Un nuevo día se levanta sobre Cádiz, Begoña sigue acongojada por la  triste noticia acerca de las cigarreras, no las conocía mucho, había tomado contacto con ellas por su trabajo, pero el poco tiempo que compartieron fue suficiente para formarse sobre  ellas un buen concepto y cogerles cariño.
Recorre la casa para abrir todas las ventanas que tiene,solo ella y la mucama están levantadas .
Luce espléndida ,con el cabello caoba lacio, un poco más largo que lo habitual,sostenido con una horquilla con forma de flor de color rojo ,un vestido largo hasta los tobillos de manga larga y cuello alto de color crema,y unos  zuecos de madera que le suman unos centímetros a su altura.
Escucha unos ruidos en la cocina y hacia allá se dirige , Cuca-la mucama que vive  con ellos - está limpiando el piso.
-Señora Begoña.
-Cuca trapeando tan temprano,deja eso querida prepárame un buen desayuno y llévalo al comedor.
-Como usted diga señora.
Se sienta en un extremo de la mesa rectangular, sobre la cual hay un mantel blanco de algodón y como centro de mesa , un caballo de plata parado sobre sus dos patas traseras.
Escucha los pasos de Carlos cada vez más cerca y cuando ya siente sus manos que masajean con suavidad  los hombros ,le grita a la mucama que también lo prepare para él.
Carlos le da un beso en la mejilla,otro en el cuello y se sienta en el otro extremo de la mesa de frente a su esposa.
La mirada serena de él, se posa sobre Begoña y con su voz grave se dirige a ella.
-Me sorprende verte levantada a esta hora, por lo general sueles hacerlo más tarde.
¿Cómo pasaste la noche mi amor? Noté que dabas muchas vueltas.
-¿Sí? No me di cuenta, estaría dormida.
Yo soy bastante inquieta, me muevo mucho, ya deberías saberlo,pero eso no afecta la calidad de mi sueño.
Me levanté temprano porque ayer no me quedé pintando hasta la madrugada, que es la razón por la cual acostumbro a dormir hasta el mediodía o un poco más.
-¿Y tú?¿ Por qué madrugaste si hoy no trabajas?
-Porque estoy acostumbrado a levantarme temprano,y aunque no vaya a trabajar siempre hay algo que hacer.
Hoy el restaurante va a permanecer cerrado ya que vamos a realizar una desinfección, que por los tiempos que se están viviendo va a ser semanal .
-¿Y no tienes qué ir para abrir ?
-No ,le di las llaves al vecino que vive al lado del restaurante para que le abra a los encargados de ese trabajo.
Cuando vaya mañana a trabajar me devuelve las llaves.Es un hombre de confianza.
La mucama se acerca con el desayuno para los dos y lo deja en la mesa.
-Gracias Cuca.
-Por nada Señor.
-Carlos me apena mucho la situación de Rufina , y me gustaría visitarla , sé donde está.
-Oh no mi amor , ni se te ocurra.
-No es mala persona, me da lástima su bebé.
-Mi amor yo no dije que fuera una mala persona, es solo que no puedes poner en riesgo tu vida; ya sabes Bego, es una enfermedad que se puede contagiar con facilidad y lo peor de todo es que todavía no hay una cura.
Y ese niño del que hablas ,¿qué edad tiene?
-Apenas unos meses.
Ahora vuelvo.
-¿Dónde vas Bego? Aún no has terminado el desayuno.
¡Bego!
Minutos después...
-Mira Carlos.
Begoña le muestra las fotos que tomó en la fábrica de tabaco.
-Son ellas . Rufina es la del medio.
-Muy guapa.
-Y ahora mira esta foto, aquí está con su hijo.
-Bello crío; pero no te preocupes Dios no deja a nadie abandonado a su suerte,y menos a un niño.
-¿Eso crees?
-Estoy persuadido de eso.
-Sí, Dios sabe lo que hace.
Una vez Manolo me preguntó, cuando vas a ir a visitarlos.
Yo le dije que estás siempre en el restaurante.
Hoy es domingo, y Juan y Manolo no trabajan.
¿Qué te parece si les hacemos una visita?
Seguro están todos en la casa de mi prima.
-¿Y Leo trabaja?
-No.
¿Vamos?¿Qué dices?
-Es un lindo día para visitar amigos. Hace mucho que no voy a San Vicente.
-Si te pasas el día en el restaurante , prácticamente no vas a ningún lado,es más creo que la última vez que saliste de Cádiz fue cuando fuimos a Portugal y la última vez que viste a Juan,fue en el evento solidario.
-Sí el trabajo me consume mucho tiempo.
-Mi padre era igual. No quiero que te parezcas a él.
-Tú también trabajas mucho Bego.
-Pero es distinto,mi trabajo me lleva a recorrer diferentes ciudades,ya sea para conocer otras realidades que después llevo al lienzo ,o para exponer mi obra en diferentes museos.
En cambio tú no sales de las cuatro paredes del restaurante;es un trabajo muy sacrificado.
Deberías trabajar junto a otra persona, para que dispongas de  más tiempo para ti.
-No soy tan confiado, prefiero hacer todo yo.
-Ya me di cuenta de eso;por un lado me alegro que haya tanta peste blanca porque eso ha hecho que por lo menos una vez a la semana cierres para desinfectar.
Cuando fuimos de viaje dejaste a tu  hermano a cargo de todo.
-Sí pero él tiene su vida ,me puede hacer un favor y cubrirme de vez en cuando, pero no ponerse a trabajar a la  par conmigo.
-¿Crees qué el dinero te da seguridad?
-¿A ti te parece qué no?
-Mi padre pensaba igual que tú.
Y yo también, hasta que perdimos todo y cambié mi forma de pensar tratando de lograr un equilibrio entre todas las áreas de mi vida.
Al vivir en carne propia la situación de calle, pude sentir y comprender el sufrimiento ajeno y eso me volvió más humilde, y menos egoísta. Por eso soy así como me ves.
La vida es un suspiro,pasa rápido y te vas sin nada, por eso no hay que esforzarse tanto por tener sino por ser .
Esas cigarreras que conocí , no eran ricas,vivían con lo justo y así y todo eran felices.Siempre sonriendo,de buen humor eran la personificación de la alegría.
Me gustaría ver a Rufina,pero tú tienes razón,no puedo arriesgarme así.
Entonces aceptas acompañarme a la casa de mi prima.
Carlos asiente con la cabeza.
-¿Tú vas así?¿O vas a ponerte otra cosa?
--Voy así Begoña ,¿mi amor cuántas veces quieres qué me cambie? Así estoy bien.
-¿Y yo cómo me veo?
-Espléndida como siempre.
-Perfecto , pero vamos por la tarde , no quiero llegar cuando están almorzando.
-Como tú digas.
¿Y cómo se encuentra Juan?
-Feliz de la vida, la llegada de su hijo lo tiene enloquecido.
-¿Y físicamente?
-Muy bien;su espíritu jovial se refleja también en su aspecto físico.
Su rostro aún conserva los rasgos de su juventud con algunas  pocas arrugas y líneas de expresión,sus ojos mantienen el brillo y la chispa de sus años mozos ,su sonrisa perfecta nada tiene que envidiar a la de  hombres mancebos,  su estado físico es excelente y su actitud  siempre es positiva, activa, alegre,bien predispuesta.
-No ha cambiado mucho entonces .
¿Y de mí qué piensas?
-Que eres un hombre de buenos sentimientos que me tiene embelesada y que me enamora  día a día.
Me gusta que tengas una mente más abierta que el promedio de los hombres, de lo contrario no me hubiese casado.
Es muy importante para mí tu apoyo incondicional,sin un hombre como tú a mí lado no podría haber llegado tan alto en el trabajo .
Ya tengo todos los cuadros listos para la presentación, terminé antes de lo esperado.
Le prometí a María que iba a hacer un segundo cuadro como el de la muestra , para dárselo a ella.
Hoy se lo voy a llevar.
Espero que estés presente el día de la exposición. No me vengas con que tienes que trabajar, dile a tu hermano que te cubra como la vez que fuimos a Portugal.
-Estaré presente , sé lo importante que es para ti.
-¿Terminaste el desayuno?
-Sí,¿por qué?
-Porque tengo ganas de ir a caminar un poco,¿qué dices?
-Te acompaño; si así lo deseas.
La mañana está fresca pero linda ,ideal para salir a dar una vuelta en buena compañía.
-Claro que lo deseo,no hay nada que ame más que compartir tiempo contigo.
La ciudad está tranquila ,todos  los locales están cerrados, incluso los del rubro gastronómico que son los únicos que abren los domingos.Los carruajes y las personas que se ven a esa hora son pocas.
Mientras la ciudad duerme Begoña y Carlos disfrutan de su paseo matinal; pasan por la casa que Manolo tiene en La Viña, y que ella conoce tan bien;y tomados del brazo llegan hasta el Castillo de San Sebastián,en la playa La Caleta.
Los inolvidables sucesos de los que fue testigo y protagonista invadieron su pensamiento, y mientras se dirigen a su entrada, Begoña le relata a Carlos, como se dieron los hechos el día que ella, junto a Juan y a Manolo,se acercaron a Leo, en ese mismo lugar.
La  vida   y toda su belleza se hace presente allí,en ese escenario natural del mar golpeando las rocas, de la espuma marina llegando hasta la orilla y tocando apenas la arena en la cual se encuentran algunas caracolas y castillos construidos por  algún niño que ha estado allí; en las risas de algún aventurero que salió a navegar para vivir un día al aire libre o en los ladridos de un perro que juega en las saladas aguas.
Escenario que contrasta con todo lo que ocurre en el hospital de tuberculosos donde la  muerte baila triunfal alrededor de las camas de los pacientes allí internados buscando entre ellos a quien invitar al último baile.
Algunos ya están preparados para la danza mortal, en tanto otros se resisten y luchan para no dar ese paso.
Un silencio mortuorio reina la mayor parte del día, solo interrumpido por el ruido de los cubiertos, la enfermera y el médico que visitan a los pacientes, la mucama que lleva la comida,la tos que nos lo deja en paz,o la débil voz de alguno que busca conversación.
Rufina está sentada en su cama tomando un tazón de caldo,mira a su derecha y ve que su compañera,está sentada mirando al frente con una mano apoyada en la mesa donde le sirvieron el desayuno; doña Yaya, -como escuchó que la llamaba la enfermera- apenas probó un poco del caldo y dejó el resto.
-Mmm está riquísimo.
¿Qué pasa doña Yaya,no tiene hambre?
Ayer sin embargo comió muy bien si solo faltaba que le pase la lengua al plato .
¿No tiene ganas de hablar tampoco?
La entiendo doña, a veces no se tiene ganas de nada,más en nuestra situación.
Pero sabe una cosa, tenemos que seguir en la lucha, y no perder la esperanza, mire si mientras estamos aquí, el médico atraviesa la puerta y nos trae la noticia de que ya hay una vacuna contra la enfermedad que nos salve a todos, porque mientras nosotras estamos aquí, allí afuera hay un conjunto de científicos que están trabajando para encontrar la cura,mientras estemos vivas aún tenemos la posibilidad de sanar.
Siempre me despierto con esa ilusión, no quiero pensar que este es el final porque pensar en eso me hace mal, siempre que lo he hecho he terminado llorando en medio de una crisis de nervios, ¿y vale la pena ponerme así?
No , no vale la pena ,no sirve de nada, entonces decidí apartar esos pensamientos y aferrarme a una ilusión,por lo menos me permite atravesar mejor mi enfermedad .
Quiero ilusionarme con que voy a salir de aquí y voy a abrazar a mi hijo, que lo voy a llevar al parque , a conocer el mar y que vamos a festejar juntos  muchos cumpleaños; y quiero seguir soñando que la vida nos tiene reservado un futuro grandioso a los dos .
Y usted piense en los  nietos que la están esperando para que les lea cuentos y les haga ricos postres.
Sabe una cosa doña Yaya, en una oportunidad conocí a Begoña Rubio, ella me tomó unas fotos junto a mis amigas y a mi hijo, va a pintar cuadros tomando esas fotos como modelo y sabe que, me imagino cuando Rafael sea grande y vea el cuadro en algún museo.
¡Qué orgullo para mi hijo!
¡Yaya! ¡Yaya!¿Me está escuchando?
Rufina mira a Yaya con el ceño fruncido y comienza a hacer señas para ver si responde a ellas.
-¡Yaya!¿Está bien?
Oh ,Dios mío.
Dios mío,no.
La mucama ingresa para retirar los platos y cuando se acerca a la cama de Yaya se da cuenta que está muerta.
-¿Pasa algo señorita?-Pregunta Rufina -.
La mucama la mira sin responder y sale corriendo de la habitación sin llevar con ella aquello que había ido a retirar.
Apenas unos minutos después ingresa con una enfermera y un médico.
Le toman el pulso y confirman su deceso.
-Doctor ,Yaya ...
-Murió. Lo lamento mucho Rufina, sé que le habías cogido cariño .
La mucama retira todo y la enfermera va a buscar una camilla.
-Por eso no me respondía, que tonta ,como no me di cuenta.
Yaya  tiene una hija.
-Sí,ahora nos vamos a comunicar con ella.
-Doctor hay noticias acerca de algún fármaco que pueda curar la peste blanca.
-Aún no, Rufina.
-No quiero pensar en la muerte pero ella nos visita a diario y me recuerda que por ahora es el único destino,pero no quiero resignarme y a pesar de las cachetadas de la realidad quiero seguir aferrada a la ilusión de curarme y volver con mi hijo.
El médico ,un hombre joven de mediana estatura y con unos cuantos kilos de más,la mira conmovido y asiente con una sonrisa .
Rufina comienza a toser y se toca el pecho.
-Me trajeron aquí y no mejoré nada,al contrario aquí aparecieron síntomas que antes no tenía.Lo único bueno de estar aquí es que dejé de representar un peligro para el vecindario y para mí bebé.
-La realidad es muy dura pero haces bien en conservar las ilusiones.
-Me pregunto, ¿quién será la próxima?
-Rufina esa es una pregunta sin respuesta.
Rufina mira el cuerpo sin vida de su compañera de habitación y luego mira al médico parado al lado de su cama.
-Hace unos días atrás se sentía mejor; seguía con tos pero había recuperado el apetito, y hoy partió con Dios.
Fue rápida su muerte porque cuando vino la mucama para traernos la comida, ella estaba viva , incluso cuando la chica se fue , Yaya bebió un poco de caldo.
-Muchos pacientes antes de morir experimentan una leve mejoría.
Ella tuvo un paro respiratorio.
-Debería llevar unos cuarenta minutos muerta.
-Si los hechos sucedieron como tú dices , ese es el tiempo estimativo.
-Ahora me voy a sentir sola, con Yaya siempre hablábamos de nuestras vidas.
Ella era una mujer muy experimentada, su discurso era propio de una persona muy sabia. Podía hablar de cualquier cosa sin aburrirme.
Ya nos estábamos conociendo .
Y ahora no tengo con quien hablar.
- No te preocupes, pronto se ocupará esa cama y tendrás con quien hacerlo.
-Doctor,¿no tiene miedo de contagiarse?
-No ,como veras tomo precauciones para evitarlo.
Un hombre con una camilla entra en la habitación, y la coloca al lado de la cama de Yaya ,con la ayuda del médico colocan sobre ella,el cuerpo de la anciana que es cubierto con una sábana.
Cuando todos se retiraron,Rufina se acuesta de costado y llora en silencio.
-Adiós Yaya,  te voy a extrañar,que tengas un buen viaje-dice en voz baja -.
La tarde llegó y Begoña y su esposo van a la casa de María y son recibidos por Hermesinda con un caluroso saludo.
-Ya me imaginé que estaban todos aquí-dice Begoña con una sonrisa a flor de labios -.
-Sí, todos los domingos nos reunimos en alguna casa,pero ahora debido  al embarazo  de María, nos reunimos siempre aquí para que ella no tenga que moverse tanto.
Carlos no lo puedo creer,¿tú por aquí?
-Sí Hermesinda ahora los domingos el restaurante permanece cerrado para desinfectar todo.
-Bego ,¿qué traes ahí?
Déjame verlo.
-No, Hermesinda,esto es para María y quiero que lo abra ella.
Hermesinda los conduce hacia la sala principal donde están todos reunidos alrededor de una mesa sobre la cual hay dos jarras con jugo de naranja, y otra con agua, vasos largos de vidrio llenos con la bebida preferida de cada uno y una tarta de frutas.
Segundos más tarde...
-Miren quienes han llegado.
-Carlos al fin te decidiste a venir a visitarnos,tomen asiento donde más les guste.
Ustedes serán siempre bienvenidos.
-María, esto es para ti. Es algo que te había prometido.
María lo coge ,le saca todo el papel que lo envuelve y lo da vuelta para que todos lo vean.
- Miren que maravilla -dice María con un tono de voz muy alegre -
¿Milagros, verdad?
-Sí encanto,ese es el nombre del cuadro.
Tesoro lo hice para ti con todo mi corazón.
Aparte hice otro, el que pinté aquí mismo, para exponer en el Museo de Bellas Artes  de Sevilla.
Espero que vayan todos.
-¿Cuándo es Bego?
-Dentro de unos meses, después que nazca el bebé, Hermesinda.
-Excelente Bego ,has sabido captar a la perfección cada rasgo de mi amada esposa .
María,¿qué te parece si lo colgamos en la pared arriba de los sillones?
-Sí,es un buen lugar.
-El cuadro que me regalaste el día que me recibí lo puse en nuestro dormitorio.
Tenemos el cuadro que nos regaló Pedro colgado a la derecha de la cómoda, y el que tú hiciste a la izquierda, arriba de una mesa donde colocamos el fonógrafo.
-Hermesinda ahora que Manolo dijo eso recordé que me dijiste que me ibas a mostrar el cuadro que hizo Pedrito.
-Sí Bego, cuando quieras.
¿Sigues con la idea de querer trabajar con chicos discapacitados?
-Sí Hermesinda, me gustaría mucho.
En el hogar Paz y Libertad,les estoy enseñando a un grupo de ex combatientes que han perdido sus miembros inferiores.
Quizás algún día organice  una exposición con los trabajos de ellos para que los conozcan  y puedan ganar dinero con ello.
Me gusta trabajar con ellos ,son un grupo de alumnos que aprenden rápido,muy entusiastas y con una gran voluntad.
Estoy muy satisfecha con mi trabajo,la magia del arte puede transformar la vida de una persona y yo quiero realizar mi pequeño aporte para que estos hombres puedan volver a insertarse en el ámbito laboral y mejorar sus vidas.
-Eres admirable Bego, me sorprende el gran cambio que has dado de en tu vida , pero no solo en lo profesional,sino también como mujer.
Yo recuerdo que en la época que vivían nuestros padres eras muy soberbia y muchas veces tratabas en forma despectiva a otras personas, pero ahora de esa Begoña no quedó nada.La actual es humilde, más empática,más servicial y mucho más sensible.
-María, todo lo que he vivido me ha hecho cambiar.
-¿Ya terminaste de pintar todo los cuadros?
-Sí,ahora puedo descansar.
-Carlos,¿y tú qué cuentas, qué hace mucho qué no te vemos?-Pregunta Juan-.
-La verdad que yo no tengo mucho que contar, tengo una vida que no escapa a la rutina.
Me gustaría cambiar el auto porque el que tengo ya tiene unos cuantos años.
¿Y Leo?
-Que casualidad,antes de que ustedes lleguen yo le comenté a Manolo lo mismo.
Y Leo, hoy tiene ensayo con el grupo musical, la última presentación la hicieron en Jaén y les fue muy bien,-replica Juan mirándolo a los ojos mientras sostiene el vaso con jugo, a la altura de su boca -.
-Oigan, se me ocurrió una idea.
¿Por qué no se quedan todos a pasar la tarde con nosotros hasta llegada la noche?
-Sí María, estupendo.
Hoy estamos todos, mañana no sabemos, así que pasemos una agradable tarde juntos.
Begoña asiente con la cabeza.
-Así es Hermesinda,estar vivo es una bendición,y más en el tiempo que está corriendo.
Ayer me dieron una noticia  triste,para la cual no estaba preparada,acerca de las tres cigarreras de Triana,que me dejó pasmada, no esperaba algo así,me rompió el corazón.
-¿Qué pasó Bego?
-Lo que pasó, María,es que dos están muertas y la otra internada.