Capitulo 21.
Holaaaaaaaaa, ya Vamo con otra actu del maratón ajdkd me andaba durmiendo, el trabajo fue pesado :3
🤗❤ pero aquí estamos ajsks
Lean y nos vemos en notas finales.
No se olviden de comentar en sus partes favoritas, las que les den coraje, risa, llanto o comenteeen lo que quieran 🤧💕soy feliz al leerlos
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Chanyeol se sintió bastante confundido cuando entró a la habitación y no vio a Baekhyun por ninguna parte. Frente a él, solo estaba un joven, sentado en una silla que se veía bastante cómoda, al pie de un sillón tipo cama al cual ese joven le indicó que se acerque.
—Disculpa... creo que esto es un error —dijo Chanyeol formando una mueca, cosa que al joven le hizo sonreír—. Vine para ver a mi esposo, pero.
—Sé lo que tu esposo hizo, y por eso estás aquí, Chanyeol. Por favor, toma asiento —insistió el joven tratando de sonar con confianza.
—No, creo que... me voy —dijo Chanyeol dispuesto a salir de la habitación, pero esta estaba cerrada, cosa que le hizo mirar ceñudo al joven con él en la habitación—. Esto no es ético.
—Eso mismo le dije a tu amigo, pero es tanta su preocupación por ti, que me suplicó casi de rodillas.
Chanyeol solo apretó sus labios, tratando de buscar paciencia en su ser, cosa que le estaba siendo difícil. Lo único que había querido era ver a Baekhyun. No podía creer que su amigo fuera tan bestia en mentirle de esa manera para llevarlo a un psicólogo. Sentirse molesto era poco para él, cuando sentía un fuerte nudo en el estómago que casi le da nauseas del malestar que eso le causó.
—Esto no tiene caso, no necesito terapia.
—Puede ser, pero sí necesitas sacar todo eso que tienes en tu pecho, porque de no ser así, seguirás sin poder dormir bien por las noches o siquiera comer, ¿te sientes bien cómo te encuentras ahora?
La pregunta del joven dejó mudo a Chanyeol, ¿que sí se sentía bien? Cómo podría ser eso posible cuando sentía que le faltaba toda su alma entera. Negó con su cabeza, soltando un suspiro caminó hasta el sillón donde tomó asiento. No sólo era Sehun quien le miraba con pena, sino su madre, su hermana y todos sus actuales amigos. Todos mostraban estar preocupados por él.
—No veo cómo puedas ayudarme si no es trayendo a mi esposo de vuelta.
El joven esbozó una pequeña pero condescendiente sonrisa, se acomodó en su asiento, notando desde ese momento el peso que ese joven alto traía encima. Se acomodó las gafas que caían un poco sobre el puente de su nariz y asintió para después hablar:
—Puedes comenzar contándome cómo te has sentido desde el primer momento que estuviste con Baekhyun, desde que te hiciste pasar por Loey.
Chanyeol formó una mueca al escuchar eso, tener que hablar de ese asunto con un extraño no le gustaba realmente, pero pensar en todo lo que había vivido hasta ese momento a causa de esa decisión que tomó años atrás le obligó a contarlo.
...
En cuanto salió de esa habitación, el castaño que estuvo esperando por esas horas a su mejor amigo en la sala de espera, se puso de pie. Se acercó al más alto, temiendo un poco por la reacción molesta de su amigo. Y debía de ser sincero, no esperó una reacción tan pacífica de Chanyeol cuando este le miró.
Hubo un largo silencio en cuanto a los dos, ninguno decía nada. Sehun quería saber qué había pasado ahí adentro, pero había recibido instrucciones claras del psicólogo Wang, no debía presionar a su amigo con preguntas al respecto, tenía que dejarlo hablar por sí solo.
—Chan, quieres que...
—Quiero regresar solo a casa, nos vemos luego, ¿ok?
La petición del más alto tomó por sorpresa a Sehun, el chico quiso negarse a ello, pero su mayor le apretó suavemente el hombro regalándole una sonrisa pequeña, indicándole que todo estaba bien. Y sí que lo estaba, para Chanyeol todo estaba mejor que antes de haber entrado a esa habitación. Sehun no insistió más, dejó que su amigo se fuera solo.
A Chanyeol no le llevó mucho tiempo salir de esos edificios, no quiso llevarse su auto por lo cual no le pidió las llaves a su amigo, solo se dedicó a caminar por los andadores alrededor de ese lugar. Tenía mucho peso fuera de su cuerpo, pero más cosas que pensar en ese instante. La platica con el joven Wang, había sido larga, la cual le ayudó a liberar todo eso que sentía desde que se había convertido en Loey. Había muchas cosas que se había estado negando a ver desde entonces, muchas cosas que su amigo SeHun le dijo, su madre e incluso la madre de Baekhyun, pero que él simplemente se había dedicado a no darle importancia. Se había dejado llevar por pensamientos de fantasía que no dejaron que viera su realidad.
Era duro, sí. Era bastante duro para él tener que aceptar esa parte de la historia, lo cual le dolía en el alma porque se negaba a aceptar que Baekhyun no lo amaba y que por eso se había ido de su lado sin siquiera darle una explicación ni despedirse de él. Se detuvo frente a una plaza, viendo a la gente ir de un lado a otro, gente sola, en parejas, entre amigos, familias y todas se veían felices, se veían de color, lo cual él carecía. Se miró a través del vidrio del auto negro a su costado, la imagen que veía era irreconocible.
¿Ese era él? Tenía el cabello bastante largo, desordenado y sin brillo a comparación de lo bien cuidado que antes lo tuvo. Sus ojos lucían hinchados, con una ligera capa oscura debajo del parpado, haciendo que tenga esa expresión enferma, a lo cual, si le sumaba que había adquirido esas enfermedades a causa de su mala alimentación, dejaba claro también por qué lucía tan delgado.
Se paró directamente de frente al automóvil, teniendo así una mejor vista de todo su físico, incluso su ropa lucía mal. No era ni la sombra del joven maestro de física que todas las mañanas se despertaba para hacer ejercicio en el parque, luciendo una sonrisa amplia y energías hasta para compartirlas al mundo. No era nada de eso y se aborreció.
¿Qué has estado haciendo con tu vida, Chanyeol? Se preguntó mientras miraba su reflejo. Le fue inevitable no pensar en que quizás esa fue la razón por la cual Baekhyun se fue de su lado, y eso le hizo sentirse bastante molesto. Wang tenía razón, debía dejar de echarse la culpa sobre lo que había pasado. No había culpables, solo el menor tomó su decisión al irse.
Siguió su camino, todavía sintiéndose molesto. Solo se detuvo cuando encontró lo que pensó buscar al ver su imagen de esa manera. Empujó con su mano la puerta siendo recibido por dos jóvenes de apariencia bastante extravagante, pero con una actitud bastante explosiva que le robaron una sonrisa.
—¿En qué podemos ayudarte, guapo? —preguntó uno de ellos con una sonrisa ladina en sus labios, Chanyeol esbozó una sonrisa también, pero pequeña y simple.
—Gracias por el cumplido, pero no creo ser guapo en este momento —mencionó formando una mueca, ambos chicos soltaron una risa—. ¿Qué?
—Eres modesto, solo estás un poco desarreglado —le dijo el mismo chico que le habló primero acercándose a Chanyeol, lo rodeó con sus pasos observando al mismo de los pies a la cabeza un par de veces—. ¿Estás buscando un cambio?
—Algo así... quiero recuperar una parte de mi vida.
Ambos chicos se miraron entre sí, no debían indagar mucho para darse cuenta de que el joven desprolijo que había entrado a su local estaba pasando por una ruptura amorosa. No era el primero y sabían que tampoco el último en entrar a su local con ese aspecto después de haber terminado una relación.
—Siéntate entonces aquí —dijo el otro joven mientras tomaba sus tijeras y hacia sonar estas al abrir y cerrar la misma.
Chanyeol solamente asintió mientras caminaba hacia la silla especial frente al enorme espejo, donde aquellos dos jóvenes le acomodaron la bata especial para evitar el cabello. No perdería nada, al contrario, quería recuperar un poco de aquel joven que era años atrás o incluso unos meses atrás.
...
Los cinco chicos se quedaron boquiabiertos cuando vieron al más alto de todos ellos, no lo reconocían, al menos no a como era unos meses atrás ni en esas semanas. Si bien, los cinco chicos aceptaban que Chanyeol era un hombre de 28 años bastante apuesto, tenía un toque maduro cuando tenía una expresión seria en el rostro y como dos o tres años menos cuando sonreía, pero en ese momento que lo estaban viendo, parecía que el chico había rejuvenecido hasta sus 18 o 20 años, y eso le hacía lucir más atractivo.
El más alto no iba a negar, se sintió un poco incomodo ante las miradas analíticas de todos los chicos sobre su cuerpo, no era para tanto. Solo se había teñido el cabello y había cambiado un poco su forma de vestir para una más casual que le hacía sentir mejor. Lo que él no se daba cuenta que no era exactamente el cambio de cabello castaño claro lacio, a un cabello medio rebelde color gris, sino, que había cambiado las sudaderas y los pants de los últimos meses por jeans ajustados y camisetas que se ajustaban bien a lo poco que quedaba de su cuerpo deportivo.
—¿Vieron a un fantasma? —inquirió tratando de ser gracioso, pero había perdido su toque cómico que le salía antes tan natural, a causa de esa expresión agria que no podía borrar de su ser con solo un cambio de look.
—Pues —Sehun se animó a hablar acercándose a su amigo, le sonrió—. Prácticamente estamos viendo un muerto resucitar.
—¡Sehun! —Le llamó la atención Luhan con una mirada de advertencia, Chanyeol sonrió por eso.
—Ay, Hannie. Es la verdad, había estado actuando como si estuviera muerto y míralo aquí, luciendo tan genial, no me vas a mentir que deseas terminarme para salir con él —bromeó Sehun a lo cual Luhan no lo negó, al contrario de ello lo aceptó haciendo que Sehun se indigne con él.
—Tonterías, solo me topé con un buen estilista que me ayudó un poco, además que estuve pensando en lo que Wang me dijo —mencionó llamando la atención de Sehun quien sabía de quién estaba hablando—. No puedo seguir preocupándolos ni dándoles lastima. Ustedes han estado al pendiente de mí todo este tiempo que no puedo seguir siendo egoísta.
Los cinco chicos se miraron entre sí, asintieron al mismo tiempo y esbozando una sonrisa se acercaron a Chanyeol en un abrazo grupal, apretándolo contra ellos y despeinando sus cabellos. Las risas de todos se hicieron escuchar en el pasillo, acompañadas de la risa gruesa de Chanyeol que tuvo que empujarlos un poco cuando ya no pudo soportar más ser molestado de esa manera. Las risas tardaron un poco en calmarse.
—Debemos festejar esto, ¿no creen? Chan está volviendo a nosotros —sugirió Minseok con una amplia sonrisa, todos le miraron acusadores—. ¿Qué?
—Estás usando a Channie para satisfacer tu vicio alcohólico —acusó directo Tao a lo cual Minseok se llevó la mano derecha hacia su corazón y fingió haber sido ofendido—. ¡Pero me parece bien!
Los otros cuatro chicos incluyendo a Chanyeol negaron con diversión mientras veían a sus dos amigos discutir entre quien era más ebrio que el otro, cosa que no tendría ganador puesto que los dos eran iguales. Sehun se acercó a su mejor amigo apretando suavemente su hombro, todavía se sentía un poco mal por haberlo llevado al psicólogo sin permiso previo. Chanyeol miró al castaño claro y le apretó la mano que tenía sobre su hombro con suavidad esbozando una sonrisa.
—Gracias, Hun —susurró el más alto haciendo pasar a los chicos a su departamento.
Los cinco chicos habían acordado de visitar a Chanyeol, después de que Sehun les había contado que lo llevó sin consentimiento a un médico y la reacción extrañamente pasiva que Chanyeol tuvo respecto a ello cuando salió de la consulta un par de horas después, temiendo que el chico tuviera alguna reacción negativa en vez de algo positivo después de eso, pero después de verlo tan cambiado creían que había sido para bien. Y tal como dijo Minseok acodaron de ir a beber unos cuantos tragos al negocio de Tao y Suho, quienes creían que por ese momento era el mejor ambiente para Chanyeol, no tan pesado ni atestado de gente, puesto que el más alto se estaba adaptando nuevamente después de varios meses que estuvo nada más encerrándose en su miseria.
Pero no resultó tan bien como ellos habían creído, sus dos amigos dueños del local olvidaron un pequeño pero gran detalle. En ese lugar Chanyeol y Baekhyun pasaron muchos momentos juntos antes de que pasara el desafortunado evento. Muchos fines de semana el más alto y su joven esposo asistieron ahí a comer unas hamburguesas grasosas y un par de cervezas con las cuales terminaban cantando en el karaoke del lugar y siendo llevados por la pareja dueña del local a su departamento puesto que todas las veces terminaban bastante bebidos como para irse solos. Y todo eso Chanyeol lo como si fueran eventos recientes borrando su sonrisa de inmediato. Y a pesar de que sus amigos quisieron reparar el error llevándolo a otro lado el alto se negó pidiendo quedarse ahí.
Lo bueno era que aprendían de sus errores, no volvieron a sugerir el local de Suho y Tao por un buen tiempo, cambiando las salidas a otros lados, tratando de que ninguno coincidiera en los lugares a los cuales la pareja iba con frecuencia antes de separarse, lo cual resultaba bastante difícil pero no imposible. Todos querían que Chanyeol saliera por completo de ese cuadro depresivo en el cual había terminado cayendo durante esos meses, por lo cual, no siempre salían todos con Chanyeol, muchos de ellos también con sus asuntos personales, se encargaron de establecer horarios y días en los cuales podían salir por individual con el más alto.
Como ese día que le tocaba a Sehun y Luhan, los cuales se encargaron de llevar a Chanyeol con el psicólogo y después de compras al supermercado de la ciudad para poder abastecer la alacena de Chanyeol y su refrigerador con comida nueva. Si hubiesen dejado al más alto hacerlo por sí solo, la pareja estaba de acuerdo en que hubiese comprado cosas chatarras nada más. Al salir del centro comercial, los tres tomaron asiento en las mesas de la terraza, donde los restaurantes de comidas rápidas daban sus servicios. Los tres pidieron pizza y mientras esperaban sus órdenes se quedaron conversando un poco de lo que Chanyeol había hablado con Wang, cosas que salían por sí solas de Chanyeol en querer contarles.
—Y entonces, me dijo que voy progresando y que debo hacer alguna actividad nuevamente que mantenga mi mente ocupada, que no siempre debo depender de mis amigos y...
Los tres se quedaron callados cuando el bullicio de un grupo de jóvenes quizá de la edad de Luhan, llamó la atención del trio. Las risas de los chicos eran bastante altas, pero lo que a Sehun y Chanyeol les llamó la atención fue reconocer un poco la risa de alguno de los presentes. Los dos chicos que estaban de espaldas a la mesa donde aquel grupo de seis chicos se sentaron, se giraron a ver quién era el dueño de esa risa y corroborar lo que estaban pensando.
A pesar de que hacía poco lo había visto en aquel restaurante, Chanyeol no iba a negar que se sintió un poco más emocionado de ver en ese momento a Kyungsoo que aquel día en ese restaurante. Quizás era por verlo en ese preciso momento con ropa casual, con un grupo de amigos y riéndose jovialmente, que a Chanyeol le recordó a esos días donde ellos solían salir con sus grupos de amigos al centro comercial después de las clases del colegio y su ex se reía de esa manera; hermosamente despreocupada, que a Chanyeol le hizo feliz verlo de esa manera.
Luhan, quien estaba sentado frente a su pareja y al costado de Chanyeol, pudo darse cuenta perfectamente de la sonrisa genuina que Chanyeol mostró al ver a ese chico a una mesa de distancia de ellos, cosa que llamó su atención. Sehun miró a su joven novio, el cual casi lo interroga con la mirada, pero SeHun negó con su cabeza, no podía explicarle en ese momento.
Chanyeol se puso de pie haciendo un poco de ruido con la silla. Con la altura del de cabellos gris, era casi imposible que los seis chicos en la mesa al costado de Chanyeol no se dieran cuenta de la presencia del mismo, Kyungsoo sonrió todavía más amplio cuando vio a su viejo amigo a una corta distancia de él, ni siquiera se había sentado todavía por lo cual solo caminó hacia Chanyeol, le dio un abrazo y un beso en la mejilla sin dejar de sonreír.
—Channie, ¡qué milagro encontrarte por aquí! —exclamó sorprendido en realidad, después de aquella vez que curiosamente se lo encontró en otro país, no lo había vuelto a ver, y siendo tan grande la ciudad en la que estaban en ese momento, no podía creer que solo fuera una coincidencia del destino que estuvieran en el mismo espacio geográfico ese día—. No esperaba verte después de tanto tiempo, pero mira qué guapo estás.
Chanyeol sonrió divertido por los constantes halagos del más bajo, sin duda el más joven no había cambiado mucho, seguía siendo casi el mismo chico adulador con el que salió muchos años atrás.
—Tú también, estás más guapo que antes, ¿qué haces por aquí? La última vez te vi en...
—Estaba solo de viaje visitando a la familia, y pues, me quedé trabajando con mi tío un tiempo, volví hace un par de meses, me instalé cerca de aquí, ¿y tú?
Los amigos de los dos solo se quedaron viendo como Chanyeol y Kyungsoo tomaban una mesa juntos, conversando sin preocupación de haber dejado solos a sus acompañantes. Ambos se veían cómodos platicando entre sí por lo cual solo los dejaron ser. Luhan era el único que se veía un poco impaciente ante la manera en la que Chanyeol actuaba con ese chico de ojos redondos y labios de corazón. Sehun se sentó más junto a su novio dándole un beso en la mejilla.
—Ese chico es...
—El primer amor de Chanyeol, fue su novio durante todo el colegio y unos años de la universidad —explico Sehun haciendo que Luhan se alarme un poco más de ver y entender ahora porque Chanyeol se sentía tan familiarizado con Kyungsoo en ese momento y esa sonrisa suave que mostraba—. No me había puesto a pensar en esto, pero viendo sonreír a Chanyeol, tan sincero como nunca lo vi durante los últimos tiempos, creo que la aparición de Soo es para bien de Channie, él siempre le dio seguridad y calma a nuestro gigante.
Luhan quiso alegar que no era correcto que Chanyeol se juntara de esa manera con su ex, pero viendo al chico sonreír de esa manera y recordar que el idiota de su amigo se fue dejando de esa manera tan devastada al más alto lo hizo callar, no tenía ni debía de tener cara para defender a Baekhyun, por lo cual solo esperó con su pareja a que Chanyeol termine de hablar con su ex pareja, quizá y sería la última vez que se verían. O al menos eso habían creído de inicio, no esperando que las salidas frecuentes con Kyungsoo sucedieran.
—Estás seguro de que él no le hará más daño, ¿cierto? —preguntó Luhan junto con Minseok a la pareja del primero, mientras los tres estaban en la casa de Sehun esperando a que lleguen sus demás amigos y los protagonistas de su conversación.
—No creo que le haga daño, cuando ellos dos salían eran una pareja muy sólida y dulce, Soo... él siempre le dio todo a Chanyeol, se preocupaba demasiado por él, desde lo que comía, si hacía sus tareas o dormía bien, jamás supe de una pelea entre los dos.
—Si eran así de perfectos, ¿por qué terminaron? —cuestionó Minseok teniendo esa duda en su ser tras haber escuchado eso. Sehun sonrió.
—Porque los padres de Kyungsoo se mudaron de ciudad y llevaron a su hijo con él, puesto que la universidad de Kyungsoo en la nueva ciudad tenía mejores oportunidades para él, y Chanyeol tomó la decisión de que era mejor dejarlo ir —explicó el más alto de los tres formando una pequeña mueca mientras se recostaba sobre el respaldar del sofá—. Ambos siempre han sido muy maduros en sus decisiones, no sé qué le pasó a Chanyeol cuando conoció a Baekhyun, dejó de tener los pies sobre la tierra y cometió muchas estupideces, pero, por eso mismo fue que los dos decidieron terminar su relación con la promesa de que iban a seguir sus vidas y si en algún momento volvían a coincidir y estaban solteros quizá podrían volver a intentarlo.
—Pero Chanyeol está casado y...
—Kyungsoo lo sabe ya, no crean que no le he preguntado qué pasa entre ellos a Chanyeol.
—¿Qué te dijo? —preguntó Minseok interesado en ello—. ¿Están saliendo como pareja?
—No, Chanyeol ama a Baekhyun de una manera tan profunda que no le sería infiel, aunque terminaran definitivamente, solo me dijo que se siente cómodo con Kyungsoo.
—La comodidad es una de las principales razones por las cuales te comienza a gustar una persona —le recordó Luhan haciendo un puchero a su voz.
Sehun iba argumentar sobre eso, pero el timbre de su casa al sonar se lo impidió. El chico se puso de pie para abrir la puerta, por lo cual caminó hasta esta abriendo la misma. Saludó a sus amigos haciendo que estos pasen a su casa, no cerró la puerta puesto que alcanzó a ver a Kyungsoo junto con Chanyeol bajando del auto del de cabellos gris.
Habían acordado de ir todos juntos al nuevo arcade que abrieron en el centro comercial, quizá no todos tenían la edad como para ir a un lugar tan juvenil, pero qué más daba, tampoco eran tan mayores y para la diversión lo que menos importaba era la edad. Una vez salieron de la casa de Sehun, todos se fueron en el coche de Chanyeol, quien optó por manejar, eran muchos para entrar cómodamente en el coche, pero aun así se las arreglaron para ir todos en el auto, siendo que Tao cargó sobre sus piernas a su novio Myeon, mientras que Sehun hizo lo mismo con Luhan, quien estaba más que feliz con eso, mientras Minseok iba en medio de las dos parejas y Kyungsoo al costado de Chanyeol como su copiloto.
Llegando al centro comercial Chanyeol buscó un buen lugar para estacionarse y una vez hecho esto todos comenzaron a bajar quejándose de lo incómodo que fue el trayecto. Kyungsoo se acercó al de cabellos gris tomando su brazo cuando este cerró la puerta de su coche, ambos se sonrieron.
—Tiene mucho tiempo desde que fuimos juntos a un arcade —comentó Kyungsoo entrando con el más alto al lugar, los primeros juegos eran llamativos, mas no del interés de Chanyeol—. ¿Te acuerdas que te mencioné que estoy buscando un nuevo departamento para vivir? —inquirió el bajito a lo cual Chanyeol respondió con un mmhn—. Encontré uno y no me vas a creer en dónde.
—¿En dónde? —preguntó con interés pasando los dos entre los juegos, llegando con sus amigos a la zona de las mesas de pimpón y boliche, Chanyeol solo se quedó viendo el espacio del boliche, recodaba la primera cita que tuvo con Baekhyun cuando él se hacía pasar por Loey, el día en que ganó aquella apuesta que le sirvió para acercarse al bajito.
—Channie.
—¿Uh? —susurró distraído mirando a su acompañante—. Lo siento, me distraje un poco.
—Está bien, parecía que te perdiste en tus pensamientos, ¿piensas en él? —preguntó directamente, lo conocía bastante bien como para andar con rodeos—. Puedes confiar en mí.
—No es nada, mejor dime dónde está ese piso.
—Arriba del tuyo, así que seremos vecinos.
Chanyeol pestañeó un poco desconcertado, pero cuando entendió lo que estaba sucediendo sonrió contento, no le parecía algo malo que Kyungsoo viviera cerca suyo, en el último mes se habían estado viendo mucho al salir a distintos lugares, y que vivan en el mismo edificio les facilitaría las cosas para verse con más frecuencia. Pensó el más alto en decirle algo al respecto, pero sus amigos llamándolos para jugar una reta de pimpón se lo impidió, Chanyeol solo le sonrió al bajito a lo cual ambos se acercaron a la mesa de juego para ver cómo sería la partida que tendrían.
(...)
Bajó del auto después de haber pagado la cuota del pasaje, sacando su pequeño bolso de la cajuela se encaminó hacia su departamento. Saludó al conserje del lugar, y pasó de largo hasta el ascensor donde picó el número de su piso esperando impacientemente. Una vez llegó a su piso salió del elevador y caminó hasta la puerta de su departamento. Tocó el timbre, nadie abrió. Insistió un par de veces, pero fue la misma respuesta. Formó un pequeño mohín en sus labios por eso. Buscó en su bolso sus llaves y una vez encontró estas se apresuró a entrar. La soledad y el olor a abandonó lo recibió en medio de la oscuridad del piso. Sus labios se apretaron un poco mientras cubría su nariz contra el polvo. Dejando aún la puerta abierta, bajó su maleta dejándola en la entrada. Con su mano libre tocó la pared en busca del interruptor de la luz, una vez lo encontró las luces se encendieron.
Toda la habitación de espera estaba vacía, los muebles estaban tapados con sábanas blancas y el piso tenía una ligera capa de polvo, dejando claro que ese departamento había estado solo durante mucho tiempo.
(...)
La música era alta, bastante fuerte como para poder conversar con voz modulada, por lo cual todos se reían a fuertes carcajadas y hablaban a gritos para poder escucharse, cosa que estaba bien y no molestaba a nadie en el segundo piso de esa discoteca a la cual habían asistido después de pensarlo tanto esa noche. En una mesa redonda con un sillón curvo, los siete chicos bebían sus tragos y comían sus botanas en el centro de la mesa, todos sentados en pareja, solo Minseok hacía mal tercio entre Sehun y Luhan, quienes se quejaban en broma de vez en cuando al no dejar que se besuqueen a gusto.
Chanyeol por su parte solo se reía de eso junto con Kyungsoo quien estaba sentado a su lado, los dos bastantes juntos para lo que sería correcto en una persona que estaba casada, pero ninguno de los amigos de Chanyeol decía algo al respecto, todos veían claramente lo bien que le había hecho la compañía de Kyungsoo en los últimos cuatro meses, donde Chanyeol había comenzado a recuperar la vida que tenía antes de conocer al innombrable.
—Iremos a bailar un momento, ¿alguien viene? —ofreció Kyungsoo a sus nuevos amigos, con quienes había formado una agradable conexión después de haber salido y asistido a muchas reuniones de ellos junto con el de cabellos gris.
—Nosotros, Min no nos deja besarnos a gusto —dijo Luhan poniéndose a la par junto con su pareja, viendo como también Chanyeol y Kyungsoo se ponían de pie, los otros chicos se quedaron nada más en la mesa.
La música movida sin duda los hizo tomar el ritmo por un largo tiempo, a lo cual los cuatro chicos bailaron juntos, en pareja y grupal mientras sus demás amigos los veían desde el balcón del segundo piso. Kyungsoo no fue nada tímido en acercarse un poco más a Chanyeol, quien terminó por abrazar al bajito por la cintura y mantenerse junto a su cuerpo al ritmo de la música. Luhan por su parte junto con su novio, siguió bailando también, bastantes juntos mientras se besaban, al menos hasta que sintió el vibrar de su teléfono en la bolsa de su pantalón. Lo sacó de su bolsa viendo el remitente causando que se detenga de manera abrupta todos sus movimientos.
Sehun al darse cuenta de la reacción de su pareja le miró curioso, Luhan le regaló una mirada nerviosa esbozando una sonrisa con la misma característica. No sabía qué hacer, algo le decía que debía de responder a la llamada, siendo que habían estado esperando mucho que eso pasara, pero, viendo en dirección a donde estaba su amigo con ese otro chico, le dejó en claro que no, no debía de hacerlo.
—¿Qué pasa, Han? —quiso saber Sehun tomando la muñeca de su novio para ver de quien era la llamada, pero Luhan bloqueó el celular—. Han.
—Mis padres marcaban, pero sabes cómo son, si saben que ando de disco me matarán —mintió esbozando una sonrisa y guardando su teléfono en su bolsillo jaló por la mano a su pareja hacia la barra de ese antro, tenía que conseguir un trago pronto, haber recibido esa llamada de pronto le dejó seca la garganta.
Estando en su mundo, Chanyeol apenas se dio cuenta de que él se había quedado solo con Kyungsoo en la pista, bailando de esa manera tan intima, sobre todo cuando el cambio de música se dio a una más íntima, una balada lenta. Kyungsoo solo por jugar lo abrazó por el cuello sin dejar de mirarle a la cara, Chanyeol solo le sonrió moviéndose al ritmo de la música.
—Channie, ¿cuánto tiempo más piensas esperarlo? —preguntó Kyungsoo a su oído, el más alto se tensó un poco—. Me duele el corazón de verte tan triste por su causa, he estado a tu lado durante casi cinco meses.
—Soo...
—Durante este año, no has sabido nada de él, ni un solo mensaje te mandó, creo que es momento de que empieces a olvidarte de él.
Chanyeol detuvo sus movimientos finalmente mirando al bajito entre sus brazos directamente a los ojos. Había tratado de no pensar en cuánto tiempo había pasado desde que el menor se había ido, todo ese tiempo solo había ignorado el paso del tiempo, y recordar que un año había pasado ya le hizo sentir vacío de pronto.
—Sé que el volverá, porque me...
—Ya no te engañes, Channie, es momento de que veas las cosas teniendo los pies sobre la tierra, todos han sido pacientes contigo, incluso has ido a terapia, pero sigues creyendo que él te ama.
—Lo hace, él me lo dijo y se esforzaba en...
—El amor no se fuerza, Chan. Lo sabes, nuestro amor jamás se forzó y me da mucha tristeza ver cómo el corazón bonito que yo dejé está roto.
—Soo, yo.
—Porque te conozco, sé que no mereces todo lo que te hizo, lo amaste incondicionalmente e hiciste locuras por él, pero se fue sin decírtelo a la cara, ¿crees que merece más de ti?
Chanyeol no respondió, no tenía nada que pudiera justificar lo que Baekhyun había hecho, y mucho menos él quería seguir justificándolo. No importaba si era Soo quien se lo decía o alguien más, todos tenían razón. Era el momento exacto para aceptar que Baekhyun jamás lo quiso como él hubiese querido, quizá y sí había sido una venganza por haberlo engañado al hacerse pasar por Loey, esa idea rondaba últimamente en su cabeza y no había otra razón más viable que esa cuando el bajito se fue en el momento que todo parecía ir mejor entre los dos.
No lo dudó más, tomó el rostro de Kyungsoo entre sus manos y después de tantos años, besó una vez más esos bonitos labios acorazados que no le supieron mal, contrario a ello sintió que esa era la boca correcta que quería besar en ese momento.
(...)
Gruñendo de mal humor caminó hacia la puerta a causa del timbre que no dejaba de sonar de manera molesta, ¿quién diablos se atrevía a irlo a molestar a su casa tan temprano? Sobre todo, cuando tenía una resaca terrible. Estaba pensando muy seriamente en darle de patadas al de correspondencia si era él quien estaba molestando, pero al abrir la puerta se quedó helado. De todo lo que esperó ver, no fue a él precisamente.
—Tú...
—Te he estado llamando en la última semana, incluso a Minseok, pero ninguno de los dos responde.
Hubo un silencio bastante incomodo entre los dos después de que él dijera eso, el más alto no tenía una justificación del porque no le había querido responder las llamadas a pesar de que sí entraban. Simplemente había estado desviando las llamadas evitando el contacto con su amigo, a quien veía realmente cambiado después de todos esos meses en los cuales no lo había visto. Quizá no solo era el cambio de tono de cabello y la ropa un poco más formal, o que quizá este ya tenía 25 años recién cumplidos. Luhan podía notar un aura diferente en el más bajo en ese momento.
—¿Quieres pasar? Me acabo de despertar y no estoy bien vestido como para dejar que mis vecinos me vean así —dijo Luhan rascando su nuca al hacerse a un lado para poder dejar que su amigo pase—. Baek.
El aludido entró al departamento de su amigo sin decir más, dejó su bolso sobre el sofá en la sala, viendo a su vez la ropa tirada en el suelo y también algunos que otros empaques de comida rápida, Luhan seguramente no había recibido a Minseok en su departamento en el último mes, o su piso no estaría tan desordenado. El dueño del piso cerró la puerta detrás de sí, pensaba en que haría en ese momento con su visita inesperada, era la razón por la cual no le había querido responder, sospechaba que el chico quería preguntarle muchas cosas de las cuales él no sabría qué decirle.
—Han, ¿cómo han estado? —preguntó el más joven tomando asiento en el sofá, Luhan miró confundido a su amigo—. Digo, hace tiempo que no los veo y.
—Un año y un par de meses para ser más exactos, ¿no?
Baekhyun notó de inmediato el sonido amargo en la voz de quien solía ser su amigo más cercano, después de todo, Minseok y Luhan eran de las personas que mejor conocía. Baekhyun solo asintió, todo ese tiempo había pasado.
—Yo.
—¿A dónde fuiste, Baekhyun?
—A muchos lugares, era necesario.
—¿Lo era? ¿por qué? —cuestionó severo sin dejar de mirar fijamente al ahora rubio.
—Si me quedaba, le haría daño a Chanyeol.
Luhan no pudo evitar soltar una risa agria ante esas palabras descaradas de su amigo, no podía creer que Baekhyun tuviera tan poca vergüenza como para decir eso nada más así. El rubio crispó sus cejas ante la sorna que su amigo usó frente a él.
—¿Y realmente crees que todo estuvo bien tras tu repentina partida? —cuestionó el más alto hundiendo el entrecejo, Baekhyun solo pudo apretar los labios—. Realmente lo creíste —susurró Luhan más para sí mismo mientras desviaba la mirada—. Como sea, ¿por qué volviste?
Baekhyun no respondió de inmediato, se mantuvo en silencio por algunos minutos mientras jugaba con sus manos. Luhan quien lo observaba en silencio se quedó tenso cuando vio lo que esos finos dedos de su amigo acariciaban, era su anillo de bodas. No podía ser cierto eso, tenía que ser una broma.
—Cuando llegué hace una semana, el departamento estaba vacío... él no estaba ahí.
Luhan no iba a mentir, estaba deseando mucho tomar por el cuello al rubio y darle un par de bofetadas para hacerlo entrar a razón después de decir semejante estupidez, pero solo se tocó la frente con su palma.
—Deja en paz a Chanyeol, no lo busques más —dijo claro y frio.
Baekhyun alzó su mirada hacia su amigo tras sus palabras, ¿qué significaba eso? Luhan debía de haber enloquecido.
—De qué estás hablando... él y yo estamos casados y.
—¿De qué hablas tú? No pensaste en eso cuando lo dejaste sin darle una explicación, Baekhyun.
Baekhyun suspiró con pesadez al notar la manera tan severa en la que su amigo lo estaba juzgando, después de ver la reacción de Luhan, quien siempre había sido el más suave algodón de azúcar que conocía entre sus amigos, no quería imaginar como estarían todos los demás con él. Incluso no había tenido el valor de ver a su madre para preguntar lo que quería saber, había creído que yendo con Luhan se ahorraría el sermón de su vida.
—No te busqué para que me sentencies sin saber mis motivos, pero tampoco pienso darte una explicación a ti, así que solo quería saber si sabes si Chanyeol está en su departamento, he intentado llamándolo al móvil, pero no está disponible su número.
Luhan apretó sus labios cuando vio al rubio ponerse de pie acomodando su chaqueta azul, no respondió de inmediato, sabía que el número de Chanyeol había cambiado después de que este en una crisis de desespero aventó su móvil por el balcón de su departamento dejando perder este con todo y el número. Después de recordar todo lo mal que la había pasado Chanyeol durante todo ese año, sabía que, aunque él no le respondiera, Baekhyun iría a buscarlo al departamento del más alto, cosa que sabía podía traerle una recaída a Chanyeol, no sabía las intenciones de Baekhyun, pero no necesitaba mucho para saber que nada bueno podía salir de su regreso.
—Se mudó lejos de aquí después de tu partida —mintió rápido y firme haciendo que fuera lo más creíble posible—. Desde entonces, no sé nada de él.
Baekhyun se negó a creer eso, ¿cómo sería posible que Chanyeol se fuera así de pronto? Suspirando resignado sabía que tenía que ir y buscar a Sehun, o quizá a Tao y su pareja, siendo que estos eran los amigos más cercanos de Chanyeol.
—Está bien, gracias —dijo Baekhyun con voz apagada saliendo del piso de Luhan.
El dueño del departamento soltó un suspiro pesado, nunca Baekhyun había sido un mal amigo con él, y se sentía muy mal de tener que mentirle de esa manera al bajito, pero después de esos cuatro años de conocer tanto a Loey como a Chanyeol y ser testigo de todo lo que este hizo por conquistar al menor, creía que lo mejor era que ellos dos no se vieran nuevamente, al menos no cuando Chanyeol recién estaba acomodando su vida con alguien que sí sabe lo que quiere.
Baekhyun subió a su motocicleta cuando salió del edificio donde vivía Luhan, se puso en marcha hacia la carretera principal de la ciudad. Pensaba en otra opción que no fuera Sehun para conseguir la nueva dirección de Chanyeol, pero nada era mejor que eso. Sin más, se puso en marcha hacia la casa de su amigo.
No le llevó más de media hora llegar a la casa de Sehun, se estacionó frente a la misma quitándose el casco que dejó sobre el volante de su motocicleta, de la cual se bajó caminando hacia la entrada de la casa del mayor. Tocó el timbre, nadie abrió la puerta por los siguientes 5 minutos, insistió un par de veces más, pero fue el mismo resultado.
Estaba por rendirse e irse a casa cuando vio al que buscaba llegar recién, caminando con una bolsa plástica en manos, quizá venia de comprar del super, y con su otra mano jugaba con sus llaves. Sehun se quedó parado en secó como si haya visto un fantasma en plena madrugada, y eran recién las cinco de la tarde.
El rubio hizo una mueca incomoda ante esa mirada, la cual era exactamente igual a la que le dio Luhan cuando lo vio frente a él. Sehun negó con su cabeza un par de veces caminando hacia su puerta, ignorando olímpicamente al rubio.
—Sehun.
—Oh, perdón, creí que realmente eras un fantasma —dijo con sorna mientras abría la puerta de su casa, Baekhyun hizo una mueca—. ¿Qué pasa, por qué apareces de pronto aquí en mi casa?
Baekhyun comenzaba a creer que obtener la información que quería sería realmente difícil cuando sus supuestos amigos estaban actuando de esa manera tan hostil con él. No pretendía que le entendieran y lo trataran suavemente, entendía bien lo que hizo mal, pero lo único que quería era encontrar a la persona a la que sí le debía una explicación.
—Quiero saber la nueva dirección de Chanyeol, estoy seguro de que sabes dónde está viviendo ahora, ustedes son como dedo y uña.
Sehun se sintió un poco confundido mientras miraba el interior de su casa desde la puerta en la cual se quedó estancado. No sabía de lo que estaba hablando el más bajo, pero saber que este estaba buscando a Chanyeol en ese momento le hizo sentirse molesto. ¿Por qué tenía que aparecer después de un año y en el momento menos indicado? No tenía ningún derecho de ir a su casa a preguntar por él cuando lo abandonó por tanto tiempo. El alto miró al menor incrédulo.
—Baek, regresa a tu casa. No tengo nada de qué hablar contigo.
—Sehun, dime dónde está Chanyeol, sino necesitara tu ayuda no vendría, necesito hablar con él de lo que pasó.
Sehun sonrió cruzándose de brazos, eso era lo que todos habían esperado durante los primeros meses de la ausencia del menor, que este apareciera y diera una explicación del porque desapareció de pronto, y si tal vez hubiese aparecido unos cinco meses atrás, donde la vida de Chanyeol estaba pendiendo de un hilo, el mismo hubiese cogido al bajito en brazos como un costal de papas y lo hubiese llevado corriendo a brazos de Chanyeol para sacarlo de su miseria, pero no, no ahora que el más alto por fin se estaba recuperando por sí mismo y comenzaba a sonreír sinceramente al lado de Kyungsoo. No iba a negar que le tenía cariño a Baekhyun, lo conocía de años, pero, más conocía a Chanyeol, y no pensaba cometer de nuevo el error de darle esa arma tan mortal a Chanyeol y que esta vuelva a hacerle daño.
—Recuerdo claramente, que fuiste tú quien me pidió que mantuviera al margen de tu relación con Chanyeol, ¿no es así? —cuestionó al recordar esa conversación poco amable que el bajito tuvo con él cuando este se había ido de luna de miel con Chanyeol—. Fuiste muy claro al decirme que me fuera a la mierda con mis ideas estúpidas y dejara de meterle esas ideas a Chanyeol, no quería que yo influya en él, ¿recuerdas?
Baekhyun sintió que las piernas se le aguadaron un poco ante la respuesta del más alto, claro que recordaba esa parte de su vida. Había estado muy molesto que no midió sus palabras en ese entonces y se desquitó de su frustración con su amigo, todo porque no podía corresponderle a Chanyeol como este lo quería.
—Sehun, yo ese día...
—Ese día no pensaste en que podías necesitar mi ayuda, pero mira, como son las cosas —dijo Sehun con ironía encogiéndose un poco de hombros sin dejar de sonreír—. Ahora te digo yo, Baekhyun, vete a la mierda y deja a Chanyeol en paz, que está mucho mejor sin ti, que contigo.
Diciendo esto se metió a su casa cerrando la puerta frente al rostro pálido del rubio.
(...)
Chanyeol abrió la puerta esbozando una amplia sonrisa cuando vio al bajito frente suyo, suspiró suavemente sintiendo que la paz volvía a su ser después de tanto tiempo. Lo había echado tanto de menos que no dudó en abrazar al bajito con fuerza, aferrándolo a su cuerpo para después besar sus labios de manera profunda y prolongada. Ambos sonrieron al separar sus labios y entraron al departamento.
—Nunca creí que iba a extrañar tanto tus besos hasta este momento —confesó del más joven pellizcando suavemente la mejilla del más alto—. ¿Cómo has estado, Channie?
—Algo triste desde que te fuiste, pero mejor ahora que te veo —dijo el más alto sentándose junto con el menor en su sofá más grande—. ¿Qué tal el viaje?
—Bien, aunque algo cansado, pero en cuanto llegué a mi departamento quise venir a verte —respondió el castaño oscuro mirando hacia donde estaba Toben echado con su carita triste—. Que feo que no le agrado a tu hijo, no importa cuánto regalo le traigo no consigo su aprecio.
Chanyeol miró a Toben ante las palabras de Kyungsoo, no entendía tampoco porque su pequeño amigo peludo no lograba simpatizar con él. Siendo que era un cachorro bastante amigable con todo mundo, no lograba entender porque jamás se acercaba a Soo, y siempre se echaba al pie de la puerta como si esperara que alguien más entrara.
—Con el tiempo él te querrá —aseguró el más alto acariciando la mejilla del menor—. ¿Quieres salir a dar la vuelta?
—Me parece bien, después de dos semanas sin vernos se me antoja comer un helado contigo en el parque —aceptó Kyungsoo creyendo que era una excelente idea el salir juntos en ese momento.
Sin tardar más, Chanyeol tomó la correa de Toben para salir los tres juntos a dar la vuelta, el pequeño no había salido mucho a caminar últimamente que Chanyeol lo creía bueno para él, pero Toben no se vio muy animado realmente en querer salir. Soo a pesar de que le gustaba el pequeño cachorro y tenía la ilusión de salir a caminar con él también, le sugirió al más alto que lo dejase en casa.
No tuvo otra opción Chanyeol que dejar a su amigo en casa para después salir con el de menor estatura de su departamento y después del edificio. Los dos caminaron de la mano por los andadores hasta salir a la avenida que los llevaba hacia el parque más cercano de su casa, el mismo donde siempre iba a hacer un poco de ejercicio matutino tiempo atrás. Ambos se acercaron al vendedor ambulante de los raspados y pidieron un vaso con doble cucharilla a petición de Kyungsoo quien se estaba encargando de elegir los sabores mientras Chanyeol atendía la llamada de su hermana, quien como cada mes le marcaba para asegurarse de que estaba bien.
—Sí, hermana, estoy comiendo bien y además Soo ya regresó de su viaje, no debes de preocu...
Se quedó callado cuando vio aquello pasar frente a él, esa motocicleta la conocía mejor que nadie, pero no, no podía ser. Debía solo estar alucinando y su corazón le estaba jugando mal, sin duda ese estilo de ropa no era la de él y mucho menos podía ser él, ¿por qué estaría de regreso después de tanto tiempo?
Kyungsoo una vez tuvo el raspado para los dos se acercó al más alto viendo esa expresión pensativa mirando a la nada. El bajito tocó suavemente la mano de Chanyeol a lo cual este regresó a verlo y antes de que el menor dijera algo Chanyeol le indicó que tome asiento.
(...)
Al llegar a su departamento bajó de su motocicleta dejando está en su estacionamiento privado. Suspirando se adentró a su piso, no importaba cuánto había estado buscando en los departamentos alrededor de la ciudad, ninguno de los conserjes le habían dado información respecto a la persona que buscaba, simplemente Chanyeol no estaba en ningún condominio de la ciudad. La idea de que este se haya mudado de ciudad surgió en su cabeza cuando esa tarde fue a buscarlo al colegio donde trabajaba, sorprendiéndose demasiado de saber que Chanyeol había dejado botado su trabajo un mes después de que él se alejó. Chanyeol no parecía ser ese tipo de persona, pero aun así lo hizo.
Mientras subía las escaleras hacia su piso se quedó pensando en cómo podía obtener información sobre Chanyeol, pero ninguno de los que solían llamarse sus amigos quería decirle. Minseok simplemente no quería hablarle y Luhan le había dejado claro que pensaba igual que Sehun, no merecía molestar a Chanyeol nuevamente. Y él simplemente sentía que se ahogaba de la ansiedad de no poder encontrarlo.
No importaba cuántas veces Sehun lo mandase a la mierda al preguntarle, insistió varias veces más, pero obtenía la misma respuesta negativa, no quería decirle y ya no sabía qué más hacer.
Dos semanas buscando al más alto en todos los recintos habitacionales y nada que sabía de él. La idea de ir a casa de sus padres y preguntarle a su madre por Chanyeol, lo tentaba, pero, no quería lidiar con su padre en ese momento y tener que decirle la verdad, que no se había ido de viaje con Loey todo ese año, sino que había huido de todo porque tuvo miedo de que su padre se entere de la verdad.
Estando en su sala se recostó en su sillón, estar en su departamento nuevamente le traía a la mente los recuerdos de los últimos días que vivió con Chanyeol. Todas las cosas que compartieron juntos estaban en su cabeza haciéndole sentir miserable. No debió irse. Fue un error, pero una vez estuvo lejos tuvo miedo de volver y encontrar en Chanyeol algo roto, lo cual no sabría como reparar, pero, en ese momento en el cual todos le daban la espalda y no querían ayudarlo, estaba seguro de que hubiese sido mejor regresar antes.
—Chan... ¿en dónde estás?
Susurró bajito tomando su celular, su corazón dio un vuelco cuando revisó la notificación que le había llegado, después de todos esos meses que había estado lejos del mundo que él conocía, se había alejado de las redes sociales, que regresar de nuevo solo para darse cuenta de eso se sintió como un balde de agua fría. Era una historia de Sehun, en la cual claramente estaba con Luhan, sus amigos del restaurant-bar, puesto que estos si se veían sus rostros para después enfocar solo la mesa, sobre la cual había vasos, copas y botellas de licor, la música de fondo era alta, se podía reconocer que estaban en la discoteca, y él conocía cual era de todas las que había en la ciudad, pero no fue eso lo que le dejó helado, sino aquella mano grande con ligeras venas que se le marcaban al tomar una de las copas, esa mano era inconfundible para él, que sintió algo frio instalarse en su pecho al ver aquella mano más pequeña acariciar su muñeca para después quitarle la copa y enlazar sus dedos.
Sin pensarlo más se puso de pie, saliendo como alma que lleva el diablo abandonó su departamento subiendo pronto a su motocicleta para ir a esa discoteca.
15 minutos después llegó. Hacer que el cadenero le dejase pasar sin hacer toda la cola de espera le costó su número de teléfono y un par de coqueteos que le hicieron sentir asqueado, no importaba qué, no se sentía cómodo portándose lindo con nadie más que no fuera Chanyeol. Una vez estuvo adentro la música lo atrapó casi dejándolo sordo, tuvo que rechazar varias ofertas para bailar o aceptar tragos de extraños que lo interceptaban en su camino. No sabía en qué parte de todo ese lugar iba a encontrar a esa bola de amigos que no le querían dar ni la hora, pero no le importaba, para ver a Chanyeol le daría toda la vuelta al antro.
Estaba por subir a la segunda planta de la discoteca cuando alcanzó a ver a Sehun y Luhan bailando en el centro de la vista, la cual tendría que atravesar entre todo ese túmulo de personas para llegar hasta ellos. Aguantando de todo, manoseos, olor a sudor y alcohol avanzó entre toda esa gente hormonada hasta llegar a Sehun, a quien le sujetó por el brazo haciendo que este se gire.
Tanto Luhan como Sehun casi sufren una bajada de presión cuando vieron al rubio de baja estatura frente a ellos.
—Baekhyun... —dijo Luhan conteniendo el aliento e instintivamente este miró hacia el segundo piso.
—¿Qué estás haciendo aquí, Baek? —preguntó severo Sehun quien no creería para nada que era una simple coincidencia, su amigo solo no frecuentaría un lugar así, siendo esta una discoteca especialmente para gente lgbt.
—¿Qué más? Estoy aquí por Chanyeol, sé que está aquí, dime en dónde está su mesa —pidió mirando a los alrededores, dándose cuenta de que inconscientemente Luhan regresó a mirar hacia la zona detrás de ellos dándole con eso la ubicación de Chanyeol.
Baekhyun estuvo por caminar hacia esa zona, pero Sehun se lo impidió cogiéndolo del brazo con fuerza, y lejos de dejarlo avanzar hacia donde estaba Chanyeol con los demás chicos jaló a Baekhyun con él hacia una zona un poco más tranquila del antro. Luhan solo recibió una mirada de su novio y supo que tenía que hacer que Chanyeol se fuera con Kyungsoo de ahí sin que estos vieran a Baekhyun.
El rubio rabió con fuerza zafándose del agarre de Sehun con brusquedad ante su acción de alejarlo de todo el bullicio de gente e interponerse en su camino para buscar a su esposo.
—¿Cuál es tu problema? —cuestionó molesto.
—No te voy a permitir que veas a Chanyeol y le hagas daño nuevamente.
—No quiero hacerle daño, Sehun. Esa jamás fue mi intención, yo realmente me alejé por su bien, tenía que aclarar muchas cosas de mi cabeza y mis sentimientos hacia él. Alejarme por un tiempo de él fue lo mejor que pude hacer para no lastimarlo.
—¿Lo mejor que pudiste hacer, Baekhyun? —preguntó con cierto toque irónico, nadie veía de esa manera lo que Baekhyun decía—. Si realmente es así como lo dices, ¿por qué te llevó más de un año en regresar para darle la cara a él? ¿por qué te fuiste diciéndole solo un lo siento? ¡Sabes siquiera lo mal que Chanyeol la ha pasado! No, no lo sabes, eres un maldito egoísta, Baek. Nunca lo has querido y lo destruiste de la peor manera, haciéndole creer que lo amabas para después largarte sin decirle nada. Tu venganza fue demasiado cruel.
Baekhyun sintió que dos bofetadas se instalaban en su rostro ante las palabras de Sehun, quizá si esos golpes fueran reales dolerían menos, porque no, nada de eso era así. Nunca planeó ninguna venganza y mucho menos quiso hacerle daño a Chanyeol.
—Te equivocas, Sehun. Yo jamás quise vengarme de Chanyeol, no podría y mucho menos ahora que estoy seguro de lo que siento, yo amo a Chanyeol tanto como llegué a amar a Loey, incluso más. Por eso estoy aquí porque yo quiero...
—Regresaste demasiado tarde.
—¿Qué? —A pesar de que no sabía qué quería decir el más alto con eso se sintió como un balde de agua fría, de pronto nada se sentía bien, la mano que tomaba la de Chanyeol le resultaba más molesta que antes y un mal sabor de boca le nació.
—Chanyeol te esperó durante mucho tiempo, al borde de la locura, dejó de comer, bebía mucho, e incluso perdió su trabajo por no tener las fuerzas para dar clases, tuvimos que quitarle a Toben y estar al pendiente de él. Y a pesar de eso, todos queríamos que aparecieras para que nuestro amigo fuera feliz con la persona que amaba —dijo Sehun con una sonrisa amarga en sus labios—. Debí detener a Chanyeol desde el momento que quiso saber de ti, nunca creí que fueras a hacerle tanto daño de tal forma que su salud física y mental llegaran al borde del colapso, pero él hubiera no existe y pasó lo que tenía que pasar, y el problema aquí, Baekhyun. Es que llegaste a la conclusión de tus sentimientos muy tarde, Chanyeol está saliendo con alguien más.
Esa última oración se escuchó en su cabeza como un eco doloroso que le hizo flaquear levemente, su corazón dolió de solo pensarlo. La mano enlazándose a la de Chanyeol tenía más sentido en ese momento. Pero no, no iba a creer eso. Solo era SeHun queriendo vengarse por su amigo, sonrió incrédulo.
—Esa broma es muy cruel, Sehun, pero no me la trago —dijo completamente decidido a no creer en esa mentira.
—¿Broma? —inquirió Sehun cual si quisiera corroborar que no escuchó mal, Baekhyun le miró obvio haciendo sonreír con gesto agrio al más alto—. Baekhyun, tú realmente crees que Chanyeol no puede encontrar a alguien que le haga sentir bien y mejor que tú, ¿cierto?
Baekhyun ni siquiera pensaba ponerse a discutir más sobre el tema con Sehun, él iría a buscar la verdad por su propia cuenta. Totalmente decidido quiso pasar por un lado de Sehun hacia donde sabía ya que estaba la mesa donde debía encontrarse Chanyeol, pero Sehun lo sujetó con fuerza por el brazo deteniéndolo.
—Déjame en paz, Sehun.
—Ya te dije que no te voy a dejar que veas a Chanyeol, entiéndelo.
—No es asunto tuyo, déjame en paz —le dijo Baekhyun soltándose del agarre ajeno con un poco de trabajo logrando lastimarse en el proceso, Sehun, aunque le tenía aprecio al más joven no vaciló. No lo dejaría ir hasta que Luhan haya sacado a Chanyeol y Kyungsoo de ahí.
...
No entendía cuál era la prisa por salir todos de la discoteca cuando la estaban pasando tan bien, además de que el menú de bebidas era variado y muy bueno. Pero al final de cuenta todos salieron del lugar yendo en el coche de Chanyeol hacia el local de Suho y Tao para seguir bebiendo un poco más, por ese día todos podían pasarse de irresponsables y beber más de la cuenta.
Chanyeol estacionó su coche en medio del espacio del estacionamiento, a esa hora y el local cerrado eso era lo de menos. Todos bajaron del auto, el más alto de todos ellos solo pudo ver como la pareja junto con Minseok iban en un abrazo de tres a abrir la puerta mientras que Luhan escribía con apuro en su celular. Pensó en preguntarle por Sehun, pero Kyungsoo lo jaló con él hacia el local de sus amigos. Estando ya todos en el interior Chanyeol se acercó a Luhan sin que este se diera cuenta alcanzando a leer un poco de la conversación que el bajito estaba teniendo al parecer con Sehun, lo cual le dejó un poco frio.
''Listo, ya salimos del antro, Chanyeol no verá a...''
—¿A quién no veré? —preguntó Chanyeol.
Luhan sintió que toda su alma se le salía de cuerpo en ese momento que escuchó y sintió a Chanyeol tan cerca que su celular salió volando hacia el suelo sin siquiera poder terminar de enviar el mensaje completo. Chanyeol hundió el entrecejo esperando una respuesta de parte del chico.
Nota final:
Chan chan chan..... Y qué está pasando aquí? Ajdkd
Pues bien, estuve leyendo sus comentarios y entre ellos ví que querían que Soo apareciera en la vida de Chanyeol y TaDa... Aquí está jajsjs.
Baekhyun regresó también, después de un año y meses, ¿qué es lo que pretende después de tanto tiempo?
¿Han sacado teorías al respecto?
Channie fue al psicólogo y sigue yendo después de ocho meses en depresión, le está yendo bien, ¿verdad que sus amigos son un amor?
¿Alguien aquí cree que Soo es mejor para Channie que Baek?
¿Tienen idea de lo que puede pasar mañana en el siguiente capítulo?
Si es así no se olviden de comentar en sus partes favoritas, las que les de coraje y genere intriga, nos leemos mañana, tengan bonita noche y dejenme sus estrellas, son gratis. Les quiero 💕❤❤🤗
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