Capítulo 1.
Hooooolis de nuevo yo.
Ayer ya no pude traer el capítulo porque se me fue el día, y para cuando me acordé ya era muy tarde.
Perooo, aquí está y espero que lo disfruten mucho. ^^/
Mood alusivo a escenas del capítulo.
Ser maestro de música era lo que tanto amaba, pero también algo que disfrutaba mucho era ser entrenador de educación física, sobre todo en el deporte de básquet, y sus puntos a favor era que es alto y tiene una muy buena y sexy complexión física.
Pero su buen físico no era nada más gracias a Dios, sino también a su duro entrenamiento y salir a correr todas las mañanas antes de ir a clases al parque que estaba a tres cuadras de su departamento.
Los domingos era donde más tiempo le dedicaba a correr y hacer un poco de ejercicio en el gimnasio público que había en el parque. Por ello ese día se encontraba trotando mientras escuchaba música.
Llevaba más de media hora haciéndolo, el sudor comenzaba a hacer que su camiseta se pegara a su cuerpo bien trabajado. Así mismo corría este por su frente la cual se limpió con su toallita cuando se detuvo cerca del área de niños.
Estaba bebiendo de su agua cuando alguien llamó su atención. A varios metros frente a él, en el arenero de juegos se encontraba el chico más guapo y sexy que había visto nunca. Llevaba al igual que él ropa deportiva, y una banda en la cabeza que echaba su cabello ligeramente hacia atrás dejando al descubierto su bonito rostro tallado por las manos de un angel, y que le permitía ver su hermosa sonrisa rectangular. Era hermoso por donde le viera.
El joven no se veía mayor, quizá era de su edad o un poco menos. Estaba acompañado de tres niños de entre cinco a ocho años, que portaban igual ropa deportiva y parecía que eran sus familiares por su mismo tono de cabello y sus ojos pequeños.
Pensó en acercarse, quizá con el vago motivo de que haría ejercicio cerca de ahí, pero sus planes se vieron irrumpidos por una mujer que se parecía mucho al chico, misma que saludaba de manera cariñosa al joven y a los niños quienes le decían mamá constantemente. Hizo una mueca cuando el amor de su vida se retiró junto con ella haciendo imposible saber su nombre.
Resignado a que sería solo un amor de calle siguió corriendo para terminar su hora de ejercicio.
[>>>]
—Me suena un poco tu descripción, pero dudo conocerlo —dijo el chico castaño a su lado mientras veían una película en su casa.
SeHun, su mejor amigo y fiel compañero de travesuras desde que tenían ocho años, se encontraba en su sala, comiendo sus palomitas y bebiendo todo el refresco que encontró en la nevera. Ni siquiera habían hecho planes para ese momento, pero el menor de los dos se apuntó a una tarde de domingo de películas y llegó nada más.
Tampoco le molestaba, no tenía nada que hacer. Tenía todo listo para sus clases del día siguiente, no había planeado salir con nadie y después de haberse quedado devastado cuando no pudo conseguir número ni nombre de ese bonito chico, no quiso ir a ninguna parte.
Soltó un suave suspiro de resignación. No le quedaba de otra más que olvidarlo.
—Es una lástima, con lo social que eres pensé que quizá lo conocerías —dijo el más alto haciendo una mueca antes de meterse un puño de palomitas a la boca y comerlas sin mucha educación. SeHun le miró indignado a lo cual el contrario se rió—. Conoces a casi toda la Universidad, y hay muchos universitarios por aquí, además que sueles ir mucho a fiestas.
SeHun le miró indignado todavía pero después asintió y sonrió amplio.
—Eso es verdad, y el viernes que viene tengo una fiesta, ¿quieres venir? —ofreció bebiendo el último trago de su vaso de soda, Chanyeol se lo pensó—. Venga, chico. Seguro que si es universitario lo verás por ahí.
Animó y surtió efecto.
Toda la semana Chanyeol mantuvo la esperanza de poder ver a ese chico en la fiesta, aunque le desanimaba un poco el que sea así. La verdad era que ese niño de bonita sonrisa y ojos risueños que vio en el parque, se veía bastante tranquilo como para andar de fiesta en fiesta, esperaba que de toparselo ahí no fuera como SeHun, un fiestero rompe corazones.
Para cuando el viernes llegó dio sus clases con más energía que nunca, incluso sus alumnos se vieron bastante sorprendidos, pero los que sí no le aguantaron el ritmo fueron los que tuvieron física con él ese día. Sus pobres cuerpos no tendrían mucha acción ese fin de semana.
Pero Chanyeol sí, al menos eso creía. Esperaba poder pasarla bien ese fin de semana y era lo bueno si era un maestro joven.
Para las ocho de la noche, hora en la que acordó con SeHun de verse fuera de su departamento, ya estaba listo, esperando nada más a que su amigo llegue para poder ir a la dichosa fiesta. Pudo llegar solo, pero SeHun insistió que era mejor ir en un solo auto, aunque Chanyeol sabía que era solo una maniobra negra de su amigo para hacerlo manejar se regreso cuando SeHun ya estuviera ahogado de alcohol hasta el tope.
Y era así desde que su antiguo novio se fue a vivir a tres países lejos, sin querer saber de él por una estupidez de borrachera. Pero aún así SeHun no entendía y seguía bebiendo como si no hubiera mañana.
Cuando SeHun llegó solo pitó el claxon, algo que le reclamó cuando estuvo dentro del auto. Odiaba que hiciera eso por la simple razón de que los vecinos pensaban que ellos dos andaban, algo que no estaba mal pero no le gustaba mucho. Durante el camino hablaron de lo que hicieron antes de la hora, SeHun le hablaba sobre un quizá futuro ligue de un rato.
A comparación de SeHun, él era la clase de persona que se daba tiempo de conocer a la persona con quien iba a salir o podía tener algo, no era de los que se besaban o acostaban con alguien la primera noche. Era de los que creían que todo a su tiempo era mejor y así las cosas podían funcionar mucho más a comparación de ir todos adelantados. Y SeHun, bueno él decía que intentar te llevaba a conocer al indicado. Eran polos opuestos pero a pesar de eso su amistad era solida y leal, siempre estaba ahí el uno para el otro.
Al llegar al lugar, Chanyeol observó todo con atención, era una casa enorme, de tres pisos, tenía una barda larga y un portón enorme color negro. Desde afuera podía ver el jardín bien cuidado, las flores, la alberca y a toda la gente que ya se encontraba ahí.
La decoración era llamativa, había globos por todos lados, luces neón, espumas, y mucha gente bailando y bebiendo por todo lados. Pero lo que más le llamó la atención es ver a otros llegando con regalos. ¿Era una fiesta de cumpleaños? Iba a preguntarle a SeHun pero cuando lo vio sacar de su cajuela una caja de cartón de regalo color negra con un moño plateado lo confirmó.
—¿Por qué no me dijiste que era una fiesta de cumpleaños? —reclamó.
SeHun se escogió de hombros y sonrió ladino indicándole que pasaran. El chico no le veía problema, su regalo era lo suficientemente grande como para pasarlo por ellos dos.
—Ya, no tiene importancia, creeme que los regalos son lo de menos para el cumpleañero —dijo restándole importancia y lo jaló por el brazo hacia el interior de la casa.
Si la entrada del jardín era genial, dentro lo era mucho más. Estaba lleno de las mismas decoraciones, pero el ruido era más fuerte por el alto volúmen de la música. Había una barra de bebidas exclusiva, bocadillos, el pastel y una pista que parecía un mini escenario, y en el centro de este había un tubo como el que usaban en los prostíbulos las mujeres que prestaban sus servicios. Alzó sus cejas en sorpresa a lo cual SeHun se rió.
—Mi amigo está cumpliendo sus 21 años, está dejando de ser un adolescente bebé para ser un hombre cien por ciento —dijo SeHun con diversión dejando su regalo en la mesa especial para los mismos, Chanyeol lo miró confundido—. Ya lo conocerás, vamos por un trago.
Chanyeol no dijo nada, solo se dejó guiar por su amigo hacia la barra donde pidió dos tragos a los cuales no le dio mucha importancia, sus ojos estaban recorriendo toda esa habitación tratando de ver si reconocía a alguien, pero no. Todos eran rostros nuevos para él. Uno, dos, tres tragos después olvidó su primer propósito y se entregó a bailar con la gente que se atrevió a invitarlo.
No debía ser modesto, sabía que era guapo y era normal que más de una persona lo saque a la pista. Era también un chico bastante divertido, tenía buen carisma y sobre todo sus temas de conversación eran fluidos. Aunque en ese momento saber de qué hablar no era necesario.
Varias pistas más tardes se sintió un poco acalorado por lo cual despidió a su acompañante y caminó hacia la barra para pedir algún trago. SeHun ya se le había perdido de vista. Para ese momento seguía sin saber quién era el tipo del cumpleaños pero le debía felicitar el buen ambiente y la música que pusieron para la pista.
El encargado de la barra le dio su trago el cual estaba a punto de beberse cuando lo vio pasar. Sintió su garganta seca de pronto. Sus ojos recorrieron su hermosa figura, en ese momento lucía todavía más hermoso que el día que lo vio en el parque. Se veía imponente, casual, sexy y... Tuvo que negar varias veces, debía dejar de fantasear y tomar rápido la iniciativa de hablarle. No podía perder esa segunda oportunidad.
Dejó el trago en la barra y se apresuró a abrirse paso entre la gente que seguía bailando, debía llegar a él pero tal parecía que la gente se apretujaba más. ¿Cuándo se habían metido todos a la casa? Quiso maldecir pero se aguantó. Estaba ya casi a nada de tocar el hombro de su crush cuando un brazo lo detuvo y lo jaló hacia una zona más despejada.
—¡Qué mierda! —gruñó frustrado.
—¿A dónde ibas tan rápido, campeón? —preguntó SeHun con diversión tomándose su trago. Chanyeol lo miró resentido buscando de inmediato a su chico bonito entre todos esos individuos. No le llevó tiempo, estaba cerca del escenario—. ¿Qué tanto buscas?
—Aquí está él, el chico del parque —le aclaró y le señaló con su cabeza sutilmente hacia donde se encontraba su crush.
SeHun miró en misma dirección tratando de ver al chico que su amigo le había descrito, y cuando vio a la única persona ahí silbó como si no lo creyera o fuera impresionante. No lo podía creer. Entendía el porqué no le había sonado de todo la descripción, su amigo se había pintado el cabello por enésima vez en ese mes, anteriormente lo tenía castaño claro, ahora lucía un negro azulado que le contrastaba muy bien a su piel blanca.
—Chan, lamentablemente vas a perder tu tiempo si le hablas —avisó tratando de no ser rudo con su mejor amigo. Chanyeol le miró confundido, con su ceño hundido—. Es Baekhyun, un amigo en común con otros amigos, me llevo bien con él y créeme cuando te digo que, de gay no tiene nada.
Chanyeol miró mal a su amigo, sentía que solo lo quería joder, o al menos eso quería creer, se negaba a aceptar en ese momento que ese lindo chico pudiera ser cien por ciento hetero, y no, no era a juzgar por su linda apariencia, era solo que deseaba que no lo fuera, que tuviera aunque sea ese 1% homo que le permita conocerlo.
Pero toda esperanza se marchó una hora después.
Chanyeol entendía en ese momento para qué era ese escenario y el tubo. Varias féminas con trajes bastante pequeños, de esos que no dejaban nada a la imaginación llegaron a la fiesta, todos los hombres —que casi eran en su mayoría los invitados— comenzaron a hacer bulla, contentos de saber lo que se venía, y entre esos hombres estaba ahí su bonito crush. Gritando emocionado por lo que estaban por ver y a Chanyeol eso le apretujaba un poco el corazón.
Desde una esquina de esa sala podía ver como ese bonito chico de cabellos negros se morboseaba a las féminas atrevidas, las cuales lo subieron al escenario y sentaron en una silla en medio, cerca del tubo donde todas ellas le daban su atención bailando para él, restregándose a su cuerpo y Chanyeol deseó ser él quien se frotara contra el bajito, le bailara y pudiera tocarlo como esas mujeres lo hacían.
Pero según SeHun, tenía dos problemas, el bajito no lo conocía y, no era una mujer.
Maldita vida.
Intentó acercarse un par de veces al de cabellos negros pero siempre el bajito era acaparado por otras personas, en especial por una chica bastante bonita que siempre estaba colgada de su brazo, y según Sehun quien los conocía mejor que nadie en ese momento, era Kim Taeyeon, la amiga con derechos del chico, al menos así la conocían, puesto que Baekhyun, el bonito morocho, no había aceptado tener una relación con ella.
—Ya, deja de mirarlo tanto, si sigues así pronto tendremos que usar salvavidas —se quejó SeHun dándole un nuevo trago. Chanyeol lo tomó y le miró resignado—. Babeas mucho por él, recién lo viste la semana pasada, ¿qué te pasa?
—¿Nunca viste a alguien y sentiste un clic en tu corazón que te decía que es el indicado? —preguntó Chanyeol con voz enamorada tocándose el pecho antes de tomarse el trago de una sola. SeHun asintió.
—Eso sentía con Soo, pero mírame aquí —dijo abriendo los brazos y encogiéndose de hombros alzó su copa—. Solo como perro, puesto que me dejó, no era el correcto.
Chanyeol iba a renegar defendiendo su postura, pero no tenía ninguna intención de hacer sentir mal a su amigo recordándole el porqué Kyungsoo se había ido dejándolo botado. Sea lo que sea, él estaba cien por ciento seguro de que Baekhyun, el lindo pelinegro era el indicado para él.
Regresó a ver hacia donde estaba el bajito, de nuevo esa sensación molesta de ver como esa mano estaba en la cintura de la chica, pegándola a su cuerpo y besando sus labios de vez en cuando. Estaba celoso y mucho.
Sehun se alejó un momento de Chanyeol cuando de lejos puedo ver como Baekhyun le llamaba. Chanyeol se dio cuenta y quizá sintió un deje de esperanza, tal vez el pequeño se había dado cuenta de su presencia y al verlo con SeHun pensó que sería más fácil acercarse a él. No quitó en ningún momento su mirada de su amigo que ya estaba al lado del bajito de cabellos negros. Los vio hablar, casi susurrándose al oído y presentía que se debía a la música fuerte y esa era la manera más cómoda para hablar sin ser escuchados por alguien ajeno a los dos.
Sintió los nervios todavía más alocados cuando la mirada de SeHun conectó con la suya mientras asentía a lo último que al parecer dijo Baekhyun. Algo ansioso miró a SeHun acercarse a él, el chico mantenía una mirada entre seria y divertida que no sabía cómo interpretar. Una vez estuvieron juntos el más joven le pasó los brazos por los hombros y comenzó a caminar con él hacia fuera de la casa grande donde la música no era tan fuerte y se podía hablar más tranquilos.
Algo confundido y molesto por no poder seguir viendo a Baekhyun se detuvo entre el jardín y la piscina, Sehun se terminó su cigarrillo que había cogido de la mano de Baekhyun y le miró sacando su humo por nariz y labios.
—Estás en problemas, Chan —dijo Sehun encogiéndose de hombros a lo cual Chanyeol le miró confuso—. Baekhyun se dio cuenta de que lo has estado mirando mucho en toda la noche y me pidió que te dijera algo amablemente.
—¿Que por favor tengamos una cita? —inquirió con una sonrisa de oreja a oreja a lo cual SeHun se sorprendió por lo idiota que su amigo podía llegar a ser.
SeHun negó con su cabeza varias veces de un lado a otro con una mirada cansada y resignada, tenía que decirle las cosas claras a Chanyeol sino quería ver a su amigo realmente en problemas. Le tomó el hombro con todo el peso del mundo y le miró directamente a los ojos.
—Lo menos que Baekhyun te pediría es una cita —aclaró SeHun puntualizando con su dedo frente al chico más alto quien borró levemente su sonrisa—. Uno, eres chico, y dos, lo que me pidió es que te dijera que dejes de verlo como si te lo quisieras tirar o que te fueras de su fiesta, si seguías incomodándolo te sacará con sus guardaespaldas —dijo haciendo una mueca.
Chanyeol alzó sus cejas en sorpresa, no exactamente por sacarlo de la casa, sino por haber escuchado que el bajito de cabellos rojos tenía guardaespaldas a su cuidado. Eso le parecía gracioso para esas épocas pero también, algo bueno. Le gustaba la idea de que siempre estuviera bien cuidado.
—Bueno, en ese caso lo invitaré a salir, nada pierdo —dijo decidido a punto de caminar de regreso hacia la casa pareciendo que ignoró todo lo que SeHun le había dicho, por eso mismo el chico lo detuvo por el brazo—. ¡Qué!
—¿A dónde vas? —preguntó algo estresado de que su amigo pareciera no entender lo que le decía—. ¿No me escuchaste? No quiere verte cerca suyo, no fuiste nada discreto y te dije que el niño es heterosexual.
—No te creo —se negó rotundamente a creer eso. No podía serlo, la vida no podía ser cruel con él para darle un enamoramiento de primera vista con un heterosexual que lo quería a varios metros de distancia lejos de sí—. Estoy seguro, muy seguro que en ese bonito chico habrá aunque sea un .00001% de homosexualidad, así que, no pienso rendirme, le pediré una cita —aseguró esbozando su sonrisa característica que le llegaba casi a las orejas.
SeHun le miró incrédulo, no entendía porque su amigo de pronto era tan decidido. ¿Cómo le hacía entender que no todos los heteros podían enamorarse de otro chico? Se rascó el puente de su nariz y soltó un suave suspiro mirando a su amigo, buscando las palabras y toda su paciencia a pesar de estar bebido.
—A ver, Chan, ¿cómo te explico para que me entiendas? —le preguntó de manera divertida tomando al chico por los hombros haciendo que le mire una vez más—. Baekhyun, mi querido amigo Baekhyun ama las vaginas, no los penes, para que te haga caso a ti, tendrías que ser castaña clara, con pechos, bonitas piernas y usar falda o un vestido entallado, ¿me entiendes? Entonces, es imposible que acepte salir contigo si le pides una cita.
—Tienes razón —dijo Chanyeol bajando la mirada, como si se viera a sí mismo cómo estaba vestido en ese momento. SeHun quiso aplaudir porque parecía que por fin su amigo estaba en la misma frecuencia que él—. No puedo invitarlo a salir sino soy así, ¡muchísimas gracias, Hunnie! —dijo mirándolo a los ojos con una enorme sonrisa en labios siendo él ahora quien le sujetaba por los hombros, incluso lo sacudió un poco tomando por sorpresa al menor quien le miró sin entender nada—. Nos vemos mañana.
SeHun apenas iba a articular palabra para cuando Chanyeol estaba ya cruzando la puerta principal del jardín y salía de ahí como alma que lleva el diablo. Parecía que alguien lo iba siguiendo. Confundido no le quedó de otra que entrar de nuevo a la fiesta y explicarle a Baekhyun que su amigo ya se había ido.
[>>>]
En la comodidad de su cama, con el aire acondicionado a todo lo que daba, bien tapado con sus mantas calentitas miraba su celular, pasando de un perfil a otro de esa gente, ninguno se le hacía nada interesante.
Sus amigos, junto con SeHun, le habían recomendado esa aplicación para tener citas de manera exprés con gente que no conocía, gracias a que ya les había comentado que tenía la pequeña intención de conocer a alguien más para tener quizás algo serio. Le habían dicho qué era lo que pasaba con Taeyeon, pero tanto él como la chica estaban de acuerdo que ellos solo eran un par de fajes y sexo ocasional, nada más allá de lo carnal, ella no era lo que él quería ni él lo que ella deseaba realmente como pareja, así que, ser amigos con derecho estaba bien, se conocían desde muy jóvenes, por lo cual, tenían en claro lo que eran.
Y ya había llegado el momento de tratar de cambiar un poco su rutina, conocer a alguien más allá de Taeyeon. Y aunque sabía que en esa aplicación no era exactamente para conocer a alguien con quién tener algo serio, creía que estaba bien, quizá y con suerte había ahí ese alguien.
Siguió mirando un par de perfiles más hasta que de manera rápida tomó asiento en la cama dejando caer sus sabanas hacia a un lado al dar con un perfil que llamó toda su atención, incluso sus cejas se alzaron y sus labios se abrieron en O. La foto de perfil de esa chica dejaba en claro que se trataba de una muchacha muy bonita, sus cabellos castaños lucía casi natural, y eso le gustó. Buscó entre las fotos del perfil, solo había unas cuantas, y en ellas podía confirmar que en sí, la chica era hermosa. Sus ojos grandes en ese rostro pequeño y suave le gustaba, sobre todo sus labios, su boca era un poco grande pero los labios eran carnositos pero a la vez delgados, una mezcla extraña que se le hizo apetecible y si a eso le sumaba que la muchacha tenía senos, era un cien de cien.
Y no era que realmente fuera un morboso superficial que solo se fijaba en el físico y en si tenían pecho o no, pero era un fetiche que tenía, el tocar los senos de sus amantes cuando tenían sexo, y esa chica era una buena opción, ya con eso no importaba si no conseguían algo más que una sola salida.
No era un chico cerrado, le gustaba conocer y experimentar, claro, con prudencia y protección, primero que todo. A pesar de que solía parecer un poco promiscuo siempre estaba al cuidado de su salud, no quería tener una enfermedad solo por la calentura, a pesar de que sus amigos creían que sí y por eso le contrataron a unas mujeres de la vida galante para su cumpleaños.
Sonrió y dio enviar solicitud. Le sorprendió lo rápido que recibió una respuesta de haber sido aceptado. Hizo una pequeña pero aún así mandó un mensaje.
Byun_BH:
¡Hola!
Vi tu perfil y quedé maravillado, eres hermosa.
¿Te parece vernos?
Mandó el mensaje de manera directa. Él era así, le gustaba decir las cosas tal cual eran, no le gustaba para nada decir las cosas a medidas o con verdades ocultas, por ello mismo no le gustaba andar con rodeos, prefería ser conciso y directo. Un poco impaciente miró la pantalla, todavía su mensaje no había sido visto, algo que le causó un poco de desesperación a causa de la pronta respuesta al aceptar su solicitud.
Canddy_CY:
Hola... Claro, ¿cuándo y dónde? O\\\O
Leyó, y la carita al final del mensaje le causó un poco de gracia, ¿realmente era normal que alguien en esa app se citas se avergüence por recibir una invitación? Ladeó un poco su cabeza y sonrió ladino escribiendo una respuesta de manera rápida. Antes de enviarla miró la hora en su reloj, en la parte superior de su celular. Estaban a muy buena hora como para quedar en ese momento y pasar el resto de la tarde y la noche si todo marchaba bien. Y a todo se refería a que en persona fuera mínimo un 90% a lo que mostró en su foto. Odiaba a la gente falsa que se valía del filtro y del maquillaje.
B_BH:
Hoy, a las 6 pm en el parque de esta ubicación.
Mandó la respuesta y seguido de ello el link de la ubicación donde se verían, así no habría problemas del tipo que no encontraban el sitio de encuentro.
[>>>]
Algo ansioso por ser la primera vez que usó esa aplicación se dirigió hacia el lugar de encuentro. Solo había optado por usar un pantalón negro tipo cuero, unos botines y una playera blanca teniendo encima una chaqueta negra de cuero, no usó tantos accesorios más que su arete en la oreja izquierda y un anillo grueso en su pulgar, escondiendo su lunar que tanto le gustaba morderse.
Una vez estuvo en el sitio, que era un parque cercano a su departamento, esperó paciente. Había llegado unos cuantos minutos antes de la hora acordada, y según experiencias con las chicas, estas siempre llegaban unos minutos más tarde e incluso hasta media hora después, por lo cual, se recargó en una pared cruzándose de brazos y mirando por una vez más la hora en su reloj de mano.
Media hora más tarde estaba ya enfadado, era bastante tiempo el que estuvo esperando nada más ahí parado. Hizo una mueca y totalmente decidido a irse y no pasar más vergüenza comenzó a caminar en dirección a su departamento, pero se detuvo cuando escuchó a alguien gritar.
—¡Espera!
Gritó de nuevo aquella persona. Giró un poco su cabeza mirando por encima de su hombro, la persona que gritaba estaba escondida entre unos arbustos, apenas y asomaba su cabeza castaña. Achicó un poco sus ojos tratando de visualizar mejor a ese individuo a quien reconoció un poco después, era la chica de su cita. Alzó una ceja e hizo una mueca.
—¿Candy? —preguntó dudoso todavía.
La chica se asomó lentamente saliendo de esos arbustos. Se acomodó sus cabellos castaños, era una cabellera corta, se veía bien cuidada, y ahora que Baekhyun podía verla de frente se daba cuenta que no era un filtro lo que la fémina utilizó. Su piel realmente se veía muy tersa y suave, además que tenía buen tono que quedaba bastante bien con el bonito color de sus ojos cafés intensos que parecían dar al color caoba, entre café y rojizo gracias al sol.
Sus ojos recorrieron el cuerpo de la chica, desde su bonito rostro hasta sus pechos yendo bajando lento hasta sus piernas descubiertas un poco más arriba de las rodillas hacia abajo, gracias a que su vestido negro algo entallado a su cuerpo. Tenía piernas bonitas, estas eran blancas como el resto de su piel, estaban bien contorneadas y bastante firmes.
Cuando sus ojos conectaron con los de la joven esta tenía las mejillas ligeramente ruborizadas, se le notaba bastante nerviosa. Baekhyun sabía que era un chico guapo, pero no para poner a alguien así de nervioso. Eso le hizo sentir bien, la chica era linda, se veía genuina pero había un gran problema.
—Sí, soy yo... Aunque, me llamo Chan —se presentó la chica, su voz era un poco ronca, aunque se le hacia graciosa esta no le dio tanta importancia—. Espero no te enojes por haberte hecho esperar... Es solo que, te vi llegar y me puse muy nerviosa, no sabía si hablarte —confesó la chica jugando con sus manos y acariciando sus cabellos que colocó detrás de sus orejas, eran algo grandes.
—No hay problema —dijo Baekhyun sin problema alguno con ello en realidad—. Pero hubiera sido genial que te acercaras antes, ¿eres así de tímida? —preguntó rascando su nuca. La chica negó rápidamente.
—No, es solo que eres muy guapo, ¿quieres sentarte o ir a otro lado? —preguntó la chica caminando hasta Baekhyun quien al verla ya de cerca corroboró lo que tanto temía—. Un gusto conocerte.
—Un gusto, soy Baekhyun —se presentó tomando la mano de la chica, esta era un poco más grande que la suya, era linda pero un poco más tosca que la suya, se sintió extraño—. Esto... Claro, vamos, ¿a dónde te gustaría ir? —dijo no muy seguro de querer seguir con ese encuentro.
Pero ver la sonrisa amplia de la chica y esos ojos brillar risueños le hicieron sentir un poco de culpa, pero, ¿cómo podía decirle que no le iban las chicas altas?
Solo esbozó una sonrisa algo incómoda cuando ella se colocó a su lado y la diferencia de altura se hizo presente. Esa cita no podía salir nada bien. De eso Baekhyun estaba seguro.
Nota final:
A que el Chan es súper tierno y divertido.
Me gusta mucho como es este personaje, jajs y el Baekhyun.
Bueno, espero que sí les haya gustado mucho el capítulo. Yo me divertí mucho escribiendo
Mañana o pasado trataré de traer el siguiente capítulo, nos leemos
Recuerden que si les gustó el capítulo pueden dejarme un bello comentario y su lindo votito, eso me hace muy feliz 🌸😊
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