, como digas — Pronuncio el castaño para sentarse al lado de ella.

La chica se sorprendió al ver que este se sentara al lado de ella. Con sus ojos bien saltones lo seguía mirando, perdiéndose en sus ojos verdes y del espectáculo "gratis" que estaba a punto de comenzar.

— ¿Que miras?, ¿Acaso te gusto? — Con esas simple palabras, hizo que su nueva amiga se sonrojara a más no poder.

—¿Qu-Que?, ¡¡Claro que no!! — Exclamo la pequeña para mirar los fuegos fuegos artificiales que acababan de empezar. —Vaya.. Son tan hermosos como dicen—.

— ¿Hm..? — Shinki miro a la chica con cierta sorpresa en sus ojos. ¿Acaso era posible que nunca los hubiera visto?. —  Tu nunca... ¿Nunca los has visto, cierto? —

— ¿Eh?.. —Su pregunta confundió a la pequeña niña — Bueno... Cada vez que estos eventos ocurrían, en los otros lugares que he vivido. Nunca pude ver ni uno solo, ya que mis padres siempre estaban trabajando y no me dejaban ir sola, aparte de que vivíamos lejos de aquellos sitios donde ocurrían...

La niña con cierta melancolía hablaba, claro que su compañero si se había dado cuenta de esto pero su mayor preocupación era de que se pusiera a llorar. A pesar del poco tiempo que tenían conociéndose, el no podría aguantar verla llorar. Ya que para el, era su amiga. Su única amiga de verdad.

—Perdón por eso— Ella le dio una sonrisa.— Por cierto, ¿Que hora es?

— Son las och- —Este se quedó con las palabras en la boca ya que su amiga había lanzado un chillido.

— ¡¡MI OKA-SAN VA A MATARME!! —Grito con susto ya que más de una vez se encontraba con estas situaciones, y no le gustaba para nada sus castigos.

—¿Quieres que te lleve? —Hablo en seco.

— ¡¡Por favor!!, Si me pierdo y llego más tarde sera peor mi castigo— Dijo preocupada la chica

Ella se había abalanzado sobre su nuevo amigo para abrazarlo y que sin querer le había sacado un ligero sonrojo junto con una diminuta sonrisa.

❍━━━━❑❒❖❑❒━━━━❍
9:37 P.M

—¡¡Estas castigada!! — Finalizo la madre de la pequeña.

— Oto-san —Miro a su padre y este miro a su esposa para volver a mirar a su hija. 

— A tu cuarto.— Finalizo el mayor de toda la casa.

La pequeña con una expresión seria y cabeza baja soltó un 'Si Oto-san' para seguir caminando directo a su habitación. A pesar de estar acostumbrada a los castigos, siempre la ponían de mala gana ya que le gustaría que sus padres fueran más flexibles con ella al menos una vez.

Caminaba dirección a su habitación mientras pensaba que sin darse cuenta había llegado. Cerro la puerta para darse medía vuelta y percatarse que estaba la ventana abierta. Al principio pensó que era producto de no haber estado en casa todo el día así que cerro. La ventana, pero al pasar de los segundos escuchaba la respiración de alguien más en el cuarto.

  — Por poco y pensaba que ya habías muerto, a decir verdad. Los gritos de tú madre me asustaron, tanto así que estuve a nada de bajar— Aquel pequeño de cabellos castaños que conoció en la aldea se encontraba sentado en el escritorio de la chica. 

  — Si te vas a creer Peter Pan justamente ahora mejor vete, no estoy de humor— La pequeña miraba a su nuevo amigo algo desafiante, a decir verdad. Las discusiones que tenía con sus padres hacían que esta se pusiera de mal humor.

  — Tal vez quiera ser Peter Pan solo contigo— Ese pequeño comentario basto para que ____ se sonrojara bastante. Este se empezó a acercarse y aquella que estaba sonrojada se pusiera nerviosa.

  — Basta de juegos, ¿S-si? — Tartamudeo la joven por la cercanía que tenía con Shinki desviando la mirada hacia la ventana, bastante sonrojada.

El poseedor de de aquellos ojos verdes quien era el culpable de aquella cercanía, levanto su mano haciendo que la otra por impulso reaccionara cerrando sus ojos fuertemente, puso su dichosa mano en el mentón de la otra, esta sin esperarse-lo abrió los ojos de un, bastante sorprendida.  Aquel pequeño que era un poco más alto que ella por escasos centímetros, movió la cara de ella bastante despacio mirando aquellos ojos bastante bonitos por la poca cercanía que tenían entre ellos. Sus respiraciones chocaban entre si, podía ver cada detalle de ella y viceversa. La escena era totalmente perfecta, la luz que generaba la luna al entrar por la ventana daba un aire bastante agradable. Los dos a pesar de su edad sabían que estaba mal pero no iban a dejar esto así como así, sabían perfectamente que entre los dos iba a pasar algo, no necesariamente ahora. Hablaban del futuro. 

El de ojos verdes dio el gran paso, bueno ni tan grande pero a pesar de su corta edad entendía lo que hacia. este corto la distancia dándole un tierno beso en la punta de la nariz. Se podía escuchar perfectamente como ambos corazones latían tan fuerte que podrían llegar a salirse de sus cuerpos. Este se alejo de aquel tierno beso que le dio para dirigirse a la ventana y abrirla. 

  — ¿Vienes?—  este le extendió la mano hacia su futuro . Esta dudosamente se acerco donde el para tomarlo de la mano con algo de timidez.

  — Si mi oka-san se entera de esto capaz termine muerta— Hablo para reír un poco. 

  —  Si eso pasa me asegurare de estar a tú lado para protegerte—  Entre ellos se miraron a los ojos para reírse los dos juntos para salir a dar una vuelta por Suna.

  * .:｡✧*ﾟ ﾟ･ ✧.｡. * * .:｡✧*ﾟ ﾟ･ ✧.｡. * . *.:｡✧ *ﾟ ﾟ･ ✧.｡. *.
┊ ┊ ┊ ┊ ┊ ┊
┊ ┊ ┊ ┊ ˚✩ ⋆｡˚ ✩
┊ ┊ ┊ ✩
┊ ┊ 🌙⋆
┊ ⊹ Fin
✧ ┊ . ˚❁Castigo mejorado❁
˚✩ Ep: 2