"Jungkook por favor no tengo tiempo para hablar contigo ahora" Camine con rapidez hasta donde se encontraba el hombre "Me están esperando, no me retrases aun más"

"Necesito que me digas quien es esa persona, ¿Por qué ordenaste que se le dejara en una celda?" Sus preguntas no paraban de seguirme "No acudiste a mi" se adelanto y se posicionó frente a mí, lo que hizo que me detuviera de forma abrupta "¿Qué fue lo que sucedió allá con él Jimin?"

"Un grupo extraño merodeaba en nuestros territorios, acudí de inmediato porque fui el primero al que Jae-beom pudo localizar" dije "Hice lo que debía hacer, seguí el protocolo es todo, deja tus preguntas para más tarde por favor. Necesito solucionar esto para darle una respuesta con argumentos a nuestros padres en su regreso al palacio ¿Me oíste? Haz lo igual"

Mis pasos fueron disminuyendo cuando la puerta hacia las celdas se presentó frente a nosotros. La abrí sin esperar un segundo más y baje de dos en dos las escaleras, el eco en las paredes siendo incomparable. Mis ojos se entrecerraron ante la poca luz en el lugar, el olor a humedad y el sonido de agua corriendo de algún lugar inquietando.

"Su altezas" reverencio un señor, médico personal del palacio "Es un placer verlos a salvo, me comentaron lo que hizo su alteza real" dijo refiriéndose a mi "Fue arriesgado, pero un orgullo para nuestro pueblo, que alguien como usted nos haya defendido de una amenaza de esta magnitud" agradeció sutilmente inclinando su cabeza, asentí.

"Doctor le agradezco que se haya presentado en el palacio, tengo entendido que estaba atendiendo otros asuntos cuando su presencia fue requerida aquí"

"Nada que no pueda posponerse por unos minutos, su alteza real, pierda cuidado" dijo.

Despeje mi garganta.

"Bien, no quisiera alargar más esto. Asumo que en mi ausencia usted ya pudo llegar a un diagnóstico ¿El hombre está con vida?" Mi preocupación más grande era esa "¿Qué fue lo que sucedió para que acabará así?"

"Intoxicación" Fueron sus palabras, mire con intriga lo que parecía ser los restos de una hermosa flor en sus manos "La cicuta de agua, es la única flor de esta familia que se puede encontrar en tierras de aire, si bien no ingirió lo necesario para fallecer, si le provocó las convulsiones que acaba de presentar, náuseas y calambre abdominal son alguno de los síntomas que acompaña a esta fatalidad. Según nuestras investigaciones un vago porcentaje de la población tiene la capacidad para pervivir" el mal presentimientos de las cosas no apartándose de mi lado "Su alteza real, tan solo un miembro de las grandes familias podría sobrevivir a la toxina de esta planta"

"¿Eso que quiere decir doctor?" Indagó mi hermano a un lado de mi, preocupado. Y no era menor, estábamos pro escuchar algo que todos aquí presentes sabíamos bien.

"No quisiera asegurarles nada su altezas" negó con nerviosismo "Pero solo un miembro de la familia real tiene la energía suficiente para hacerle frente al veneno. Es posible que alguien común pueda hacerlo de igual manera, es por eso que no quiero confirmar nada aun, no por lo menos antes de iniciar la investigación correspondiente"

"Un miembro de la familia real" musito "¿Porque ingerir una planta venenosa cuando sabría perfectamente que no lo mataría? Suena ilógico, no tiene sentido"

"Todo sucede por algo, Jungkook" comenté "No creo que haya perdido su tiempo en vano al montar todo este circo" mire hacia el fondo de la celda, en donde aquel tipo yacía inconsciente "Quería probar algo o probarnos a nosotros, decidir si salvar su vida o no era una cosa que quería deducir" comenzó a removerse sobre la superficie, lentamente y con dificultad en cada acción "Y lo descubrió, sabía que no lo dejaríamos morir, se sometió a todo este dolor por eso"

Regrese mi vista hacia los presentes.

"¿Qué nos recomienda, doctor?" Pregunté.

"Mantenerlo bajo una dosis diaria de este medicamento, va a contrarrestar el veneno, dentro de pocos días volverá a recobrar su energía completamente" me observo con desazón "Estimo que podrá declarar para cuando su majestades regresen al palacio"

Asentimos junto a Jungkook.

"Doctor" le llame antes de que se fuera "Que su visita a este lugar del palacio, quede solo entre los que estuvimos aquí" él hombre solo asintió y dio una reverencia "Guardias del palacio lo esperan en la entrada, lo escoltaran hasta su consultorio" él solo asintió con una sonrisa pequeña.

"Buenas noches su altezas" se despidió.

Mire la caja con el medicamento en mis manos, pensando en que hacer realmente con este sujeto. Miles de ideas me llenaron la cabeza, pero solo una de ellas logro convencerme por el momento y era lo más seguro hasta tomar una decisión rotunda.

"¿Qué haces, Jimin?"

"Lo único que nos dará la seguridad de que este hombre no saldrá de esta celda" me apresuré y abrí la celda para adentrarme. De mi bolsillo saque un brazalete de cuero y lo coloque en su brazo derecho, respire profundamente cuando cerré la puerta otra vez "No nos podemos arriesgar" musite.

"¿Qué fue lo que sucedió con él, Jimin?"

"Vagaba en la frontera de nuestro reino, y se atrevió a decir cosas inaceptables sobre nosotros" intentar no hablar de esto con mi hermano seria una perdida de tiempo, tome una pausa y seguí "Habló sobre nuestros padres, simplemente no se lo pude permitir más, me atacó cuando quise someterlo"

"¿Qué te hizo hermano?" Amago a acercarse pero se detuvo antes de que yo se lo impidiera "¿Estas bien verdad?" Dijo.

"No te preocupes, estoy bien" asentí "Ahora solo nos queda esperar a que reaccione, volveré en unas horas para suministrarle el medicamento. Puedes regresar conmigo al palacio o atender algún asunto pendiente" Despeje mi garganta "Oí que hoy vendría a verte el ministro Han Jun con su hija Han Cho-yeon, supuse que madre te informaría. Elije un atuendo presentable y atiendelos, madre no querría errores en esta reunión"

"Por supuesto que no" se mostró nervioso "No lo sabía, le pediré a la señora Yang-mi que me prepare el salón de visitas, debes venir a cenar con nosotros cuando lleguen"

"Por el momento debo atender otros asuntos, de todas formas intentaré no demorar" él asintió con la mirada gacha, no quise hacer un comentario al respecto "Te veo allí, confío en que todo saldrá bien"

Le di una última mirada, diciendo eso suponiendo que era lo que quería escuchar.

"Imagine que podría encontrarse aquí, su alteza real" Giré mi rostro para ver de quien se trataba, sonreí pequeño al ver que era Hye-jinssi la persona que caminaba a mi "¿Tuvo un buen descanso, príncipe Min?"

Suspire "No como hubiera deseado, pero al menos mis piernas ya no me duelen tanto" dije con un deje de diversión "Esperaba que estuvieras atendiendo a los potrillos que nacieron esta mañana, me gustaría verlos"

"Ellos se encuentran bien, son dos machos" sonrió "Cada uno de los caballos que usted y el príncipe Min Yoongi adoptaron hace tantos años. Puedo llevarlo mañana a las caballerizas su alteza real, debe descansar" solo me limité a asentir y regresar mi vista hacia el horizonte, en donde el sol regalaba sus últimos rayos a los universos. Suspire "¿Por qué no regresa a la cama? Mañana volverá a salir con la primera luz del día"

Note que aquel nudo en mi pecho seguía allí. Me reincorpore nuevamente, mis ojos puestos aún en el horizonte y todo lo que esté conllevaba, sentí a mis ojos aguarse.

"¿Hay algo que lo atormenta, su alteza?"

Eran muchas cosas las que me asustaban desde que madre tomó la decisión de abrirnos las puertas del palacio a Yoongi y a mi. Cada una de ellas atormentandome y haciéndome cuestionar todo mi futuro y el de mi familia, como acabarían las cosas era la pregunta que aún no podía garantir. Pero al menos tenía la seguridad de que con una buena planeación podríamos tener la victoria en todo este quiebre en la balanza de lo que era correcto y lo que no.

Pero una de ellas era la que más me asustaba, porque no sabia manejarlo.

"Ni siquiera se por donde empezar, Hye-jinssi" comenté despacio "Ni siquiera se lo que realmente me está quitando el aliento cada vez que pienso en ese mar de incógnitas. En ese revoltijo de emociones" me detuve al escuchar mis palabras, ¿Si  hablaba de esto con alguien más, lo haría real? "¿No debería permitir sentirme así?"

"Si me explica puedo aconsejarlo, alteza" dijo con suavidad, acercándose hasta a mi para apoyarse en el barandal "En sus ojos no veo más que el desasosiego que evita exhibir frente a los demás, aparentar que no pasa nada solo empeorará las cosas.." Le mire luego de eso, la comprensión en su mirada acompañando a mi cobardía ¿Qué significaba realmente todo esto que me acontecía? Eran muchas las formas de interpretar algo que iba más allá de mis manos "Su alteza real, ¿A quién ve en mi?"

Su pregunta me había tomado por sorpresa, y es que después de todo tenía un trasfondo, y era en quien más confiaba.

"Temo desilusionarte si hablo de esto" negó de inmediato "No entiendo absolutamente nada y es lo que más inquietud me causa. No tener la certeza de lo que pueda pasar me irrita, y no hacer algo por evitarlo me exaspera" pase una mano por mi antebrazo "Hye-jinssi ¿Cómo se manifiesta el amor?"

Su mirada cambió.

"¿A que se refiere, su alteza real? El amor puede manifestarse de muchas formas que escapan de lo convencional" sonrió apenas "¿Por qué me pregunta algo así, su alteza? Explicárselo seria algo muy sencillo, porque el amor está en todas partes príncipe Min. No obstante así como el amor se respira en cada lugar no todas las personas lo ven del mismo modo ni lo van a experimentar igual porque nunca sabremos como nos llegará"

Sentí que me ahogaba.

"Esta el amor fraternal, el amor filial entre padres e hijos, un amor que recibimos desde el primer momento de vida, el amor reflejado en una amistad, entregado de una persona que conocimos sin saber cuando ni desde que momento este amor nacerá, solo sucedió. Esta el amor hacia las cosas, los animales o algún pasatiempo que tenga su alteza real, el amor autopersonal que no es menor y por último un amor romántico, una llama naciente entre dos personas que acaban de conocerse, mucho más fuerte y diferente que los amores anteriores. Es con la persona que uno quisiera pasar el resto de nuestros días, príncipe Min, lo sé y supe que había encontrado a la persona que era destinada a mi vida cuando tuve miedo de lo que pudiera suceder más adelante, algo nuevo siempre tiende a causar inseguridad en cada uno de nosotros, cuando mi mente era un completo caos y le temí a ese amor. Mucho mas, cuando temí no verlo jamás"

Hye-jinssi era mucho más mayor que yo, y siempre supe que había dejado mucho atrás cuando tomo la decisión de proteger a los príncipes de los hijos del fuego hace tantos años, aunque ella nunca habló de eso abiertamente, sabíamos que sacrificó cosas importantes por vivir con nosotros.

"Cuando la respiración nos falta, y duele el corazón al no tener cerca a esa persona. Cuando te confunde y no sabes que hacer" sonrió con la mirada gacha "Esas son algunas de las formas en las que el amor se manifiesta su alteza real y espero que eso haya sido lo que esperaba escuchar.."

Deje salir todo el aire que tenia en mis pulmones y trate de abandonar este dilema que había provocado yo mismo en esta habitación y en la lejanía de esa frontera. Implorando al cielo que el aire se llevara con él todo aquello que no quería en mi vida, convenciendome de que era ridículo, simplemente una desfachatez a la que erróneamente le di más importancia de la que debía. Sintiendo nuevamente esa sensación en el pecho desaparecer otra vez, así como el último rayo de sol cada atardecer, gire para observar a Hye-jinssi.

"Discúlpame, tus palabras fueron hermosas, pero temo que ya no necesito que me ayudes a resolver esta incógnita" le sonreí suavemente "Confundí las cosas, y temí por algo que se que no va a suceder, todo me tiene abrumado es todo, no te preocupes" pero todo aquello pareció no convencerle y es que mi error tal vez fue hablar más de lo que hubiera querido. Sentí la garganta levemente más apretada cuando sus manos envolvieron las mías.

"¿Qué es eso que va a decepcionarme, su alteza real?" Sus ojos brillaron más, de una manera completamente hermosa y triste a la vez "¿Qué es lo que alberga en su corazón que es tan terrible que se sepa? Hábleme de esa confusión que a tenido, confíe sus temores así como los confiaba cuando era solo un pequeño inocente y le ayudaba a encontrar ese arcoiris en medio de la tormenta" la sonrisa que me entrego se sintió cálida en mi interior, en el alma.

Después de todo, ¿Qué podría suceder?.

"Conocí a un hijo del invierno, Hye-jinssi" la preocupación en su mirada acrecentó y la calidez que me transmitía se desvaneció "Intente resolver mis dudas con su ayuda, pero no hice más que confundirme más..." 

"¿Quién está enterado sobre esto, alteza?" Su tono de voz bajo "¿Como dio con uno de ellos? ¿Lo obligaron a algo su alteza real? Acaso, ¿Esto tiene que ver con la Orden de Calder?" Indagó sin detenerse en cada una de las preguntas, finalmente asentí "¿Qué?"

"Los hijos del invierno están al tanto de lo que sucede en nuestro reino, saben que la orden de calder a estado por demasiadas semanas merodeando en nuestro territorio, lo único que nos juega en contra es su vago conocimiento del asunto en relación a quienes lo conforman" tome aire y exhale "Busque a uno de ellos porque necesito sentir que colaboro realmente en esta misión, mi padre no está y yo como futuro sucesor de mi madre debo buscar solución a todo este problema, la carga no debe ser solamente de la reina de los hijos del fuego y es lo que intento cada día respetar ¿Si?"

"¿Por qué no me dijo nada? Podría haberle ayudado, sin embargo opto viable buscar la ayuda de un hijo de una tierra extraña" quizá su intención no había sido atacarme, pero en el fondo me hizo sentir culpable "Príncipe Min, no es malo el querer buscar soluciones, si no de quién las obtuvimos. Dígame, ¿A quién conoció de ese reino?"

"No se si deba decirte Hye-jinssi. Es algo que me gustaría mantener en secreto, por respeto hacia esa persona" Despeje mi garganta con cierta incomodidad "Ya fue suficiente con haberme relacionado con un hijo del invierno a costa del título que llevo en el palacio, puse en juego mi reputación, revelar con quien me encontré sería la ruina para nosotros si alguien llega a enterarse.."

La imagen de su rostro de pronto atacó mi cabeza. Y esa sonrisa casi imperceptible bordandose en sus labios con vergüenza.

"No es algo que volvería a hacer, de todas formas no conseguí absolutamente nada de este encuentro Hye-jinssi" Ella se giró para tomar mis manos, sus ojos reflejando la preocupación y tristeza hacia mi "Ya me arriesgue demasiado, perdóname por no haber sido sincero contigo, quien más me a ayudado a lo largo de toda mi vida ¿No? Te oculte algo importante y creí hacer las cosas bien" solté una risa en un suspiro.

"No tiene que disculparse su alteza real. El camino que decida recorrer estará bien, no seria capaz de detenerlo cuando apenas y recién está conociendo el mundo, su reino y alrededor mi querido príncipe Min" sonrió.

"Gracias, Hye-jinssi" Sentí a mis ojos arder.

La puerta fue tocada dos veces.
Deje mi posición en el balcón y camine unos pasos antes de que la puerta estuviera abierta, mi hermano estaba allí. 

"Yoongi, ¿Qué sucede?" Indague.

El guardo silencio un segundo.

"Madre, pidió que la viéramos en su despacho, es momento de que podamos hablar de lo que sucedió hoy en la frontera hermano" lucia preocupado, ansioso "No podemos esperar más, es la oportunidad"

"El manto del infortunio nos cae sobre los hombros hermano, hay que ser precavidos. Madre a decidido guardar silencio todos estos años y no debemos juzgarla por ello. Lo que nos haya dicho el príncipe Jeon no puede ser más importante que lo que nuestra madre tenga que decir al respecto" él desvío su mirada hacia Hye-jinssi para finalmente verme a los ojos y asentir en un suspiro "Iremos y escucharemos lo que tenga para decirnos, que no se sienta decepcionada de nosotros ¿Si, hermano?"

"Por supuesto hermano" asintió seguro.

Le di una mirada atenta a Hye-jinssi y me despedí de ella con un asentimiento. Las preguntas comenzaron a llenar mi mente, y es que luego de varios días en que madre a centrado su atención e interés en todo lo que estuviera relacionado con los calder, a necesitado vernos a ambos de imprevisto.

El despacho no se encontraba muy lejos.
Y pronto la gran puerta estuvo frente a nuestras narices, los guardias a los lados no tardaron en saludarnos y abrirnos paso a la habitación que sucumbió a la tensión que se respiraba en cada partícula del aire. La mirada de nuestra madre se sintió distante, fría como ninguna otra ocasión, y fue imposible pasar desapercibida frente a nosotros, quienes eran sus únicos hijos.

"Madre, estamos aquí" avise aún así.

Aquel dorado majestuoso que alguna vez vi en sus ojos, hoy agonizante en eso orbes. La esperanza se le había sido arrebatada de cada poro, y era más que evidente para cualquiera que pudiera verle a la cara. Sentí una presión dolorosa en mi pecho y aún cuando quise acercarme a ella mis piernas no se movieron en absoluto, quizá en el fondo respetando el espacio que requería.

Algo estaba diferente.

"Tenemos a uno de ellos" Fueron sus palabras, tan precisas como secas a la vez. En ningún momento dirigiéndonos la vista "Mi trabajo fuera del pueblo posiblemente haya dado frutos después de todo, hijos. Pero no es el motivo por el cual los traje aquí, mis razones van mucho más allá y quisiera que ustedes me den una buena explicación al respecto, antes de pensar en que decisión tomar luego al respecto"

"No entendemos, madre" contestó Yoongi "¿Un miembro de la orden de calder está bajo el resguardo de los hijos del fuego?" Comenzó a titubear, pero fue interrumpido.

"Pasaron por alto una de mis órdenes" Su mirada sobre nosotros fue más dura de lo que imaginaba "Preferí no escuchar lo que el señor Sung tenía para decirme porque a pesar de que sea mi consejero real sus afirmaciones no podían ser así de ciertas. ¿El despacho de su padre les suena algo?"

Mire a mi hermano afligido, sorprendido y pensando en mis propias palabras dichas esa misma noche. No era correcto ir allí.

"No hace falta que digan, si es verdad" ella se puso de pie y se detuvo frente a ambos "¿Qué fue lo que buscaban allí? Saben que es un lugar privado, su padre quiso que se mantuviera cerrado si él no regresaba, han defraudado la promesa de tantos años"

"Madre" hable, con la mirada gacha.

"Cosas privadas pero que de alguna manera lograron responder algunas de nuestras dudas madre, nos abrieron un nuevo camino en busca de la verdad que se esconde detrás de la orden de calder, ¿Papá murió por culpa de esa orden, no? Esto no es actual. Se remonta a muchos años antes, tenemos derecho a saberlo"

"No tienen porque" recriminó.

"¡Hemos leído sus notas, madre!" Desvíe la mirada al escuchar las palabras de mi hermano "Sabemos que todo esto inició al poco tiempo de su coronación, padre lo escribió en una de sus notas, esta terrible conminación acabo con su vida ¿Verdad?" Su voz comenzó a quebrarse poco a poco "Ellos querían deshacerse de lo que era más preciado para ustedes ¿No es así? Es por eso que nunca se nos permitió poner un pie fuera del palacio, porque la gente mala de la que usted habló era esta orden"

Alce mi rostro y observe atento la reacción de nuestra madre. Mi corazón palpitante arañando por salir arrancando del pecho.

"¿De donde sacaste ese tipo de ideas, Min Yoongi?" Fueron las palabras titubeantes de madre, sus ojos brillaban indiscutibles "Y-yo, necesito que respeten lo que alguna vez su padre dijo en esta familia antes de marcharse, sean los hijos que él esperaba que fueran" sus palabras fueron duras.

"Es innegable, madre" murmure "No somos los hijos que nuestro padre esperaba que fuéramos, porque los planes para nuestra vida tuvieron un camino diferente, asumo que falleció creyendo fielmente a la idea de que su sacrificio había bastado para detener toda esta catástrofe en nuestras vidas, y que nosotros hubiéramos tenido la vida pacífico y sin restricciones que si este problema persistía nos ocasionaría ¿No?" Una lágrima descendió por mi mejilla.

"Hoseok, por favor" negó.

"¿Qué es lo que sucedió realmente? ¿Por qué nos ataca esta orden, madre?" Indagó mi hermano, su semblante volviéndose un poco más tenso que antes, simulando que la situación se encuentra aún bajo control "¿Por qué motivo acusan a la familia real de comfabular con gente extraña en el quiebre de la balanza elemental?" La reacción de nuestra madre fue notoria, algo sabía y por ende todo esto no era del todo una mentira.

"¿Quién les dijo todas estas patrañas? ¡¿Con quien estuvieron hablando en sus expediciones durante los últimos dos días?!" Di un paso hacia atrás, topando con mi hermano menor, ambos pasmados. Mi corazón latía con desenfreno en mi pecho, madre desvío su mirada hacia el costado y respiro profundamente "Discúlpenme, yo solo quiero que estén a salvo muchachos"

Mire a Yoongi.

"¿A salvo de quienes, madre?" Indagó "Sabemos que quienes nos amenazan son hijos del invierno, hombres con experiencia guiados por una líder que se esconde tras ese maldito nombre de orden de calder"

Mi alarma en la cabeza se encendió.

"Hermano por favor, ya no más" le pedí.

"¿Qué problemas podría tener la familia real con un pueblo lejano? Diferente a nosotros. Atacaron al palacio años pasados, cuando ninguno de nosotros aún existía madre y padre nos dejó por eso, esa gente lo alejó de nuestro lado" un nudo se formó en mi garganta y la voz de mi hermano se quebró una vez más "Podría estar con nosotros ahora, pero se sacrificó para que la orden de calder e hijos del invierno no llegarán a concluir su propósito con nosotros, con los reyes de esta nación que sucumbió a viles  secretos que arruinan a nuestra familia"

Aquel sonido seco y retumbante quedó retenido en las paredes, y por siempre en nuestras memorias. Madre dio un paso al fondo de la habitación, su espalda dando con la superficie del escritorio, y sus ojos desorientados. Mi hermano se quedó allí, en el mismo lugar mirando hacia un lado con la mirada gacha, mientras poco a poco su mejilla se enrojecia cada minuto más.

"Madre.." murmure. Eventualmente me acerque a mi hermano y sostuve sus hombros, tratando de acercarlo a mi lado. Él me observo con sus ojos vidriosos asintiendo a la pregunta que persistía en mi interior "Me parece que esto ha sido una precipitación madre, solo queremos saber la verdad, mi hermano no es culpable de absolutamente nada, entiendanos también" trague saliva y tome una bocanada de aire "Gracias a los mapas de nuestro padre hemos logrado seguir una ruta más firme, intentamos ser los hijos que alguna vez espero que fuéramos, los hombres que cuidarán de este reino y las personas que lo habitan, buscando respuestas creí que.. hacíamos las cosas de manera correcta, pero veo la decepción reflejada en sus ojos madre, y me duele inmensamente que las cosas no sean como usted hubiera querido"

Las lágrimas se desbordaron de sus ojos.

"Pero de alguna manera logramos hallarle respuestas a este acertijo" Mis labios temblaron "Conocimos a una persona con las mismas dudas que nosotros, un joven perdido luego de que su mundo se cayera a pedazos por palabras y calumnias dichas por un hijo del invierno madre ¿Sabe que relación puede tener eso con nosotros?"

Mi cabeza solo daba vueltas.

"No entiendo Hoseok, por favor díganme que es lo que han estado haciendo" habló.

"Era un hijo del aire" su sorpresa fue más que evidente, desconcertante "Madre, ¿Qué tratos hicieron con los reyes de los hijos del aire para que la orden de calder los culpen de comfabular contra el orden elemental?"

Se acercó apresuradamente hacia mi.
Viéndonos a ambos con arrepentimiento, alzó una de sus manos y con dificultad la poso en la mejilla de cada uno, llorando.

"Perdónenme" intento sonreír en medio de aquella tormenta "Pero hasta que no logre solucionar todo esto, no pondrán un pie fuera del palacio. Es una orden" Yoongi no hizo más que guardar silencio, mientras evitaba ver a nuestra madre a toda costa. En cambio para mi fue difícil apartar mis ojos de ella, analizando cada reacción que pudiera tener, sin duda lo que fue ahora escapaba completamente de mis ideas.

"Madre.." el desconcierto era enorme "¿Es de esta manera que solucionará las cosas? Excluirnos de esto no va a cambiar nada, estuvo en el destino de cada uno todo este tiempo, aún sin saber absolutamente nada los dioses supieron guiarnos hasta acá y colisionar con la verdad que usted y padre quisieron mantener en el anonimato. Quiero ayudar y ser el apoyo que alguna vez mi padre lo fue para usted ¿Puede confiarme eso, madre? Quisiera saber sinceramente"

"¿Confiarles la seguridad de un reino entero? Cuando debo mantenerlos bajo la protección del palacio.." comenzó a negar "Todo lo que decido es por ustedes, son lo único que tengo y el futuro de este reino, no permitiré que me vuelvan a arrebatar más personas de mi vida, es lo último que diré"

Ella comenzó a avanzar hacia la puerta, abandonando la habitación a los minutos, dejándome tambalear por un momento, vi a mi hermano eventualmente a los ojos.

"Todo era verdad, Hoseok" musito "Nuestros padres tuvieron relación con los hijos del aire, la orden de calder busca rectificar lo que ellos alguna vez hicieron"

Por primera vez tuve dudas de todo esto ¿Quién era el lado con culpa realmente?

Vire mis ojos hacia la puerta, cuando esta misma rechino. Quizá por una corriente de aire, camine hacia ella y salí del cuarto, mi sorpresa fue tal que para la persona que se encontraba frente a mí fue muy evidente.

"S-señor Sung. ¿Qué hace usted aquí?" Él se limito a entregar sonrisa casi imperceptible "¿Su majestad la reina lo envío aqui? Es una zona privada, me sorprende que mi madre no haya tomado eso en cuenta al decirle usted que nosotros estábamos por aquí en noches pasadas" su semblante se enserio.

"¿Me acusa de algo su alteza real? Me temo que mis intenciones han sido malentendidas, así como su majestad la reina, yo como quien los vio crecer desde que nacieron quiero solamente su cuidado" agacho su cabeza en señal de respeto.

Yoongi había llegado a mi lado.

"Buenas noches señor Sung" saludo. Tan confundido con su presencia como yo.

Le mire extrañado.

"No es lo que quise transmitirle, señor Sung. Usted es alguien muy querido por todos nosotros, le agradecemos su arduo trabajo en el palacio y su preocupación por los príncipes de este reino" el asintió y mi hermano opto por guardar silencio "Le pido disculpas si lo hice sentir ofendido, con su permiso necesitamos atender un asunto"

"Que tengan buen descanso, su altezas. Y no se preocupe, entiendo perfectamente"

Reverencio, y nos abrió paso en el pasillo.

"Llegó un informe, su majestad" alce el rostro cansada y tome el columbograma que sostenía una de mis consejeras, con la duda reflejada en mis ojos "Exigen una respuesta, hijos del fuego necesitan saber si nuestro reino se está haciendo cargo de la plaga que esta contaminando a su reino"

Suspire.

"Una plaga, que se multiplica aún más con el paso de los días. Pareciera que nunca los vamos a encontrar ¿Verdad, Eleanor?"

"Usted a hecho todo a su alcance, su majestad" comentó "Dentro de sus requerimientos como reina de los hijos del invierno, hizo todo con respecto a la orden de calder, esto escapa de nuestras manos"

"¿Le has comentado algo al rey?" Negó "Necesito que convoques al parlamento a una reunión lo antes posible, esto requiere la aprobación de lo más altos rangos, hay que tomar cartas en el asunto sobre esto"

Eleanor reverencio y asintió.

"Como usted ordené, su majestad" segundos después ya se encontraba fuera de la habitación, pero antes que pudiera cerrar la puerta la presencia de alguien más impidió eso. Vi como afuera reverenciaba.

"Buenas noches, su majestad" reverencio sutilmente antes de sonreírme pequeño "Espero no importunar, quise pasar a verla"

"Su excelencia, tome asiento por favor" le sonreí y espere que tomara asiento frente al escritorio "Dígame, en que puedo servirle. No es usual para usted merodear a estas horas por los pasillos del palacio" dije.

"Los años nos han hecho conocernos mejor ¿No?. Escuche que nuevamente el pueblo vecino exige respuestas por la agrupación que merodea por sus tierras ¿Es verdad?" Por inercia apreté el papel entre mis manos "Quisiera que me comentara sobre eso"

"No hay mucho que acotar, su excelencia" Despeje mi garganta "Se ha hecho lo que dicta la ley, la familia real no puede verse más involucrada con esa orden porque nuestra reputación se vería en juego, perjudicada. El pueblo dejaría de confiar en nosotros y lo que tuviéramos para decirles"

Su sonrisa está vez me desconcertó.

"No fue lo que escuche antes de entrar, su majestad" me miro con atención "Tomar cartas en el asunto contradice a todo lo que me esta diciendo justo ahora. ¿Cree que alguien pueda creer en sus palabras?" Frunci mi ceño "¿Sus palabras tienen la suficiente credibilidad para que un pueblo se pueda sentir verdaderamente a salvo?"

Se inclinó levemente.

"¿O para que siquiera piensen que de verdad le interesa ponerle fin a la orden de calder?" Dio un suspiro y se puso de pie y se acercó a la mesa donde cargaba una botella de licor, vertió un poco del líquido en un vaso y el resto lo lleno con hielo "No fue convincente para mi, deberá esforzarse más si quiere que los demás no duden de usted, su majestad Kim Minseo" sonrió.

Bebió del licor.

"Me parece que eso fue fuera de lugar, su excelencia" vire mis ojos por un momento "Hago lo mejor que puedo, le recuerdo que quien inició con todo esto no fui yo. Ambas sabemos perfectamente como comenzó, que esto no esté funcionando como usted quiere no solo es por mis decisiones ¿No?"

"Creó que el descanso que tuvo, su majestad no le ha sentado demasiado bien" se reincorporó y se coloco de pie "El tiempo nos juega en contra, hay muchas cosas por hacer, quisiera recordarle eso al menos. Una plaga que desfavorece al equilibrio y la rectificación del universo no puede seguir viviendo y disfrutando de comodidades"

Opte por guardar silencio.

"Me comunicare con alguien de confianza para brindarle mi apoyo en todo esto, su majestad. Hablare de esto igualmente con mi esposo, su excelencia Jung Gon" dio una pequeña reverencia "Que tenga un buen descanso, no olvide irse a la cama pronto. No queremos tenerla ausente otra vez, el reino no seria absolutamente nada sin su presencia. Buenas noches su majestad"

Tan solo mire con atención como dejaba la habitación y desaparecía en los pasillos. La penumbra de los mismo haciéndose cada vez más profunda e imposible de atravesar.

El tiempo estaba en nuestra contra.
Y mis capacidades llegando a un límite que no esperaba enfrentar en algún momento.