Naru-chan hace relaciones internacionales
Historia original de "Kyogre", enlace historia original:
https://archiveofourown.org/works/30822917/chapters/76365203#workskin
Descargo de responsabilidad: Naruto no me pertenece, todo es propiedad de Kishimoto.
Aviso (del autor original): Esto fue escrito antes de que hubiera visto a Fuu en acción y definitivamente antes del relleno de anime que mostraba un poco más su personalidad. Por esa razón, esto no refleja su objetivo de hacer cien amigos u otras peculiaridades.
"Entonces, ¿qué quieres para tu cumpleaños, renacuajo?" preguntó Jiraiya "¡Vas a cumplir cinco años, solo un año de la Academia!"
El propio Jiraiya y sus dos compañeros de equipo ya habían sido genin a las seis, pero cosas como la inscripción anticipada se prohibieron poco después de la pequeña hazaña de Kakashi de ingresar a las cuatro y terminar a las cinco. Probablemente fue lo mejor. Mayor fanático o no, Jiraiya tuvo que admitir que Kakashi no estaba bien de la cabeza.
No es que Kushina hubiera permitido que Naruto se inscribiera temprano de todos modos.
"Juego completo de Icha-Icha, edición especial, con autógrafo", dijo Naruto, sorbiendo lo último de su ramen.
"¡Jaja, gran elección!" Jiraiya se rió. Y fácil de hacer para él también— "¡Espera un minuto! ¡Eso no es bueno! ¡¿Estás tratando de hacer que me maten?!"
Naruto puso los ojos en blanco "No voy a leerlo, Ero-Sennin", dijo, tan desdeñosamente que Jiraiya se sintió instantáneamente insultado en nombre de sus amadas novelas "Quiero que se los entreguen a Marimo Books en Onodera Town. Son para un... amigo"
¿Por qué tienes amigos en un pueblo fronterizo con Kusa?, pensó Jiraiya pero no preguntó. Esta fue una oportunidad perfecta para obtener una idea del misterio de su lindo y pequeño ahijado definitivamente no normal.
"¡Está bien, los entregaré yo mismo!" él declaró.
El individuo que vino a recoger los libros no podría haber sido más sospechoso: una figura alta y corpulenta completamente envuelta en túnicas pesadas debajo de un sombrero de ala ancha. Jiraiya no pudo ver una sola característica distintiva, aparte de la impresionante altura.
Eso, quienquiera y lo que sea que fuera, resonaba mientras caminaba.
"Entonces, ¿recoges algo a nombre de Uzumaki Naruto?" Jiraiya dijo, poniendo su sonrisa más cautivadora. Y no era ese otro dato interesante, ¿Por qué Naruto había pedido usar el apellido de soltera de su madre?
"... Sí, así es", dijo la figura, extendiendo las manos ligeramente temblorosas. Aceptando el paquete con reverente cuidado, el hombre, a juzgar por su voz, cayó de rodillas en alegre adulación.
Bueno, en realidad eso era bastante normal. Jiraiya tenía muchos fans así.
"¿Puedo... puedo darte la mano, Jiraiya-sama?" preguntó el extraño.
"Jaja, sí, claro", dijo Jiraiya, hinchado de orgullo.
Fue solo después de que tuvieron una larga y agradable conversación sobre las escenas favoritas del extraño y él se fuera, agarrando sus nuevos tesoros, que Jiraiya se dio cuenta de que no había descubierto nada útil, al menos en lo que respecta a Naruto.
"Está bien", declaró Han, en el próximo momento de la familia bijuu-jinchuuriki "Cooperación, paz mundial, amor, armonía, lo que sea. Estoy a bordo" Soltó una risita inquietante y, aunque era difícil saberlo detrás de la placa frontal, pareció sonrojarse como el pervertido que era.
"No puedo creer que esto sea lo que se necesita", murmuró Kokuou "Humanos..."
"Es un progreso", decidió Naruto con optimismo "Asegúrate de hablar con ese viejo barbudo también. Necesitas ser más amable con Son"
"Correcto", asintió Han, su mente claramente en otros asuntos pervertidos.
"Genial. Eso solo deja a Fuu-chan", reflexionó Naruto en voz alta. B había prometido enseñarle a Yugito la forma correcta de llevarse bien con Matatabi, y Yagura estaba vigilando a Utakata y su maestro "Y luego tendremos a todos tomando en serio sus asociaciones... y estar listos para Akatsuki, antes de que comiencen a moverse"
"¿Los malos realmente van a tratar de llevarse a Shukaku?" preguntó Gaara. Sentado sobre los hombros de Naruto, nerviosamente agarró los mechones rubios y miró entre el chico mayor y el bijuu en cuestión.
"¡Pwah! ¡Que vengan! ¡Esta vez los destrozaremos!" Shukaku gritó, moviendo sus garras con entusiasmo.
"No te preocupes, no dejaremos que eso suceda", prometió Naruto, acariciando la pierna del niño. Definitivamente no quería volver a ver el cuerpo inmóvil de su amigo. Esta vez, después de haber visto, aunque solo fuera a ratos, cómo Gaara crecía, sería aún peor.
"Los humanos siempre son así", dijo Matatabi, inmerso en una conversación diferente con el otro bijuu "Todo es romance, intimidad y sexo con ellos. Yugito actúa muy seria en las misiones, pero en el momento en que está fuera del horario, son comedias románticas blandas y suspirando por chicos lindos, otra vez" El gran gato resopló pesadamente.
"Chicos lindos, eh..." dijo Choumei pensativo, y miró especulativamente a Naruto y Yagura "Sabes, creo que tengo una idea sobre hacer que Fuu siga el juego..."
Naruto solo parecía confundido, pero Yagura, siendo más rápido en la comprensión, protestó: "¡No soy un niño! ¡Soy un hombre adulto!" Aparentemente, esa era la única parte que le importaba.
La traición de Kumo había sacudido a todos, pero Minato no se dio por vencido tan fácilmente en cumplir el sueño de paz mundial de su maestro. De hecho, el único más comprometido con la paz mundial era Naruto, pero sus esfuerzos por lograrla permanecieron tristemente desconocidos para casi todos.
El primer paso, según la estimación de Minato, fue preservar y fortalecer la alianza tentativa con Suna. Fue por esa razón que tomó la decisión de viajar a Suna para observar la ronda final de los exámenes de Chuunin que se realizaba allí.
Los mayores protestaron, por supuesto, pero Minato sonrió y los ignoró. Nada se arriesga, nada se gana, como decía el refrán.
Además, podría decirse que era la persona con menos probabilidades de estar realmente en peligro, incluso si Suna intentara algo.
Cuando Minato llegó a Suna, el Kazekage estaba casi tan incrédulo como lo habían estado los ancianos. Observó a Minato casi como si esperara que el Hokage de repente resultara estar hecho de etiquetas explosivas. Minato mantuvo su mejor sonrisa de líder benevolente firmemente en su lugar.
¿Era la idea de buscar la paz realmente tan extraña? Bueno, sí, admitió Minato para sí mismo. Algunos días, no estaba seguro de creerlo. O más bien, ni siquiera estaba seguro de qué era lo que estaba tratando de alcanzar ¿Cómo era la paz? Era como avanzar a trompicones obstinadamente, ciego y sordo.
Pero, para alivio de Minato, el Kazekage al menos se estaba tomando todo el asunto en serio. Antes de que pudieran dirigirse al estadio, Minato fue presentado a todo el consejo asesor, y también a los tres hijos del Kazekage. Los dos mayores miraron a Minato casi con tanta desconfianza como los viejos, pero el más joven lo miró con ojos muy abiertos y asombrados.
"¡Naru! ¡Naru, viniste!" exclamó y se aferró a las piernas de Minato.
"¡Gaara!" siseó la chica, escandalizada.
El Kazekage suspiró profundamente y se estiró para intentar apartar a Gaara "Ese no es tu amigo imaginario", lo regañó "¿Cuántas veces tengo que decirte que no es real?"
Una ola de arena se elevó para bloquear sus manos, y Gaara siguió frotando su mejilla contra Minato.
"Oh, ya veo", murmuró Minato, cuando finalmente hizo clic. Se arrodilló junto al niño y sonrió "Gaara, ¿verdad? Mi nombre es Minato. Encantado de conocerte"
Gaara parpadeó confundido por un momento. Luego, sus ojos se nublaron un poco mientras parecía perderse en sus pensamientos. Era una expresión que Minato reconoció fácilmente "Así que no eres Naru..." Se detuvo, haciendo un puchero como si hubiera sido castigado.
"Sabes, tengo un hijo de tu edad", dijo Minato, más para el beneficio de todos los demás "Su nombre es Naruto"
"¿Mi edad?" Gaara repitió, su rostro arrugándose en confusión.
"Espero que ustedes dos puedan convertirse en buenos amigos", continuó Minato.
Podía sentir el puro escepticismo y la incredulidad de los concejales de Suna ¿Un ninja de Konoha y un ninja de Suna, amigos? Imposible. Pero Gaara solo hizo un puchero "Naru y yo ya somos amigos", resopló, lanzando a Minato una mirada de fastidio.
Finalmente, su hermana mayor logró alejar a Gaara. Enderezándose, Minato vio que el chico miraba por encima del hombro, sonreía y saludaba. El Hokage sonrió y le devolvió el saludo.
"Mis disculpas", dijo el Kazekage, suspirando de una manera familiar para todos los padres "Gaara es... todavía un niño"
"Tu hijo es muy lindo", dijo Minato felizmente al Kazekage "Mi Naru-chan también es un revoltoso. Realmente espero que los dos puedan ser amigos... Tienen mucho en común"
No sabía cómo era la paz. Probablemente, él no lo reconocería incluso si lo encontrara. Pero eso estaba bien. De alguna manera, Minato estaba seguro de que Naruto lo sabía, y eso fue suficiente. Incluso ciego y sordo, sería capaz de seguir el ejemplo de Naruto.
"Como jinchuuriki", concluyó Minato, observando cómo los ojos del Kazekage se abrían de par en par, comprendiendo.
Nada arriesgado, nada ganado.
Cuando llegó la propuesta de tratado de Kiri, los ancianos y el consejo jounin estallaron en protestas y acusaciones.
¿Paz? ¿Con la Niebla Sangrienta? ¡Era solo otra trampa, como el supuesto tratado de Kumo!
Minato los escuchó pacientemente, a pesar de que ya había tomado la decisión de ir "¿Qué sabemos sobre Nami no Kuni? ¿Por qué el Mizukage lo sugirió como lugar de reunión?" preguntó, durante una pausa.
"No puedes tener la intención de ir en serio", dijo Koharu con brusquedad "Tú eres el Hokage. Piensa en tu posición"
"El hecho de que el Mizukage desee asistir en persona es una señal de lo serio que se toma este tratado", señaló Minato "Y según todos los informes, Yondaime Yagura tiene una visión del futuro de Kiri muy diferente a la de su predecesor. Kiri se está unificando y fortaleciendo. Nos conviene aprender más sobre ellos y construir una alianza"
Su lógica, una mezcla de practicidad egoísta que los mayores entenderían y su propia ideología, era difícil de refutar.
"Nami no Kuni es una pequeña nación frente a nuestra costa, casi directamente al este", dijo Shikaku pensativamente "Nunca ha tenido mucho valor estratégico y no aparece en la mayoría de los mapas. Pero podría servir como punto de intercambio en el futuro, si las negociaciones dan resultado"
"Con suerte, estará en todos los mapas de aquí en adelante, como el lugar donde Konoha y Kiri se aliaron por primera vez", dijo Minato, ignorando los resoplidos de incredulidad de los ancianos y varios jounin.
Nadie pudo disuadirlo, por supuesto, pero la discusión sobre quién lo acompañaría y con qué tipo de fuerza se alargó lo suficiente como para poner a prueba incluso la paciencia de Minato. Al final, Minato amenazó, muy cortésmente, con escabullirse en medio de la noche con uno o dos guardias, lo que puso fin a las demandas más ridículas.
Todo fue un sinsentido al final. El Mizukage Yagura era bueno en su palabra. No había engaño en su mirada o en su tono cuando saludó respetuosamente a Minato en el castillo de un señor local.
Los dos Kiri shinobi que lo acompañaban, ambos portando espadas que los marcaban como miembros de los Siete Espadachines Ninja, miraron al séquito de Minato con desconfianza y recibieron miradas igualmente desconfiadas a cambio.
Minato y Yagura se sonrieron el uno al otro.
Las conversaciones eran solo preliminares, Yagura tenía su propio consejo al que responder, pero Minato se permitió una pequeña medida de optimismo, que fue muy útil cuando Yagura le pidió que diera un breve paseo con él, sin sus guardias.
Una vez que estuvieron solos, Yagura dudó un momento antes de comenzar "¿Sabías que... los bijuu pueden comunicarse entre sí, independientemente de la distancia o los sellos?" preguntó, alejándose del paisaje marino para observar a Minato de cerca.
El hecho de que el Yondaime Mizukage fuera un jinchuuriki era un secreto a voces. Así fue como se había distinguido por primera vez: sometiendo sin ayuda al Sanbi después de que se reformara.
Minato entendió su significado inmediatamente "Jinchuuriki también," dijo, con tranquila certeza.
De repente, muchas cosas cobraron sentido. Minato había sospechado algo por el estilo, pero la confirmación fue suficiente para permitir que varias piezas finalmente se deslizaran en su lugar y encajaran.
Casi se perdió el asentimiento de Yagura "Si están lo suficientemente cerca de su bijuu", dijo, aliviando un poco la tensión "No estaba seguro si te lo había dicho... Pero eso lo hace más fácil. Tenía otra razón para desear hablar contigo. Se trata de ese hombre enmascarado, que atacó tu aldea hace cinco años..."
Cuando regresó a Konoha, lo primero que hizo Minato fue encontrar a Naruto y abrazar al niño pequeño en un fuerte abrazo.
"Gracias por todo su arduo trabajo", dijo.
No estaba hablando de los esfuerzos de Naruto para convertir el Monumento Hokage en una exhibición de arte expresionista, nuevamente.
El primer jinchuuriki que conoció a Naruto en persona fue Fuu.
Desafortunadamente, fue solo después de un espectáculo completo. Como de costumbre, Kurama murmuró secamente.
Primero, una pequeña historia de fondo. Fuu había nacido unos años antes que Naruto y estaba firmemente en la preadolescencia al borde de la etapa de la pubertad.
Su condición de jinchuuriki era una fuente continua de desconcierto para las otras personas de Takigakure: había sucedido de manera similar a la situación de Naruto, por necesidad de hacer algo con respecto a un bijuu violento en lugar de por el deseo de tal arma. Eran un pueblo pequeño, que se enorgullecía del sigilo y la sutileza, en lugar del poder ¿Qué se suponía que debían hacer con un jinchuuriki?
La mayoría de ellos prefirieron olvidar que Fuu era diferente de otras jóvenes kunoichi.
Así que Fuu había crecido mayormente bien, aunque algo aislada y, como resultado, bastante propensa al dramatismo. La capacidad de volar y generar sus propias lluvias de brillo probablemente también tuvo algo que ver con eso.
Ella se había enamorado muchísimo de uno de los mejores jounin del pueblo. Era fuerte, guapo y algo así como quince años mayor que ella. Cuando Fuu trató de acercarse a él, él la miró y dijo: "¿Quién eres tú otra vez? Escucha, corre, pequeña, tu sensei debe estar buscándote"
Sólo había una cosa que hacer. Fuu huyó llorando. Inicialmente, desapareció en los densos bosques alrededor de la aldea para deprimirse, pero verter su corazón roto a las ardillas envejeció rápidamente, y se mudó de nuevo a Taki. Tomando posición en la parte superior del centro administrativo, se lamentó melodramáticamente y sollozó por su dolor.
Desafortunadamente, los otros residentes de Taki parecían tener poca simpatía por las pruebas del corazón de una niña, al menos cuando ella insistía en maullar sobre ellos literalmente día y noche, cada vez más fuerte, y una anciana finalmente recurrió a arrojar su sandalia a Fuu. cabeza, gritando: "¡Cállate de una vez, pequeña trompeta! ¡Lo que hay que ver, los niños de estos días!"
Claramente, no entendían su difícil situación.
Bueno, ¡bien, perfecto! Entonces, Fuu solo tendría que ir con el único hombre que siempre la había escuchado con paciencia, compartió su amor por lo dramático y resultó ser fuerte, guapo y mayor que ella, ¡aunque no tanto!
En otras palabras, ella voló para encontrar a Uzumaki Naruto.
(Por cierto, Naruto nunca había logrado dejar el hábito de usar el apellido de soltera de su madre. Parte del problema era que todos los que conocía ya sabían quién era, por lo que no necesitaba presentarse. Parte del problema era que las pocas veces que se equivocó, Kushina se había regodeado demasiado como para corregirlo)
El Cuerpo de Sensores de Konoha entró en completo pánico cuando algo atravesó la barrera en lo alto del cielo, pero Fuu no sabía nada de eso. En cambio, voló directamente al edificio más grande y llamativo.
Allí, vio a un rubio alto y bien parecido, y procedió a... engullirlo
(El ANBU se asustó casi tanto como el Cuerpo de Sensores)
"¡Naru-san! ¡Olvidemos este mundo cruel y huyamos juntos!" Fuu declaró dramáticamente, apretando su abrazo.
Hubo un momento de profundo silencio.
"Um... No creo que mi esposa esté de acuerdo con eso, señorita", dijo torpemente la persona que Fuu estaba abrazando con entusiasmo.
Esa voz no era la de Naruto.
Fuu retrocedió. Le dio unas palmaditas al hombre en los costados y los hombros, poniéndose de puntillas para alcanzarlo. Demasiado alto. Ella tiró de las colas laterales de su cabello. Demasiado largo. Ella le pellizcó las mejillas. Sin marcas.
"¡Aaaaah!" Fuu gritó, saltando hacia atrás "¡Me equivoqué de persona!... Pero este también es muy guapo..."
Una gruesa cadena hecha de chakra puro se clavó en el suelo entre ella y Minato "¡Retrocede, ladrona de hombres, ese es mío!" una pelirroja furiosa, la esposa, rugió cuando llegó a la escena.
Los ANBU abandonaron sus puestos y huyeron aterrorizados. Nadie los culpó.
Eventualmente arreglaron las cosas, aunque no ayudó mucho. En todo caso, Kushina estaba aún menos feliz de que Fuu "apuntara" a su bebé que de que ella estuviera detrás de Minato.
"Sabes, realmente me pregunto por qué todos esperan que seas mucho más alto", le dijo Minato a Naruto mientras los dos miraban a Fuu y Kushina discutir: se estaba volviendo cruel, ya que Fuu había llamado a Kushina una vieja bruja con un fetiche de esclavitud.
"Eh," Naruto se encogió de hombros "Llegaré allí, algún día"
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