¿Cuantos meses han pasado?

MinSoo ya perdió la cuenta, desde que se fue Jungkook, su hogar estuvo muy silencioso. Su madre, quien siempre estaba fuera de casa por su trabajo, apenas y se había dado cuenta de que habían tenido un inquilino especial.

Todo había desaparecido, al menos lo relacionado con Jungkook y el infierno. Todo menos la tarjeta de color negro, la cual aún funcionaba. ¿Era un recuerdo de que todo había sido de verdad? ¿Era un especie de agradecimiento? Sea lo que sea, atesoraria esa tarjeta y lo guardaría solo para cosas especiales.

Ella había intentado abrir las puertas del infierno de nuevo, pero nada pasaba, Jimin había tenido razón. Jungkook había cerrado todas las puertas que conectaban con el mundo humano. Ahora esos juegos macabros solo parecían juegos de niños.

─MinSoo, vamos a ir al cine ¿Te apuntas? ─

─Claro, ¿cuál verán? ─

─Aún no sabemos, escogeremos una vez estemos ahí ─

Un pequeño grupo de chicas se alejaron de la escuela, MinSoo las acompañaba.

Ahora no había pretextos para negarse a ir al cine o a cualquier otro lado, ya no cuidaba a nadie. Ella sonrió al darse cuenta de ese detalle, su vida había vuelto a ser tranquila... Y aburrida.

Cuando llegaron al cine, se encontraron con otro pequeño grupo de chicos. MinSoo se sorprendió y apartó a su mejor amiga para hablar con ella sin que las demás escucharan.

─Oye, no dijeron nada de encontrarnos con chicos ─

─Si te lo decía, ¿vendrías? ─

─No ─ contestó de inmediato.

─¿Ya lo ves? Es por eso que no te dije nada, no te molestes, esto lo hago por ti ─

─¿Por mí? ─

─Sí, no falta mucho para terminar nuestra vida escolar, y tú no has tenido ningún novio, necesitas experimentar eso de vez en cuando o al menos una vez en tu vida ─

MinSoo gruñó molesta quería irse de allí, para ella eso era algo incómodo.

─Vamos, toleralo solo un poco sino te agrada ninguno de ellos, nos vamos ¿está bien? ─

MinSoo miró al grupo de chicos, quienes hablaban animadamente con sus compañeras, después volteó a ver a su mejor amiga.

─Si no me agradan, me iré ─

─Claro ─

MinSoo resignada se dejó arrastrar por su amiga, integrandola en el grupito que había crecido un poco.

Todos fueron a la taquilla por los boletos para ver la película, después de que se hubiesen puesto de acuerdo en ver la misma película.

Aún faltaban minutos para que pudieran entrar, y por eso se sentaron en algunas bancas que estaban dispersas por el cine. MinSoo se sentó en una, seguida por un chico. No estaba mal, pero no era su tipo tuvieron una charla donde él sólo hacía preguntas y ella sólo trataba de contestar con algo más que solo un sí o no.

Los minutos pasaron y llegó el momento de entrar a la sala del cine, MinSoo se quería sentar a un lado de su mejor amiga, pero tal parece que ella estaba confabulando en su contra. Ahora mismo la odiaba. El mismo chico que se había sentado con ella en la banca para charlar, estaba a su lado.

La película empezó, pero MinSoo estaba tan incomoda con ese chico a su lado que no prestó atención a lo que pasaba en la gran pantalla. Ni siquiera había tocado sus palomitas ni su refresco, y el momento fue aún más incomodo cuando ese mismo chico tocó su mano para entrelazarla. ¿Qué le pasaba? A penas y si habían intercambiado algunas palabras.

─Discúlpenme ─ susurró y se levantó de su asiento.

─¿A donde vas? ─  preguntó susurrante su mejor amiga.

─Baño ─

Claro que iba al baño, pero solo para poder alejarse de ese chico, estaba pensando muy seriamente quedarse en el baño el resto de la película, no era una mala idea.

Ya en el baño, ella lavó sus manos y después mojó su rostro dos veces. Cerró el grifo y se miró al espejo.

─Me quiero ir ─ gimoteó. ─ Estoy tan desesperada que aceptaría ir al mismísimo infierno si eso sirve para alejarme del chico ese ─ habló a su reflejo en el espejo.

Volvió a mojar su rostro y después lo secó con unas toallitas. Suspiró agotada, ella esperaría en las bancas, no volvería a entrar a esa sala.

Se dirigió a la puerta y con su mano derecha giro el pomo de la puerta, con la izquierda talló sus ojos un poco de agua había entrado a sus ojos. No irritaba pero si era molesto.

Abrió la puerta y dio un par de pasos hasta salir del baño.

─Así que estaría bien el infierno, ¿no? ─

Parpadea un osr de veces, había escuchado de nuevo esa voz, pero no sería la primera vez.

─¿Jungkook? ─

─Bienvenida al infierno, humana ─ sonrió él.

MinSoo sólo pudo sonreír feliz. Nunca había estado más feliz que ahora que estaba en el infierno.

─────────

Bien, ahora si esta totalmente terminada la historia. Y contestando algunas preguntas.

NO tendrá segunda temporada.

El +18 quedó en el olvido, realmente la idea original de esta historia era otra, pero ya saben, en esta vida todo cambia.

Soy demasiado indecisa, y muchas veces quité la historia y otras Wattpad la mandó a borradores. Así qué...

Gracias por leer votar y por sus comentarios. Recuerden que se están subiendo más historias, ¿les gustan las historias de lobos? Bueno, den una vuelta por la historia de Plenilunio.

Las amo...

Lizzy.

Fin