Cuando el primer amor se va....

Queda un gran vacío en tu ser.
Dejas de darle el primer lugar a Dios. Todo tu tiempo es consumido por el que hacer del diario vivir.

Poco a poco tu fe va menguando y tus fuerzas se van agotando.
El gozo del que antes disfrutabas va cambiando en pena.
La seguridad y paz que sentías en el Señor se ven opacadas por la inseguridad e intranquilidad.

Cesa tú alabanza y tú adoración.
Llega el desánimo a tú vida.
Cesa tu acción de gracias y tu comunicación con Dios.
Te sientes desmayar.
Ya no quieres seguir caminando.

No todo esta perdido el Señor sigue a tu lado. En su Palabra el nos ha prometido estar con nosotros todos los días de nuestra vida.
En momentos como este es cuando mas debemos acercarnos al trono de la gracia y pedirle al Señor que nos renueve, que nos infunda nuevas fuerzas.

Que calme la tempestad que
a comenzado a rugir dentro de nosotros y que nos devuelva ese amor y pasión que antes sentiamos por Él.
Y él en su infinita misericordia una vez nos hayamos sincerados con Él, nos renovará.