La ceja del pequeño se elevó al percatarse de la llamada misteriosa que su alfa había recibido con una sonrisa de oreja a oreja −cosa que se le hizo completamente raro− ¿Desde cuándo su novio no le sonreía así? Tal vez hace una semana atrás, y es que, no comprendía el por qué aquella sonrisa de conejito que tanto amaba había desaparecido remplazándose por una seria.

Aunque eso no era todo, tampoco lo miraba con dulzura o con ese toque de brillo en los ojos el cual lo hacía especial a todos los demás omegas, ya no, ni siquiera le daba un besito de buenas noches junto con un "Te amo", algo que le dolió mucho al tratar de asimilar.

Se sentía tan triste que no evitó llorar en silencio y liberar feromonas agrias al mismo tiempo que veía a su pareja salir de casa sin avisarle a dónde y a qué hora regresaría.

─ ¡Alfa tonto! ─exclamó aún llorando rumbo a su habitación. Tan solo quería tirarse a su cama para continuar llorando y luego caer en los brazos del morfeo sino fuera porque escuchó la puerta ser abierta, dándole las esperanzas de que se trataban de JungKook, aunque el olor a frambuesa y chicle le hizo pensar lo contrario.

Era Jimin, su mejor amigo.─ TaeTae, cariño ¿Todo bien? ─una voz gruesa se oyó detrás de la puerta.

─ No Hyung, ¿Puede entrar y darme un abrazo? Lo necesito ─le pidió y el pronunciado no dudo en entrar, topándose con Taehyung quien lloriquiaba bajo las sábanas.

Jimin de manera rápida caminó muy preocupado hacia el pequeño y lo envolvió entre sus brazos dejando uno que otro besito en su cabecita. Sabía que su amigo necesitaba cariño por parte de su alfa.

Sin embargo, era un omega reconciliando a otro, también sabía el por qué JungKook actuaba así de raro con Taehyung, aunque prefirió no ser el quien se lo dijera ya que no quería arruinar nada entre esos dos. Por ahora solo quería darle mimos a Taehyung, luego regañaría al alfa de su Dongsaeng.

El plan de JungKook no estaba saliendo como el pensaría que saldría, puesto que estaba haciendo sentir mal a la persona que más amaba.

─ Cre-creo que Nochu quiere terminar conmigo, seguro ya se enamoró de un omega más bonito que yo y-... ─iba a continuar diciendo lo que creía hasta que fue interrumpido.

─ No digas eso, JungKook no sería capas de terminar a una ternurita como tú, ya sé que es idiota en algunas cosas, pero es tu pareja predestinada, Taehyung ¿Sabes lo que eso significa? Ustedes dos deben permanecer juntos porque la luna los eligió, así que vete quitándo esas ideas absurdas de tu cabecita y planea en cómo tener la atención necesitaría de tú alfa. No siempre seré yo quien te de mimitos, a veces Nam se pone celoso ─soltó una risita nasal contagiando al más pequeño.

Entonces fue ahí donde Taehyung decidió hacer todo lo posible para volver a tener la atención de antes, ya no quería llorar, se sentía débil e inútil al hacerlo.

Además, ya no era un niño, sino un adulto con 24 años, puede que sea algo infantil, igualmente eso no quitaba el hecho de que ya era mayor de edad. Taehyung quería mimos ¡Y los obtendría! También quería besitos ¡Y los obtendría! Él era feliz con esas dos cosas.

Después de todo no estaba haciendo nada de malo, solo recuperar al JungKook de antes, quien lo enamoró en su adolescencia con simples cartas de amor la cuales conservaba hasta el día de hoy, era tan bonito la forma en la que de expresaba y lo trataba en ese tiempo.

No como su ex novio Jin quien una vez intentó marcarlo sin consentimiento suyo −una fea experiencia a decir verdad−. Por otro lado su novio no era así, aún no lo había marcado y no pensaba hacerlo si él no se sentía preparado, tampoco habían tenido relaciones sexuales, aunque hubieron veces un tanto incómodas por el celo de Taehyung. Al fin y al cabo nunca hicieron nada más allá de los besos.

Volviendo a la actualidad, Taehyung dejó sus pensamientos a un lado para regalarle una de sus enternecidas sonrisas al igual que un cálido abrazo a quien lo terminó de consolar.

─ Gracias Hyung ─le agradeció desde lo más profundo de su corazoncito, porque su mejor amigo siempre estaba ahí presente cuando más lo necesitaba.

─ ¿Gracias?

─ Sí, por estar para mí ─de manera lenta se separó, admirando está vez el slime eyes del castañito que tanto lo caracterizaba.

─ No agradezcas ─cuando se disponía a pellizcar las mejillas gorditas de Taehyung éste reaccionó mucho más rápido y tomó entre sus manitas las mejillas de su Hyung.

Su sonrisita tierna cambio a una traviesa y sin pensarlo dos veces las apretó, escuchando como respuesta un gran quejido por parte de Jimin que también imitó su acto juguetón.

Ambos amigos reían por tal dolor que sentían en sus rostros hasta cierto punto de hacer muecas raras a causa de los apretones que a sí mismos se daban. Al parecer aquella tristeza había desaparecido como por arte de magia gracias al novio de Namjoon.

៸៸ ♡ ៸៸