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Narrador omnisciente.

Domingo 23 de Junio.

5:00 pm.

El servicio en la iglesia había dado inicio. La esposa del pastor leyó un salmo para la apertura e hizo una oración pidiendo que el espíritu fuera dirigiendo todo lo que se iba a estar haciendo.

Posteriormente, dejó el lugar al grupo "Luz en la oscuridad" para que dirigieran la adoración y la alabanza.

Dan comenzo cantando junto a Mía, mientras los demás tocaban los instrumentos. Paola la guitarra, Rodrigo la batería y José el teclado.

Poco a poco la atmósfera del lugar fue cambiando. El espíritu santo comenzó a moverse de una manera sorprendente sobre cada vida trayendo libertad, consolación, fortaleza.

Todos adoraban con gran fervor y con todo el corazón. Era un momento único, de esos que quedan grabados por siempre.

Cuando la adoración terminó, continuaron con la alabanza. Todos cantaban, aplaudían, y danzaban con gran libertad mientras la presencia de Dios fluía como un río dentro de cada corazón.

— ¿Quién vive? — exclamó Dan a traves del micrófono.

— ¡CRISTO! — Respondió toda la congregación a gran voz.

— ¿Y a su nombre?

— ¡GLORIA!

— ¿Y a su pueblo?

— ¡LA VICTORIA!

Todo el lugar se inundó de aplausos para el Rey de Reyes y Señor de Señores.

— Ahora estaré dando el lugar a nuestro pastor quien nos estará trayendo la palabra de Dios.

El pastor Isaac subió al altar y tomó el micrófono. Los integrantes del grupo bajaron a sentarse en sus lugares.

— Dios los bendiga hermanos y hermanas.

— ¡Amén! — dijeron al unísono.

— Antes de que meditemos en la palabra los voy a invitar a que se pongan de pie y vamos a estar elevando una oración...

Se pusieron de pie y comenzaron a orar pidiendo que Dios trajera revelación de su palabra a cada una de sus vidas y que el espíritu santo los dirigiera. Cuando acabaron de orar el pastor siguió hablando.

— Así como están de pie, voy a invitar a que busquen en sus biblias en el libro de Hebreos capítulo 12 versículos 1 al 3.

¹Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante,
²Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios.
³Considerad a aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra si mismo, para que vuestro ánimo no se canse hasta desmayar.

Luego de leer los versículos, la congregación procedió a sentarse mientras el pastor seguía hablando.

— El autor de hebreos nos habla y nos anima acerca de como permanecer en la fe. Nos dice en el capítulo anterior, Hebreos 11:1 — es pues la fe la certeza de lo se espera, la convicción de lo que no se ve.
La fe es la confianza en las promesas de Dios, y cuando nosotros decidimos poner nuestra fe en Cristo, cuando elegimos creer en él y en el sacrificio que hizo por amor en la cruz nos encontramos en una carrera.
Cuándo decidimos caminar con Cristo, en su camino, nos encontramos en una carrera, la biblia lo llama la carrera de la fe, teniendo como meta alcanzar la vida eterna, llegar a lo que Dios tiene preparado para nosotros.
En el versículo 1 que acabamos de leer, se esta refiriendo, hablando de estos testigos, de aquellas personas que nos menciona el capitulo 11, donde podemos ver que nos habla acerca de la fe que tuvieron estos hombres (Abel, Enoc, Noé, Abraham y muchos otros que menciona) Hebreos 11:33 — nos dice que por fe conquistaron reinos, hicieron justicia, alcanzaron promesas...
Y la lista continua.
Por su fe, estos hombres, estas personas alcanzaron buen testimonio, y sus vidas son testimonios de su Fe en Dios, Y a pesar de que muchas de estas personas que menciona no recibieron o no vieron lo que se les habia prometido ellos se mantuvieron firmes en su fe en Dios. Sus vidas son testimonios acerca de su fe, acerca de su permanencia en la fe para nosotros hoy en dia.
Entonces ¿Cómo debemos nosotros avanzar en esta carrera?

Todos escuchaban atentamente, unos cuantos asentian. Erick sentado en las bancas de en medio, ponía atención a cada palabra, quería saber más y comprender mas.

El pastor siguió explicando acerca del tema, dando continuidad al versículo 1, habló acerca de que era necesario despojarse de todo peso, de todas aquellas cosas que eran una carga o una distracción para avanzar en el camino de Dios. Y sobretodo, despojarse del pecado que tan fácilmente puede hacernos desviar de nuestro caminar con Dios, porque Dios anhela que vivamos una vida agradable ante él.

Como segundo punto mencionó; dando continuidad al versículo: y corramos con Paciencia la carrera que tenemos por delante. La palabra griega que se usa para paciencia significa "Perseverancia". En el camino de Dios tenemos que tener Perseverancia, porque aunque aveces nos equivocamos, o sentimos que ya no podemos o ya no queremos seguir, tenemos que perseverar, tenemos que mantenernos firmes en nuestra fe, para que un día Cristo nos de la recompensa que ha prometido; porqué como en una carrera normal hay una meta a la cual llegar y un premio; para aquellos que le sirven fielmente y sobretodo no dejar de ver a Cristo, nuestra mirada siempre debe estar fija en él, nuestra confianza debe estar totalmente puesta en él para que nuestro ánimo no decaiga sino día a día se fortalezca.

Erick estaba atento sintiendo que aquellas palabras eran para él, porque debido a las tentaciones que habían venido a su vida pensaba que tal vez eso no era lo suyo, que tal vez ser Cristiano no era para él, pero al estar ahí comprendía que debía resistir, debía perseverar y avanzar.

El pastor terminó con una palabra que quedó grabada en el corazón y la mente de muchos de los hermanos y hermanas, pues era Dios a través de él quien estaba hablando.

— Cristo viene pronto hermanos...— Todos respondieron con un "amén" — No es tiempo de retroceder, no es tiempo de mirar atras, es tiempo de seguir avanzando hacia la meta fijando nuestra mirada en él...Cristo viene por una iglesia pura y sin mancha, una iglesia que persevera, que se mantiene firme en su Fe. Que no retrocede, que no vuelve al mundo, que no mira hacia atrás. Una iglesia que avanza dia a dia fijando la mirada en él sabiendo que al final de la jornada recibira la recompensa.

Cerró los ojos e invitó a la congregación a ponerse de pie.

— Hoy Dios te dice: Aunque el camino sea largo y pesado: ¡Avanza!
Aunque te falten las fuerzas: ¡Avanza!
Aunque sientas qué ya no puedes o ya no quieres seguir: ¡pero Avanza! ¡no te rindas!
Porque al final de la jornada, al final del camino, al terminar la carrera, Dios te dara la corona de Vida que Él ha prometido.

Comenzaron a orar e hizo el llamado para los que quisieran pasar al altar. Fue un momento asombroso donde el espíritu santo comenzó a moverse y obrar en cada vida.

.....

7:30 pm.

El servicio había culminado hace unos minutos. Todos se saludaban unos a otros.

Erick se levantó de su asiento y buscó a Mía con la mirada, necesitaba hablar con ella. Cuándo la encontró sonrió y caminó hacia el frente.

Mía platicaba animadamente con Diego y reía. A Erick, eso era algo que no le agradaba mucho, pues estaba decidido a recuperarla.

— Hola — los saludó. Ambos voltearon.

— Hola Erick, Dios te bendiga — respondió Diego.

— Amén.

— Hola — dijo Mía casi en un susurro.

Erick sonrió al escucharla. Volteó a ver al otro chico y le dijo:

— ¿Será que podrías dejarme a solas con Mía un minuto?

Diego desvaneció su sonrisa al instante, sin embargo asintió y se fue dejandolos solos.

Estuvieron unos segundos en silencio hasta que Erick se animó a hablar:

— No has respondido mis mensajes...

— Lo siento — contestó la chica.

— Necesito hablar contigo — continuó diciendo sin dejar de verla, Mía por su parte mantenía la mirada hacia el suelo — ¿Quieres salir conmigo? Para que hablemos...

— ¿Hoy? — alzó la vista encontrandose con su mirada, esos ojos verdes la observaban.

— Si — Erick sonrió — podemos ir a cenar si quieres...

Mía estuvo tentada a acceder de inmediato, pero no lo hizo al recordar algo, ya había quedado con su madre para cenar junto a ella.

— Hoy no puedo...— dijo — además, ya es noche, ¿podría ser otro día, pero en la mañana o en la tarde?

— Esta bien — asintió — ¿Tienes tiempo mañana en la tarde, como a las 5?

— Si, claro...mañana entonces.

— Gracias — le sonrió — Debo irme...Dios te bendiga Mía.

— Igualmente a ti — correspondió a la sonrisa.

Erick le tendió la mano para saludarla, ella también pero cuando iba a soltarse, él se aferró a su mano y la llevó hasta sus labios depositando un beso.

Mía bajó la mirada sonrojada.

— Hasta mañana, Princesa...

La soltó y se fue. Ella dejó salir un suspiro.

Diego, quien desde la puerta principal los observaba, sintió su corazón romperse en mil pedazos al verlos ahí juntos, y más aún al ver cómo Erick besaba su mano.

N/A

Holi!❤

Quise compartirles el mensaje que compartí en mi iglesia el día sábado, pero era tan extenso que solo lo resumí.
Espero pueda ser de bendición para sus vidas como lo ha sido para mi💫.

Dios los bendiga!

Pdt. ¿Alguien quiere una dedicatoria?✌

Atte: PAOLA R.