Capítulo 4.
Hooola. De nuevo yo con otra actu.
Tuve algunos problemas y no he escrito nada de esta historia, pero espero pronto poder seguirlo haciendo y actualizar con rapidez 😊 igual les dejo leer, gracias por los votos y comentarios, sus lecturas.
Tocar las nubes con sus dedos lo asemejaba a tocar los labios de Baekhyun que sabían a miel sobre hojuelas. Era un sueño hecho realidad sentir como esos belfos suaves y húmedos se rozaban con los suyos lento y pausado.
Si eso era un sueño, no quería despertar nunca. Podía dar su vida en ese momento con tal de inmortalizar ese instante. Pero todo lo bonito se acaba en algún momento. Casi quiso llorar al sentir los suaves labios del chico más bajo alejarse de los suyos lentamente y después sintió un ligero apretón de mejilla.
Baekhyun se alejó un par de pasos de Chanyeol, casi estando al pie de la puerta listo para huir. ¿Qué diablos había hecho? ¿por qué había besado a la castaña? Ambos chicos se miraron a los ojos pero fue Baekhyun quien desvió la mirada y se adentró por completo en el departamento caminando unos cuantos pasos por la sala, sin decir nada.
Chanyeol se tocó los labios suavemente con sus dedos sintiendo su corazón latir muy deprisa en ese momento. Le costaba mucho tratar de razonar lo que había pasado, solo podía pensar en que Baekhyun lo había besado de la nada y fue la misma gloria. Se giró hacia él para preguntar qué había sido eso.
—Baekkie...
—Tu departamento es muy sencillo para ser una chica —interrumpió el bajito siguiendo caminando por el lugar, cual si estudiara de manera analítica el sitio.
Chanyeol hizo un puchero. No era tonto, se había dado cuenta de que Baekhyun había interrumpido a propósito, pero no importaba. Esbozó una sonrisa, ese beso de su boca nadie se lo podía quitar en ese momento y si Baekhyun había sido solo, era una buena señal, ¿no?
—¿Quieres algo de beber? —preguntó mirando al chico con una sonrisa en sus labios mientras jugaba con sus manos sobre su vestido.
Baekhyun le miró por encima del hombro un momento para después seguir viendo un cuadro que había sobre la mesa junto al televisor de plasma que había en la sala, eran dos mujeres, una bastante mayor a ellos y la otra muchacha se veía muy jóven, y se parecía mucho a Loey según lo que veía, pero también, podía darse cuenta de que no era ella.
—¿Es tu hermana? —inquirió curioso tomando el cuadro.
Chanyeol asintió sin dudarlo dos veces con su cabeza acercándose al chico, había notado ya que estar al lado de Baekhyun al bajito le molestaba darse cuenta de su estatura, por lo cual se sentó en el borde del sillón junto a la televisión. Baekhyun le miró haciendo una mueca.
—Todos dicen que se parece mucho a mí, pero ella es más bonita —comentó la alta tomando el cuadro de su familia. Las extrañaba en ese momento, hacía varios meses que no las había visto—. ¿Tú tienes hermanos? —inquirió sin dejar de sonreír.
—Tengo un hermano mayor —mencionó Baekhyun encogiendo sus hombros un momento y tomó asiento al lado de Loey—. ¿Vives sola aquí? ¿No te da miedo? —preguntó sacando su celular. Era bastante temprano y no tenía mucho que hacer por lo cual quedarse un poco más con la castaña estaba bien.
De alguna manera Baekhyun debía de admitir que la presencia de la chica no le molestaba tanto, al menos no cuando estaba sentada y no parada.
—No me da miedo pero sí, vivo sola —respondió Loey tomando la mano de Baekhyun haciendo que este se sorprenda un poco—. ¿Quieres ir.. . no sé, a dar la vuelta? —preguntó bajito, bastante inseguro de su invitación, sabía ya cómo era Baekhyun con él que podía ser rechazado de pronto.
—Está bien, ¿a dónde quieres ir? —preguntó el más bajo mirando con interés a la chica, en espera de una buena sugerencia.
Chanyeol se quedó un momento en las nubes, realmente no había esperado a que el bajito aceptara su invitación de buenas a primeras, mínimo esperaba un montón de objeciones para él insistir y al final el más bajo aceptara con resignación. Pero eso también estaba bien, sentía más esperanza en ese momento de que el chico acepte salir con él. Era una gran oportunidad.
—Ven, creo que sé de un buen lugar —dijo finalmente Loey con una enorme sonrisa en sus labios, tomando la mano del chico y lo jaló consigo hacia la puerta para salir de la casa.
Lo bueno de ser un chico que se viste de chica era que ya estaba listo para salir en cualquier momento. Con el más bajo salieron del departamento, y una vez fuera del edificio Chanyeol recordó que el bajito había ido hasta ahí en moto. Hizo un mohín, subirse a una moto usando falda no creía que fuera muy cómodo. Baekhyun fue el primero en subir, le sonrió a la chica indicándole con la mirada que subiera también. Loey lo pensó un momento, no tenía de otra. Caminó hasta Baekhyun subiendo con cuidado a la moto, sonrió porque la espalda del bajito era linda, le gustaba.
—Puedes sujetarte de mi chaqueta, si quieres —ofreció el chico sin tener verdadero problema en ello.
Chanyeol no lo dudó mucho, con su sonrisa grande en labios abrazó a Baekhyun por la cintura, pasando bien sus largos brazos por ella. Baekhyun se sintió extraño, los brazos de la fémina eran largos y fuertes, incluso cerraban bien en su cintura. Mordió uno de sus labios y escuchó atento el lugar al que le indicó la chica.
Un parque de diversiones era el lugar al que menos iría, sentía que para su edad quizás esos lugares ya no eran tan adecuados. O quizá, solo se trataba de su estilo de vida, los lugares que frecuentaba con sus amigos eran bares, albercas o lugares con temáticas adultas. Pero, tampoco estaba mal para ese día, estaba aburrido, así que sería bueno cambiar una vez en su vida el sitio de distracción. Tomó su casco y tocando apenas la mano de la chica, misma que era más grande que la suya llamó la atención de la adversa, dándole el casco para que se lo ponga.
—Ten, uno debe llevarlo —le dijo Baekhyun como sino fuera de tanta importancia su acción. Pero eso para Chanyeol fue un gesto muy lindo, sabía lo importante que era llevar un casco y que Baekhyun se lo dé a él, era algo noble y varonil ante sus ojos.
—Gracias —susurró poniéndose el casco, cuidando de no tumbarse la peluca con el casco y una vez lo tuvo bien puesto se abrazó de nuevo de Baekhyun, colocando su barbilla en el hombro del chico.
Baekhyun le miró de reojo, sin decir más se puso en marcha haciendo sonar un poco el motor de la motocicleta, haciendo fantasear un poco a Chanyeol con ello. Baekhyun tenía buen sentido de la moda, se vestía muy bien y lo que llevaba puesto lo hacía ver muy atractivo. Lo había visto en cuanto llegó a su casa, pero por todo lo que había pasado, desde su emoción y el beso, no lo había podido pensar a fondo.
El camino fue corto gracias a la velocidad que usó el bajito. Una vez llegaron buscó un buen lugar para estacionarse, apagó el moto y esperó a que Loey fuera quien baje primero de la moto. La chica lo hizo, bastante hábil para llevar un vestido un poco corto. No dijo nada él, solo apretó los labios después de bajar. Tomó el casco que la fémina le dio y puso la alarma contra robos.
—¿Tenemos que comprar boletos, no? —inquirió Baekhyun quitándose la chaqueta y colocó esta sobre su hombro, estaba haciendo un poco de calor. Chanyeol asintió a su cuestión—. Vamos entonces.
—¡Vamos! —exclamó Loey colgándose del brazo del bajito y lo jaló rápido hacia la taquilla de los boletos para el parque. Una vez los consiguieron Loey no se hizo esperar para llevar al contrario hacia los juegos que más llamaban su atención.
Baekhyun a pesar de que no se sentía muy cómodo del todo andar paseando por todo el parque con Loey a causa de su estatura, se estaba dejando llevar por la chica de un lado a otro. Los primeros juegos fueron los carritos chocones y las tazas giratorias. Para Loey estos juegos eran la mera diversión, mientras que para Baekhyun, al bajar de las tazas sintió que el estómago se le saldría en ese momento por la boca.
Loey lo llevó a una de las bancas que encontraron al paso y fue rápido a buscar una botella con agua, que una vez que estuvo con Baekhyun le destapó y le dio. El bajito se quejó varias veces tratando de recuperarse.
—Lo siento, me hubieras dicho que eres delicado a estos juegos —susurró Loey bastante preocupada de ver a Baekhyun así, pensando en que ese Lugar no fue el correcto.
Baekhyun bebió un último trago de agua y secó sus labios con su brazo negando con su cabeza. Esa mirada afligida de la chica le hizo sentir culpable de amargarle su salida. La chica realmente había parecido que lo disfrutaba mucho estar ahí.
—Estoy bien, hay otro tipo de juegos en los cuales podemos divertirnos —aseguró tratando de no terminar arruinando toda la salida. Incluso estiró su mano hacia Loey y apretó suave su mejilla haciendo ruborizar un poco a la chica—. No pongas esa expresión, te ves adorable.
—¿Y te gustan las cosas adorables? —preguntó de inmediato Chanyeol haciendo un puchero. Baekhyun alzó la ceja derecha mirando acusador a la chica, pudo darse cuenta de su treta por parecer adorable. Tomó un poco más de agua y sonrió.
—Un poco, ahora vamos —terminó por decir el más bajo poniéndose de pie. Tiró la botella desde su posición hasta el bote de basura a un par de metros anotando perfecto. Chanyeol la aplaudió haciéndolo sentir bien—. ¿A cuál quieres ir ahora?
Loey se quedó pensativa un momento, mirando todo a su alrededor, buscando un juego que no fuera tan feroz como el pasado para Baekhyun y no termine sintiéndose mal. Le tomó la mano una vez más, solo que jalando al más bajo por la muñeca hasta que llegaron a la noria. Era uno de los juegos más tranquilos. Baekhyun se sorprendió un poco solo por lo alto que era ese juego, pero no puso objeciones.
Ambos se formaron en la fila para los pases, Loey se veía bastante animada, incluso tarareaba una canción que a Baekhyun le gustó como se escuchaban las melismas en la voz de Loey. Esa voz gruesa de la fémina llamaba mucho su atención. Muchas veces parecía que escuchaba a un varón, pero entendía que había muchachas que tenían ese tipo de voz especial, bastante gruesa. Aunque debía de admitir que iba bien con la chica.
Cuando por fin les tocó subir a una de las cabinas, Loey le permitió entrar primero mientras le marcaban en sus boletos el juego usado. Sonrió la fémina y después subió tomando asiento al lado de Baekhyun, acomodando su falda de manera que su ropa no se arrugaba tanto.
—Veo que te gustan mucho los vestidos de este tipo —mencionó Baekhyun mirando la ropa de Loey. Era un vestido tipo overol café con rayas pequeñas blancas. Que iba a conjunto de una blusa blanca con cuello de tortuga, de mangas cortas muy similar a otro conjunto que ya le había visto a la chica.
Chanyeol se miró un momento e hizo un puchero, pensando en que quizá a Baekhyun no le gustaba ese tipo de ropa, pero era lo que mejor le iba para ocultar ciertas partes de su cuerpo que lo delataban como chico, como su manzana de Adán y sus brazos ligeramente musculosos. Incluso había dejado de hacer ejercicio de brazos para evitar marcarlos más y dejar relajados sus músculos.
—¿No es lindo mi vestido? —preguntó con timidez mordiendo sus labios. Baekhyun negó con su cabeza un poco.
—Es lindo, en efecto me gusta —respondió sincero el de cabellos negros apoyando su codo en la pared de la cabina conforme iban subiendo para que todos terminen de subir a la rueda—. Se te ve bien, es corto pero no exagerado y hace ver tus piernas más llamativas.
Loey le miró con los ojos bien abiertos al escuchar eso. Baekhyun al darse cuenta de lo que había dicho sintió sus mejillas ponerse calientes. Había dicho una estupidez que seguro Loey malinterpretaría.
—Entonces te gustan mis piernas —dijo la chica con una sonrisa apenada pero a la vez coqueta en sus labios bajando su mirada hasta sus piernas, las cuales estaban ligeramente cubiertas por un par de mallas color piel.
Baekhyun tragó saliva mirando las manos de Loey, mismas que descansaban sobre sus piernas, haciendo que inevitablemente sus ojos enfoquen esos bonitos muslos que quedaban descubiertos. Apretó sus labios sintiéndose un poco ansioso de pronto.
—Emh, bueno —balbuceó un poco frotando su nuca mirando por la ventana, dándose cuenta de la bonita vista que tenían desde esa altura, miró a la chica y señaló la ventana—. Mira que lindo se ve desde aquí, ¿no te parece?
Chanyeol hizo un puchero al darse cuenta de que Baekhyun otra vez le desviaba el tema de su conversación. Pero no pensó en insistir en ese momento, solo miró hacia la ventana dándose cuenta de la bonita visto que tenían. Esbozó una amplia sonrisa y asintió pegándose un poco más a Baekhyun, quien le miró de reojo poniéndose un poco nervioso de tener tan cerca a la chica. Loey era bastante bonita, su piel de cerca se veía fresca.
La alta dirigió su mirada hacia Baekhyun, dándose cuenta de que este la estaba mirando tan fijamente, eso hizo que su corazón se acelere un poco y mierda sus labios un momento, hasta que Baekhyun se dio cuenta de que la chica lo miraba. Ambos se alejaron y desviaron la mirada.
—Vi que borraste tu perfil de citas en esa app —comentó Baekhyun tratando de desvanecer ese momento incómodo o tímido entre los dos, realmente no sabía cómo sentirse al lado de la chica, todo era tan extraño—. ¿Por qué?
—Porque no me interesa tener otra cosa con alguien más que contigo —confesó la fémina acomodando uno de sus mechones traviesos detrás de su oreja. Baekhyun se sorprendió de esa respuesta—. Me gustan las cosas serias.
—¿Por eso no te rindes?
—La palabra rendir no existe en mi vocabulario —comentó la chica tomando la mano de Baekhyun y enlazó sus dedos, el bajito apretó sus labios—. Yo sé que vas a enamorarte de mí, y nunca me vas a dejar —dijo deseando que realmente fuera así.
—Claro —susurró Baekhyun sin tener la intención de arruinar los sueños de la chica.
Al bajar de la rueda de la fortuna ambos caminaron por un tiempo más por varios lares del parque hasta que llegaron a una zona de área verde, frente a un pequeño lago artificial donde tenían patos y tortugas a la vista. Loey esperó sentada en la orilla del lago a Baekhyun, quien se había ofrecido a ir por un par de sodas y algo de comer.
Mientras Loey esperaba a que el chico regresara con él sacó su teléfono, tenía varios mensajes de SeHun en su buzón. Abrió el buzón y se puso a escuchar cada audio esbozando una sonrisa amplia que pronto se convirtieron en risas.
Baekhyun regresaba con una charola en la cual llevaba las cosas para los dos. Se detuvo cuando vio a Loey hablar animadamente con alguien por teléfono, eso le hizo arquear una ceja. La chica reía como si la felicidad estuviera al cien por ciento en su ser. La pregunta de quién podía hacer sonreír de esa manera a la chica le generó incomodidad. Se acercó hasta estar a un paso de ella y dejó la charola en el suelo tomando asiento al lado de la chica.
—¿Con quién hablas? —preguntó directo mirando a la chica serio. Loey le miró confundida dejando de sonreír para tratar de entender lo que Baekhyun le había dicho—. ¿Con quién hablas? —repitió.
—Un amigo —respondió y volvió a sonreír colgando la llamada guardando su celular para poder ver lo que Baekhyun había comprado—. Que rico se ve, me gusta la pizza —comentó mirando a Baekhyun, pero el chico estaba bastante serio.
—Debe ser muy importante ese amigo para que sonrías así de feliz al hablar con él —escupió con un deje de molestia en su voz, tomando por sorpresa a la fémina quién le miraba atónita—. Come, yo no tengo hambre.
Loey tomó una de las sodas y destapó la lata, mordió su labio inferior haciendo un puchero mientras pensaba en el porqué estaba molesto Baekhyun de pronto. Cuando se había ido a comprar había estado bastante contento, pero ahora parecía que de nuevo estaba ahí el Baekhyun que le hacía el feo. Iba a tomarle a la soda pero en cuanto una idea cruzó por su cabeza tomó el brazo de Baekhyun mirándole incrédulo.
—Será que.. . —Se quedó con la frase en la boca mirando a Baekhyun como si realmente le hubiera dicho algo que le era imposible de creer. Baekhyun hizo una mueca mirando molesto a la chica—. ¿Estás celoso de mi amigo? —inquirió Loey con una sonrisa enorme en su rostro. Baekhyun hundió el entrecejo—. ¡Lo estás!
—Claro que no —se negó el bajito jalando su brazo para alejarse de Loey y se puso de pie mirando molesto a la chica—. No seas ridícula, ¿por qué estaría celoso de alguien que no es mejor que yo? —soltó cruzándose de brazos y desvió mirada.
Chanyeol abrió la boca en sorpresa. Cada cosa que salía de los labios de Baekhyun le hacía feliz en ese momento. Esa seguridad falsa que el chico mostraba en ese momento le hacía sentir bien. Baekhyun estaba celoso de alguien que solo le estaba ayudando con él, y eso era algo maravilloso. Porque para Chanyeol, que Baekhyun sienta celos por su causa, le daba una buena esperanza.
—Tienes razón, no hay nadie mejor que tú —aseguró Chanyeol sin dejar de sonreír y mirar el bonito rostro de Baekhyun. Para sus ojos no había ser más perfecto que Baekhyun, desde ese bonito rostro hasta esos celos sin sentido del chico. Baekhyun para él era adorable. Se puso de pie tomando el rostro del más bajo entre sus manos y apretó suave sus mejillas escuchando al chico quejarse, sobre todo por esos notorios centímetros de más—. Eres hermoso.
—Hey —se quejó el bajito quitando las manos de la chica de su rostro mirándola filoso—. Mis cachetes no son bolitas de amasar —le recordó sobando sus mejillas—. Come que se va a enfriar.
—Tú también come —pidió la alta jalando a Baekhyun consigo para volverse a sentar.
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La vuelta a ese parque de diversiones no fue la primera ni la última. Para Baekhyun estaba bien siempre y cuando no tuviera que subir a esos juegos que le revolvían el estómago y pudiera pasar tranquilo el día de manera divertida, de lo cual Loey se encargaba de hacer realidad.
En un mes habían ido alrededor de tres veces a ese parque, siendo que de todas sus salidas fueron a parques acuáticos, también al cine, y a una pista de hielo que habían abierto recién en la ciudad, así mismo como los arcades que era del lugar más divertido para Baekhyun, quien se sentía en su sitio, hasta que hacía algún tipo de apuesta con Loey y terminaba perdiendo y cumpliendo los deseos de la castaña, que iban desde un beso hasta otra cita más.
Y Baekhyun debía de admitir al cien por ciento, que Loey era linda y pura. No tenía ningún tipo de maldad en su ser. Sus deseos eran tan simples y dulces que le hacían sentirse cómodo con ella. Aunque sus centímetros de más seguían siendo molestos.
Para llevar dos meses saliendo desde aquella salida en la que perdió el reto de los bolos y se convirtió en el no novio de Loey, estaba bien. La chica le gustaba hasta cierto punto y disfrutaba de su compañia, que casi era todo el tiempo.
Justo para ese día habían acordado de que de verían después de la Universidad, para salir a dar la vuelta en el auto de Loey, el cual era bastante masculino para la chica, pero eran sus gustos, ¿qué podía hacer?
Baekhyun terminó por guardar sus cosas en su mochila mirando acercarse a él a sus dos amigos, quienes venían bromeando entre sí. Minseok fue el primero en saludarlo.
—¿Irás a ver a Loey hoy? —preguntó Luhan, sabiendo los dos chicos que su mejor amigo Baekhyun se había estado frecuentando con la chica. Baekhyun asintió—. Oh vaya, ¿será que el mujeriego Byun por fin sienta cabeza? —Se burló.
—No es nada de eso —aseguró el chico esbozando una sonrisa—. Les dije que estaba aburrido, quería a alguien nuevo, ya está, Loey es por ahora hasta que me interese alguien linda.
Ambos chicos se miraron entre sí e hicieron una mueca. Sabían que Baekhyun era capaz de eso en realidad, podría botar lejos a Loey en cuanto encuentre a una mejor chica que esté en sus ideales.
—¿Baek, estás ocupado?
Los tres chicos regresaron a ver hacia la entrada del salón, ahí estaba Taeyeon, la amiga de los tres y la íntima del morocho. Baekhyun negó con su cabeza y la chica sonrió mirando a su amigo mientras caminaba hacia ellos. Una vez frente a los tres chicos saludó a todos pero puso más atención a Baekhyun.
—Mi amiga Tiffany, tiene un perrito de raza Chihuahua que está enfermito, ¿podrías ser tú quien lo atienda? —pidió la chica esbozando una sonrisa que más bien parecía un puchero. Baekhyun se sorprendió de eso—. Ella es un poco desconfiada en los veterinarios, pero le dije que tenía un buen amigo que podía hacerle el trabajo y no cobrarle mucho, ¿puedes?
—Tae me gustaría pero tengo una ci.. .
—Te puedo compensar bien esta noche, bebé —dijo ella colgándose del cuello de Baekhyun.
Luhan y Minseok hicieron una mueca cuando vieron a Baekhyun sonreír. Ambos sabían que ni siquiera Loey iba a poder contra esa relación poco sana que esos dos chicos frente a ellos tenían desde hacía años.
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Miró la hora en su celular una vez más, hizo un pequeño puchero en sus labios, ligeramente pintados de rosa. Miró hacia los lados, con la esperanza de ver a Baekhyun llegar, pero este tal parecía que iba muy atrasado o simplemente no iba a llegar.
Soltó un suspiro dando un par de pasos por la zona, tratando de no sentirse mal por la tardanza del chico, a pesar de que ya casi iba a ser una hora desde la que habían acordado.
—Tal vez tuvo cosas que hacer —se dijo a sí mismo haciendo una mueca y guardó su celular en su bolso acomodando el mismo bien entre su hombro. Tomó aire con pesadez y lo dejó salir suavemente. No tenía más que hacer ahí.
Comenzó a caminar hacia donde había dejado estacionado su auto, lo mejor era ir a casa para preparar las cosas que ocuparía en la clase que tenía al día siguiente. Hizo una mueca nuevamente deteniéndose al abrir la puerta de su auto. El quejido de lo que al parecer era un perro llamó su atención.
Rodeó su auto, buscando con su mirada lo que pudiera estar llorando, cerca de ahí, solo cruzando la calle de un carril podía ver un callejón, del cual llegaban el chillido. Miró hacía los lados, corroboró que no hubiera auto cerca y cruzó la calle rápido, sin tener mucho cuidado de su andar para parecer una chica. Al entrar al pequeño callejón se dio cuenta de que era un cachorro, quizá de raza o quizá no, eso era lo que menos le preocupó en ese momento, sino el estado del cachorro. Tenía sus orejas sangrando y una patita rota, lo notó al acercarse porque el cachorro al verlo quiso huir y cojeó. Se preocupó por él acercándose por completo, se quitó la chaqueta de mezclilla que llevaba puesta y con ella lo enrolló llevándolo hacía su auto, lo dejó en el asiento del copiloto y subió pronto de su lado.
Estuvo buscando por varias calles cercanas ahí un veterinario, ya que no conocía a alguno que fuera de confianza. No había muchos abiertos, los tres primeros que encontró estaban cerrados. Mientras buscaba todavía hablaba con el cachorro para poder tranquilizarlo y entre en confianza, sobre todo porque imaginaba el dolor que el perrito estaba sufriendo.
Estaba ya por rendirse cuando por fin dio con una veterinaria abierta. Estacionó el auto en el pequeño estacionamiento frente a la tienda, al pie de un auto blanco del año. Bajó caminando hasta el otro asiento de donde sacó el cachorro, mismo que se mantenía un poco arisco. Cuando abrió la puerta la campanita del recibidor sonó llamando la atención de la gente que había ahí.
Loey se quedó parada en la puerta mirando al chico que estaba a un par de metros frente a él. Era Baekhyun, quien estaba poniendo una inyección a un cachorro de raza pequeña. Apretó un poco sus labios mirando lo concentrado que estaba el chico, pensó en irse pero el cachorro en sus brazos necesitaba ayuda. Caminó varios pasos hasta que otro empleado del lugar salió de un pequeño cuarto y le sonrió.
—Buenas tardes, ¿en que puedo ayudarle? —preguntó el empleado con una sonrisa amable en labios a la cual Loey correspondió apenas terminado por acercarse.
—Buenas... me encontré a este cachorro, está herido quisiera que lo revisen —pidió Chanyeol dejando al cachorro en su chamarra sobre la barra de metal casi junto al otro cachorro. Su mirada se clavó en Baekhyun quien al escuchar su voz dirigió su mirada hacia él, su rostro parecía estar sorprendido al igual que él—. Hola —susurró.
—Loey —dijo Baekhyun terminando lo que estaba haciendo.
—¿Se conocen? —inquirió Taeyeon quien había visto junto con su amiga entrar a esa chica demasiado alta, y sintió bastante intriga al ver la manera en la que Baekhyun y esa chica se miraron.
—Algo así —respondió el de cabellos negros esbozando una sonrisa a su amiga y después dirigió su mirada hacia la otra chica para hablar, sin prestarle atención a la expresión dolida de Loey al escuchar eso—. Listo, tu cachorra ya estará bien con estas vacunas, cualquier cosa háblame a la hora que sea. Iré a verla —ofreció dándole su número en una pequeña tarjeta.
Loey solo desvió la mirada viendo como aquel otro chico que era mucho mayor que Baekhyun aparentemente atendía al cachorro que había encontrado en la calle.
—Bien, bebé —dijo Taeyeon tomando el rostro de Baekhyun y le dio un beso en las comisuras—. Te veo en la noche en mi departamento, ¿ok? Te cuidas —acordó ella esbozando una sonrisa coqueta saliendo de ahí.
Baekhyun le despidió con la mano sin dejar de sonreír hasta que sus ojos se toparon con los de Loey, la chica estaba bastante seria, incluso parecía estar muy pensativa pero también, había algo extraño en sus ojos que no pudo descifrar en ese momento.
—Byun, por favor tráeme los siguientes medicamentos —pidió el chico que estaba atendiendo el cachorro de Loey a lo cual Baekhyun asintió escuchando atento lo que su jefe le estaba pidiendo.
Una hora después el dueño del local le explicó todo lo que ese cachorrito tenía, había sido solo un ataque de perros más grandes y siguiendo indicaciones correctamente se pondría bien. Loey asintió agradeciendo después de pagar la consulta y tomó al pequeño cachorro, al cual le puso Toben y decidió adaptar en ese momento, obteniendo su placa y un transportin, una camita y muchas croquetas en una bolsa grande.
Una vez todo estuvo listo hizo una reverencia para salir de ahí e irse a su casa. Baekhyun se ofreció a ayudarla pero la chica solamente lo ignoró y salió de la tienda. El chico de cabellos negros soltó un suspiro, si bien podía dejar que se fuera nada más, pero la mirada de su jefe le hizo sentir culpable por lo cual dejó su bata y salió tras de ella viendo como Loey metía las cosas a la cajuela de su auto y ponía al cachorro en el asiento trasero del coche cerrando después la puerta.
—Loey —habló Baekhyun tomando la muñeca de la chica cuando esta iba a subir a su auto. La fémina le miró con el ceño fruncido—. A dónde.. .
—Voy a mi casa, ¿qué quieres? —dijo con mal modo safándose del agarre del chico, Baekhyun se sorprendió por ello, la chica tenía fuerza y no parecía ser la misma chica tranquila con la que había estado conviviendo todo ese tiempo—. Si no tienes nada que decir me voy —abrió la puerta y subió al auto pero no pudo cerrar el mismo porque Baekhyun se interpuso.
—Lo siento, ¿sí? Me pidieron un favor para atender a esa cachorra, los animales son mi debilidad, no pude decir que no —comentó Baekhyun haciendo una mueca, en su vida se había justificado en algo pero ahí estaba, haciendo muchas cosas fuera de lo normal desde que había conocido a la chica—. Loey.
—¿A qué tienes que ir a su departamento? —inquirió queriendo realmente saber eso sobre todo lo demás. Las excusas no eran algo que le sirvieran realmente, lo hecho, hecho estaba.
Baekhyun alzó sus cejas en sorpresa, había pensando que la fémina frente a él no lo había escuchado pero se daba cuenta que se había equivocado en ese momento. Tomó la mano de la castaña y le sonrió.
—Me invitó a ver una película, nada importante —mintió.
Loey mordió sus labios para no decir nada y desvió la mirada. Él sabía qué era esa chica para Baekhyun gracias a Sehun, y la manera en la que la chica se comportó con el morocho solo le dejaba claro que era mentira, ellos no habían quedado en ir y ver una película. Lo peor de todo, era que Baekhyun le estaba mintiendo y sobre todo, lo negó frente a ella hacía una hora y minutos atrás.
—Si es así.. . —murmuró la alta girando un poco su mano y tomó la muñeca de Baekhyun mirándole de nuevo—. Ven a ver la película a mi casa —pidió ella.
Baekhyun sintió que sus mejillas se pusieron caliente ante eso. De solo imaginar que la contraria pudiera darle lo que Taeyeon, le hizo sentir extraño.
Nota final:
Fue todo de mi parte, espero que les haya gustado, si fue así no se olviden de dejarme un votito, y si pueden comentar :3 chao chao.
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