Una posible alianza sin igual y sueños inexplicables.

Shidou Itsuka y Artemisia Bell Ashcroft...

Artemisia Bell Ashcroft, ese es el nombre de una persona que está llena de sorpresas. Una chica de cabello rubio y largo con una semi-trenza, de ojos azules con un cuerpo envidiable para cualquier persona del género femenino y una belleza tan genuina y natural, que no sería sorpresa que algún ingenuo pretendiente este en busca de su atención.

Pero tal vez eso no es lo importante aquí, teniendo una belleza inquietante cuenta con algo más que la hace tan especial. Puede ser su origen, su capacidad física o inclusive, algo que aun sea desconocido para el mundo.

Es o era un miembro de la equivalente británico de AST, que es el SSS. Ella fue la mejor asistente de la organización y era conocida por su personalidad amable y alegre.

Encontrar a una persona tan considerada y humilde es muy difícil, y más en opinión de los espíritus que incluso llegaron a cuestionar al mismo Sr. Elliot Baldwin Woodman; Fundador y presidente de la organización Ratatoskr, la misma organización que les dio acogimiento y una vida "normal". Los espíritus solo confían ciegamente en dos "humanos", Shidou Itsuka y Reine Murasame, analista de "Fraxinus" y amiga de Kotori que por cierto, siendo una espíritu esta última, ya no es considerada humana para muchos.

Pero el caso de Artemisia es tan diferente y no tan diferente a la vez, pues lo que es la "genuina" Ashcroft; se le podía describir como pensativa y considerada ya que una vez "quiso" usar sus poderes para el mejoramiento de la humanidad.

Una maga tan prometedora, que ella junto a dos personas más, pueden reclamar una posición como "las 5 magas más poderosas del planeta", siendo una más joven que la misma Artemisia y la otra, que teniendo una apariencia tan joven como la de esta última, es mucho mayor a la hermosa rubia.

Sin embargo, no hace mucho se unió sorpresivamente a la organización de Industrias DEM, cosa irregular ya que por palabras de algunos, ella consideraba a DEM como una organización desagradable pero, la vida puede traer varias sorpresas. Amigas, por supuesto que la hermosa rubia llego a tener amigas, y no simples colegialas de secundaria, sino en su mismo trabajo creo lazos de amistad con muchas personas ya que entablar conversaciones o amistades era algo que para Artemisia era fácil por su encanto de personalidad.

Pero recalcando, puede que su situación con DEM sea algún misterio para muchos, y no solo para Ratatoskr y sus aliados, sino también para los de afuera que conocen mejor a la maga, incluso, mejor que Isaac Pelham Wescott y Ellen Mira Mathers; La maga más poderosa del mundo y quien posiblemente, sea la única que puede derrotarla en un combate de Realizers.

RECUERDOS

Esa palabra estaba en la mente de tres jóvenes en específico; Dos hermanos peli-azules y una chica rubia. Esas tres personas compartían algunas cosas en común y entre ellas era que los tres se auto-consideraban "humanos" siendo que para muchos o pocos, ese concepto es ajeno para ellos.

Artemisia se encontraba "aburrida" en la oficina de su compañera y "Senpai" Ellen Mathers, quien estaba lidiando o más bien peleando con otras chicas que la estaban molestando. Lo curioso es que estas "chicas" poseían literalmente la misma cara y misma vestimenta, ósea, era como si una sola estuviera en algún juego de feria, especialmente la casa de los espejos.

<<Nibelcols>> así se podía referirse a las niñas que estaban jalándole el cabello a Ellen, quien por cierto, tenía a una de estas chicas tomándola del cuello mientras le metía la parte del borrador de un lápiz en la oreja izquierda.

Para la rubia más joven no era nada nuevo presenciar estas escenas, su compañera y <<Nibelcols>> tenían de rutina pelear o insultarse todos los días por cualquier cosa y, en varias situaciones, cosas sin sentido. La otra vez una de estas criaturas se había comido un pedazo de pastel que por cierto, había comprado Ellen para degustarlo con un café que estaba preparando en uno de los comedores del edificio donde trabaja.

Las consecuencias; 5 de estas chicas parecidas, calcinadas por un ataque de la rubia-pálida en un arranque de furia. Lo curioso y "chistoso" es que ninguna de las que fueron aniquiladas por Ellen, se habían comido su preciado postre, pues ellas ni sabían siquiera él porque ella estaba molesta. Hasta el momento la maga no ha encontrado a la verdadera culpable de su hambre en ese día.

- Oye Ellen ¿Podrías de dejar de molestar a esas niñas? –

Dijo una Artemisia algo divertida por la situación. Cosa curiosa porque ella no estaba mostrando interés en el asunto hace un minuto.

- ¿Eh? ¿Lo ves Ellen? Deja de molestarnos, no es culpa nuestra que estés quedando como cerda al comer bastante sema –

- ¿Sema?... ¡¿Sema?¡ ¡Maldita mocosa sin madre! –

Contesto una Ellen furiosa al entender el insulto de la <<Nibelcol>> que ya la tenía hasta el límite.

- ¿Madre?... ¡¿Madre?! ¡Maldita vieja sin hijos! –

Contesto ahora una <<NIbelcol>> furiosa al entender el insulto de la maga que a diferencia de ella, tenía varios insultos con que responder.

- ¿Por cierto, Artemisia? ¡¿De qué lado estas?! –

- Uhh...Por supuesto que del tuyo Ellen, solo que no es bueno pelear entre nosotras ya que poseemos a un enemigo en común. ¿No lo crees? –

Dijo la joven rubia con una sonrisa nerviosa al tener una pregunta directa y un poco "innecesaria" a su ver, por parte de su compañera.

- ¿Uhh? Tan joven y ya sabe cómo manejar esta situación, cosa que no puedo decir de ti, amargada –

- Es verdad, deberíamos decirle nuestro padre que despida a la glotona y que deje a Artemisia-chan como nuestra compañera –

- Es verdad, te apoyo. No solo es más bonita que Ellen, sino también más inteligente y el poder no es tan diferente –

- Cierto ¿Por qué no se nos había ocurrido antes? –

Todas las "gemelas" estaban debatiendo el por qué Ellen debería ser "despedida" por su parte de su "querido padre" sin tomar en cuenta los sentimientos de la rubia-pálida.

La rubia mayor activo su territorio provocando la inmovilidad de las "inocentes" criaturas y las torturaba con una gravedad tan fuerte para ellas y tan débil como para destruirlas.

- Déjense de tonterías mocosas bastardas. Ike no puede despedirme porque no tiene el poder para ello y si fuera así, no puede despedir a su aliada más fiel y con la que fundo esta empresa.

Dijo Ellen en un tono amenazador mientras miraba ferozmente a las <<Nibelcols>>, que solo se limitaron a asentir con una sonrisa provocativa.

Artemisia solo miraba esto mientras seguía diciéndole a Ellen que las soltara porque no era bueno pelear entre aliados.

La rubia mayor hizo caso a las peticiones de la rubia menor y dejo de emitir su territorio para dejar libres a las molestas chicas.

- Coff coff... Cielos, que carácter –

- Definitivamente necesita pareja para que esa actitud desaparezca -

- Estoy de acuerdo –

Las "espíritus" decían al momento de recuperar sus fuerzas y el oxígeno. No entendieron bien que no debían molestar a la maga más poderosa.

- Chicas ¿Podrían de dejar de molestar a Ellen? Ella es muy buena y amable si le dan la oportunidad, por favor, dejen de molestarla también.

Ahora fue Artemisia la que hablo por Ellen que aunque mostrara una actitud amable, parecía que estaba un poco molesta de como hablaban de su compañera.

- De acuerdo, de todos modos ya nos habíamos aburrido. Yo me voy, adiós "Artemi-chan". Hasta pronto...Glotona.

- Yo también me voy, quiero pedirle algo a papa –

- Adiós, chicas –

- Al rato nos volvemos a ver Artemisia-chan, igualmente "Ellen-chan" –

- Nos vemos –

Y así de fueron despidiendo cada una de las <<Nibelcols>> a su manera de las dos magas para desaparecer en una especie de destello negro.

Artemisia solo se limitó a decir adiós con una mano y una sonrisa irónica por los apodos y dirigidos a ella.

Ellen se recargo en su escritorio y solo suspiro de alivio al no tener que lidiar por un rato con esas "mocosas" que le hacían la vida imposible.

Ambas rubias estaban vestidas de forma "normal", mientras que Ellen llevaba una vestimenta más formal, conformada por una blusa blanca y un saco café oscuro cubriendo su parte superior, y una falda del mismo color que el saco que le llegaba hasta las rodillas con unas mayas negras cubriendo sus torneadas piernas. Sin excluir sus tacones de color negro.

Artemisia llevaba un vestido blanco que le llegaba debajo de las rodillas y unas sandalias color durazno que le daban un aspecto más infantil del que ya tenía. Sin duda ambas eran hermosas por naturaleza y podrían engañar a cualquiera diciendo que son hermanas con pocos años de diferencia.

- Ellen, quisiera pedirte algo. ¿Podrías escuchar mi petición? –

Pregunto la rubia menor a Ellen que logro tener la atención de esta última para demostrar que la escuchaba.

- ¿Qué es lo que quieres? –

- Bueno, podrías acompañarme a un lado por favor –

Artemisia contesto a la pregunta de Ellen que mostro una cara de sorpresa al ser invitada a salir por su compañera de trabajo.

- ¿A dónde quieres ir exactamente? –

Pregunto Ellen curiosa de lo que la rubia podría decirle. No es como si tuviera una cierta desconfianza en ella, simplemente tenia curiosidad de saber a donde podrían ir.

- Pues quisiera ir al centro comercial, ya sabes, a comprar algo de ropa como cualquier chica lo haría. Solo que no tengo ganas de ir sola ¿Qué dices? ¿Me acompañas? –

Artemisia mostro una cara libre de maldad dando una sonrisa nerviosa al decir que quería convivir con Ellen como lo harían dos chicas "normales", ya que aunque sea una maga trabajando en la empresa tecnológicamente, más avanzada del planeta, seguía siendo una chica que puede mostrar interés en esa clase de cosas.

Ellen mostro una cara comprensible a la petición de Artemisia. No es como si a ella no le interesara tampoco esas cosas, de todos no era como si hubiera alguna misión hoy o alguna otra cosa profesional. Bien podría salir un rato aprovechando la invitación de la joven rubia a liberar ese estrés y desagrado que le habían brindado las "mocosas" de hace un momento.

- Bien, te acompaño. Pero te advierto que no estaré probándome cada cosa que vea como lo hacen las demás, solo será un rato en lo que tomo un poco de aire.

Artemisia mostro una cara feliz y asintió a lo que dijo Ellen. Este era un momento para liberarse del trabajo y que mejor que salir un rato al centro comercial.

- Entendido. En ese caso, vámonos. ¿Quieres irte así de formal o quieres que espere a que te cambies?

- Solo dame un momento, solo me despido de Ike y me cambio –

- De acuerdo –

La rubia menos asintió a las palabras de Ellen y aprovecho en darle un seña con la mano a esta última como diciéndole que la esperaba abajo en la salida del edificio. La rubia mayor entendió la seña y solo respondió con un asentimiento.

En una oficina de la parte más alta del edificio se encontraba un hombre sentado en su escritorio. Este hombre tenía el cabello cenizo y un poco alborotado, mientras que su vestimenta consistía en un traje completamente negro al igual que su camisa, y solo su corbata mostraba tener un color diferente ya que era del mismo color que su cabello. Un persona alta con una atmósfera algo peculiar e inquietante para las personas que se le acercaban.

Sir Isaac Wescoot; Fundador y presidente de Industrias DEM, una de las empresas más poderosas de la historia y uno de los hombres más temidos por sus subordinados.

Wescoot se encontraba hojeando un "libro" como si se tratara lo más interesante del mundo y no es mentira, pues no era cualquier libro, sino del mismo <<Belzeebu>>, el rey demonio que le fue robado a un espíritu hace poco con la ayuda de sus compañeras de trabajo. Claro, especialmente de una de ellas, que con una especia de canto y un territorio muy especial, se pudo sacar el <<Cristal Sephira>> de ese espíritu y así obtener al rey demonio de este.

La puerta de la oficina sonó demostrando que alguien llamaba del otro lado del picaporte.

- Adelante –

La puerta se abrió mostrando a Ellen que parecía que tenía que decirle algo a su compañero.

- Ike, soy yo –

- Oh, Ellen, pasa. Siéntate si gustas.

- No, gracias. Solo vengo a decirte que voy a salir un rato, al parecer Artemisia quiere salir a comprar ropa y me invito a ir con ella –

El peli-gris sonrió de forma divertida al ver que su compañera, que es muy reservada con ese tipo de cosas, estaba dispuesta a salir por una simple invitación.

- Ya veo. Así que irán a divertirse –

- No hagas ideas antes de tiempo, solo la acompañare ya que también necesito despejar un poco mi mente –

- No es necesaria tanta agresividad mí querida Ellen. Anda, vayan a entretenerse, lo merecen. Yo estaré aquí también entreteniéndome un rato con este grandioso "libro" –

Dijo Isaac mostrando otra sonrisa divertida mientras cerraba su preciado rey demonio y le daba comprensión a la necesidad de su compañera.

- ¿Nada de que deba enterarme? –

- No, aun nada. Si ocurre algo te contactare, por lo mientras, vayan a divertirse Ellen. No dejes a nuestra preciada Artemisia esperándote. –

- De acuerdo. Por cierto ¿Y las mocosas? –

- ¿Mocosas? Aaa, te refieres a las <<Nibelcorl>>. Ellas salieron un rato a divertirse, después de todo también son chicas que necesitan despejarse un rato. Fufu no te preocupes, no causaran problemas. –

- Entiendo, nos vemos en unas horas –

- De acuerdo, adiós Ellen. Cuídense –

- Lo mismo digo –

Wescoot al ver Ellen retirándose, cambio a un semblante un poco serio, como si algo estuviera mal o no cuadrara para él.

- ¿Qué habrá sido eso? –

Después de que Ellen se despidió de Wescoot se dirigió a su oficina para cambiarse de ropa y bajar en elevador llegando a la parte baja del edificio donde se encontraba la rubia esperándola.

Artemisia sonrió y se acercó a Ellen...

- ¿Nos vamos? –

- Si –

Ambas chicas se dirigieron a la salida para ir a lo que es el centro comercial sin saber que otro par, se había dirigido al mismo lugar.

En un departamento de algún edificio de la ciudad había un desastre como si un pequeño tornado hubiese aparecido en medio de las habitaciones a devastar todo lo que había.

- ¿Qué demonios fue eso? –

En medio del caos de hogar, se encontraba la peli-gris conocida como Sister para unos y Nia Honjou para otros, la segunda espíritu en aparecer en la tierra.

Ella se encontraba en medio del desastre con una vestimenta "especial" parecido al que llevaría una Maid. Nia estaba sentada en el piso como si se hubiera dado un sentón justo después del "tornado" en su habitación, pero no lucia como la típica One-san que conocen todos, sino como una la típica persona que estuviera pasando por una situación realmente difícil.

No, no era porque se estaba quedando sin ideas para algún manga o porque su trabajo se había echado a perder, era totalmente diferente a eso.

- Me duele la cabeza, necesito contactar al Chico o a Otou-chan. ¿Qué rayos fue esa anomalía? –

Si, parecía que la mangaka había experimentado algo anormal y no sabía lo que era, es como si algo bastante grande se acercara.

Residencia de los espiritus...

- ¿Shidou ya se fue? –

- Si ¿Algún asunto con Nushi-sama? –

En la residencia que está justo al lado de los Itsuka, se encontraban 5 chicas en una sala del departamento, y estaban sentadas como si estuvieran debatiendo o tuvieran junta de algo importante.

La primera que pregunto eso fue una hermosa chica de cabello morado oscuro con una cola de caballo bastante largo que le llegaba casi a las rodillas.

La chica que le contesto era otra hermosa muchacha de cabello rubio que, aunque suene increíble, era más largo que el de la primera chica y lo tenía trenzado como adango.

Las chicas en hablar eran Tohka Yatogami y Mukuro Hoshimiya que habían comenzado a interactuar entre ellas.

- Muu no pero, es que tengo algo de hambre –

- ¿Por qué no tratamos de cocinar? Siempre hay que estar preparadas para este tipo de situaciones.

- A-poyo lo que dijo Natsumi-san –

- Kuku Natsumi-chan suele tener buenas ideas aunque sea de las más "calladas" –

- Oww ¡¿Enserio?! !Umu, vamos hacerlo! –

- Cierto, yo podría enseñarles un poco a cocinar, no soy tan buena como Nii-sama pero me defiendo –

Las chicas en contestar lo que dijo Tohka fueron Natsumi, Yoshino, Yoshinon y Mana. Es tal y como dijo Yoshinon, Natsumi es muy reservada pero cuando tiene un plan, difícilmente hay quien pueda debatir contra su inteligencia.

- Fumu, no tengo hambre pero tengo antojo. Vamos, Muku quiere probar algo –

- De acuerdo, espero que Kaguya y Yuzuru no demoren tanto en llegar –

- S-si, no me gustaría comer sin que falte alguien –

- ¡Umu! Vamos a darles una sorpresa –

- Si, si pero quisiera llamar a la sargento Tobichii para que coma con nosotras –

- ¡No es necesaria su presencia! –

Después de que Mukuro dijera que no tiene hambre, seguido de Natsumi con su espera a las hermanas Yamai y el acuerdo que Yoshino tiene con ella, a Mana se le ocurrió invitar a Origami, claro, la que le respondió con un puchero fue Tohka. Mana solo sonrió de forma irónica ante el reclamo de la peli-morada.

- Creo que no debe de haber problema en invitar a Origami, Tohka –

Dijo Natsumi con un semblante un poco sombría como siempre. Al parecer ella no tenía algún problema con que la poseedora de Metatron comiese con ellas.

- Muu, en ese caso también debemos hablarle a Miku y Nia –

- ¿Hu? –

Ahora el semblante de Natsumi cambio a un de miedo ante la "grandiosa jugada" que Tohka había hecho, claro que la peli-morada no tenía esa intención.

- Apoyo a Tohka, será mejor hasta la próxima ¿No creen? –

Natsumi pareció apoyar la idea de Tohka en tan solo un momento, parece que no "quería" a más invitados innecesarios.

Aunque no había problema con invitar a Nia por parte de Tohka o Natsumi, Se había nombrado a alguien más aparte de la peli-gris.

Las demás solo dieron sonrisas nerviosas ante el repentino cambio de idea que tuvo la peli-verde.

En los cielos de la ciudad Tengu se encontraba una gran nave que no se parecía en nada a un avión comercial, sino algún tipo de "pinza" gigante. "Fraxinus" la nave donde se lleva a cabo los monitoreos de las citas de Shidou y el lugar que es dirigido por su hermana menor, Kotori.

- Reine ¿Qué está pasando? ¿Por qué Shidou no aparece en el radar?

- No tengo idea Kotori, alguna interferencia de AST o puede ser que haya dejado su auricular en casa –

Las que hablaron fueron la hermana adoptiva de Shidou; Kotori Itsuka y Reine Murasame, analista de "Fraxinus" y mejor amiga de la antes mencionada.

- Pero si solo esta con Kurumi. Bien, traten de localizar a mi hermano y solo eso. El me pidió que no lo espiara porque así lo quiso Kurumi. Solo queda confiar en el –

- ¡¡Entendido comandante!! –

Contestaron al unísono todos los tripulantes de la nave al escuchar la indicación de la niña peli-roja.

En la superficie y la ciudad...

- Aquí. Quiero probar unos accesorios de esta tienda, ven Ellen –

- ¡¿Ehh?! ¡Espera! ¡¿Una lencería?! Yo no ir...-

Ellen no termino de a completar su negación ya que Artemisia la jalo dentro de la lencería para después terminar dentro de la tienda.

- ¡No me gustan estos lugares! –

Grito/susurro la rubia-pálida a la joven que la metió en ese lugar, era evidente que no quería llamar la atención de algún cliente en ese lugar.

- Solo será un momento hehe –

- No sé por qué me obligas a venir a estos lugares, yo no estoy para venir aquí –

- Vamos Ellen, será divertido –

- Sin duda eres una niña todavía, pero solo por esta vez te la paso –

- Gracias, Senpai –

- Deja de decirme así Artemisia –

Las dos rubias estaban conversando sobre él porque Ellen no debería estar en una tienda para "colegialas" o para seducir parejas.

Aunque corto Ellen alcanzo a ver que una figura entro corriendo a un vestidor como si su vida dependiera de ello.

La rubia menor noto que la atención de su acompañante se enfocó en un punto específico, más exacto en un vestidor de cortina negra.

- Umm ¿Qué sucede "Senpai"?

- ¿Hu? O nada, solo que pareció ver algo extraño. Oye, si vas a escoger algo hazlo, me siento rara aquí.

- ¿Ah? De acuerdo, déjame ver, umm...vamos para allá, ahí hay accesorios que podrían gustarme –

- Eh de acuerdo, te sigo –

Así el par de magas de dirigieron a otra parte de la tienda, justo donde habían de la talla de ambas. Curioso que justo ahí, unos minutos antes una chica peli-negra, había escogido su lencería de esa misma zona.

Mientras tanto en un vestidor de esta misma tienda...

- Uff, eso estuvo cerca, perdona Kurumi por...-

Un chico peli-azul había entrado corriendo al vestidor donde una peli-negra se había metido apenas unos minutos, y mientras volteaba a verla para pedirle disculpas quedo más que rojo y congelado ante la escena que estaba frente a él.

- Sh-shidou-san, dije que no espiara –

Frente a él estaba una fascinante escena para cualquier joven sano. Una hermosa peli-negra con una lencería de color rojo, y parecía que aún no se acomodaba la parte del busto ya que se cubría esa parte con ambos brazos cruzados.

Decir que estaba sonrojada era poca cosa, en realidad, es roja como remolacha y casi igual que el mismo Shidou.

Hablando del chico esta que echaba humo de la cabeza por semejante muestra de la chica, rápidamente se cubrió la cara con ambas manos mientras volteaba del lado opuesto y se disculpaba desesperadamente.

- ¡Perdona Kurumi! ¡Tengo una buena razón de mi atrevimiento, no era mi intención verte así! –

- ¡Pues espero que sea lo que dices, una muy buena razón Shidou-san! –

Kurumi sonaba molesta por la acción de Shidou pero era normal, después de todo no debería ser un placer el que te estés vistiendo con ropa interior y entre un fulano de la nada a verte mientras te vistes. Aun si lo conoces muy bien, cada quien necesita su privacidad para ciertas cosas.

Shidou sin pensarlo dos veces le explico la situación mientras seguía cubriéndose los ojos con las manos de vergüenza.

- ¿Ara? Con que eso paso. Esto sí que es un problema pero, por lo menos me hubieras avisado, Shidou-san pervertido –

Parecía que Kurumi seguía un poco molesta y aunque sea haya sido solo un momento, Shidou dio un vistazo al rostro de la peli-negra y vio un pequeño sonrojo en sus mejillas con un tierno puchero.

Kurumi volvió a vestirse con sus prendas, por supuesto que la lencería la conservo ya que no iba a cambiarse de nuevo la ropa interior con un chico metido en el mismo vestidor.

- Bien, y ahora ¿Que hacemos Kurumi? –

- Lo obvio, vamos a desaparecer de aquí para no arriesgarnos a que nos vean ese par de molestias –

La bella peli-negra tomo al chico de la cintura mientras lo abrazaba con fuerza e invocaba un rifle.

- ¡Espera! Si invocas a un ángel podrían detectarnos –

- Tan inocente como siempre Shidou-san –

A Kurumi no le importo la advertencia del peli-azul y ambos desaparecieron en un silencioso disparo del arma que la chica había invocado.

Los dos estudiantes salieron justo de un agujero "negro" que salió de la nada de un árbol de un parque de la ciudad y se recargaron en este.

- Eso estuvo cerca, me alivia que no nos hayan visto –

- Bueno, aunque me sorprende ver a esas mujeres en una lencería, será una desagradable casualidad –

Después de lo que había dicho el peli-azul, Kurumi expreso su disgusto al poder toparse con dos de sus obstáculos en su meta.

Shidou sonrió irónicamente ante las palabras de la peli-negra, al parecer si odia a DEM igual o más que el mismo.

- Bueno ¿Seguimos con nuestra cita? O ¿ya tengo la victoria? –

Dijo el chico al componerse de la situación y reincorporarse para estirar su mano a su hermosa acompañante con una sonrisa un poco audaz.

- ¿Ara? Al parecer hoy alguien viene muy confiado. No es buena la arrogancia, Shidou-san –

Contesto Kurumi de forma provocativa al escuchar las palabras de su acompañante en un tono insultante para ella.

- Entonces vamos –

- Pues andando, chico play-boy –

La chica tomo del brazo al chico mientras él podía sentir el modesto busto de su compañera y se sonrojaba al tacto.

Ambos siguieron con su cita sin ahora, algún problema u obstáculo que les impida seguir con su juego/cita.

Unidad británica de SSS...

- Entonces ya quedo demostrado que fue un "lavado de cerebro" –

- No podríamos llamarlo un "lavado de cerebro", solo son recuerdos extraídos –

- ¿No es lo mismo? –

- No, porque un lavado de cerebro es cuando "alteras por completo la memoria" y luego manipulas en si a la persona engañándola con su origen y objetivo. La conviertes en otra cosa para el beneficio personal –

- ¿Hug? Sigo pensando que es casi lo mismo ¿Verdad? –

Todos en una mesa redonda asintieron ante el comentario que dijo una joven de apariencia de niña de 14 años.

El lugar en donde se ubicaba la discusión era en otro lugar muy alejado de la ciudad de Tengu. Exactamente en el continente Europeo.

Las personas que se encontraban intercambiando diálogos eran exactamente 6 jóvenes del sexo femenino. Lo curioso de todo esto es que dos de ellas tenían puesto un traje muy similar al que portaba Origami durante su estancia con AST; La unidad para la aniquilación de los espíritus básicamente.

- No es lo mismo, ya que....Bueno eso no es lo importante aquí, lo que estamos discutiendo es la razón de este incidente –

La próxima en hablar fue una chica con el cabello de color miel, y se encontraba sentada en silla de ruedas. Ella llevaba su cabello atado en dos trenzas que parecían coletas. Una apariencia muy gentil y tierno para sus compañeras de trabajo, y vestía una blusa blanca tradicional con una falda negra larga.

Ashley Sinclair

Cecile O'Brien

Leonora Sears

Si, las principales del grupo eran esas tres personas. Si se analizara la situación, fácilmente se podría deducir que estaban intercambiando información acerca de algo "ilegal".

- Por eso se me ocurrió algo y quisiese que me ayudaran en ello por favor –

Dijo la chica de silla de ruedas conocida como Cecile...

Las demás no dijeron nada, parece que le daban la oportunidad de que siguiera hablando para escuchar ese "plan" que tenía en mente. El silencio le dio esa idea a Cecile para seguir con su discurso.

- Iremos a la ciudad de Tengu, Japón. Y recuperaremos, salvaremos a nuestra compañera y quisiera tener una alianza con... –

- ¡Espera! Nosotros no hacemos alianzas –

Interrumpió la peli-negra conocida como Leonora. La unidad Británica no hacia alianzas a la ligera, era obvio que era una organización tan implacable que nunca necesito de ello.

Las demás solo se le quedaron viendo a la chica de sillas de rueda con miradas afiladas, esa obvio que apoyaban lo que dijo Leonora.

Pero aun así Cecile no perdió la calma, y al igual Ashley solo observaba en silencio la situación. Estaba considerando lo que su amiga estaba diciendo acerca de salvar a alguien y de aliarse con algún otro "Imperio".

- Hasta que me dejen terminar de hablar, tomaran su decisión, así que por favor escúchenme –

Contesto con tranquilidad la peli-miel para seguir hablando con los ojos cerrados.

- No nos uniremos con cualquier fortaleza, pero tienen que saber que esto es para beneficio propio. En pocas palabras, nosotras al final de la batalla que se acerca, tendremos la victoria por el bien de la HUMANIDAD. Deben saber a qué me refiero, no estoy buscando treguas porque la necesitemos, sino para demostrar que no solo dependemos del poder, sino también del engaño. Sé que no puedo obligarlas a ir conmigo pero, quisiera no hacerlo sola. –

Termino de decir la tierna chica mientras ponía su puño en el pecho como si hiciera un juramento.

Un silencio inundo la mesa por unos momentos ya que, para un poco de alivio de Cecile, demostraba que estaban pensándolo bien.

- Yo iré contigo –

Se escuchó de repente y todas dirigieron su mirada a la persona que al parecer fue la que dijo eso, menos la pelo de jengibre que solo dirigió sus oídos para escuchar bien.

La que apoyó la idea fue Ashley Sinclair, fue la primera persona en dar su mano a la chica.

- Entonces, por el bien de todas y el de la humanidad. Cuenten conmigo también. –

Dijo la misma persona que se había negado a la petición de la chica de trenzas. Por supuesto que Leonora Sears.

- Chicas...-

Dijo Ceci feliz de que hayan apoyado su plan.

- En ese caso todas iremos, y no me refiero solo a nosotras 6. Todo el equipo completo se unirá a esto. Por el bien de Artemisia-sama, por el bien de SSS y por el bien la raza humana.

Contestaron las sobrantes y todas asintieron a eso. Claro como el agua, toda la organización Británica irá a Tengu. Al parecer una batalla grande se acercaba.

- Entonces, ¿Quién será nuestro "aliado"? –

-...Fumm –

Dio una pequeña risa Cecile para responder...

- 10:23 pm –

Ya era muy noche en la ciudad y solo las luces de la zona residencial iluminaban algunas calles.

En una residencia en específico una persona abría la puerta de lo que bien podría decirme su hogar.

- Ya llegue, disculpen mi tardanza. Si no me hubieran dicho que ya cenaron habría llegado más temprano. Pero les traje algo...-

Llego diciendo Shidou con unas bolsas de regalos pero vio que todas dormían en los sillones de la sala. Parece que lo estuvieron esperando pero se quedaron dormidas El peli-azul no pudo evitar dar una sonrisa conmovida por tal escena.

- Perdónenme chicas, tarde en llegar pero mañana se los explicare. –

Dijo susurrando para acercarse lentamente mientras les ponía cobertores y cobijas encima para que el frio no les llegara. No quería arruinar esa paz.

- Descansen –

- Shidou...-

- ¿Huh? –

Shidou escucho una pequeña voz y vio que era Tohka la que lo había nombrado entre sueños.

El chico solo sonrió mientras le acariciaba la cabeza suavemente y parece que eso hizo que Tohka siguiera durmiendo más a gusto.

Las chicas estaban acomodadas de forma peculiar.

Tohka abrazaba su peluche en forma de pan de soya, Yoshino estaba usando el abdomen de Natsumi como almohada mientras que esta última usaba la pierna de Yuzuru como para mantener su cabeza y Kaguya también usaba de almohada el brazo derecho de su hermana para dormir. Mukuro estaba usando su propio cabello como protector del frio.

A pesar de que todas estaban en sofás era casi imposible que se acomodaran en ese orden. ¿Cómo lo hicieron? Sabrá Wescoot con su rey deminio porque Shidou no encontraba respuesta.

Las únicas que no estaban eran Nia, Miku, Origami y Kotori. Se puede comprender de las primeras tres ya que cuentan con un hogar propio al que pueden ir cuando sea y pues Kotori debe estar en su habitación.

Aunque ya es tarde para estar afuera, era temprano para dormir en el caso de las chicas pero, debieron de esforzarse todo el día para no llamar a Shidou todo un rato. Además de que habían esperado y al parecer les gano el sueño sin siquiera notarlo.

- Me sentiría culpable dormir en mi cama viendo que ellas están de esta manera -

Dijo para acto seguido ir a su habitación, ponerse un a pijama y dormir en el piso con todas sus cobijas encima, claro, una debajo de él.

Media noche.

https://youtu.be/UuofG8a7EEk

Un lugar tormentoso, no había a donde correr. Fuego en el cielo como en la tierra, y el oxígeno, un aire con olor desagradable. Si se tuviera que describir ese olor era a amoniaco.

Gritos de desesperación, terror y agonía. Un escenario digno del apocalipsis.

Criaturas volando por todos lados, eran como si salieran de un libro de criaturas mitológicas. Demonios, monstruos o simplemente criaturas infernales estaban en todos lados matando a cualquier ser viviente.

¿Qué era esto? ¿Qué ven mis ojos? Entonces veo algo que nunca creí ver nunca. Un dragón, no, dos, no, tres ¿Qué, cuántos son? ¿Dónde están Tohka y las demás?

- ¡SHIDOU-KUN! ¡¿DONDE ESTAS?! –

Escuche claramente que alguien me llamo, entonces volteo a ver justo en la dirección donde escuche esa voz y me encuentro a una chica llorando a un metro de mí.

¿Quién es ella? ¿Por qué pronuncio mi nombre? Es una chica que estoy seguro que nunca había visto antes. Cabello blanco dando el tono plateado y de una apariencia que bien podría rivalizar con Ellen en cuanto a edad.

No puede verme, es como si yo fuera un fantasma, esto es ¿Un sueño? O ¿Una pesadilla?

- O-oye, ¿Quién eres? –

Le pregunte a esa mujer y me mira con una cara aturdida. Como si estuviera impactada. También quede impactado con eso. ¿Al fin pudo verme?

- S-soy R-ross-ross-we –

- ¿Ross? –

- Isse –

- ¿Qué? ¿Qué está pasando? ¡¿Cómo puedo ayudarte?! –

Estaba desesperado por saberlo, no podía seguir viendo a esa chica llorar, me siento impotente. ¿Quién eres?

- Tenemos...u-na...ci-cita...pen-pendiente –

Me dijo y antes de que pueda decirme algo más con esa sonrisa triste, un asteroide, meteoro o ¡¿Una montaña de fuego cae del cielo?! Es enorme.

Entonces antes de que caiga aplastando y destruyendo todo, ella me dice...

- Adios, tú eras ese chico que...cayo del árbol-

- ¿Eh?

Todo se vuelve color rojo carmesí, y escucho todos los gritos mezclados sufriendo como si algo los quemara.

¡¿Qué demonios es esto?!

- ¡!Ha!! –

Lance un corto grito cuando me doy cuenta que me levante de golpe del piso.

Volteo a ver a todos lados y no veo nada fuera de lo común, que no sea estar durmiendo en el piso.

- ¿Todo fue una pesadilla? –

Continuara...

Gracias por la espera chicos y el motivo es que el Internet no funcionaba. Entonces lo gracioso de todo es que abuchearon al proveedor del Internet en el radio por su falta de puntualidad a la hora de decir que ira reparar las cosas (Casi yo) y después de eso. Apareció justo hoy en mi casa para arreglar el problema. Si que le afecto que hablaran mal de el. Pero yo no lo critico, al fin y al cabo debe tener mucho trabajo, pero no pude evitar reír al verlo después de que una señora hablara mal de el en un medio de comunicación. En fin aquí les traigo el capitulo. Gracias.