Lunes 5 de Junio.

Hace poco más de dos semanas que el tema de Yoshino había concluido, lo que quiere decir que hasta estos momentos todo ha transcurrido con notable tranquilidad.

Se suponía que, como en años anteriores, la temporada de lluvia debería ser partícipe a estas alturas del año pero por algún raro motivo el cielo estaba totalmente despejado y con sol radiante adornando los cielos en compañía de algunas pocas nubes. Como si el mes pasado la lluvia se hubiera agotado por algún que otro motivo.

Pero bueno, vaya a saber uno porque es así.

Como bien se dijo, el sol estaba radiante y ya era el mes de Junio, lo que significa que la temperatura va aumentando, lo que significa que el verano estaba a la vuelta de la esquina y lo que significa que era tiempo de sacar el uniforme de verano del closet para que los estudiantes se sientan más cómodos al ir a sus respectivas escuelas.

Aunque quiera decir que cambien de estación de año, no quería decir que sus horarios vayan a ser afectados. Todo sería normal e igual que siempre entrando a clases a las 8:30 de la mañana, y si vivías lejos de tu escuela o se te dificulta llegar a ella tendrías que madrugar para poder llegar a tiempo a esta.

En el caso de Shidou y Tohka para llegar a Preparatoria Raizen solamente le tomaba 20 minutos aproximadamente, poco más o poco menos. De vez en cuando se topaban con Origami de camino, para gusto de ella, o simplemente se encontraban como la mayoría de las veces dentro del salón de clases.

Pero en este día, las cosas iban a ser un poco diferentes...

-O sea que... ¿esto se pone... directamente? -se escuchaban nervios en la voz de la chica.

-S-Sí, se pone directamente... -se le notaba tranquilo pero el rubor en su rostro decía lo contrario.

-Pero Shidou... ¿es necesario... hacer esto?

-Es muy necesario, sería un problema si no hacemos esto.

-E-Entiendo, pero es que... no sé cómo ponerlo.

-Tranquila, si lo haces como te dije lo harás bien ¿Ok?

-Mm... de acuerdo.

Ambos estaban dentro de la habitación de Tohka en el departamento que Ratatoskr había construido para la estadía de los espíritus que había sido inaugurado cuando Yoshino había llegado a vivir aquí también hace un par de semanas.

El ambiente para ellos dos era un poco tenso e incómodo, más para la chica presente ahí ya que era ella la que estaba haciendo la mayor parte del trabajo mientras Shidou solo observaba el cómo Tohka lo hacía. Solamente faltaba un poco más y todo este ambiente se terminaría.

Tohka, con un poco más de esfuerzo, se apresuró a estirar más sus brazos para acabar esto de una vez por todas.

Hasta que finalmente...

CLICK

...se sujetó.

-¿Ya está?

-Sí, eso era todo. Te pusiste tú sola el sostén.

-¡Sí! ¡Lo hice yo sola!

Con alegría, Tohka festejaba el que podía hacerlo ella sola desde ahora. Era una cosa simple que se puede hacer y hasta puede escucharse un poco absurdo que lograse algo tan simple como era abrocharse el clip del sostén. Pero hacer eso a la primera, había que reconocer su esfuerzo.

Bueno no, pero para ella sí.

-(Te dije que le ayudaras a sujetarle el sostén, pero no tuviste el valor de hacerlo como el princeso que eres) -se burló de Shidou.

-Oye, oye... no soy un princeso, además no es que no haya querido hacerlo por tener vergüenza, es solo que ella debe aprender a hacer estas cosas ella sola -dijo con palabras que eran ciertas.

-(Bueno eso sí)

-"¡Que rápido!" -sintió un gota de sudor bajar por su cabeza por la simple y corta respuesta de Kotori.

-(Ya salgan de ahí y apresúrense que van llegar tarde. Yo también voy saliendo, cualquier cosa que suceda me lo haces saber) -dijo y cortó la comunicación.

-Mmmm... es un poco incómodo usar este sostén y tener que abrochárselo en la espalda es un poco molesto -apesar de que hace un momento estaba feliz por hacer esto ella sola, no estaba acostumbrada a llevar esto en sus pechos.

-Sopórtalo, así es como es.

-Lo haré pero... se siente raro moverse con este sostén -hizo unos movimientos para probar que no le apretara mucho, haciendo rebotar sus atributos.

-Sí, sí, como sea, solo date prisa y vístete -estaba sonrojado y un poco nervioso con su mano tapando parcialmente su vista.

Tohka estaba frente a él vestida con su falda, calcetas y zapatos en la parte inferior y nada en la parte superior con solamente el sostén tapando sus pechos. Por cierto, el sostén era de un color claro para que no hiciera tanto contraste con la blusa de la escuela.

Con la vista a un lado, evitando mirar a Tohka, su sonrojo adornaba notoriamente su rostro y eso no pasó desapercibido por ella que se acercó para ver qué es lo que le pasaba.

-Shidou ¿estás bien?

-Sí, sí, estoy bien.

-Pero tienes la cara un poco roja.

-Estoy en el cuarto de una chica donde ella está frente a mi semidesnuda ¿no es natural que actué de esta forma?

-Supongo que sí.. pero no te preocupes ¡El sostén está perfectamente cerrado! -dijo dando saltos para asegurar lo que decía.

-¿Lo abrochaste bien? -movió un poco su mano para mirar a Tohka.

-¡Umu! ¡Está bien asegurad...!

CLICK

-¿Eh? -ella quedo estática.

-A-A-A-A-A-Ah... -él se quedó de piedra.

Un sonido... un pequeñísimo sonido hizo que el tiempo se detuviera para Tohka y Shidou.

Algo se había caído al suelo y no era precisamente la temperatura del lugar, era algo más... ligero.

Hablando de temperatura, Tohka sentía como de la nada comenzaba a sentir más calor de lo normal y sentía que sus mejillas empezaba a tornarse de un brillante color rojo mientras rápidamente se daba vuelta cubriéndose con sus brazos, evitando que Shidou haya visto algo.

-¡N-N-No viste nada ¿verdad?! -decía alterada y muy roja.

-¡Nada, no vi nada! -antes que ella le hablara, había girado su sonrojado rostro hacia otro lado evitando mirar a lugares que no debía- ¡Además me habías dicho que ya lo habías abrochado! ¡¿Porque se soltó entonces?!

-¡Lo sujete bien, no sé porque se soltó si lo sujete en el broche que había!

-¡Ese sostén tenía dos broches!

-¡¿Y ahora me lo dices?!

-¡Pensé que te habías dado cuenta!

Antes que siguieran con esa discusión, el sonido de la puerta de la habitación abriéndose llamó la atención de ambos y por esta se asomó un niña de cabellos celestes y una marioneta en forma de conejo.

Shidou y Tohka vieron estáticos como Yoshino y Yoshinon se les quedaban viendo donde fácilmente la situación actual podría ser vista de una forma extraña.

-Etto... la puerta estaba abierta... y quise preguntar si estaban unos lápices que deje aquí -decía con timidez para esconderse tras la puerta, dándole la oportunidad al conejo de hablar.

-¡Por favor, por favor, no detengan lo que estaban haciendo! ¡Podemos volver más tarde, así que sigan haciendo lo suyo par de tortolos! -dijo alegremente, tras eso desapareció de la puerta y esta fue cerrada.

Y la primera reacción de ambos fue...

-¡¡¡Es un malentendido!!!

...decir una frase cliché de los animes.

Shidou recordaría comprarle un sostén que se abrochara por el frente la próxima vez para que no vuelva a ocurrir algo como esto... otra vez.

-Más tarde-

Pasando por ese momento, asegurándose que esta vez el sostén si estuviera bien abrochado, salieron de la casa con paso apresurado para dirigirse a la escuela ya que ya iban con algo de retraso.

Durante el transcurso del camino, el silencio entre ambos se hizo incomodo tras lo que había pasado hace unos momentos atrás. Seguían un poco sonrojados por el momento vergonzoso que vivieron, pero a medida que el camino se hacía más familiar a la Preparatoria Raizen, donde la multitud de estudiantes era más recurrente, el ambiente incomodo se fue alejando de ellos. Alcanzaron a llegar con 8 minutos de antelación al timbre que daría inicio a las clases por lo que se dirigieron a sus respectivos casilleros para cambiarse sus zapatos y posteriormente ir hacia su salón.

Al entrar vieron a todos sus compañeros de clases haciendo cosas de ellos; Ai, Mai y Mii hablando entre ellas, Tonomachi chateando con su "novia", alguno de sus compañeros dormía, otros riéndose entre ellos o hablando de temas variados, etc. Y por supuesto, Origami estaba ahí sentada leyendo una pequeña libreta de anotaciones para las clases que venían.

-¡Hola Origami! -saludó con energía Tohka llamando la atención de la mencionada.

-Ah, Tohka-san, Itsuka-kun, buenos días -devolvió el saludo, guardando su libreta en su maletín.

-Buenos días, lamento si tardamos un poco.

-No pasa nada, lo importante es que llegaron bien. Por cierto ¿por que demoraron en llegar? ¿Paso algo?

-¡Nada! ¡No pasó nada de nada! -Tohka rápidamente respondió a la pregunta yéndose a su asiento completamente sonrojada por recordar lo que había pasado.

-¿Huh? ¿Qué fue lo que sucedió para que Tohka-san actuara así?

-N-No estoy seguro, pero no pasó nada raro hoy, de veras.

-Eh... de acuerdo -no convencida del todo, no le quedó más remedio que aceptar las palabras que le dieron.

Entonces las campanas del inicio de clases sonaron por la Preparatoria y cada estudiante del salón se dirigió a su respectivo asiento y segundos después, Tama-chan entró con sus habituales libros en sus manos y con una actitud que decía que tenía una información importante que decir.

-¡Buenos días chicos! -se paró al frente de la clase y todos respondieron al saludo de forma unísona- Antes de comenzar con las clases, tengo algo importante que decirles. Normalmente este nunca ocurre tan seguido, pero increíblemente tenemos a una nueva estudiante que se une a nuestra clase.

Basto decir "nueva estudiante" para que los hombres del salón se emocionaran por la llegada de una nueva compañera a su salón, "¡OOOOOOOOOOHHHHH!" gritaban con gran exaltación; exceptuando a Shidou que sabía a la perfección de quien se trataba. Por otro lado, algunas chicas estaba decepcionadas o suspiraban molestas de que la nueva estudiante sea otra chica, y algunas se quejaban diciendo "¿Cuándo llegará un chico lindo?", "¿Otra chica más?", "Ya nos tocará nuestro príncipe azul", y algún que otro reclamo.

Aunque sea así, no es razón para malentender las cosas.

Apesar de que las chicas estaba algo deprimidas de que no sea un "nuevo" en vez de "nueva", no quitaba el hecho de que todas estaban igual de ansiosas por conocer a su nueva compañera de clases para, quizás, tenerla como amiga o algo por el estilo. Caso parecido ocurrió cuando tanto Tohka y Origami se unieron a la clase hace unas cuantas semanas, ya que son pocas las ocasiones en que alguien se une a la clase en medio del año escolar.

(N.A: No sé si realmente sea así en las escuelas de Japón, así que vamos a suponer que lo que dije es cierto)

Tama-chan dirigió su voz hacia la puerta para darle el pase a la nueva chica que se uniría a su clase. Tras cerrar la puerta, había un gran silencio por la expectativa a la presentación de la nueva estudiante.

La chica de cabello azabache, con un mechón de cabello ocultando su ojo izquierdo llamó la atención de todos por vestir el uniforme de la temporada de invierno de la Preparatoria Raizen, cuando actualmente era la temporada de verano, lo que hacía que los estudiantes usaran una camisa y un pantalón en el caso de los hombres, y una blusa, una falda y calcetas cortas en el caso de las mujeres.

-Por favor, preséntate ante la clase -pidió Tama-chan a lo que la chica procedió a tomar una tiza y comenzar a escribir su nombre en el pizarrón.

Una vez hecho, dejo la tiza en donde estaba y se presentó ante todos.

-Mi nombre es Tokisaki Kurumi.

Se presentó Kurumi ante la clase dando una brillante sonrisa, dejando cautivado a los hombres de la clase y haciendo gritos alegóricos por la hermosa chica que estaban viendo, pero como Shidou sabia esto desde antes, ella no había terminado su presentación.

-Yo, soy un espíritu.

https://youtu.be/cRRTX5ZCWp4

(N.A: Para entrar en ambiente xd)

Ante lo dicho por Kurumi, la clase quedó en un profundo silencio y precisamente dos chicas, que miraban fijamente a la pelinegra que estaba frente a la clase con una sonrisa, tenían un rostro de completa sorpresa. Para aparentar el momento, Shidou imitó las expresiones de las chicas, mientras observaba como Kurumi lo miraba fijamente a él con una sonrisa.

-Eh... ¡V-Vaya! ¡Esa fue una presentación bastante impactante, Tokisaki-san! Con eso dicho, ¿podría tomar el asiento vacío que está ahí? -dijo señalando el lugar

-Con mucho gusto, pero antes quisiera pedir un favor si no le molesta.

-¿Hm? Bueno... no, claro que no. Por favor adelante.

-Debido a que me transferí recientemente, no conozco las localidades de esta escuela, así que si alguien pudiese ayudarme a recorrer la escuela después de clases, le estaría muy agradecida.

-¡Yo lo haré con mucho gusto! -se ofreció Tonomachi...

-Gracias pero no -...para ser cordialmente rechazado, haciendo que le saliera un aura de depresión sobre él.

-Me gustaría que quien me acompañe sea una persona en particular -Kurumi fue acercándose al asiento de Shidou, hasta quedar frente a él- Y esa persona serias tú, Shidou-san.

Esta acción genero un sentimiento de alerta en Tohka y Origami por ser tan descarada en pedírselo apenas viéndolo a él, pero no entendían como sabia ella el nombre de Shidou.

-Eh... ¿cómo es que sabes mi nombre?

-¿Eh? ¿Que acaso... no puedes?

-No, jamás dije algo como es...

-Entonces, me encantara estar a tu cuidado después de clases, Shidou-san.

Tras decir eso, con una notable sonrisa, a paso lento fue a sentarse en el asiento vacío que Tama-chan le había señalado. Todo esto bajo la mirada de sus compañeros, la mirada de molestia de Tohka y Origami, un Tonomachi aun con el aura de depresión maldiciendo internamente a Shidou y una Ai burlándose disimuladamente de este último.

Mejor suerte para la próxima vez... si es que hay una próxima.

-Después de clases-

Tras terminar la clase, sonó la campana de almuerzo y Shidou llamó a Kotori diciéndole acerca de la llegada de Kurumi. Obvio, ella le pidió más detalles acerca de esto para confirmar lo que decía, pero al no "conocer" más detalles sobre ella solo tenía las palabras que ella dijo hacia la clase. Y debido a que era bastante anormal que alguien supiera sobre la existencia de los espíritus, iba a averiguar sobre ella para despejar las dudas.

Terminó el almuerzo, comenzó la jornada de la tarde y al finalizar las clases del día de hoy, Kotori se comunicó con Shidou por el auricular para afirmarle acerca de lo de Kurumi sobre ser una espíritu. Ahora mismo estaba en Fraxinus junto a los demás para ayudar en las decisiones que tendría que tomar luego cuando le muestre la escuela a Kurumi.

Hablando de Kurumi, se acercó amistosamente a Shidou para preguntarle si ya estaba listo para mostrarle la escuela, a lo que el peliazul le dijo que ya lo estaba por lo que de esa manera ambos salieron del salón. Y tras unos metros alejados de la puerta del salón, Tohka y Origami asomaron la cabeza, se miraron mutuamente y se decidieron a seguir a Shidou y la chica nueva.

Mientras tanto Shidou le iba mostrando los sectores de la escuela a Kurumi que podía visitar, mientras seguía algunas instrucciones mínimas que Kotori le daba a través del auricular en su oído. Llegaron al sector de la cafetería de la escuela, donde había una inusual cantidad de estudiantes comprando cosas para comer.

-¿Normalmente esta siempre así? -preguntó Kurumi.

-No siempre, esto solo pasa cuando la dueña trae nueva mercancía cada 2 semanas. Aunque se vea así no te desanimes porque, por raro que parezca, siempre quedan varias porciones de rollos de canela cuando la mayoría se va de aquí y son una verdadera delicia.

-Ara, si tú lo dices, entonces tal vez me pase un día de estos por aquí. Gracias por la recomendación, Shidou-san.

-No fue nada.

Estaban por marcharse, cuando una chica, aparentemente de primer año, salió del montón de estudiantes, cayéndose al suelo y botando la bolsa con todo lo que había comprado.

-Cielos, ¿te encuentras bien? -le preguntó Kurumi acercándose a la chica.

-Estoy bien, esto ya es normal para mí -dijo la chica con voz neutral.

-Déjame ayudarte a recoger las cosas -dijo Shidou tomando las cosas del suelo y poniéndolos nuevamente en la bolsa, aunque cuando los estaba recogiendo, notó que eran muchas cosas para que ella sola lo consumiera- Oye, ¿te vas a comer todo esto tu sola?

-No, yo estoy bien. Esto es para mi amiga.

-¿Todo esto... para ella sola?

-Sí.

Shidou estaba sorprendido mientras que una gota sudor bajaba por su cabeza, y Kurumi, que era expectante de esto, también estaba un poco sorprendida, pero no quería mostrar esa expresión.

-Ya veo... bueno, aquí tienes las cosas para tu amiga, etto...

-Yoshino, Koiwai Yoshino, un gusto -saludó agachando levemente su cabeza, recibiendo las cosas por parte de Shidou.

-Bien, un gusto en conocerte Koiwai-san. Yo soy Itsuka Shidou y la chica que me acompaña aquí es Tokisaki Kurumi, es nueva en la escuela, estamos en segundo año -se presentó Shidou a la vez que Kurumi saludaba con una sonrisa.

-Entiendo, un gusto conocerlos. Si me disculpan, ya debo retirarme. Con permiso Itsuka-senpai, Tokisaki-senpai -fue lo que dijo para retirarse rápidamente de ahí con las cosas en sus brazos.

-Que agradable chica ¿no lo cree Shidou-san?

-Sí lo es. Aunque me sorprende un poco su estatura, diría que va en secundaria -dijo mirando cómo se alejaba rápidamente por el pasillo.

-Así parece ser, pero ella tiene ciertos "atributos" que la identifican como una chica de su edad y una estudiante de preparatoria -dijo Kurumi recalcando esa palabra.

-¿A qué te refieres con atributos?

-Por favor Shidou-san, usted sabe a lo que me refiero con eso -dijo y paso un pequeño lapso de tiempo hasta que Shidou entendió a lo que se refería y se sonrojó un poco.

-O-Ok ya entiendo, pero no... no es como si... los estuviera... viendo o algo así -dijo avergonzado.

-Ara ¿y quién lo está acusando de que estuviese mirando tal cosa?

-Eh... bueno yo... yo no... -dijo tratando de excusarse, pero Kurumi le había ganado esta platica, y ella solo se llevó una mano a su boca riéndose levemente de Shidou.

-Ufufu, descuide Shidou-san. Comprendo perfectamente que a los hombres de su edad estén interesados en este tipo de cosas, así que no se avergüence de ello ya que es perfectamente normal.

-L-Lo siento. Mejor sigamos con el recorrido.

-Hai.

Ya pasado un momento, Shidou recuperó la compostura y siguió con el recorrido por la escuela.

-(Pervertido) -escuchó la voz de Kotori por el auricular con un claro tono de desprecio en su voz.

Después, siguieron hablando hasta que llegaron al sector de la escalera para bajar al primer piso. En eso, escucho la voz de Kotori por el auricular, diciéndole que aparecieron opciones en la pantalla.

-En Fraxinus, en la pantalla de opciones-

1. ¿Qué quisiste decir en la mañana sobre ser un espíritu?

2. ¿Dónde estudiabas antes Kurumi?

3. ¿Qué ropa interior estas llevando hoy?

-¡Todo mundo, elijan ahora! -fue la orden a viva voz, para que unos segundos después el resultado final se diera en la pantalla- La opción 1 resulto ser la más votada, era de esperarse. Pero, ¿quién fue el que voto por la opción 3?

-Oh, ese sería yo -dijo Kannazuki señalándose.

-Explícate.

-Jeje, es muy sencillo. La ropa interior que este ocupando una mujer siempre será uno de los mayores secretos para el hombre, preguntarle acerca de ello hará que la chica piense en que Shidou-kun está interesado en ella, dándole más oportunidades a Shidou-kun de tener más intimidad con la joven.

-...

-Y bien, ¿qué me dice Comandante?

¡SNAP!

-Llévenselo -dos grandes hombres aparecieron cuando Kotori chasqueo sus dedos, tomaron a Kannazuki y se lo llevaron arrastrando.

-¡Co-comandante! ¡Apiádese de mí! ¡Piedad! ¡¡¡Piedad!!! -fue lo último que se escuchó de él tras el cierre de la puerta metálica.

-Por dios, eso claramente no es para nada bueno. Olvidemos todo este drama y vayamos con la primera opción.

-De vuelta con Shidou-

-Oye Kurumi, cuando llegaste en la mañana, hablaste de que eras espíritu ¿A qué te referías con eso? -preguntó esperando la respuesta de Kurumi.

Pero esto era extraño, Kurumi estaba con la mirada perdida, parecía pensar en algo y tenía su cabeza mirando hacia abajo. No había escuchado lo que Shidou había dicho, estaba totalmente ausente. Claro está que le pareció extraño... bastante extraño diría él.

-(¿Qué le pasa?) -dijo Kotori con extrañeza.

-No lo sé -dijo a modo de susurro- Hey, Kurumi -le habló pero seguía fuera de sí- Kurumi... ¡Kurumi!

-¡Ah! ¿Qué sucede Shidou-san?

-Eso debería preguntártelo yo a ti, ¿qué te ocurría? Te estaba hablando y estabas divagando.

-Oh, de verdad lo siento mucho. Es solo que... estaba... pensando algo... muy extraño...

-¿Algo extraño? Si me permites preguntar ¿que estabas pensando? -dijo acercándose a ella hasta estar cara a cara.

-Bueno, más que un pensamiento... es más como una... sensación.

-¿Sensación?

-... -Kurumi puso un rostro serio y tenía sus manos cerradas.

-¿Kurumi?

-Ne, Shidou-san...

-¡UWAAAA!

Antes que Kurumi continuara hablando, un grito femenino vino desde atrás de ellos, aunque mejor dicho gritos. Desde el casillero de equipo de limpieza, una chica pelimorada y una peliblanca, cayeron al suelo provocando bastante ruido.

-Auch, eso dolió...

-Ugh, sabía que no era buena idea hacer esto...

-Eh, Tohka, Origami... ¿que se supone que estaban haciendo? -dijo Shidou con una gota de sudor bajando por su cabeza, ya que, aunque sea otra de las tantas coincidencias que han habido, no podía no pensar en que eso era un tanto torpe.

Ya quería escuchar cuál sería su excusa.

-¡Eh! ¡Bueno, yo... nosotras... nosotras estábamos...! -decía Origami con nerviosismo.

-¡Estábamos buscando cosas para limpiar la pizarra del salón, y da la casualidad que justamente lo encontramos en este armario de metal! ¡Mira, con esto lo limpiaremos! -dijo Tohka sosteniendo un... ¿trapeador?

-Eh, Tohka... eso no sirve para limpiar el pizarrón.

-¡Entonces esto!

-Eso es una cubeta.

-¡Esto!

-Es una botella de cloro.

-¡Esto sí!

-Es una esponja.

-¡Esto definitivamente lo limpiara!

-¡Volviste a tomar el trapeador!

La situación se estaba volviendo ridícula en verdad.

-¡Mooo, eso ya no importa! Solo responde ¿porque están tan juntitos ustedes?

-¿Juntos? Estaba cerca de ella porque se sentía mal, y solo esta viéndola de que tuviera nada malo.

-Pero Itsuka-kun, yo la veo completamente bien.

-Ara, discúlpenme si las preocupe, Origami-san, Tohka-san. Es solo que últimamente he tenido algunos mareos, hasta ahora no he entendido a que se debe esto y Shidou-san solo estaba tomándose la molestia de que no tuviese fiebre.

-¿Esta segura que se siente bien Kurumi-san?

-Hai. Es más, ahora ya me siento perfectamente, así que si me disculpan, quisiera seguir el recorrido por la escuela junto a Shidou-san -dijo jalando a Shidou del brazo- ¿Seguimos?

-Ah... claro. Las veo a la salida chicas.

Ambas chicas veían como Shidou y Kurumi se alejaban por el largo pasillo que había, y ambas solo veían fijamente con el ceño fruncido a Kurumi por la gran cercanía que tenía con Shidou.

-Más tarde-

Eran las 6 de la tarde, el cielo ya tenía una tonalidad anaranjada y la escuela ya había cerrado sus puertas, y afuera de estas habían 4 jóvenes, aunque 2 de ellas estaban muy aferradas a una de ellas mirando seriamente a la otra persona que estaba frente a ellos y los miraba con una sonrisa amable, por así decir.

-Muchas gracias Shidou-san, fue muy amable de tu parte haberme enseñado la escuela.

-No fue nada Kurumi, espero que todo te haya quedado más claro.

-Descuide, aunque de todos modos... me hubiese sentido más cómoda si solo hubiéramos sido solo nosotros dos.

Esto claramente hizo que ambas chicas a los lados de Shidou afilaran su mirada, y que, de igual forma, Kotori, viendo esto desde la pantalla de Fraxinus y escuchando por el altavoces, chasqueara su lengua en señal de molestia, ya que sabía que lo que Kurumi dijo se lo decía indirectamente a todos en la tripulación, pero a fin de cuentas...

Esto era, sin dudas, algo de lo que tenían que ser precavidos.

-Bueno, ya es algo tarde, así que Shidou-san, Tohka-san, Origami-san, aquí es donde nos despedimos, espero verlos mañana. Hasta mañana.

De esa manera, hizo una reverencia, dio media vuelta y se fue del lugar a paso rápido, perdiéndose de la vista de los 3

-Tch ¿que se traerá entre manos?

-No lo sé, pero debemos tener cuidado con ella.

-Mm, mm, cierto, cierto, debemos alejarla lo más posible de Shidou.

-Estoy de acuerdo en eso.

Tohka y Origami discutían un plan para mantener en la mira a Kurumi. Claramente ellas dos aún estaban ignorando un detalle, y ese era...

-Saben que sigo aquí ¿verdad?

-¡Waaah! -ambas gritaron sorprendidas- ¡¿Shidou?! ¡¿Sigues aquí?!

-Se dan cuenta que ambas todavía me tienen atrapado de los brazos ¿no? Así no puedo ir a ningún lado.

-¡Ah, e-es verdad! ¡Lo siento Itsuka-kun! -hablo Origami para soltar el brazo de Shidou mientras Tohka copiaba esto- B-Bueno Itsuka-kun... l-lo que dijimos hace poco...

-Oh claro, no quise decir eso Shidou, veras, bueno... -ambas chicas estaban algo avergonzadas y nerviosas de que Shidou escuchase eso, y él peliazul vio esto.

-No sé qué están diciendo, yo no escuche nada de nada -se hizo el desentendido.

-¿Huh? -dijeron ambas.

-Vámonos antes que se haga más tarde, tengo que comprar las cosas para la cena. Origami, estas invitada a cenar si te parece bien.

Tras decir eso, Shidou dio media vuelta y comenzó a caminar por la calle. Ambas chicas se dieron una mirada de confusión.

-¿Que habrá sido eso?

-No estoy segura.

-Tal vez de verdad que no escucho eso.

-Quizás...

-¡Oigan! ¡Si no se apuran, me iré sin ustedes!

-¡Ya vamos! -ambas apresuraron el paso hasta llegar donde Shidou.

Si realmente no escuchó lo que dijeron o solamente se hizo el desentendido, ya es cosa de cada quien de creer lo que le parezca.

-En otro lado-

Kurumi iba brincando para llegar a su hogar con una sonrisa en su rostro por lo sucedido el día de hoy. Al fin había llegado el tan ansiado momento en que conocería al chico que tanto anhelaba ver.

-Ufufu, finalmente podré llevar a cabo mi objetivo -detuvo sus palabras- Oh, pero que estoy diciendo... Debo esperar por un tiempo más antes de hacer eso, será mejor que aproveche bien mi jornada en la vida escolar. Ufufu, que emocionada estoy... -dijo rebosante de alegría.

Pero de repente, algo la detuvo.

Otro mareo.

Sí, cuando estuvo con Shidou, Tohka y Origami dijo eso, pero no en manera de excusa. De verdad se sentía así.

Débil, se sostuvo a la pared que había a su lado, mirando el suelo fijamente y respirando con dificultad.

-*Jadeo**Jadeo* Odio... que pase esto... *Jadeo* ¿Qué es lo que...? *Jadeo* No lo... entiendo... ¿Porque rayos... pasa esto?

Aproximadamente, hace un par de años que este "síntoma" comenzó y desde entonces, le ha ocurrido un par de veces durante ese tiempo y, hasta la fecha de hoy, no ha encontrado el porque a todo esto. Era extraño, fue un día como cualquier otro cuando lo sintió por primera vez. Desde entonces, lo ha estado sintiendo y en verdad que le desagradaba esa sensación.

Totalmente agobiante.

Aunque últimamente, para su disgusto, lo sentía más seguido.

Y en serio que odiaba esto.

-Oiga señorita ¿Se encuentra bien? -un hombre con aspecto de delincuente, junto a 2 hombres del mismo aspecto, se acercaron a ella.

-Oh... H-Hai, solo estaba descansando. Salí de casa esta mañana no sintiéndome muy bien que digamos -dijo recomponiendo su postura.

-Tch, por Dios. Si vas a salir de casa, asegúrate de sentirte bien. No querrás que algún tipo se acerque y se aproveche de ti -dijo el segundo.

-Je, tiene razón. Una princesa como usted debería ser precavida -dijo el tercero.

-Oh vaya, agradezco el elogio.

-Jeje, oye mejor hagamos algo. ¿Porque no vienes con nosotros y disfrutamos algún tiempo de caridad?

Para entonces, Kurumi entendió hacia donde se dirigía esta situación.

-Ara, no será que... ¿quieren tener un juego conmigo?

-Jaja, vaya que pervertida es usted princesita. Si tanto insistes en hacerlo, entonces nos negaremos a ello.

-Siendo así ¿qué les parece si vamos a un lugar más discreto, con menos gente?

Los hombres sin dudar, aceptaron y llevaron casi forzosamente a Kurumi hacia un callejón.

Aunque lo que realmente importa es que fueron 4 personas las que entraron, de las cuales solo una saldría de ese callejón.

Minutos después, lo que habría allí seria solo grandes manchas rojas tanto en el suelo como en las paredes del lugar. Y también, una extraña sombra que disminuía su tamaño y se reunía por completo bajo los pies de Kurumi.

-Fufufu, fufu. Fue un buen aperitivo, pero no fue la gran cosa. Si bien, con eso mis mareos cesaron, aun espero con ansias el plato de fondo, que tanto anhelo probar en un futuro cercano.

Juntando ambas manos en un aplauso, se preparó en salir de ahí, pero entonces algo la dejo inmóvil.

Había una persona frente a ella, y que al parecer era la responsable de que se quedara así.

-¿Ara? ¿Pero si no eres Takamiya Mana-san? ¿Cómo estás?

-Tsk, otra vez llegue tarde. ¿Te estas divirtiendo "Nightmare"?

-Gracias Mana-san, yo me encuentro muy bien. Agradezco su preocupación.

-Deja de jugar ¿quieres? Tu sola presencia me da nauseas.

-Ara, que mala eres Mana-san ¿Que acaso no conoce lo que son los modales?

-Claro que lo sé, pero estoy viendo precisamente a alguien que no conoce lo que es la palabra Humanidad.

-Déjeme decirle que si la conozco ¿Que me dice usted Mana-san?

-Déjate de decir estupideces, espíritu.

Entonces, Kurumi sintió un escalofrió.

-Minutos después, en otro lugar-

-¡Te lo digo, es absolutamente increíble!

-Debe serlo si tú lo dices Tohka-san.

-¡Es que es súper genial! ¡Es una corona que convierte en princesa a quien sea que la lleve puesta!

-De verdad que es genial.

Después de salir de la escuela e ir a la tienda a comprar lo que usaran en la cena, estaban sentados en el autobús que los llevaría a la casa de Shidou, y Tohka le hablaba a Origami de uno de los tantos juegos que jugaba en la consola de Kotori. Shidou estaba al lado de Origami, mientras escuchaba atentamente la conversación de ambas chicas.

Y entonces, Origami hizo una pregunta.

Una muy buena pregunta.

-Ahora que lo pienso, ¿que pasaría si esa corona estuviese en ese juego donde aparecen todos esos personajes seleccionables?

-...

-...

-...

-(...)

-Ok, mi mente acaba de explotar.

-¡Estoy de acuerdo!

-¡Pienso igual!

-(Comparto su opinión)

Menudo dilema se formó con ese tema.

Luego de ese momento de charla "gamer", los tres bajaron del autobús y comenzaron a caminar en dirección a la casa.

-(De verdad que fue un tema de conversación ¿eh?)-sonó la voz de Kotori por el auricular que Shidou y Origami traían puesto.

Sí, a ella también le habían dado un auricular en caso de que cualquier cosa pasara y en caso de que Shidou no lo trajera puesto.

-Por favor no sigas hablando de eso, porque de verdad no quiero imaginarme lo que pasaría si pasase eso -Shidou intentó cerrar ese tema.

-Pero, si esa cosa existiera en la vida real ¿significa que me convertiría en princesa? -preguntó Tohka con curiosidad.

-Bueno, tal vez llevarías tu vestido astral pero quitándole las partes que pertenecen a la armadura ¿no? -supuso Origami.

-Tal vez... pero si eso pasa en quien sea que lleve la corona puesta... me pregunto ¿cómo se vería Shidou si la llevara puesta? -fue la pregunta random de Tohka mientras miraba al peliazul.

-¡¿Y a que vino esa pregunta?! -exclamó Shidou.

-Simple curiosidad, aunque la verdad me cuesta un poco imaginarte vestida de princesa.

-Quisiera que eso no pasara por favor.

-(He... pues la verdad no te verías nada mal con vestido... onee-chan) -se burló Kotori por el auricular.

-"Quisiera no pasar por lo de Shiori de nuevo, pero sé que eso no podrá ser así" -pensó decaído- Ugh... como sea, dejemos ese tema de lad...

-Shidou, Shidou, algo raro le pasa a Origami.

-¿Huh? ¿Origami?

Origami caminaba del lado derecho de Shidou, y se veía que su expresión facial estaba un tanto... sonrojada y murmuraba cosas como...

-Itsuka-kun, Itsuka-kun, princesa, princesa, Itsuka-kun, princesa, Itsuka-kun vestido de princesa, Itsuka-kun, Itsuka-chan... -ella estaba en su mundo, mientras que en su mente se imaginaba a Shidou vestido de princesa.

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N.A: 7w7

N.M: ¿Sabes que sigue siendo hombre por dentro, no?

N.A: Tenias que arruinarlo con tu comentario... 7-7

N.M: Protejo tu sexualidad... animal 😠

N.A: Awuebo, entendí esa referencia xd.
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-¡¡¡Origami!!! -Shidou y Tohka le gritaron, haciéndola volver a la realidad.

-¡KYA! ¡¿Q-Q-Que pasa?!

-Eso te lo pregunto a ti ¿qué te pasaba a ti? Parecías estar en otro lado.

-Cierto, cierto. Incluso murmurabas cosas raras como que Shidou vestido de princesa.

-¡¿EH?! ¡A-A-Ah...! ¡Y-Yo no...!

-T-Tranquila no pasa nada, solo... te pido que no vuelvas a imaginarte... eso ¿bien?

-C-Claro, lo haré. "¡Es imposible hacer eso!" -dijo/pensó Origami- D-De cualquier modo ¿qué tienes planeado para la cena Itsuka-kun?

-Bien, compramos suficiente carne molida para hacer hamburguesas y suficientes verduras como para hacer una ensalada o un guiso de verduras -aclaró Shidou.

-(¡Ah! ¡Yo voto por las hamburguesas! ¡Voy saliendo de Fraxinus!) -dijo Kotori ansiosa.

-¡Oh, quiero probar esas hamburguesas! -pidió Tohka.

-Si quieres te puedo ayudar a hacer las hamburguesas o mejor hago el guiso, tú decides Itsuka-kun -sugirió Origami.

-Cuando lleguemos a casa, veremos que podemos hacer -le dijo a Origami haciéndola asentir ante lo susodicho.

Al poner su mirada al frente, Shidou veía como se acercaba una persona que hace bastante tiempo que no veía.

Paró en seco tras verla, mientras que las chicas a sus lados repetían esta acción viendo a la persona que reconocieron como una chica alrededor de sus 14 años, cabello azul atado a una pequeña cola de caballo, ojos marrones y lo más notorio era un lunar bajo su ojo izquierdo. Pero claro está que ni Tohka ni Origami no reconocían a esta chica en cuestión.

-Así que era cierto -dijo ella- De verdad eras tú al que había visto -comenzó a acercarse al grupo.

-¿Eh... la conocen? -preguntó Origami.

-No -negó Tohka- ¿Y tú Shidou?

-Eh... no, no la... conozco... -respondió con nervios.

De otra forma no podía ser, el tener nervios era algo que por obviedad total no se podía evitar.

Me explico de mejor manera.

Ver a tu hermana de sangre tras 5 largos años tras tu "muerte", era una sensación de nervios, emoción y alegría, y lo único que querrías hacer es correr hacia ella, abrazarla con todas tus fuerzas y llorar por encontrarte nuevamente con aquella familia que no veías hace tiempo. ¿Que otra cosa se podría hacer? Volvías a ver a un pariente de tu sangre.

Sangre de tu sangre. 

En el caso de Shidou, quería hacer eso, pero debía seguir aparentando y guardarse todos esos sentimientos por más esto que le doliese.

Y finalmente, la tenía frente a él y dijo:

-Nii~... -escuchar eso, hizo que una corriente eléctrica pasara por su espina dorsal.

-¿Nii?

-¿Nii?

-(¿Nii?)

Las voces de Tohka, Origami y Kotori fue lo oyó a su alrededor, mientras Shidou solo tenía una expresión en blanco.

-¡Nii-sama!

Escuchar eso y sentir el abrazo que estaba recibiendo de su parte, lo hizo despertar de su "trance", y volvió para ver en donde y la situación en la que se encontraba. Así que, como buen actor que es, puso la misma expresión que las chicas a sus lados y les siguió la corriente.

-¡¿QUE?!/¡¿QUE?!/(¡¿QUE?!)

Shidou tendría una charla algo incomoda en unos momentos... otra vez.

-Ese mismo día, en la noche-

Alrededor de las 10:30 de la noche, nuestro protagonista peliazul estaba recostado en su cama, después de la "agradable" conversación que ocurrió entre sus hermanas en la tarde, mirando un libro a la vez que cambiaba entre paginas mirando el contenido de estas.

La peculiaridad de este libro es que tiene una similitud a una biblia con una cruz de platino en su portada y contraportada con una joya en el centro de cada cruz. Pero en si el libro de no es una biblia o algo parecido, tampoco era un libro cualquiera, este era [Rasiel], el ángel omnisciente que sabe acerca de todo y de todos.

Mirando con detenimiento el movimiento de las páginas, no se dio cuenta cuando alguien apareció en su habitación y se recostaba a su lado apoyando la cabeza en el pecho de Shidou.

-¿Que estás haciendo con [Rasiel]?

-Nada en especial Mio, solo reviso como están las cosas con las demás.

-Cuando dices a las demás te refieres a...

-Kaguya, Yuzuru, Miku, Natsumi, Mukuro y sobretodo Nia. Es ella la que más me preocupa, aún más sabiendo que no puedo hacer nada al respecto para tratar de ayudarla.

-A mí tampoco me gusta, pero no podemos hacer nada respecto a eso. Recuerda que dijimos que haríamos los menos cambios posibles en esta línea de tiempo.

-Lo sé, lo sé, es solo que... es frustrante no poder hacer nada con ella.

-Haa... Shidou... -tras suspirar, Mio hizo un ligero movimiento de mano, haciendo desaparecer a [Rasiel]- Mírame a los ojos -el asintió a lo pedido mientras que ella apoyaba su brazo en la cama- Sé que te preocupas por todas las chicas, pero todo llegara en su momento y pasara cuando tenga que pasar, así que no te apresures a los hechos y no hagas las cosas antes de tiempo ¿De acuerdo?

-Sí, lo entiendo perfectamente, solo quería dejar salir esto que tenía en el pecho -comenzó a acariciar el cabello de la chica- Pero, aun no me puedo quitar algo de la mente.

-¿Qué cosa? -dijo mientras disfrutaba de esa sensación.

-El extraño comportamiento que tuvo Kurumi hoy -habló con seriedad- Había algo en ella que me daba mala espina.

-Veo que también lo notaste. ¿En qué momento la sentiste así? -preguntó.

-Cuando le estaba dando el recorrido por la escuela. Estaba un poco... extraña, su mirada parecía estar alejada de todo, como si estuviera en conflicto con algo y eso me hace pensar que...

-¿Que ella se esté dando cuenta que esto es algo que ya vivió? -sentencio Mio para dejar sin habla a Shidou- Créeme, yo también pensé en algo así, pero por más que le doy vueltas al asunto, no veo la posibilidad de que ella recuerde lo sucedido en la línea de tiempo pasada. Ella y todas las demás debieron desaparecer cuando deje ese mundo, de esa manera, Kurumi no tiene conexión alguna con algunos de sus clones desde ahí y teniendo solo los disponibles en esta línea temporal.

Exactamente como Mio lo había dicho, no había manera alguna que Kurumi recuerde o tenga alguna fuente de memoria la otra línea temporal. Pero aun así, era un tanto preocupante que le pasara todo eso a ella, o tal vez lo ella decía era verdad.

Mareos provocados por no comer apropiadamente, a cualquier persona normal le puede pasar eso.

Sí, claro, como no...

-Haa, como sea. Ya no quiero pensar más en eso ahora. Al menos algo bueno paso hoy, y es que me pude reencontrar con Mana.

-Dime algo ¿Mana esta igual que la primera vez?

-Sí, está igual desde aquella vez.

-Menos mal... lo único que quiero hacer es acercarme a ella solo para darle un gran abrazo. De verdad que la echo de menos -dijo con un tono de tristeza, entonces sintió como Shidou la acercaba más a él para asegurar el abrazo.

-Tranquila, ya verás que podrás hacerlo. Además puedes visitarla cuando ella este durmiendo -le dijo.

-¿Visitarla en sus sueños? No, no sé si podría. Eso ya sería invadir mucho su espacio personal. Además ¿qué pasaría si llega a recordarme de hace 30 años?

-Oye ¿en serio me dices que te podría recordar cuando puedes cambiar de apariencia?

-Eh... tehe~, se me había olvidado... -decía con una sonrisa nerviosa mientras se daba un pequeño golpe en la cabeza.

-Por dios, no olvides ese tipo de cosas -dijo.

Mientras ambos estaban así, las nubes en el cielo se movían y dejaban ver la luz brillante que transmitía la luna, cayendo en la noche de la ciudad y entrando por la ventana de la habitación en donde nuestra pareja se encontraba recostada en la cama.

Gracias a esa luz, Shidou veía el rostro Mio de una forma reluciente y maravillosa, era..

-Hermosa -ella lo miro fijo por un momento cuando él dijo eso, para posteriormente darle una bella sonrisa.

-Shidou... -ella acercaba su rostro al de él.

-Mio... -él hacia la misma acción que ella.

Hasta que finalmente sus labios se encontraron en un tierno beso, lleno totalmente amor, el uno hacia el otro. Ellos seguían en este momento, y para entonces, los segundos parecían ser más lentos que de costumbre. Estaban rodeados en su atmosfera en la que nadie intervendría, y solo harían durar este momento hasta que ellos decidan cuando acabarlo.

Separando sus labios en busca de respiración, los unieron nuevamente explorando con más profundidad aquel sentimiento que tanto les gustaba sentir.

Pero las cosas parecían ya no ser igual, pues de un beso cariñoso y tierno, paso a ser un beso más apasionado y candente. Por lo que ambos sabiendo esto, decidieron detenerse y mirarse con atención antes de que ocurriese algo de mayores magnitudes.

-Wow... eso fue... intenso... -habló Shidou un tanto sonrojado.

-S-Sí, así fue... -de igual forma, ella estaba sonrojada- Pero... será mejor detenerse por ahora. Aún no me siento lista para seguir más allá de eso.

-Comparto tu opinión. Será mejor esperar hasta que ambos estemos listos para seguir avanzando en esto.

-Tienes razón -hizo una pequeña pausa y fue entonces que recordó algo importante- Oye, ahora que lo recuerdo, aún me debes la cita que tendrías conmigo.

-Oh, ehh... claro, se me había olvidado eso. Han pasado tantas cosas últimamente que se me había olvidado por completo eso -dijo y vio como Mio inflaba sus mejillas.

-¡Mooo, no es justo que hayas tenido una cita con Tohka, Origami y Yoshino antes que yo! ¡Quiero mi cita, quiero mi cita, quiero mi C-I-T-A! -decía con molestia.

-¡Ya entendí, ya entendí! No es necesario que lo digas tantas veces. Pero espera un poco más, contigo en Fraxinus y yo en la escuela, además de ocuparme del asunto de los espíritus, no nos deja tiempo para nuestra cita, sobre todo ahora que está el tema de Kurumi.

-Mm, no es justo... -miraba hacia otro lado con un puchero en su rostro.

Viendo la adorable expresión que Mio podía hacer en algunos momentos, Shidou sonrió, la acerco más a ella y le dijo al oído.

-Ya verás que valdrá la pena la espera. Será una cita que ambos disfrutaremos mucho y la pasaremos de maravilla.

-¿En serio?

-Sí, sé que te gustara -terminaba de hablar, para que ella lo viera directamente a los ojos.

-¿Lo prometes?

-Lo prometo totalmente -respondió, y entonces ella puso una sincera sonrisa.

-De acuerdo, si lo dices así, entonces confiare plenamente en que eso harás.

-Lo haré, tenlo por seguro -dijo para dar un bostezo y cerrar lentamente sus ojos- Buenas Noches.

-Buenas Noches... -le dio un rápido beso en los labios-...Shidou.

Momentos después, ambos ya se encontraban durmiendo atrapados en los brazos del otro, formando una tierna imagen para cualquiera que los mirase.

Y de hecho, ese era el caso.

Desde lo más lejano de la casa, en lo alto del cielo, la misma figura de las veces anteriores, los miraba fija y seriamente.

-Pronto nos encontraremos y hablaremos cara a cara. Muy pronto.

Y volvió a desaparecer en un parpadeo.

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¡AHORA SIIIIIIIIIIIIIIIIIII!

¡Joder, la de problemas que tuve para subir el capítulo!

Para empezar, me quiero disculpar el que se me haya borrado el capitulo sin tener algún tipo de respaldo, este capitulo lo empecé de cero y lo termine en pocos días por lo que ven si esta mal redactado, estructurado o cualquier otra cosa que le encuentren ya sabrán porque esta así.

Ahora bien... con este capítulo la trama se pone más interesante y el clímax (el de verdad) da inicio. ¡Por fin quería llegar a esto!

Darle las gracias a Nachox1 por recomendarme poner el tema de Kurumi. ¡Gracias bro!

Y bien sí... se que la imagen de Shiori no esta vestida de una princesa sino la de una novia ¡PERO SE PARECE Y ESO ES LO QUE IMPORTA!

Y antes de que se me olvide...

Para el que no haya entendido el chiste de la corona, aunque más de uno de seguro que habrá entendido la referencia...

En fin, creo que eso es todo, no tengo nada más que decir por mi parte ¿que hay de ti Monika? ¿Algo que quieras decir?

"Que todavía estoy bien triste por el final del volumen 20 😭😭😭"

Tenias que recordarmelo :'v

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También comparte la historia para que más gente venga a leerla. De verdad, eso seria genial.

Nos vemos en el siguiente capitulo.