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Capítulo 16: Déjà vu incierto - Parte 2

-Kuru... mi...

-S-Shidou-san... me pone feliz... verlo otra vez...

A ver, a ver... hagamos un rápido recuento de todo lo que pasado en estos últimos momentos porque en verdad que las cosas estaban muy... ¿extrañas sería correcto decir?

Sí, eso es lo adecuado.

Para empezar las cosas hasta ahora no estaban sucediendo como deberían pasar y eso de por si era malo, Kurumi ha tenido un extraño comportamiento algunas veces que estuvo con Shidou, ha sospechado de él por todo lo que ha pasado hasta ahora y al parecer vio su ojo izquierdo que era exactamente igual al de ella.

Hasta aquí, todo se volvió complicado. ¿Qué otra cosa podría volver más complicada y extraña la situación actual?

Tal vez la cuestión de que hace solo unos minutos, un "terremoto espacial" se originó aquí mismo "SIN" destruir absolutamente nada de los alrededores y que, contrario a las posibilidades, hiciera aparecer a una chica igual a la que estaba a unos metros de él.

Sin duda que la situación se había complicado... mucho más de lo normal.

-¿Kurumi? Eres... Kurumi ¿cierto? -esta demás decir que aun no se lo creía.

-Sí, soy Kurumi. La Kurumi que usted bien conoce.

-P-Pero... -la vio a ella y rápidamente giro para ver a la persona desmayada en el piso alejado de él, no había duda de lo que veía- Tú eres... pero se supone que estas... ¿Cómo es que...? -dejó de hablar para procesar una idea que se le ocurrió- Acaso...

-¿Shidou-san?

-Acaso... eres... un clon ¿verdad?

A su pregunta, el rostro de la chica cambio a un semblante de depresión y no había que ser un gran genio para identificar eso como un sentimiento de tristeza. Tan solo ver que bajo su mirada y el descenso de la comisura de sus labios... Shidou sabía que algo andaba mal con ella.

-Etto...

-Bueno, podría decirse que... soy un clon... más o menos...

-¿Huh? ¿Qué quieres decir con es...? ¡Espera, espera, espera! ¡Más importante aún! ¡¿Porque apareciste de la nada y porque mediante un terremoto espacial si es que se le puede llamar así?! ¡Se supone que estas ahí! -señaló a donde estaba la otra Kurumi en el piso.

-Es... un poco complicado, la verdad.

-¡¿Por qué es complicado?! ¡Dime lo que está pasando Kurumi! -el grito de Shidou la hizo apretar sus puños, como si no tuviera otra opción más que...

-Ngh... -el gemido de dolor de la chica tirada en el piso de la azotea llamó la atención de Kurumi que su puso en alerta.

-Tengo que irme... -hizo aparecer su típica sombra por debajo de ella del tamaño justo para que solo ella pudiera entrar- Shidou-san... le pido que actúe como si nada hubiera pasado en estos últimos momentos.

-¿Qué? ¡¿Qué estás...?!

-Por favor, le suplico que haga lo que pido. Mi "Yo" de este tiempo no puede saber nada sobre mi, al menos no por ahora. Se lo encargo -poco a poco fue entrando a la sombra, mientras veía a Shidou acercarse a ella rápidamente.

-¡Espera un momento! ¡¿Qué quieres decir con eso?! -se acercó a ella a la vez que veía su cabeza entrar por la sombra con lentitud.

-Lo siento, pero eso es algo que no puede saber aún. Y por cierto... -Shidou puso atención a eso ultimo- Ese ojo izquierdo no le sienta mal.

Y se hundió en la sombra, la cual también desapareció por completo.

No necesitaba ser un genio para entender que se estaba refiriendo al ojo dorado en forma de reloj antiguo completamente visible para cualquiera, por poco y olvidaba ese detalle.

Ver como Kurumi, la que está en el piso, comenzaba a ponerse de pie lentamente hizo que se diera prisa y concentrara su energía espiritual en su ojo para controlar su flujo, y hacerlo parecer su ojo café de siempre.

-Ahh... mi cabeza... -la chica se tambaleaba un poco al erguirse por completo y tenía algún que otro mareo- ¿Que... paso? -con una mano en su ojo izquierdo, enfocó su borrosa vista y vio a Shidou frente a ella a un par de metros de su posición- Shidou-san... ¿Qué fue lo que paso... hace unos momentos?

-Ehh... bueno...

-"...actúe como si nada hubiera pasado... Mi "Yo" de este tiempo no puede saber nada sobre mi... Se lo encargo."

Por alguna razón, eso le hizo replantearse lo que iba a decir a continuación. Originalmente, planeaba decirle lo que había pasado realmente... "Ambos nos desmayamos y cuando desperté, vi a lo que parecía ser un clon tuyo que apareció por terremoto espacial que no destruyo nada y me dijo que no te dijera nada de esto".

Pensándolo mejor, si se repetía esas palabras en su mente, sonaba un tanto ridículo.

También recordar la manera en la que esa Kurumi le había hablado, lo hacía sentir curioso. El aura que la rodeaba no es como la Kurumi que ve hoy en día, su reacción al ver a Shidou era de un estado de emoción.

Como si no lo hubiera visto hace mucho tiempo.

...

Una idea. Solo una pequeña idea, algo loca e imposible de creer, pero una fugaz idea se le vino a la mente que daría una explicación lógica a todo lo sucedido hace unos minutos.

Pero para no quedarse parado como un tonto frente a Kurumi, optó por confiar en lo que le habían dicho antes.

-Bueno... la verdad es que, yo tampoco lo sé con exactitud. Solo ocurrió algo raro... no lo sé, mi mente esta algo borrosa.

-Ara, esta situación es extraña... Olvidar lo que hice recientemente... Por más que trato de recordar lo que pasó, hace que me duela la cabeza -si bien el dolor era como tener migraña, al menos era algo que estaba en el nivel de lo soportable- Pero en fin, no me quiero seguir extendiendo en este asunto tan misterioso y mejor será que volvamos al tema por el que estoy aquí.

De nueva cuenta, un nuevo par de brazos aparecieron por debajo de Shidou atrapando sus piernas y brazos impidiendo moverse, casi perdiendo el equilibrio por la falta de fuerza que tenia su cuerpo aun por lo de antes. En tanto, veía a Kurumi acercarse a él sin ninguna señal de cansancio.

Era eso o estaba obligando a su cuerpo a ignorar todo rastro de debilidad.

-No importa lo que haya sucedido unos minutos atrás, las palabras falsas que Shidou-san me dijo, esa vacía promesa de una vida normal...

-Ya te dije que no eran palabras vacías.

-Ya basta de tanto engaño -se acercó a él para pasar su mano por el rostro del peliazul con afecto, si se le puede llamar así- Ahora, Shidou-san... voy a servirme de su poder.

Justo entonces...


¡SLASH!


La mano que estaba acariciando el rostro de Shidou fue cortada en un abrir y cerrar de ojos donde solamente se alcanzó a ver la mano dando unos cuantos giros en el aire antes de caer al suelo.

Dando un pequeño salto evasivo hacia atrás, Kurumi frunció levemente el ceño al ver que fue interrumpida otra vez, pero al menos ahora sabia con precisión quien había sido la culpable.

-¡Mana! -vio a su hermana de sangre descender desde el aire.

-Lamento la demora, pero confié mucho en la velocidad que utilice para llegar hasta este lugar -vistiendo con una armadura mecánica plateada y hojas de luz en sus manos, habló- En verdad que tienes talento en meterte en problemas Nii-sama.

-"Tiene razón lo que dice" -pensó con una sonrisa nerviosa al escuchar esas palabras.

-(¡... do...! ¡¿... cu... s?!) -escucho estática en su oído y sonidos cortados, le estaban hablando desde Fraxinus- (¡Shi...un! ¡¿... esc... has?!) -ahora con más claridad, identifico la voz de un hombre- (¡Shidou-kun! ¡¿Me escuchas?!)

-Kannazuki, ¿eres tú?

-(¡Bien, recuperamos el contacto! ¡Sea lo haya sido lo de antes, nos cortó la comunicación contigo y Origami-kun!)

-¿Tanto afectó? O-Olvida eso ahora, ¿todo está bien allá arriba?

-(Ya recuperamos contacto, así que deberíamos estar bien. Yo estoy al mando por ahora mientras que la comandante se recupera)

-¿Eh? ¿Kotori está bien?

-(La comandante se sentía con muchos dolores de cabeza y mareos, así que Reine se ofreció para llevarla a la enfermería de la nave y acompañarla hasta que se recupere)

-"Que extraño..."

-¡Sal de ahí, [Zafkiel]!

Un estruendo se generó en el lugar, sacándolo de su conversación, seguido de varios rayos carmesíes dirigidas hacia atrás de Kurumi donde materializaron a un enorme reloj dorado con grandes manecillas, engranajes y números romanos en este.

Ahí estaba, ese era el ángel de Kurumi, ahí estaba [Zafkiel] "Emperador del Tiempo", en todo su esplendor.

Haciendo aparecer su arma de corto cañón, Kurumi murmuró...

-<Dalet>

Desde el número romano que decía "IV", algo parecido a una sombra salió desde este y se dirigió hacia el cañón del arma de Kurumi, a la vez que las manecillas en el ojo de Kurumi comenzaron a avanzar con gran velocidad. Una vez terminado esto se apuntó hacia si misma a la zona de la barbilla y jalo el gatillo que acciono el disparo.

Cosa sorprendente y contradiciendo el sentido de las palabras, la mano que estaba tirada en el piso comenzó a retroceder a gran velocidad hasta adherirse nuevamente al cuerpo de Kurumi como si nada más allá de lo creíble hubiera pasado.

Había sido restaurado a su posición original, e incluso el guante largo que componía el Vestido Astral había sido completamente reparado.

Realmente increíble.

-Una impresionante capacidad regenerativa... -dijo Mana con impresión.

-Eso no es exactamente cierto, lo que hice fue simplemente retroceder mi tiempo -la sonrisa de Kurumi se agrando, haciendo aparecer su segunda arma desde el minutero del gran reloj siendo este un rifle- ¡Bien, vamos a comenzar!

-No queda de otra, solo te matare como siempre lo hago...

-¡Kihi, hihihihihihihihi, ¿aún no lo entiendes?! ¡Jamás serás capaz de matarme realmente!

-Si no puedo hacerlo ahora, entonces lo seguiré una y otra y otra y otra vez. No importa el tiempo que me tome, definitivamente te venceré.

-¡Kihihi, y precisamente es tiempo lo que me sobra a mí! -apuntó el mosquete hacia el número "I" marcado en el gran reloj detrás de ella- ¡<Aleph>!

Una sombra salió y se introdujo en el cañón del arma, lo dirigió hacia su barbilla y al momento de disparar, Kurumi desapareció de donde estaba. Reapareció al lado de Mana, con una sonrisa maniática, sorprendiéndola y no dándole el tiempo para esquivar el disparo del rifle de Kurumi.

Mandándola a volar, rápidamente uso los propulsores de su armadura para lanzarse a atacarla pero nuevamente no pudo esquivar otro ataque de Kurumi que apareció detrás de ella acertándole una fuerte patada en su espalda.

-<Zayin>

Volvió a murmurar, apuntando el mosquete hacia el número "VII", una sombra saliendo de este y se introducía en el cañón del arma, volvió a apuntar hacia Mana y disparó.

-¿Qué clase de p...?

Ni siquiera termino de hablar ya que quedo "congelada" en el aire.

Inmóvil. Todo su cuerpo estaba suspendido en el aire sin poder moverse; su cabello, las alas de su armadura, sus propulsores estaban completamente en movimiento cero.

Pierna, abdomen, pecho, hombro...

Varios disparos se oyeron con fuerza en el área.

Mientras que Kurumi caía con lentitud y elegancia al suelo, no podía decirse lo mismo de Mana.

-¡Gaaaah! -cayendo violentamente boca abajo al suelo, la sangre salía desde los lugares impactados por las balas.

Eso debía doler mucho.

-¡Mana ¿estás bien?! -intentando forcejear para zafarse de los brazos que lo retenían, otros brazos surgieron desde el suelo para aferrarse a sus piernas y manos.

En cierto modo, se sentía bastante incomodo tener tantos brazos rodeando tu cuerpo y haciendo fuerza en retenerte para que no pudieras escapar.

Retomemos las compostura y volvamos a lo actual.

Ver lastimada así a su hermana e intentar liberarse para ayudarla, era normal para él que actuara de esa manera.

No quería verla herida, era doloroso.

-Nii-sama... -puso sus brazos para levantarse con lentitud, fallando en el intento- Sé que te preocupas por mi... pero, descuida. Hazte a un lado y déjame... esto a mí.

-¡¿Qué se supone que estas diciendo idiota?! ¡Déjate de andar jugando a que puedes levantarte de todo! ¡Solo mírate como estas! -mezclando preocupación y enojo, pareció haber afectado un poco a la chica.

-No es como si... hubiera de otra...

-¡Shidou!

Desde la entrada a la azotea, la puerta fue abierta de golpe dejando ver a 2 chicas, una de ella con más signos de cansancio que la otra.

-¡Tohka y... ¿Origami?!

Su voz fue de sorpresa y de intriga por ver a la chica peliblanca llevar puesto una armadura en su cuerpo. ¿Desde cuando tenia uno y quien se lo...?

Esperen un momento, ayer cuando Kotori le dijo que desde hace un par de días atrás ha estado junto a Reine en los tiempos libres y que al final seria una sorpresa para todos...

Entonces ¿se refería a esto?

Como sea, ya tendría una conversación algo seria con ella más tarde, ahora había que enfocarse en lo actual.

-¡Itsuka-kun! ¡Incluso Mana-san está aquí también! -dijo Origami con sorpresa.

-Hermana de Shidou número 2. ¿Qué estás haciendo aquí?

-Yo podría... preguntar lo mismo -mientras decía eso, su puso de pie como pudo- En cambio... ¿qué sucede con... las apariencias de ambas? ¿Por qué llevan eso puesto?

-Creo que no es el mejor momento para discutir eso, Mana-san...

-Ufufu, cierto, cierto. Origami-san tiene toda la razón. Sin embargo, ¿no es algo injusto que una delicada chica como yo se enfrente a todos ustedes? -suspiró- Bueno, eso se puede cambiar en un instantes. ¿No lo creen así... "nosotras"?

Para las demás, esa ultima frase las saco de cuadro al no entender a que se refería Kurumi con eso, pero al notar que desde la gran sombra que se extendía por debajo de ella comenzaban a salir varios de los mismos brazos blancos que retenían a Shidou y comenzaban a salir más y más hasta mostrar a varias chicas que eran exactamente iguales a Kurumi entendieron a que se refería cuando dijo "Nosotras", aunque la expresión de incredulidad en sus rostros tampoco podría ser dejada de lado.

-Fufufu, que interesante puesta en escena.

-Kihihihi ¿vamos a jugar ahora?

-¿Qué piensas de esto?

-Se ven deliciosos.

-¿Qué pasa con esa expresión?

-Kihihi, no me digas que te asuste.

-Esto será divertido.

-¡Ufufufufu!

-Entonces, aquí estamos.

-¿Comenzamos ya?

Una gran cantidad de Kurumis aparecieron en la azotea rodeando al grupo de personas que eran claramente diferentes a todas las iguales habían en ese momento que los veían con sonrisas que te podrían poner los pelos de punta.

Tétrica imagen.

-Impresionante, ¿verdad?. Todas ella son parte de mi. Cada una representa un momento distinto en mi historia personal. Diferentes versiones mías de diferentes puntos temporales de mis memorias -dijo aclarándoles y dejando en claro lo que se venía ahora.

No lo mencionó, pero había menos clones de ellas de lo que esperaba tener. "Bueno, eso que importa ahora" fue lo que se le pasó por la mente restándole importancia a este hecho.

-¿Ahora entiende Mana-san porque nunca podrá derrotarme?

-¡No me jodas con es...! ¡Ahh! -fue cortada porque un clon la pateó con fuerza dejándola de rodillas para así usar su escopeta y ponerla en su cuello para ahogarla- ¡Gaaah!

-¡Mana-sa...!

-Ni siquiera lo intentes -no solo una, varias Kurumis apuntaban hacia Origami con sus pistolas, reteniéndola de ir en su ayuda.

-¡Gya! -otra clon inmovilizó a Tohka por los brazos.

-Ahh, ahh, finalmente estamos libres de cualquier intromisión innecesaria -se acercó bastante a Shidou y eso dio una gran sensación de peligro para Tohka y Origami.

-¡No te...! ¡No te acerques a Shidou, Kurumi... o si no...! -la Kurumi que la apresaba apretó su agarre.

-O si no... ¿que?

-¡Haaaa! -un grito por parte de Origami llamó la atención de todos.

Las Kurumis a su alrededor fueron lanzadas lejos de ella, producto de haber expandido su Territorio Personal de su Unidad CR <Brynhildr>. Una esfera verdosa la rodeaba solo a ella, no pudiendo evitar que Tohka también saliera despedida junto a los clones, aunque al menos eso la dejaba libre del agarre del clon que la retenía e impedía que pudiese moverse. El ser lanzada por el territorio de Origami la había dejado un poco adolorida, pero, incluso, teniendo en cuenta eso, no le fue difícil ponerse de pie con lentitud, evitando hacer alguna fuerza innecesaria.

Origami, que ya había deshecho el Territorio, cayó arrodillada exhausta por haber llegado al limite del tiempo que podía soportar.

-Ya... *jadeo* no puedo más... -al deshacer su Territorio, sintió todas la fuerzas de su cuerpo desvanecerse de ella- Parece que... *jadeo* aún no... no estoy... lista para esto...

-Estuviste genial... Origami... -se acercaba a la chica para ayudarla a ponerse de pie.

-Tohka-san... graci...

¡SHUT!

-¡Kya!

-¡Origami!

El repentino ruido de disparo, el quejido de dolor de la chica y el grito de Shidou, todo eso en tan solo 2 segundos.

-Bueno, no quería hacer esto realmente, pero Origami-san no me dejo de otra alternativa -su brazo extendido con su mosquete en alto y humo saliendo de su cañón, declaró a Kurumi como la culpable.

-Maldición... me descuide... -el disparo le había dado en el brazo izquierdo, en una zona donde, por suerte, estaba protegida por la armadura.

Si bien el traje mecánico (Unidad CR), [Brynhildr], todavía estaba con ella, ocupar nuevamente su territorio personal o desplegar por segunda vez su lanza <Einjerhar>, sería algo imposible de hacer ahora. Su cuerpo ya estaba bastante estresado por ser la primera vez que acciona esta armadura que Reine la había dado, y era obvio que no estaba acostumbrada a ocuparlo por esta misma razón.

Debe darle las gracias a Reine más tarde por haberle dado el traje para esta ocasión. Casi como si hubiese adivinado que algo así pasaría hoy.

Sí, eso debe ser.

-¡Origami ¿estás bien?! -Tohka llegó junto a ella, tirada en el piso y sosteniendo su brazo izquierdo.

-S-Sí, lo estoy... pero, me duele el brazo... -dijo entrecortado, aguantando el dolor.

El disparo no la había herido de gravedad, pero el impacto de la bala sí que le había dejado delicada la zona afectada.

-En serio... que no tienes... una pizca de amabilidad.

-Una dama tiene que ser amable cuando el momento sea el apropiado, Mana-san -Kurumi se acercó a la mencionada y le dio un golpe en el abdomen que le sacó el aire- Pero cuando no es el momento, puede comportarse como se le dé la gana.

Posterior a eso, con el mango de su mosquete le dio un fuerte golpe en la cabeza que la dejó noqueada al instante y tirada en el suelo, muy herida.

-¡Hermana de Shidou!

-Guarde cuidado Tohka-san -le habló a ella mientras que miraba a la chica inconsciente en el piso- Mana-san solo esta... dormida. Solo eso.

-¡Kurumi! -escuchar esa respuesta de la azabache no quitó para nada su enojo.

Y aunque quisiera hacer algo en su contra, no tenia mucho que hacer. Rodeada de clones que se recompusieron del reciente ataque de Origami, vigilando a la misma de cualquier otra cosa que intenten hacer contra ellas y más encima que había desaparecido a [Sandalphon] creyendo que ya no sería necesario y porque tenia que ayudar a Origami a llegar a la azotea porque se sentía cansada.

Desaparecer a [Sandalphon] había sido un grave error y no tenia muchas opciones que pudieran serle útiles ahora.

Hacia manifestar a su ángel y los clones no dudarían en atacarla a ella y Origami.

-Ahora... -se acercó a Shidou quedando a centímetros de su rostro- Por fin podemos estar tranquilos... sin nadie que pueda interrumpirnos -paso su mano por su mejilla con delicadeza, lamiéndose los labios de paso.

Shidou miraba a la Kurumi frente a él de manera neutral pero mezclada con una sensación de impotencia por no poder hacer nada en este momento.

Ahora bien, eso es falso y cierto decirlo de esa forma.

Es falso porque tiene un arsenal de poder para hacer lo que se le venga en gana para así no parecer tan inútil de solo quedarse parado ahí y no hacer absolutamente nada al respecto.

Es cierto por la misma razón por la cual es falsa. Si sacaba a la luz su "verdadero poder", venido completamente de la nada, y que parecía tener el conocimiento total de cada uno de ellos, eso seria bastante sospechoso y, como ya se ha dicho numerosas veces antes, sería muy problemático tener que dar las explicaciones correspondientes que todavía no son el momento de decir.

Aún no era el momento, y sinceramente no sabía cuando lo sería.

Cuando ya pensaba que las cosas estaban siendo distintas, no muy diferente de lo ya usual en su vida, algo sorprendente sucedió.

Una gran onda carmesí apareció desde el cielo directamente hacia el lugar donde Shidou estaba parado. Kurumi logró reaccionar a este ataque notando la peligrosidad que significaba para ella y dio un gran salto lejos desde donde estaba anteriormente. Los clones que estaban alrededor de Tohka y Origami, hicieron la misma acción que su "Yo" original y fueron lo suficientemente rápidas para moverse de donde estaban y evitar así un destino fatal.

El par de chicas quedaron desconcertadas desde donde provino ese ataque, aunque vieron que el ataque también pasó por donde estaba el clon y las manos que retenían a Shidou, quien perdió el equilibrio por el súbito empujón que recibió conllevando a que cayera al suelo.

Por otro lado, Kurumi ya tenía sus niveles de enfado en zona de peligro. Otra vez había sido interrumpida en el momento cúspide de su plan que tanto tiempo ha estado esperando.

La vida solo le ponía obstáculos que le impedía llegar a su meta soñada.

-¡Por un demonio lo que faltaba! ¡Esto debe ser una maldita broma! ¡¿Y ahora que rayos sucede?! -su tono de voz la delataba, no estaba nada contenta.

Para nada.

Vio la zona en la que estaba antes, el ataque que parecía estar dirigida a ella estaba bastante bien apuntado. La zona en donde estaba y donde estaban sus clones rodeando a Tohka y Origami tenían una curvas bastantes estrechas que daban con precisión en cada lugar en donde ella y sus iguales estaban colocadas.

Vaya puntería fue esa.

-¿Preguntas que rayos sucede ahora? Pues la respuesta a eso es muy sencilla realmente.

Una voz externa totalmente desconocida para Kurumi hizo que dirigiera su atención hacia la fuente de emisión del sonido, acto similar hicieron los clones que quedaban en las cercanías y que habían esquivado el ataque anterior.

-"En verdad que olvido cosas importantes en situaciones muy estresantes" -pensó con nerviosismo, en serio que ese tipo de momentos son un fastidio.

Cosas como esas pasan muy seguido y vaya que es molesto que suceda.

Por otra parte, como que ya comenzaba a sentirse calor en el ambiente, y no precisamente por causa del sol.

-Atacas a una preparatoria completa, con todos y cada unos de sus estudiantes, profesores y funcionarios dentro de ella. Y luego vas tú, amenazando y atacando a las personas de mi familia y hieres de muerte a una chica con la cual comenzaba a tener una buena relación comunicativa... Mh, esta malditamente claro que es una excelente razón como para detener tus estúpidas locuras.

Exceptuando a Kurumi, todos conocían a la chica quien era la dueña de esa voz. Una chica vestida con un kimono blanco, un obi negro con líneas amarillas y una cinta rosada por debajo del obi, un cintillo negro con líneas en amarilla alrededor de su cuello y unos notorios cuernos por al lado de su cabeza con unas cintas amarradas en cada cuerno.

(N.A: El obi es el cinturón, si lo prefieren más fácilmente.)

Y como último detalle, había fuego a su alrededor haciendo parecer que estaba dentro de una esfera de fuego.

Llamas rojas intensas que hacían juego con su color de cabello.

-¿Kotori? -la vio descender con lentitud desde el aire.

-Discúlpame Shidou, pero, así como estaban las cosas tenia que intervenir de un modo u otro.

-¿Qué haces aquí?

-No preguntes algo así de estúpido cuando la respuesta es más que obvia -respondió- Por esta vez, tomaré lo que me pertenece... solo por un rato.

Al terminar de hablar, Shidou sintió perfectamente una sensación de escalofríos recorrer por su cuerpo completo. Sensación que coincidió perfectamente con lo dicho por Kotori, exactamente como si la parte que correspondía a su respectivo poder fuera vaciado y llevado hacia su lugar de origen.

Sin embargo, sentía el poder del ángel de Kotori dentro de él, pero al mismo tiempo se sentía diferente a lo que estaba acostumbrado. Algo parecido sintió hace unos 10 minutos y el ver llegar a Tohka con su vestido astral limitado le había aclarado sus dudas.

Aunque no sabe porque se hace esas preguntas, si sentía la misma sensación hace tiempo atrás.

Hace mucho tiempo atrás.

-¡Quema, [Camael]!

De nueva cuenta, el fuego comenzó a arremolinarse hasta hacer aparecer una enorme maza que fue tomada por las manos de Kotori con suma facilidad. Un estruendo se escuchó cuando el arma fue blandida, las llamas también se hicieron sentir con más avivo que antes.

Y si hablamos del arma en sí, esta parecía ser más una alabarda que una misma maza. El mango del arma hasta la parte superior era cubierto por un profundo color negro metálico, la parte superior tenía la típica zona afilada de una alabarda, un punta de lanza y una hoja de hacha negra con el borde en escarlata por ambos lados.

Una magnifica arma perfecta para una batalla, vieras como lo vieras.

-Tch, ¿Por qué tienes que meterte en lo que no te concierne?

-¿Estas sorda o qué? Atacaste a mi familia, así que tengo todo el permiso posible para entrometerme en tus estúpidos planes.

-¿Que acaso no te enseñaron a no meterte en los asuntos de los demás? -su ángel en forma de reloj apareció detrás de ella junto a varias clones de ella desde las sombras- Pero no importa lo que hagas, mi [Zaphkiel] puede hacerle frente a cualquier cosa que se interponga en mi camino, así que no tienes oportunidad contra mí.

-"Con un movimiento de mano podría quitarle su poder si quisiera, me gustaría ver su reacción entonces" -oír a Mio decir eso, lo hizo reír internamente.

-Le tienes bastante confianza a tu ángel por lo que veo, pero esa enorme confianza que le tienes también te va a llevar a tu propia destrucción.

-Ya me canse de oírte ¡Vayan! -gritó en voz alta y todas las clones saltaron hacia la posición de Kotori.

Por lo menos había una notable cantidad de Kurumis dirigirse hacia Kotori, apuntando con sus armas hacia la pelirroja, disparando a diestra y siniestra múltiples balas en su dirección. Por su parte, Kotori ni se inmutaba ante esto y solo mantenía su mirada viendo acercarse al grupo de clones que intentaban atacarla con sus pistolas disparándole en más de una ocasión.

Sin embargo, todos estos ataques eran en vano.

El fuego a su alrededor era muy abrazador, le servía como un escudo que incineraba todos los ataques a larga distancia que iban hacia ella. Algo bastante útil, a decir verdad.

-¡[Camael]! -el grito al aire resonó fuerte y claro en el área al momento en que daba un movimiento de su hacha.

Tras dicho movimiento, un corte poderoso atravesó a los clones que ni tiempo les dio para reaccionar a esto, y en cuestión de un parpadeo fueron convertidas en cenizas que se esfumaron rápidamente al vacío de la nada. Y ni siquiera habían alcanzado a tocar el suelo cuando desaparecieron.

Kotori descendió con lentitud desde el cielo, pisando el suelo de la azotea quedándose por delante de Shidou y enfrente a Kurumi, que tenía una expresión facial de fastidio por como están las cosas.

-Shidou, ve con Tohka y con Nee-san y asegúrate que nada les suceda mientras me hago cargo de esto -dijo sin mirar al mencionado- Sé que tienes preguntas ahora, pero te responderé todo más tarde.

-Claro, lo haré, pero ¿estarás bi...?

-Te dije que yo me encargo de esto. ¡Ve con ellas de una buena vez! -terminó de hablar y saltó hacia Kurumi agitando su hacha.

Esa subida de voz en esa ultima oración le llamo un poco la atención. O sea, sabe bastante bien que Kotori suele hablar con un poco de dureza cuando hay una situación compleja y en los momentos que son necesarios, y en cosas que llegan a ser muy tensas es también cuando suele tomar rápidas decisiones que resultan ser las más acertadas y correctas.

Ahora que lo pone de esa manera, tal vez no sea nada y este tomando ideas a lo apresurado por creer que algo andaba mal con Kotori. Porque, a fin de cuentas, solo le pedía que no se metiera en esto y que fuera a resguardar a Tohka y Origami para evitar que algo les ocurra en el medio de todo.

Mientras tanto, por otra lado...

-¡Kihi, no es bueno que Shidou-san salga de esto aún! ¡Todavía no hemos terminado con lo que estábamos haciendo! -habló Kurumi mientras evitaba los ataques que Kotori intentaba acertarle.

-Vete olvidándote de eso porque no harás nada de eso mientras yo estoy aquí -respondió.

Otro movimiento de su hacha que no logró llegar con su objetivo pero aun así dio contra el piso que originó una pequeña explosión de fuego.

Kurumi había dado un salto hacia atrás para evitar esto, cuando llegó a una distancia adecuada, se quedó viendo a su enemiga para tratar de ver lo que podía hacer contra ella, aunque de todos modos no tuvo que pensar mucho para eso.

-¿Que? ¿Te quedaste estática al darte cuenta que mi [Camael] es más poderoso que tú ángel?

-Claro que no, solo pensaba en que solo debo eliminarte para ir con Shidou-san, y debo decir que eso será muy sencillo de hacer.

-Veo que aun no entiendes que no dejare que hagas lo que te plazca -su llamas tomaron más fuerza que antes cuando dijo eso.

-Por lo que veo, pareces tener un buen control sobre tu ángel. Pero... -el reloj gigante de [Zaphkiel] apareció por detrás de ella- ¡Mi experiencia de mi ángel es mucho mayor que el tuyo!

-Ja, ya quisieras estar en lo cierto.

-¡Por supuesto que estoy en lo correcto! ¡[Zaphkiel]! ¡<Aleph>!

Al siguiente momento, Kurumi desapareció de la vista de Kotori y los demás. Un leve gruñido salió de los labios de Kotori en señal de molestia.

Mientras Shidou veía el enfrentamiento desde una zona alejada y segura con Tohka y Origami a su lado, escuchaba los pequeños gemidos de dolor de la chica, donde en un rápido vistazo vio como removía la parte de la armadura donde el disparo anterior le había dado.

Cuando la sacó, esta estaba agrietada casi por completo, mientras que la zona del brazo del impacto estaba de una coloración rojiza.

Parecía estar en un estado nada grave, lo cual era bueno, pero aun así había dejado un pequeño raspón en la hermosa piel nívea de la chica.

-¿Te duele mucho Origami?

-No mucho Itsuka-kun, solo me duele cuando trato de mover o tocar el hombro. Aunque por otro lado... -giró su vista hacia Kotori, retrocediendo ante los constantes golpes de Kurumi- Por fin puedo ver cómo es Kotori-chan en su forma de espíritu.

-¿Así que también lo sabias?

-Sí, Kotori-chan me lo dijo ella misma la primera vez que me llevo al Fraxinus.

-Flashback-

-Por favor Yoshino, colócate en esa plataforma y quédate quieta hasta que hayamos terminado -habló Reine.

-H-Hai -respondió algo nerviosa.

-Tranquila, esto no va a doler nada, confía a mi -le dio una sonrisa para calmarla.

Al instante después de apretar unos botones en el panel de la computador que tenia frente a ella, 2 brazos robóticos con una mano circular aparecieron desde el piso y se posicionaron en ambos lados, por arriba de Yoshino.

-¿Que son esas cosas Kotori-chan? -pregunto Origami a la chica a su lado.

-Para ponerlo de forma simple, los brazos emiten una luz que se asemeja a los rayos X para ver a través del cuerpo de Yoshino y asegurarnos que su poder espiritual ha quedado sellado por completo y revisar que su cuerpo este en perfectas condiciones y sin ninguna anomalía restante en ella -explicó.

-Oh, ya veo. Parece bastante simple de utilizar -Origami veía bajar lentamente los brazos por alrededor de Yoshino, emitiendo una luz azul que rodeaba todo su cuerpo.

Se acercó a Reine para observar el monitoreo en la pantalla de la computadora y, efectivamente, como decía Kotori, había una gran cantidad de letras y números señalando la estabilidad de Yoshino al lado de una silueta que iba generándose a partir de la silueta real de la chica peliceleste.

Actualmente los números mostrados en porcentajes iban ascendiendo a un ritmo normal, suponiendo que el tope a alcanzar era del 100%.

-Tienen varios aspectos que ver cuando hacen este monitoreo ¿verdad? -preguntó con curiosidad al ver los estados a un lado de la pantalla.

Estado mental, estado anímico, estado corporal interno, estado corporal externo, estado espiritual, entre otros estados más ligados a los niveles biológicos comunes en una persona normal, ya sea nivel sanguíneo, nivel cardiaco y demás tipo de cosas relacionadas.

-Así es, tenemos que asegurarnos que todo vaya bien antes dar los resultados, hacer el papeleo de identificación correspondiente y la posterior ubicación en el edificio al lado de la residencia Itsuka como residente de este, exactamente igual que Tohka.

-Ya veo.

-Ya viste lo fácil que es manejar esto y el proceso para hacer el análisis a un espíritu -Kotori detuvo sus palabras y se puso a pensar bien lo que diría a continuación.

Sabía desde hace tiempo que el tema que tenia en mente era algo complicado de tratar y que no muchas personas sabían acerca de esto.

Tenía la duda de si Shidou ya conocía esto por lo sucedido hace 5 años y solo hizo las conexiones por todo lo reciente que ha vivido.

O tal vez había olvidado ese incidente y ya no recordaba nada de esto. Porque, después de todo, tantas cosas que suceden en ese periodo de tiempo hacen que sea bastante factible que pueda olvidarse.

Durante 5 años son tantas las cosas que pueden suceder que recordar un detalle especifico es muy difícil de lograr, y mientras aquel periodo sea más prolongado, más difícil será recordar aquel detalle.

Y tras pensar y pensar, Kotori se decidió a contarle acerca de todo sin nada de rodeos.

-Por eso mismo, de vez en cuando yo también lo utilizo en mi misma para analizar mi propio poder -habló.

-¿Qué? ¿En ti misma? -Origami creyó haber escuchado mal lo dicho por Kotori, pero viendo con la seriedad con la que hablaba, entendió que lo había oído perfectamente- Entonces, eso quiere decir que...

-Yo también soy un espíritu.

-Kotori-chan...

-Te prometí que ya no habría secretos entre nosotras ¿verdad?. Así que también quiero que sepas esa parte de mí.

Con un sonido agudo que duró algunos segundos, el análisis de Yoshino finalizó, sin ninguna anomalía presente en su cuerpo.

-Fin de Flashback-

-Luego de eso, Kotori-chan me explico que el incendio de hace 5 años fue provocado por ella cuando recibió sus poderes espirituales de un ser sin nombre. También dijo que todos en Ratatoskr sabían sobre su condición de espíritu y supuso que eso había influido en su inclusión en la organización y en su poder como comandante de Fraxinus -explico Origami recordando esa conversación hace ya un tiempo atrás.

-Ya veo, Kotori te explico de su condición de espíritu ella misma -dijo Shidou.

-Así es, pero me llama la atención de que te tomes a ligera cuando Kotori-chan apareció así -a lo lejos, vio que seguía intercambiando ataques con Kurumi.

-Bueno... a decir verdad, ya sabia sobre esto. Quiero decir, recordar lo de hace 5 años y unirlo a todo lo que he vivido últimamente, debo decir que me sorprendió bastante cuando lo descubrí -dijo, mintiendo acerca de cómo lo descubrió.

-Es curioso, Kotori-chan había dicho que era una posibilidad que supieras sobre eso -dijo con una ligera risa.

-Bueno, supongo que acertó en eso.

-Supongo que sí.

Un pequeño ambiente se había generado entre ellos dos que estaba totalmente sacado de contexto, dada la situación que estaba ocurriendo ahora.

Tohka, que estaba justo al lado de ellos, miró todo eso y se sintió excluida de esa conversación, añadiendo el detalle que era la única que no sabía lo de Kotori.

-Mun... no es justo. ¿Por qué yo era la única que no sabía lo de Kotori?

-Bueno, si de algo ayuda, tenia mis dudas si lo que pensaba era cierto, pero solo ver lo de ahora me hace confirmar lo que creía.

Todos pasaron a ver hacia Kotori y Kurumi que seguían en lo suyo, la pelinegra disparando de vez en cuando y atacando constantemente a la pelirroja quien bloqueaba cada ataque que recibía.

Ya cansada de estar en modo defensiva, paso a dar un enorme hachazo descendente que soltó una explosión de fuego e hizo saltar a Kurumi hacia atrás, evitando recibir daño que ya no merecía la pena.

-Dices que eres muy refinada, pero actúas igual que una cerda negra -dijo Kotori con asco en su voz.

-Sus palabras en verdad que me duelen, pero si tanto quiere verme actuar con fineza, se lo demostrare con elegancia para su gusto -respondió al insulto de Kotori sin verse afectada por sus palabras.

Nuevamente, [Zaphkiel] apareció detrás de ella y con sus armas apunto indicando hacia el número "VII".

-¡[Zaphkiel]! ¡<Zayin>!

Igual que antes, una sombra salió desde el número y entró en el cañón del arma. Kurumi apuntó hacia Kotori y disparo un par de veces hacia la susodicha.

Ella ante esto, desvió el primer disparo de Kurumi con dificultad, pero no pudo hacer lo mismo con el segundo disparo y le dio de lleno en su cuerpo.

Al igual que antes con Mana, Kotori quedó paralizada en donde estaba.

Su vestido astral, cabello, incluso el fuego, quedaron completamente detenidos, preocupando en enormes cantidades a las chicas y a Shidou.

-¡Fufu... hahaha...! ¡De nada sirves si no puedes mover un musculo! Tienes buena fuerza y poder, pero ahora no sirve para nada.

Justo desde el suelo, alrededor de una congelada Kotori, las sombras se extendieron y más clones de Kurumi aparecieron en ascenso. Entonces, cada una de ellas levanto su arma en dirección a Kotori y comenzaron a dispararle.

Cada parte de su cuerpo recibió múltiples disparos sin cesar. Origami estaba sumamente alterada y ya estaba que rompía a llorar por la imagen que estaba viendo.

Después de varios disparos, el ataque se detuvo y la Kurumi original se acercaba a paso lento hacia Kotori.

-Te le había dicho ¿no es así? -levanto su pistola apuntando hacia la frente y puso su dedo en el gatillo del arma- Te dije que mi experiencia con mi ángel era mucho mayor a la tuya.

Y disparó.

-¡Kotori-chan! ¡Kotori-chan! -Origami veía a la chica tirada en el piso con sangre saliendo de sus heridas.

Quería ir hacia allá y estar a su lado para intentar hacer algo para que se mueva y no de la sensación de que ella este...

No, no quiere pensar en eso. Aunque el dolor de su hombro era solo eso, se puso de pie tan rápido como sus piernas le permitieron, y estaba lista para ir corriendo y estar a su lado cuando, para sorpresa de ella y de Tohka, la mano de Shidou la tomó de su brazo impidiéndole realizar su cometido.

¿Por qué hacia algo como eso?

-¿Shidou?

-¡¿Qué estás haciendo Itsuka-kun?! ¡¿Porque me detienes?! -dijo alterada, muy alterada.

-Tienes que calmarte, Kotori va a estar bien...

-¡¿Cómo me dices que me calme?! ¡¿No ves lo que acaba de pasar?! -Origami se zafó del agarre y encaro a Shidou- ¡¿Siquiera estas preocupada por ella?!

-Claro que lo estoy, pero tienes que confiar en mi -la chica lo miró con gran duda- Si estoy en lo correcto, Kotori va a estar bien en unos segundos.

-¿De que estás hablando? -Origami no parecía estar convencida de sus palabras aún.

-¿Que tanto hablan por allá? -Kurumi habló desde la distancia.

-No es nada, solo estábamos discutiendo acerca de Kotori -respondió Shidou.

-Kihi... ¿qué pasa con eso? Yo fui la que ganó y ella fue la que perdió aquí pagando con su muerte ¿qué acaso no quedó claro? -habló con sarcasmo.

Origami agrando sus ojos con terror cuando menciono que estaba muerta, pero no quería creer eso.

No podía creerlo.

-Ella está ahí, tirada en el piso, muerta, fin de la historia. No es como si se levantara entre los muertos y venga a cobrar venganza -cuando pensó en eso, encontró eso tan imposible que le pareció divertido- ¡Fufufuhahahaha... es absurdo! ¿Qué tan ridículo podría ser eso?

-Bueno, no me lo creerías si te lo dijera -dijo Shidou.

Como para cortar su risa, Kurumi no vio esto de buena manera.

Origami y Tohka no entendieron a lo que se refería con eso... ¿qué es lo que trataba de decir con esas palabras?

-¿Que trata de decir con eso Shidou-san? Ella esta muerta, fin de su camino.

-Ahí... es justo donde te equivocas.

-¿Eh?

Cuando Kurumi giro su vista hacia Kotori vio fon sorpresa cuando un fuego de múltiples colores estaba en cada zona en la que había disparado. Y tras eso, Kotori usó sus talones para tomar impulso y quedar de pie frente a frente a la pelinegra con una sonrisa burlesca.

-Te dije que no tendrías que preocuparte, Origami.

-Kotori-chan se recuperó con ese fuego que había en sus heridas... pero entonces ese día...

-Sí, el día que nos reunimos con Yoshino en la zona comercial, cuando me hice la herida en la pierna, viste el mismo fuego sanando mi herida.

-Así que era por eso, supongo que debí confiar más en ti Itsuka-kun -habló en tono de disculpa, pero a su mente le vino una intrigante pregunta- Pero, ¿cómo es que tienes el mismo poder que Kotori-chan si no has sellado su poder?

-¡Geh!

Ese detalle había sido por completo ignorado por Shidou.

Y como no era un buen momento, no se le ocurrió que responder ante esto.

-B-Bueno, es algo.. complicado de explicar -el que estuviera rascándose la mejilla más el tono de nerviosismo que acaba de hacer no le cayó en gracia a las chicas.

-¿Porque es complicado de explicar?

-Si... ¿por qué es complicado?

La mirada inquisitiva que le daban Origami y Tohka, más la presión que emitían con sus ojos puestos en él, lo incomodaban mucho y hacía que una corriente eléctrica de puro nerviosismo recorriera todo su cuerpo desde la cabeza a los pies.

Y además, como ya se dijo antes, la situación en la que estaban no era la más adecuada para discutir este tipo de cosas.

-¡<Aleph>!

El sonido de varios disparos atrajo su atención y vieron a los clones de Kurumi desaparecer de los alrededores de Kotori.

Ya habían oído ese nombre antes desde los labios de Kurumi y según recordaban, ese poder le daba mas velocidad a la chica cuando la vieron usarla contra Mana.

Kotori tuvo que esquivar los ataques de 3 clones de Kurumi que vinieron desde el suelo. Claramente el salto que dio para esquivar resultó, pero no vio venir el ataque de otras clones que aparecieron desde atrás del lugar al que había llegado tras el salto.

Las clones habían puesto sus brazos en Kotori y la había obligado a arrodillarse mientras sentía que más clones se tiraban sobre ella, lo cual ya le estaban hartando.

-¡Desgárralas, [Camael]! -nombrando a su ángel, generó una explosión de fuego en ella, lanzando a las clones lejos de ella e incinerándolas de paso.

Aunque Kurumi estaba a una distancia prudente de Kotori, la explosión de [Camael] sí pudo llegar hasta donde ella. Soltó un pequeño gemido de dolor cuando en toda la parte superior de su cuerpo heridas pequeñas aparecieron en ella.

-¡Maldita mocosa!

Con enojo claro, invocó una vez más a su ángel, apuntó hacia el número "IV", <Dalet>, y disparó a su sien, haciendo que sus heridas desaparecieron de ella, como si nunca hubieran estado ahí.

-Entonces... ¿ya te cansaste? La verdad esperabas que duraras un poco más dado el poder que tanto presumías. Eres decepcionante - soltando un suspiro en desilusión, Kotori se echó el hacha al hombro.

Estaba burlándose de ella, claro que sí. Y eso Kurumi lo notó en su tono de voz.

No iba a permitir que sea tratada de ese modo.

-Te vas... a arrepentir de tus palabras ¡Maldita enana! ¡¡¡[ZAAAAAAAAAAAAAAAAAAPHKIEL]!!!

Un grito enorme y muy desgarrador salió desde las cuerdas vocales de Kurumi, soltando el gran enojo que había en ella. Kotori, al ver eso, dio una pequeña sonrisa.

-Je, me hubiera aburrido si eso era todo lo que podías dar. Entonces, ¡sigamos con nuestr...!

¡¡¡GIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIINK!!!

-Khu... ghiiii... que... d-duele...

Totalmente de la nada, Kotori se desplomó en el suelo y dejo caer su hacha de su mano, sosteniendo su cabeza con firmeza tratando de calmar su dolor. Tanto parecía ser este que incluso las llamas que había a su alrededor desaparecieron.

Ante tal escena, dos personas en específico tenían un mal presentimiento creciendo en ellos junto a una muy mala sensación.

Shidou y Mio sentían que algo no iba bien con Kotori, sobre todo Mio, quien, cuando Kotori estaba en Fraxinus, sintió algo turbio en la mente de Kotori. Al principio creía que era por lo que Kurumi había hecho en Raizen, lo que explicaba su forma de actuar. Pero ahora que presencia esto, es obvio admitir que estaba equivocada.

Shidou, por su lado, no podía ver esto sin afirmar que algo no andaba del todo bien con su pequeña hermana. Y sin explicación alguna, un pequeño ardor comenzó a formarse en su mano derecha.

-Fufuhaha... ¡Ahahahahahahahahahahahahaha! ¡Parece ser que la situación finalmente está a mi favor! ¡Este va a ser tu final! -burlándose de la pelirroja, Kurumi apuntó hacia Kotori con clara intención de acabar con esto de una buena vez.

Instantáneamente, Shidou escapó de su espasmo de sorpresa.

-¡Kotori! -fue hacia a ella con la intención de ayudarla- ¡Oye Kotori ¿te sientes bien?! ¡Dime algo!

Por alguna razón, su preocupación era alta. Tan alta como la primera vez que paso esto, pues ahora todo parecía tan diferente pero tan igual que aquella vez.

Al momento de tocar su hombro, ella reaccionó con un pequeño sobresalto.

-Kotori...

-No...

-¿Eh?

Efectivamente, algo se sentía... muy mal.

-(¡Shidou, sal de ahí!) -escuchar a Mio gritarle por el auricular lo alertó.

Pero aunque fue así, no pudo reaccionar a tiempo.

-No... me toques...  bastardo...

En ese momento, las llamas de Kotori reaparecieron de golpe y con brusquedad en ella. Shidou recibió por completo esta explosión que lo terminó lanzando con violencia hacia atrás y de paso ganarse unas cuantas quemaduras en sus brazos y rostro.

-¡Shidou!

-¡Itsuka-kun!

Tirado en el piso mirando hacia arriba, todavía estaba procesando lo que pasó hace solo un momento.

Salió de su sorpresa cuando Tohka y Origami llegaron con él.

-¡Shidou, ¿estás bien?!

-E-Eh... sí, sí, estoy... bien...

-Menos mal, parece que tus heridas no se ven tan mal. Pero la actitud de Kotori-chan... ¿qué paso tan de repente?

-Yo... yo no...

-¡<Meggido>!

Las llamas de Kotori se arremolinaron furiosamente en el hacha en sus manos. El doble filo del hacha desapareció y el arma en su punto más alto se comenzó a expandir que acomodó toda el arma hasta alcanzar la forma de un cañón, así mismo, el mango retrocedió y cubrió la mano de Kotori, donde sus llamas comenzaron a alimentar al cañón que fue apuntado hacia Kurumi.

Un sentimiento de miedo invadió a Kurumi por ver a semejante arma apuntándole y dispuesta a disparar con todo lo que tenía.

-¡Protéjanme, mis otras! -gritó en desesperación.

Algo inusual en ella.

Varias clones salieron del suelo cercano o se acercaron con rapidez para proteger a su "Yo" original del gran ataque que estaba por desatarse.

-¡Vuélvelas cenizas!

Y finalmente se disparó.

El sonido producido era casi idéntico al de una erupción volcánica. El disparo fue una enorme y ardiente corriente de llamas comprimidas que todo a su paso se ardía intensamente.

La sensación del ambiente era calurosa, la longitud del disparo se extendió más allá de la escuela y todo a su alrededor, por un instante, se tiño de un fuerte tono rojizo.

Shidou, Tohka y Origami cubrieron su vista por el enorme resplandor que soltó el disparo del cañón <Meggido> de Kotori. Sobra decir que el ruido provocado por este también fue ensordecedor y no fueron capaces de evitar quedar un poco aturdidos por el enorme sonido que provocó el arma.

Cuando pudieron ver con claridad, el ataque del cañón parecía haber cesado y pusieron su mirada en lo que era el objetivo de esta.

Se sorprendieron cuando vieron a una sola Kurumi, arrodillada en el piso con un aura de derrota sobre ella. Y si hablamos sobre su ángel, [Zaphkiel], este no estaba en sus mejores condiciones. Donde deberían estar los números romanos del "I" al "III", ahora no había más que un espacio vacío en este.

No quedaba más.

[Zaphkiel] estaba severamente dañado, las clones de Kurumi parecía haberse vuelto cenizas con el ataque, y la propia Kurumi estaba de rodillas con la cabeza gacha, soltando varios jadeos de cansancio.

Da igual de la forma en que lo vieras, Kurumi ya no era capaz de continuar esta lucha.

Pero alguien aquí, no comparte ese pensamiento.

-¿Quién te dijo que podías descansar? -la voz de Kotori sonaba despectiva- Levanta tus armas y continuemos con nuestra batalla.

-...

Kurumi no decía ni hacia nada para tratar de responderle.

-¡Kotori-chan! ¡Ya detente! ¡Kurumi-san ya no puede seguir con esto!

-Solo eres una inútil incapaz de seguir con lo que tu misma iniciaste. Si no eres capaz de seguir, deberías morir. Si eres débil de mente, entonces deberías morir. Los débiles no fueron hechos para vivir en este mundo. Solo deberías morir.

Origami fue totalmente ignorada por Kotori, quien miraba a Kurumi de manera depredadora. Kotori estaba en un modo en el que no se detendría hasta acabar definitivamente con su objetivo.

Lo siguiente que hizo fue cargar nuevamente el cañón <Meggido> con el fuego que giraba a su alrededor.

Origami fue hacia ella para hablarle más de cerca para intentar hacerla entrar en razón, pero el fuego era demasiado intenso como para acercársele, por lo que no pudo hacer otra cosa que retroceder unos pasos.

-Tenemos que hacer algo -poniéndose de pie, Shidou le habló a Tohka- Tenemos que ayudar a Origami a detener a Kotori, esto se salió de control.

-Pero, ¿está bien que ayudemos a Kurumi después de lo que ha hecho?

-Entiendo lo que dices, pero aunque lo haya hecho, no podemos dejar que esto se vaya más allá de nuestras manos. Por favor, Tohka...

-Mh...

Poniendo su mirada hacia la peliblanca, vieron que caminaba para interponerse entre Kurumi y el cañón.

Shidou sintió que era él quien debería estar en su posición y no ella.

-Ya fue suficiente, no voy a dejar que sigas con esto Kotori-chan -se puso en medio de ambas, a fin de proteger a Kurumi.

-¿Origami...-san?

-Tranquila Kurumi, deja que nos encarguemos de esto ahora.

-¿Shidou...-san?

-No confundas las cosas, aun sigo sin confiar en ti, pero voy a ayudar a Shidou y Origami en esto.

-¿Y Tohka-san...? -había levantado su rostro y miró que Shidou y Origami se ponían frente a ella de forma protectora y Tohka llegaba a su lado- ¿Por qué...?

-Kotori, tienes que detenerte ahora mismo, estas yendo muy lejos con esto. Si sigues como ahora, todos nosotros saldremos muy lastimados ¿lo sabes, cierto? ¿No se supone que el significado de que hagamos todo esto es para evitar la opción de atacar a muerte a los espíritus? ¿No es verdad que en Ratatoskr protegemos a los espíritus para otorgarle una vida completamente tranquila? -la mencionada no dijo nada y siguió cargando fuego a su cañón- Kotori, yo sigo creyendo firmemente en esto, no dejare que ningún espíritu salga lastimado en la misión que Ratatoskr nos impuso. Eso también te incluye a ti Kotori.

Por primera vez en todo este rato, la expresión facial tuvo un ligero cambio y el fuego circundante bajo su intensidad.

Shidou comenzó a acercarse a Kotori.

-No tienes que hacer esto Kotori, si hay algo que quieras decir o algo que quieras hacer, solo tienes que decírnoslo ¿bien?

Moviéndose por el espacio de Kotori, con lentitud camino para ubicarse en la misma posición que antes se había puesto. Ya a su lado, continúo hablando.

-Vamos, Kotori. Termina con esto de una vez -dijo con la voz más tranquilizante que pudo articular.

-T-Tienes... razón... -habló Kotori con calma.

Perdiendo toda preocupación, Shidou acerco su mano hacia Kotori para tratar de darle un abrazo.

-¿Ves? Eso es todo lo que...

O al menos esa era la intención.

-¡...! -una corriente eléctrica horriblemente dolorosa nació en su mano derecha que se extendió por todo su brazo le sacó un gemido de dolor y lo hizo retroceder.

¿Qué acaba de pasar? ¿De dónde vino eso? Sabia que era grave porque el dolor no cesaba, y de verdad que ya comenzaba a arderle.

Esto era malo.

Pero, la cosa aquí es...

¿Por qué esto era malo?

-Tienes razón... -puso su atención en Kotori- Tienes mucha razón... hay que terminar con esto.

-¡Kotori!

En vez de hacer algo para acercarse, retrocedió más ya que el calor se intensificó a niveles explosivos. Era mucho más que antes, llegando a ser insoportable para él. Y ese dolor en su mano tampoco era de mucha ayuda.

El cañón estaba en su momento clímax de poder acumulado, era muy seguro que al ser disparado dejaría una gran senda de destrucción.

Origami seguía en su lugar frente al poderoso cañón, todavía con la creencia de que Kotori se arrepentiría de disparar.

Tohka estaba detrás de ella y ya comenzaba a inquietarse por lo que estaba presenciando y ver a Shidou retroceder, sosteniendo su mano con aparente dolor, le dio un mal augurio.

Kurumi, por su parte, trataba de hallar el mejor momento para escapar de ahí sin ser vista por nadie presente ahí. Pero incluso si esa era su plan, no evitaba pensar que la situación que veía frente a ella era algo descontrolado y fuera de su entendimiento.

-¡Cualquiera que se meta en mi camino... solo debería morir!

-¡Detente Kotori!

El enorme rugido del cañón se hizo escuchar al momento de efectuar el disparo.

Shidou veía en cámara lenta el avance del disparo desde el cañón <Meggido>, yendo directamente hacia el grupo de chicas.

Casi por instinto puro, e ignorando toda sensación de dolor en su mano, fue tan rápido como su cuerpo pudo responderle y así evitar una tragedia.

Entonces...

Un destello dorado.

 ¡¡¡BOOOOOOOOM!!! 

El impacto había originado una abundante cantidad de humo, y es que era de esperar viniendo de tal disparo. Y si existía algo que hubiera resistido a la magnitud de semejante ataque... pues, a ciencia cierta, era muy difícil saber una respuesta para eso.

Desde la nave Fraxinus, habían visto cada detalle de lo que pasaba en la azotea de la preparatoria Raizen por la pantalla principal, quedando en completo asombro con respecto a los últimos acontecimientos sucedidos.

Nadie decía nada porque no sabían que decir frente a lo que veían en vivo y directo el desastre que se había provocado en tan solo unos pocos minutos.

¿Asombrados? Claro que sí.

¿Sin palabras? Obviamente.

¿Mantención de la compostura? Diablos, ni siquiera entendían como estaban tan calmados viendo semejante obra de destrucción

Mio estaba inquieta ante todo esto. Sentía perfectamente que Shidou y los demás se encontraban bien, aunque el humo aún no se haya disipado totalmente. Sintió también que Kurumi ya se había escapado de ahí, pero le resto total importancia a eso.

Se sentía inquieta por el hecho de que puede hacer algo al respecto para ayudar, pero algo le impide actuar para intentar aportar en la situación. Ya sintió algo como eso en el pasado y vaya que no terminó de la mejor manera... y es debido a eso, junto a Shidou, que está metida en esto.

Sabía que desde ahora tendría que estar atenta a cualquier alteración en la estabilidad mental de Kotori, tanto como miembro de Ratatoskr como creadora de los cristales Sephira. Y en cuanto tenga la oportunidad, saltaría a escena para poder hacer algo para cambiar el rumbo de lo que este pasando, con tal de no cometer más errores de los que se pueda arrepentir en un futuro.

Volviendo a la situación que nos importa...

El humo comenzaba a desvanecerse del monstruoso ataque que <Meggido> había realizado, y la imagen residual de la zona en donde el grupo de Shidou estaba era para quedarse estupefacto.

Pero fuera de esto ¿había algo bueno?

Pues, sorprendentemente lo había, y ese era el cuestión de que una desmayada Mana había salido completamente indemne de todo lo sucedido recientemente, pues estaba a una importante distancia desde todo lo ocurrido.

Bien por ella.

Y si se están preguntando... ¿Cómo salieron parados Shidou y las chicas?

La respuesta viene a continuación.

Una vez el humo se desvaneció por completo, un brillo blanco comenzó a aparecer junto a varios cristales azules a su alrededor.

Desde atrás de todo esto, el rostro de Tohka era digno de retratar puesto que no sabia como definir su estado actual de impresión. Origami no se quedaba atrás, su piernas estaban temblando a más no poder que la llevo finalmente a derrumbarse y caer sentada al piso.

Y Shidou, completamente inmóvil de espaldas a las chicas con sus dos manos sosteniendo una espada increíblemente familiar con escarcha surgiendo desde el lugar en el que estaba parado hasta formar una pared de hielo delante suyo y unos pilares blanco puro con detalles dorados.

-Las dos...

-¿Shi... dou...?

-Las dos... ¿están bien?

-Itsuka... -kun... estas...

Las dos creyeron ver mal, había algo raro en Shidou cuando lo vieron voltear su mirada hacia ellas. Lo que, sin duda, les llamó la atención fue su mirada.

Sus ojos no tenían los habituales colores marrones, ahora tenían una tonalidad dorada.

¿Qué le había ocurrido a sus ojos?

El piso de la azotea a ambos lados estaba hundido y despedazado, el misma caso era el de las vallas de seguridad de atrás de ellos, aunque solo el pedazo en el que estaban se había salvado, el metal cortado y chamuscado de la barandilla era prueba de ello.

Los 3 parecían estar bien, Shidou dio un suspiro de satisfacción a eso.

Había usado a [Raphael] para llegar hasta acá rápidamente y no se fijó en que ángel más usó para bloquear el monstruoso ataque de fuego de <Meggido>. Luego se dio cuenta de que, por inconsciencia, había utilizado a [Sandalphon], [Zadkiel] y [Metatron].

Tendría que explicar algunas más tarde, pero eso ahora era lo de menos.

Deshaciendo el hielo de [Zadkiel] y haciendo desaparecer los pilares de [Metatron], tuvo que sostenerse en la espada para no caer al suelo por la fatiga que hay acumulada en su cuerpo.

Un dolor proveniente de la nada misma, la repentina utilización de 4 ángeles, la repentina aparición de "Kurumi" a partir de un terremoto espacial, si es que así se le puede llamar... el cansancio le estaba pasando la cuenta ya.

-Haa... haa... haa... -respirando con cierta dificultad, un fuerte ruido le llamó la atención.

Poniendo su mirada en Kotori, que estaba casi en iguales condiciones que él, había dejado caer a <Meggido> que, al contacto del suelo, desapareció en varias chispas de fuego. Estaba agachada, presionando sus manos en su pecho como si este le doliera y respiraba en repetidas ocasiones con clara dificultad.

-Kotori... -el peliazul lentamente logró ponerse de pie, a pesar de la fátiga que recorría su cuerpo.

La mencionada levantó la mirada hacia un Shidou que a paso lento se dirigía hacia ella, solamente para darle un rápido vistazo a lo que ella hizo.

¿Qué es lo que había hecho? En verdad que no lo sabia, no recordaba a ciencia cierta las acciones que había cometido mientras estaba en una especie de... trance inconsciente... que ella misma desconocía.

-Onii... -chan... -dicho eso, se desplomo en el piso en desmayo.

Y de inmediato su vestido astral se desvaneció hasta dejarla con el uniforme de comandante del Fraxinus puesto.

-¡Kotor...!

El dolor en su mano volvió de repente con pulsaciones horribles, volviéndolo a dejar arrodillado sosteniéndose como pudo de [Sandalphon] para no caer de cara al suelo y posiblemente desmayarse también.

Entonces sintió a alguien acercarse a él.

Ya se daba una idea de quien era.

-¡Itsuka-kun, ¿estás bien?!

-Estoy bien, estoy bien... mejor ve a ver Kotori que es lo que importa ahora Origami.

-¿Estás seguro que estas bien?

-Sí, sí, estoy bien... ve con Kotori rápido.

-De acuerdo.

Y así dicho, Origami se apresuró en llegar hacia Kotori que yacía tirada en el suelo, y al llegar pudo confirmar que en verdad estaba desmayada y no algo de más gravedad. Estaba respirando, por lo que ahora solo estaba durmiendo.

Pronto, Shidou ya no pudo más con el temblor de su mano y soltó la espada que usaba de apoyo, a lo que esta solamente desapareció en partículas azules. Sintió como unas manos se posaban con suavidad en su espalda, manos que identificó como las de Tohka.

-¿Te sientes bien Shidou? -la preocupación en la voz de la chica era muy clara.

-Estoy... bien, solo... necesito descansar... un poco...

Viendo el estado en el que estaba Shidou, ella quería hacer algo para él que de seguro le agradaría en este momento.

Si recordaba bien del programa que daban por televisión los fines de semana durante el horario de la tarde, justamente después de que pasaran el anime que ella ve. Este programa trataba sobre las relaciones amorosas de diferentes parejas que estaban de invitados a hablar de su experiencia personal y como han llevado juntos su nueva vida de relación entre ellos.

Esto debería ser algo que le serviría para que se relajara después de todo lo que tuvo que pasar este día.

Y decidida a hacerlo, Tohka se sentó en el piso.

-Shidou, ven aquí.

-Tohka... ¿qué estas...?

Cortando sus palabras, Shidou sintió como las manos de Tohka tomaban su cabeza y lo movían hasta colocarlo en algo que era bastante cómodo.

-¿Toh... ka?

-Shhh... tranquilo Shidou... -ella había colocado su dedo en la boca del chico para evitar que hablara más- Ya hiciste mucho por hoy, ahora solo relájate y descansa... ¿bien?

Sin poder decir algo al respecto, solamente pudo callar y disfrutar esa almohada de regazo que Tohka le estaba ofreciendo. Si lo decía de esa forma, con una sonrisa muy reluciente y amorosa y más aún, acariciándole delicadamente el cabello con una de sus manos, era imposible negarse a algo como esto.

-Gracias... Tohka.

-Uhm -ella movió su cabeza en negación- Gracias a ti Shidou, por salvarnos a Origami y a mí. Gracias por salvarme otra vez.

-No... fue... nada...

Y finalmente, el cansancio pudo con él y lo llevo al mundo de los sueños.

Un detalle que ninguno de los dos se dio cuenta, fue que un tenue destello apareció en la adolorida mano derecha de Shidou, solamente para después de pocos segundos, esta comenzara a desvanecerse hasta llegar a ser completamente imperceptible para los dos.











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A ver, veamos... ¿por donde debería empezar? ¿Saludando, tal vez? Sí, eso podri... *le dan un zape* ¡Ay, ¿y eso por qué fue?!

"¡¿Es lo primero que dices después de casi un año sin actualizar?!"

¡Hey, no fue un año! Fueron 9 meses...

"¡Es casi lo mismo tarado! ¡Te vas por todo ese tiempo y ni pizca de vida das por aquí!"

Pero lo hice por el tablero de mensajes...

"¡Esto y aquello son cosas diferentes idiota!"

Bueno ya, perdóname.

"¡No, no quiero hablar contigo ahora!" *se va del lugar*

Haa... ¿y ahora que hago con ella?

Bueno, vamos a lo que importa.

Si, se que fue un tiempo extenso el que estuve fuera. Pero entre esto y estudios universitarios, le doy preferencias a este ultimo. Lo siento pero así son las cosas.

Pero hey, ya estoy en segundo año de universidad, valió la pena.

LOGRO OBTENIDO: ¡SOBREVIVIR LAS CLASES VIRTUALES!

XD

Ahora, ¿qué tal estuvieron los capítulos? A este punto creo que estoy en la misma posición que Tachibana cuando hizo el volumen 22.

Así tipo...

Ejem.. mejor veamos lo que paso mientras no estuve por aquí...

Amigo mío, en verdad que messirve que me estes siguiendo. (la de todos mis lectores de hecho xd)

Hola we :v

No se de quien se tratara pero gracias compa :v

Automáticamente yo: ...

Ok ok, se que muchas personas más comenzaron a seguirme en este periodo de inactividad, pero puse los que tenían un nombre curioson de perfil y los que alcance a tomar screenshoot.

Otro punto que tocar, el que haya actualizado ahora mismo no significa que este será el nuevo ritmo desde ahora. En el tablero, puse la semana pasada que tendría 2 regalitos para ustedes. Uno ya lo di en navidad y el otro seria el de ahora.

No quisiera dar una fecha del siguiente capitulo porque eso tendrá que verse en el trascurso de que tanto me demore en escribir dicho capitulo.

Y antes de que se me olvide, quiero saludar a estas personas.

        

julianmon11 por entender la referencia al juego que me hizo amar los viajes en el tiempo y a marianobr18 por entender la referencia al anime Shigatsu wa Kimi no Uso (Your lie in April). Felicidades por entender las referencias que nadie pudo entender tras tanto tiempo de haberse publicado los capítulos y que nadie más pudo comentar antes.

Felicitaciones y un saludo a los dos.

No se preocupen, aun quedan referencias ocultas que nadie ha comentado todavía en la historia, así que quiero verlos ahí si son Cazadores de Referencias nivel memero.

Otro punto que hablar...

Decir que este capitulo fue dividido en 2 partes por la cantidad de palabras que me tomó escribir en los ratos libres de la universidad.

Capítulo 15 con un total de 11.404 palabras y Capítulo 16 con un total de 10.640 palabras, hacen en total... ¡22.044 PALABRAS! ¡LO MÁS EXTENSO QUE HE ESCRITO HASTA AHORA! ¡INCREÍBLE!

Otro punto y el ultimo, que nada que ver con DAL. Para los que juegan SAOARS, si copiaron mi ID anterior, este  ya no sirve más ya que fui baneado 2 veces por "usar" mods en el juego. Bro, perdí todo el progreso y personajes que junte por 10 meses, me dolió en el alma eso; además, ¿qué gracia hay en usar mods si se pierde la diversión del esfuerzo invertido en ello?

Chicos, no hagan eso por favor. Aquí les dejo mi tercera cuenta para los que juegan dicho juego:  691718321315. (Para los interesados)

Y eso seria todo de mi parte. Sé que no hubo mucho de mi este año, y dudó si el siguiente vaya a actualizar más seguido, pero si seguiré escribiendo para entretenerlos a ustedes.

¡Cuídense mucho y conmigo será hasta el siguiente año!

¡Nos vemos en la parte 2 del 2020... A.K.A 2021!



CHAOOOOOOOOOOOOOOO





















Oh shit... 😰

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