4. Una buena oportunidad
¡Han pasado muchas cosas en los últimos días! El decano no me dejó de insistir para que me postulé como presidente estudiantil este año, y no se me antoja ser responsable de los “niños” de mi facultad, aunque si tú estuvieras como secretario o vicepresidente no me importaría eso, sin embargo dudo que suceda.
Bueno no te seguiré escribiendo de eso, mejor déjame redactarlo...lo que pasó el sábado cuando fuimos a cenar y beber unos tragos.
¿Por dónde empiezo?
¡Ah si! El juego de la botella.
Debido a la ausencia de féminas en nuestro grupo, algunos chicos se besaron debido al condenado juego, y cuando me tocó contigo, tú te lanzaste hacía mí dejándome asombrado, tus labios con los míos estuvieron conectados como la señal del internet, desde entonces me di cuenta de que mis sentimientos empezaron a ser más fuertes...estaban creciendo, como las bacterias en un emparedado alejado por un mes.
En aquel momento también aproveché para hacerme más cercano a tí, además del beso que me robaste, nos tomamos unas cervezas junto; luego de eso y ahí sí parecíamos un par de cotorras hablando incoherencias, mi amigo de la facultad (el único que tengo, que me ha sido incondicional) me mostró un vídeo (que grabó) de nosotros hablando todas esas pendejadas, ese día sentí alegría, y abrace a Paul por haber hecho eso, él solo decía “Deja de actuar como adolescente menstruando” y es que no pude evitarlo, ese fue un buen sábado.
Aunque no sé si lo fue para ti también, tu cabello dorado y tus dos lunas azules eran un imán, y no solo para mí, también para algunas chicas de la universidad que no dejan de clavar sus ojos en tí.
Te regalaré esta frase: “No sé si es amor puro. Cuando lo averigüe sabré si soy un maldito degenerado o mi sexualidad está cambiando”.
Lo sé, no fue nada romántico y mi siquiera rimó.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro